Toxoplasmosis y Embarazo

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REVISIN

L. DAZ, ET AL
Rev Obstet Ginecol Venez 2010;70(3):190-205

Toxoplasmosis y embarazo
Drs. Linder Daz*, Belkys Zambrano*, Germn Chacn**, Brs. Ana Rocha***, Santiago Daz****

INTRODUCCIN

La toxoplasmosis es la zoonosis ms frecuente en los humanos. Esta parasitosis causada por un protozoario conocido como Toxoplasma gondii, presenta riesgo de transmisin vertical al feto en una primoinfeccin durante la gestacin, la cual puede producir morbimortalidad significativa en el feto y recin nacido con posibles secuelas a largo plazo en nios y adultos (1-5). Esta enfermedad infectocontagiosa, puede producir manifestaciones clnicas en los recin nacidos, las cuales van desde la tpica ttrada de Sabin (coriorretinitis, hidrocefalia, calcificaciones y retardo psicomotor) a un cuadro visceral (hepatoesplenomegalia, ictericia), sepsis o totalmente inespecfico (6). Estas son solo algunas de las razones por las cuales en mucho tiempo esta infeccin ha generado y sigue generando mucha preocupacin y temor entre las gestantes y sus familiares, que incluso en muchas oportunidades el mdico no logra disiparlas. Nos preocupa al observar lo frecuente de los reportes de algunos laboratorios, que solo se resumen en Test para toxoplasmosis positivo o negativo, sin precisar el o los anticuerpos que se determin en cada caso, la concentracin de estas inmunoglobulinas en suero materno y la tcnica de laboratorio que se utiliz para tal determinacin. Mucho ms angustiante es darnos cuenta de que a pesar de lo impreciso de

estos resultados, se decida en algunos de estos casos diagnosticar o no diagnosticar y tratar o no tratar a la paciente. Es as como surge el estmulo para la realizacin de esta revisin y preguntarnos: Estaremos tratando a todas aquellas pacientes que lo requieran, y se estn medicando las que no lo ameriten? La educacin preventiva se estar aportando de la mejor manera? Se logra disminuir el miedo de consecuencias indeseables en el feto y recin nacido de aquellas pacientes que lo refieren y no se justifica tal temor?
AGENTE CAUSAL

El Toxoplasma gondii (Nicolle y Manceaux, 1908), recibe su nombre del gondii, un roedor norteafricano en el que se detect por primera vez (7). Es un parsito protozoario intracelular obligado de la familia Apicomplexa, orden Coccidia, la cual recibe su nombre por el complejo apical de su citoesqueleto, que tambin se encuentra en los esporozitos del parsito de la malaria (Plasmodium) y del Cryptosporidium (8,9). El T. gondii es la nica especie en su gnero (10). Su husped definitivo son los felinos, siendo el intestino de estos animales el lugar donde ocurre la multiplicacin sexual, y los huspedes intermediarios potenciales son numerosos: humanos, mamferos no felinos (animales de sangre caliente) y aves (10,11); es tal la diseminacin de este parsito por todo el

Mdico Obstetra-Gineclogo del Centro Clnico Quirrgico CARALI II. Barquisimeto, Venezuela. Egresado de Universidad de Los Andes. ** Mdico Obstetra-Gineclogo. Profesor Agregado de Universidad de Los Andes. Instituto Autnomo Hospital Universitario de Los Andes. Mrida, Venezuela.

*** Estudiante de Pregrado de Decanato de Ciencias de la Salud, Escuela de Medicina Dr. Pablo Acosta Ortiz, Universidad Centroocidental Lisandro Alvarado. Barquisimeto, Venezuela. ****Estudiante de Pregrado de Decanato de Ciencias Veterinarias, Universidad Centroocidental Lisandro Alvarado. Cabudare, Venezuela. Rev Obstet Ginecol Venez

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mundo y en mltiples huspedes potenciales que se ha logrado determinar no solo en animales domsticos o de granja como por ejemplo: cerdos, ovinos, caprinos, bovinos, equinos, perros y pollos, tambin en animales salvajes desde los canguros australianos hasta los zorros rticos de Noruega, pasando por monos, aves migratorias y diferentes depredadores, entre muchos otros (12-21). Los ooquistes que se encuentran en las heces de los gatos, tiene forma esferoide, midiendo de 11-15 por 9-11 micras; contienen un par de esporoquistes elipsoidales, conteniendo cada uno cuatro esporozotos. Los taquizotos que son las formas virulentas que causan lesiones en los seres humanos (aproximadamente de 2 x 7 micras), son estados asexuales de divisin rpida; recibe el nombre de seudoquiste (por no tener envoltura qustica) aquella clula del husped que contiene numerosos taquizotos, tiene forma de punta de flecha curvada (10-12). Los bradizotos (forma no virulenta) se diferencian de los taquizotos en que se dividen lentamente, tienen forma de coma y estn rodeados de una verdadera membrana formando un quiste, que parasitan diferentes clulas del organismo, siendo el estado letrgico o inactivo en huspedes inmunocompetentes (10-12).
CICLO VITAL, MECANISMO DE INFECCIN Y PATOGENICIDAD

El ciclo vital del T. gondii consiste en 2 fases (asexual y sexual), la asexual se lleva a cabo en los huspedes intermedios (animales mamferos, aves y humanos), donde el crecimiento y divisin es rpida, en forma de taquizotos (in vitro es de 6-8 horas). Esta forma ovalada o en medialuna de los taquizotos puede infectar y multiplicarse en casi cualquier clula nucleada aviar o de mamferos (11). Los taquizotos se multiplican por repetidas endodiogenias dentro de la clula, que es un tipo de divisin especializada en la cual se da lugar a dos clulas hijas dentro de su madre, y as sucesivamente hasta ocuparla, cuando la acumulacin es entre 64 y 128 taquizotos, se rompe la membrana materna y siendo liberados al torrente sanguneo, propagndose por todo el cuerpo comenzando con la enfermedad aguda (parasitemia) (12,22), y es en esta fase que durante la primoinfeccin en el embarazo se produce la transmisin vertical por paso transplacentario (4). La respuesta inmune y la transformacin de taquizotos a bradizotos dentro de la forma qustica limitan la fase aguda establecindose as la infeccin crnica (12,23-25). Los quistes se forman
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principalmente en los nervios, cerebro, hueso, msculo y miocardio y pueden mantenerse inactivos en el cuerpo por un largo tiempo. En pacientes inmunocomprometidos (SIDA, terapia prolongada con esteroides) la reactivacin de los quistes y liberacin de bradizotos puede producir encefalitis aguda (9,10). La fase sexual se produce en el intestino del husped definitivo que son los felinos (por ejemplo: gatos domsticos), cuando estos consumen bradizotos en sus quistes, taquizotos en sus seudoquistes y/o los ooquistes en alimentos contaminados, varios millones de ooquistes no esporulados pueden ser liberados en las heces de un gato en los prximos 3 a 20 das, dependiendo del estado de T. gondii ingerido (11,12). Bajo condiciones ambientales favorables los ooquistes pueden esporular en un perodo de tres semanas (26), pudiendo infectar a humanos y otros huspedes intermedios. Los ooquistes pueden diseminarse en el ambiente y contaminar agua, suelo, frutas, vegetacin y hasta animales herbvoros que consuman plantas contaminadas (9). Algunos estudios han mostrado obtencin de ooquistes de suelos (27), pero no as del agua (28,29), sin embargo, existe una investigacin muy reciente donde se sugiere que las amibas por su capacidad fagocitaria parecieran jugar un papel muy importante en la acumulacin y dispersin de ooquistes de T. gondii en ambientes acuticos, demostrndose que la amiba no impide la transmisin de toxoplasmosis en un modelo experimental de infeccin marina (30). Los ooquistes se mantienen estables y con resistencia a muchos desinfectantes mientras estn en ambientes tibios y hmedos (31), incluso son resistentes al cido sulfrico al 2 % (32), pero sobreviven pobremente en climas fros o ridos (33); sin embargo, en zonas ridas del Estado Lara se encontraron que 5,97 % de las cabras de un total de 10 granjas, presentaban anticuerpos positivos (por hemaglutinacin indirecta) para toxoplasmosis (34). Se conocen tres modos de transmisin: 1) Congnita (transmisin vertical), 2) Por ingestin de carnes contaminadas y 3) Por deglucin de ooquistes en el ambiente que contaminan alimentos como los vegetales y las frutas, o por consumo accidental de estos al manipular, jardines, suelos o herramientas contaminadas (12). El primer paso para la invasin celular consiste en el reconocimiento de un punto de unin por parte del T. gondii, gracias a la liberacin de protenas desde organelas especiales involucradas en este proceso invasivo (rhoptrias y micronemas) (25,35). Seguido
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de la invasin celular, el parsito se aloja dentro de una vacuola derivada de la membrana plasmtica de clula husped (22,36). La actividad mvil del T. gondii, se conoce como deslizamiento, porque durante el ingreso de este a la clula no se presentan mayores cambios de la forma citolgica (37). Como el T. gondii es intracelular obligado, su capacidad invasiva juega un papel importante en la virulencia y patogenicidad, siendo el interior de la clula donde encuentra los nutrientes necesarios para su supervivencia y adems que all escapa a la respuesta inmune del husped (38). El T. gondii presenta tres tipos de linajes genticos que determinan la virulencia (39,40), demostrndose en modelos animales (ratones) los genotipos: I, II y III; esta no es an una herramienta diagnstica en humanos infectados, pero puede estar asociado alguno de estos tipos con lesiones de mayor severidad. Un estudio mostr en pacientes con toxoplasmosis congnita, al usar marcadores de microsatlite y marcadores isoenzimticos, que la virulencia tipo II predomin con un 84,88 % (86 pacientes) y que el tipo I no pudo ser aislado ni siquiera en pacientes asintomticos (41,42). En pacientes con SIDA el tipo mayormente aislado es el II; el tipo I y II se ha podido aislar en pacientes con enfermedad congnita; en animales el genotipo mayormente aislado es el III (40). La infeccin por T. gondii genera una respuesta fuerte y persistente de clulas T-ayudante-1 (Th1), caracterizada por la produccin de citoquinas proinflamatorias como interleukina 12, interfern , factor de necrosis tumoral. La accin combinada de estas tres citoquinas con otros mecanismos inmunolgicos protege al husped contra la rpida replicacin de los taquizotos y posteriores cambios patolgicos. Luego de la invasin del enterocito, el T. gondii infecta las clulas presentadoras de antgeno en la lmina propia del intestino e induce una respuesta transitoria y local de Th1 (43,44). Los linfocitos T CD4+ y CD8+ sensibilizados son citotxicos para clulas infectadas con T. gondii (45). En las 2 semanas posteriores a la infeccin se puede detectar: IgG, IgM, IgA e IgE, las cuales actan como anticuerpos contra muchas de las protenas del T. gondii. La produccin de IgA en la superficie de la mucosa gastrointestinal aporta proteccin contra una reinfeccin en el husped (46,47).
EPIDEMIOLOGA

La mayora de las pacientes se infectan de manera inadvertida, sin poderse establecer generalmente la va especfica de transmisin. Las variaciones
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en la seroprevalencia de T. gondii entre regiones se ha correlacionado con los hbitos de higiene y alimentarios de cada poblacin, las cuales se ubican en zonas de menor salubridad y ms populosas. Se encuentra suficiente soporte para pensar que la va oral es la ms importante para el comienzo de la infeccin (48,49). Los cerdos de granja que son vendidos para el consumo humano son considerados una importante fuente de infeccin (14,50,51). Se ha demostrado que insectos coprofgicos como las cucarachas y moscas tiene papel de vector en la diseminacin del T. gondii (52,53). Muy recientemente en el ao 2010 Jones y Dubey (54) realizaron un anlisis que incluy estudios de todos los continentes del mundo, motivados por una gran epidemia humana relacionada con la contaminacin por felinos salvajes de un reservorio de agua municipal en Canad y a una extensa infeccin de mamferos marinos en Estados Unidos, donde plantean considerar la importancia de transmisin por este medio, concluyendo: 1) Los ooquistes de Toxoplasma gondii son altamente resistentes a las influencias ambientales, inclusive la congelacin, y no se destruyen por tratamientos fsicos, ni qumicos actualmente aplicados en plantas de tratamiento de agua, entre los que se incluyen cloracin, tratamiento con ozono y rayos ultravioleta; 2) No existen mtodos de deteccin rpida de ooquiste en agua, pues se necesitara examinar grandes volmenes de agua por filtracin o centrifugacin y aislamiento de partculas concentradas por separacin inmunomagntica para finalmente realizar la deteccin del parsito por las tcnicas ya conocidas; 3) Para eliminar efectivamente el Toxoplasma gondii del agua a ingerir, se debe tratar con tintura de yodo al 2 % durante por lo menos 3 horas como mtodo qumico o utilizar mtodos fsicos como filtrado de 1 micra de dimetro y hervir el agua. Es posible la transmisin del T. gondii en rganos trasplantados y reactivacin de la infeccin por su inmunocompromiso esteroide-dependiente; transfusiones de hemoderivados produjeron la enfermedad en pacientes seronegativos para T. gondii pero que padecen de SIDA (55-57). Personal de laboratorio ha adquirido la toxoplasmosis por manipulacin de agujas, recipientes de vidrio y animales de experimentacin contaminados con T. gondii (58,59). El grupo de mujeres embarazadas con mayor riesgo para primoinfeccin con T. gondii son las adolescentes, mayor aun si habitan en ambientes contaminados por animales huspedes y vehculos
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de transmisin de ooquistes (60). En la actualidad se sugieren otras vas de transmisin del Toxoplasma gondii, como es la sexual entre perros domsticos (61). En Estados Unidos se estudiaron los factores de riesgo epidemiolgico en 131 madres de hijos con toxoplasmosis congnita, encontrndose que solo el 48.% de las madres referan estos riesgos epidemiolgicos, como son: contacto con gatos, exposicin cercana de cacerolas para cocinar, manipulacin de jardines, consumo de carnes crudas o poco cocidas, comer con platos o cubiertos que se expusieron a carnes crudas, preparacin de carnes crudas, consumo de huevos crudos y lcteos no pasteurizados (62). En esta revisin no se encontraron estudios que apoyen la transmisin del Toxoplasma gondii durante la lactancia, ni transmisin humano-humano. La prevalencia de toxoplasmosis congnita vara de 1-10 por cada 10 000 nacidos vivos (63,64). En Venezuela la seroconversin durante el embarazo se ha reportado entre 2,6 a 4,7 primoinfecciones toxoplasmsicas por 1 000 embarazos por ao, mostrando mayor incidencia que en otros pases (65). Rara vez ocurre la infeccin fetal durante las primeras 8 semanas de gestacin (66); pero si la madre siendo inmunocompetente adquiere la primoinfeccin en los 3 meses previos al embarazo, el feto tiene riesgo de contraerla (67). La frecuencia de transmisin del T. gondii y la severidad de la enfermedad para el feto o recin nacido, estn inversamente relacionadas (Figura 1); es decir que a mayor edad gestacional mayor ser la posibilidad de transmisin al feto, pero menor ser la severidad de la toxoplasmosis en este producto de la concepcin (68). El riesgo de infeccin fetal por trimestre es de 25 % en el 1er trimestre, 54 % en segundo trimestre y tercer trimestre 65 %, en cambio el riesgo de severidad de la enfermedad es de 75 % en primer trimestre, y de 17 % y 0 % para segundo y tercer trimestre respectivamente (69). La seroprevalencia est presente en todo el mundo, siendo muy variable segn la regin. En frica, especficamente Etiopia se ha reportado 22,9 % (70), a diferencia del 75,2 % de Sao Tome y Prncipe (71). En Europa vara segn el pas desde 38 % hasta 71.% en Francia (72,73); en Grecia se expresa la media de todo el continente con 51 % (74). Asia presenta reas con prevalencia importante como lo son India, Malasia y Nepal: 41,8 % a 55,4 % (75), prevalencia discreta como China: 7,9 % a 10,6 % (76,77) y Vietnam: 11,2.% (75), y pases con prevalencia casi inexistente como
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Figura 1. Relacin infeccin fetal - severidad.

Korea: 0,8 % (75). La prevalencia serolgica del continente Americano: Estados Unidos 22,5 % (78), Trinidad y Tobago 39,3 % (79), El Salvador 75 % (78), Brasil 66,3 % (80), Chile 36,2 % (81), Colombia 47,1 % (82). En Venezuela la seroprevalencia promedio para T. gondii es mayor al 50 % demostrado en varios estudios: Estado Zulia 65,57 % (83), Estado Trujillo 69.% (84) y Estado Lara entre 38 % y 43 % (85,86); esta estadstica aumenta en poblaciones indgenas (87). Los estudios pioneros en Venezuela realizados por Maekelt y col. (88-91) entre 1970 y 1989, demostraron que la infeccin toxoplasmsica aumentaba desde la infancia hasta llegar a un 60 % en la edad adulta. Entonces podemos concluir que por lo menos la mitad de las embarazadas venezolanas nos llegan al control prenatal con estado de infeccin crnica, es decir, sin riesgo para el feto o neonato producto de esta gestacin. A pesar de varias dcadas de investigacin y seguimiento son pocos los casos publicados de posible o presunta reinfeccin, tal cual como se titulan los papers que hacen referencia a esta situacin en pacientes con respuesta inmunolgica conservada (92-96). Sin embargo, se plantean dos hiptesis posibles en estos casos: 1) La primoinfeccin por quistes contenidos no producen proteccin inmunolgica contra los ooquistes, debido a que los esporozotos poseen diferencias antignicas con los taquizotos (97,98); 2) La contaminacin de la madre por T. gondii de genotipo diferente al de la primoinfeccin, esta posibilidad se plantea en Francia, luego de aislar este parsito en sangre perifrica de
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un recin nacido con un genotipo muy poco comn en Europa pero el cual es muy frecuente en Amrica del Sur y de caractersticas ms virulentas (99). La reinfeccin segn este ltimo planteamiento ha sido demostrada en modelos experimentales con ratones. Entonces podemos decir que los viajes a otros continentes tambin pueden ser un factor de riesgo epidemiolgico a tomar en cuenta (99).
MANIFESTACIONES CLNICAS

sensibilidad. Los signos menngeos son raros. Estas pacientes pueden presentar neumonas, coriorretinitis, e incluso sndrome de respuesta inflamatoria sistmica
(104,105).

En la mayora de las mujeres embarazadas inmunocompetentes, al igual que en nios y adultos la primoinfeccin se presenta como asintomtica (10,57,100,101). Alrededor del 10 % de los casos se manifiesta como una enfermedad autolimitada, con sntomas inespecficos, parecidos al sndrome de mononucleosis, que en raras ocasiones amerita algn tratamiento (57,100,101). La mayora de las manifestaciones clnicas caractersticas son linfadenopatas aisladas occipitales y/o cervicales, que generalmente son poco dolorosas y no abscedadas y desaparecen en menos de 4-6 semanas (57,101). Se describen linfadenopatas crnicas como forma de presentacin de la enfermedad, las cuales pueden permanecer por meses (57). Muy infrecuentes son la miocarditis, polimiositis, neumonas, hepatitis o encefalitis (57). La habilidad del T. gondii de cruzar las barreras biolgicas est asociada con la virulencia aguda (102). La patogenicidad y la severidad de las manifestaciones clnicas va a depender de la virulencia del parsito, el sitio de inoculacin, la ruta de infeccin, la competencia de la respuesta inmune del husped, la integridad de las mucosas y barreras epiteliales del husped y finalmente de la edad y caractersticas genticas del husped (12,103). Un estudio norteamericano demostr que: de 131 madres de hijos con toxoplasmosis congnita, solo la cuarta parte refirieri fiebre y linfadenopatas durante la gestacin (23 % y 27 % respectivamente), el 52.% de estas madres negaron haber presentado algn sntoma durante el embarazo (62). En pacientes inmunocomprometidos, como SIDA y receptores de trasplante de rganos, la enfermedad se presenta en la mayora de las veces como muy sintomtica, e incluso puede ocurrir reactivacin de la infeccin crnica. El sistema nervioso central es el lugar ms afectado en estos pacientes, expresndose este dao como alteraciones del lenguaje y hemiparesias, hasta signos cerebelosos y patologa neuropsiquitrica, pasando por dficit neurolgico focal, alteraciones de nervios craneales y
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Los fetos con toxoplasmosis congnita generalmente se observan normales al estudio ecosonogrfico prenatal (57). En Francia se realiz una investigacin retrospectiva que analizaba los ultrasonidos prenatales de 36 nios infectados con T. gondii durante el primer trimestre de gestacin, mostrando estudios imaginolgicos normales, el 78.% present toxoplasmosis subclnica, al 19 % se le diagnostic coriorretinitis sin mayor prdida de la visin a los 12 meses de edad y solo el 3 % present toxoplasmosis congnita severa (106). Las alteraciones en el estudio ecosonogrfico obsttrico ms frecuentes son: placentomegalia, hepatomegalia, ascitis, calcificaciones intracraneales, dilatacin de ventrculos cerebrales, hidrocefalia o microcefalia. En el perodo neonatal se anexan coriorretinitis, amaurosis, estrabismo, retardo mental y psicomotor, trombocitopenia y anemia (107-109). La dificultad diagnstica se presenta en que todas estas manifestaciones clnicas en el producto de la concepcin incluyendo la clsica ttrada de Sabin (coriorretinitis, calcificaciones cerebrales, hidrocefalia y retardo psicomotor) son poco frecuentes y no son exclusivas de la toxoplasmosis, tambin pueden ser producidas por citomegalovirus, virus herpes simple, rubola y sfilis, entre muchas otras infecciones virales (57). La toxoplasmosis en el embarazo se asocia con parto en embarazos de pretrmino, pero no as con bajo peso al nacer y pequeo para edad gestacional (110). Cuando la primoinfeccin ocurre en el primer trimestre se pueden producir abortos espontneos (9,111), aunque la relacin entre toxoplasmosis y aborto sigue siendo un punto controversia en parte por la proteccin que se observa en la gestacin durante las primeras 8 semanas a la primoinfeccin (66). La toxoplasmosis aunque se ha sugerido, no se ha podido relacionar en estudios controlados con prdida gestacional recurrente (112,113). En Venezuela en el ao 1965 Viso y col. (114), usando intradermorreaccin en embarazadas, mostraron que la infeccin crnica por T. gondii no es causante de aborto.
PATOLOGA EN EL RECIN NACIDO Y EL NIO

Ya entre 1950 y 1977 en Venezuela se haban reportado 24 casos de toxoplasmosis congnita, los cuales fueron demostrados por diferentes vas: lesiones anatomopatolgicas, manifestaciones
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clnicas, inmunologa-serologa e identificacin del parasito vivo; siendo en el ltimo de ellos la primera vez en reportarse una evolucin clnica satisfactoria gracias a un diagnstico y tratamiento precoz (115-122). La importancia del seguimiento del recin nacido (RN) y el nio se fundamenta en lograr un diagnstico definitivo y prevenir un posible dao ocular ms adelante en la vida (123). El examen clnico e imaginolgico del recin nacido incluye principalmente al sistema neurolgico, y de ser posible al ojo a travs de estudio de fondo ocular, porque estos dos sistema involucran la famosa ttrada de Sabin descrita con anterioridad (10,57). En toxoplasmosis congnita se debe llevar un seguimiento oftalmolgico estricto (92-94,96), e incluso se debe realizar pesquisa de problemas en la audicin (124). En la actualidad se asocia la toxoplasmosis congnita como causante de autismo (125). Patolgicamente se pueden distinguir varias lesiones que expliquen estas manifestaciones clnicas: 1) Destruccin de clulas parasitadas, principalmente por los taquizotos, 2) Necrosis tisular por ruptura de quistes, 3) Necrosis por infarto debido a la implicacin vascular de los mecanismos 1 y 2, 4) Los cerebros de los nios con toxoplasmosis tambin demuestran vasculitis periacueductal y periventricular con necrosis (126). El primer mecanismo por el cual se producen las lesiones es la destruccin de clulas parasitadas por los taquizotos. Esto es especialmente perjudicial a los tejidos tales como el cerebro, el ojo, y msculos, en los cuales las clulas no regeneran. Sin embargo, si se substituyen las clulas destruidas en tejido linfoide, epitelial, y conectivo, o en el hgado y el pulmn, pudiendo no ser visibles las lesiones. En caso de la prdida extensa de clulas o de tejido, la reparacin ocurre por fibrosis y en el cerebro por gliosis (126). La ruptura de quistes ocurre en la infeccin crnica en presencia de la inmunidad y de hipersensibilidad retrasada. La mayora de todos los bradizotos liberados por la ruptura son destruidos por procesos inmunes. A menudo hay necrosis de las clulas parasitadas adyacentes, como una manifestacin de hipersensibilidad. Los quistes persisten en muchos rganos, pero al permanecer intactos presentan poca significancia. Asimismo, la ruptura de quistes en hgado o tejido linfoide puede ser de poca importancia, puesto que las clulas destruidas pueden ser sustituidas. Incluso en el miocardio y el cerebro, la ruptura de algunos quistes no es acompaada, generalmente, por sntomas debido a la reserva funcional que reside en las clulas restantes. Sin embargo, la ruptura de quistes
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en la retina a menudo es sintomtica, puesto que la funcin se limita altamente; la prdida de una seccin de la retina da lugar a un escotoma, y la reaccin inflamatoria en el vtreo obscurece la visin (126). La necrosis producto de la implicacin vascular no est presente regularmente, sin embargo de ocurrir, da lugar a trombosis la cual desencadena infarto. Tales lesiones son particularmente evidentes en el cerebro puesto que el tejido necrtico en fetos y nios es propenso a calcificacin (126). Las vasculitis periacueductal y periventricular con necrosis se han observado solamente despus de la infeccin intrauterina, donde hay parasitacin significativa del cerebro. Parasita las clulas ependimales y el tejido subependimal, produciendo inflamacin y causando lceras pequeas. Si el acueducto de Sylvius, la parte ms estrecha del sistema ventricular, se obstruye, los ventrculos tercero y laterales se transforman en una cavidad, que contiene acumulaciones del Toxoplasma, material antignico, y clulas inflamatorias (126). Desde un punto de vista biolgico el T. gondii puede ser detectado en la placenta mediante reaccin en cadena de la polimerasa (PCR), inoculacin de ratones y estudios histopatolgicos (127).
DIAGNSTICO

El diagnstico se lograr por: 1) factores de riesgo epidemiolgicos relacionados con la madre, 2) manifestaciones clnicas, 3) imaginologa como ultrasonido obsttrico y resonancia magntica (10) y 4) estudios paraclnicos. Ya se ha comentado las limitantes que tienen los 3 primeros puntos para identificar quines presentan esta patologa (62,106). Paraclinicamente se puede realizar el diagnstico por va indirecta con mtodos serolgicos, y directamente por PCR, aislamiento (por cultivo celular o inoculacin de ratones), hibridacin e histopatologa. Los mtodos indirectos pueden ser tiles en pacientes inmunocompetentes, pero en aquellos con compromiso de su sistema inmunolgico el diagnstico se lograr por demostracin directa del T. gondii en fluidos corporales como: orina, sangre y lquido cefalorraqudeo (128-130). En toxoplasmosis congnita tambin tienen ms valor los mtodos directos. La mayor sensibilidad (91 %) se logra combinando prenatalmente PCR e inoculacin de ratones con lquido amnitico; la PCR sola nos proporciona una especificidad de 96 %. Se demostr una sensibilidad de 47 % y especificidad de 38 % al determinar IgG e IgM para toxoplasmosis en sangre fetal obtenida por
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cordocentesis, demostrndose as que este mtodo tiene sus limitaciones diagnsticas (131). El mtodo ms comnmente usado para el diagnstico de toxoplasmosis durante el embarazo, es la determinacin de anticuerpos especficos para toxoplasmosis y seguimiento de la respuesta inmune ante este parsito (9). Las IgM son indicadores de infeccin aguda, porque desaparecen luego de esta fase, detectados a las 2 semanas (Figura 2) de la infeccin por tcnica de ensayo inmunoabsorvente ligado a enzimas (ELISA) o ensayo inmunoabsorvente por aglutinacin (ISAGA); aunque este anticuerpo nos indica infeccin reciente, puede persistir positiva por ms de 12 meses o varios aos (Figura 2) (132). El test de Remington detecta IgM especfica por inmunofluorescencia indirecta y se considera positivo cuando es mayor de 1/20 (59). La inmunofluorescencia indirecta puede detectar anticuerpos anti IgG y anti IgM, la ventaja reside en su economa, y su desventaja es la alta tasa de falsos positivos en sueros que contengan otros anticuerpos o factor reumatoide y falsos negativos por bloqueo de IgG por parte de IgM (133,134). El ISAGA nos permite detectar IgM, IgA o IgE para toxoplasmosis con alta especificidad, pero es costoso, requiere entrenamiento o experiencia y no es automatizado, por lo que es utilizado solo en los centros de referencia (135-137). Las IgG presentan el pico de concentracin entre 6 y 8 semanas (Figura 2) luego de la infeccin y se mantienen positivos en forma indefinida, indicndonos con IgM, IgA e IgE negativas infeccin crnica o paciente inmunizada contra toxoplasmosis (9). Por ende no sirven para diagnosticar infeccin aguda salvo que se realicen dos pruebas separadas por un mnimo de 20 das y el ttulo de la segunda sea 4 veces superior al de la primera, a lo que llamamos conversin serolgica en muestras pareadas (9). La IgA persiste positiva por ms de 12 meses (Figura 2) y es de mucho valor para el diagnstico de toxoplasmosis congnita (9). En un reciente estudio se plantea que el ISAGA IgA especfico puede confirmar infecciones agudas no detectadas por ELISA IgM especfico (138). Las concentraciones de IgE especficas aumentan rpidamente luego de la infeccin y se mantiene detectable solo por 4 meses (Figura 2) (139). Cuando el ISAGA IgE especfico es positivo confirma la infeccin aguda. Su negatividad se usa para descartarla, pero se recomiendan combinarlo con otras tcnicas (140). Este test en infeccin aguda presenta: sensibilidad: 79,5 %, especificidad: 98 %,
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Figura 2. Anticuerpos desde primoinfeccin.

valor predictivo positivo: 95,5 % y valor predictivo negativo: 89,8 % (140-142). La IgA y la IgE aparecen por lo menos una semana despus que la Ig M en toxoplasmosis aguda (Figura 2) (142). El ISAGA-PLUS IgA/IgM es el ms sensible de los mtodos convencionales para diagnosticar toxoplasmosis aguda y congnita. Su nica limitacin est dada en pacientes con linfadenopatas: en estos casos la persistencia de la IgA es prolongada (puede tratarse de una toxoplasmosis crnica) y, por tanto, es recomendable utilizar ISAGA IgE o una tcnica IgM especfica para el diagnstico diferencial (140). El test de tincin de Sabin Feldman (SFDT) es la primera prueba de laboratorio desarrollada (ao 1948) para el diagnstico de la infeccin por T. gondii (143), y sigue siendo considerada por algunos como la prueba de oro en la deteccin de infeccin por este protozoario, considerndose positiva cuando es mayor de 1/1 000 (63). Esta prueba que detecta IgG especficos, junto a pruebas de IgM especficas es la combinacin ms sensible para el diagnstico en fase aguda (63). La limitante del SFDT es que solo realiza en centros de referencia en el mundo. Cambios
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significativos en los ttulos corresponden a diferencia de por lo menos cuatro veces su valor inicial en un perodo de 3 semanas, aunque ttulos mayores de 250 UI/mL son considerados altamente sugestivos de infeccin reciente. El fundamento de este test consiste en poner en contacto suero del paciente a estudiar el cual posee taquizotos (antgenos especficos), con plasma de un humano seronegativo para T. gondii, el cual va a proporcionar los componentes del complemento inmunolgico, se forma el complejo antgeno-anticuerpo-complemento y ante la presencia de azul de metileno se produce lisis de estos (144). Hace algunos aos la Organizacin Mundial de la Salud (OMS) ha estandarizado las ampollas de antitoxoplasma IgG a utilizar en humanos, con una potencia de 20 UI de anticuerpos cada una (145). La prueba de Avidez-IgG consiste en un ELISA en el cual un agente desestabilizante de puentes de hidrgeno, como la urea, es empleado para disociar la unin entre las IgG especficas y el antgeno, de tal forma que en infecciones recientes las IgG con avidez dbil son casi totalmente disociadas del complejo antgeno-anticuerpo, mientras que en infecciones crnicas las IgG de alta avidez (ms del 50 %) permanecen ms fuertemente unidas a los antgenos del T. gondii (146). Mltiples estudios de origen nacional como extranjero coinciden en que este mtodo es seguro y valioso al momento de diferenciar infecciones agudas de infecciones crnicas (147-151). Al volverse insuficiente la serologa como mtodo diagnstico, es imperativo la deteccin directa del T. gondii, incluso cuando se sospecha de toxoplasmosis por positividad de IgM especficos, se debe enviar entonces muestras para centros de referencia donde realizaran SFDT, PCR u otros ensayos avanzados para confirmar la infeccin (9). Podemos notar que son variadas las posibilidades diagnsticas por mtodos serolgicos, sin embargo, algunos estudios aportan suficiente evidencia que demuestra que el cribaje serolgico en la embarazada no es confiable (152,153). Entre 1995 y 2006 fueron estudiados 542 binomios madre-hijo en el Departamento de Obstetricia y Ginecologa de la Universidad de Naples Federico II (Italia), en este estudio se repiti la serologa y se reinterpretaron los perfiles serolgicos de todos los perfiles previos, revelando una tasa del 90 % de falsos positivos en pruebas previas de IgM, con una tasa de seroconversin del 12 % (154). Adicionalmente el American College of Obstetricians and Gynecologists (ACOG) no recomienda el muestreo serolgico de rutina para toxoplasmosis por la alta posibilidad de
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falsos positivos (155). Es por esto que se recomienda que el cribaje solo deba realizarse si existen test lo suficientemente validados o confiables para detectar la enfermedad en estado preclnico y si los avances en las intervenciones teraputicas son claros (154). El diagnstico molecular por PCR se basa en una amplificacin del ADN para evaluar el gen B1 principalmente y el gen P30 o tambin conocido como SAG1; otro objetivo de la PCR es el ADN ribosomal 18S. Ya en la actualidad existen laboratorios que muestran xitos en la amplificacin de fragmentos de ADN (156-158). Otro estudio de laboratorio para la confirmacin es la inoculacin de tejido o lquidos corporales como por ejemplo lquido amnitico en el interior de ratones o en cultivos celulares (131), presentando una sensibilidad diagnstica de 73 % y 53 % respectivamente (159). El rol actual de estos mtodos es el de ayudar a confirmar la infeccin por PCR, aumentando la sensibilidad al combinarse (131). El T. gondii se puede detectar en placenta por inoculacin de ratones y PCR (160). Las tcnicas serolgicas permiten la deteccin de IgM e IgA en 75.% de los RN con toxoplasmosis congnita. La IgG transmitida por la madre al RN, desaparecer entre 6 y 12 meses de vida extrauterina, y de no ser as, es porque el nio est sintetizando IgG especfica y esto indica infeccin en el paciente peditrico (10). Western blots se usa para diferenciar los anticuerpos maternos de los anticuerpos del recin nacido, por su gran capacidad para separar ambos grupos de inmunoglobulinas, siendo de alto valor en pediatra; la desventaja de este mtodo es su alto precio y complejidad tcnica (161). Cada centro de salud o grupo mdico deber seleccionar una combinacin de los mtodos existentes para el diagnstico o descarte de toxoplasmosis y a la vez individualizar cada caso, en vista de que un solo mtodo no permite lograr con certeza la situacin con respecto a esta parasitosis en cada paciente. En base a esto la Red Europea de Investigacin de la Toxoplasmosis Congnita (ERNCT), sugiere la siguiente clasificacin diagnstica (162): Cierta o definida: Cuando la infeccin se ha podido demostrar con 1) Seroconversin en dos muestras recogidas luego de la concepcin. 2) Cultivo positivo en sangre materna. 3) Demostracin de infeccin congnita en el nio (PCR en lquido amnitico). Probable: Cuando existe 1) Seroconversin entre 2 muestras, la primera de las cuales se ha recogido antes de la concepcin (en los dos meses previos).
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2) Aumento significativo de los ttulos de IgG en presencia de IgA o IgM. 3) Ttulos altos de IgG, presencia de IgA o IgM y adenopatas durante el embarazo. 4) Ttulos altos de IgG y presencia de IgA o IgM en la segunda mitad del embarazo. Posible: Al existir 1) Ttulos estables de IgG sin IgM en la segunda mitad del embarazo. 2) Ttulos altos de IgG en presencia de IgM o IgA en la primera mitad del embarazo. Rara o improbable: Al presentarse 1) Ttulos bajos y estables de IgG, con o sin IgM. 2) Ttulos estables de IgG sin IgM al comienzo del embarazo. No infeccin primaria materna: 1) Seronegatividad durante el embarazo. 2) Seropositiva antes del embarazo. 3) IgM o IgA positivas sin aparicin de IgG.
TRATAMIENTO

El tratamiento puede ser: 1) placentario: al ocurrir seroconversin materna sin evidencia de infeccin fetal y antes de las 20 semanas de gestacin, se indica espiramicina por su menor potencial de teratogenicidad a dosis de 9 000 000 U o 3-4 g/da divida en 3 dosis cada 24 horas; 2) fetal: en la segunda mitad del embarazo con aislamiento del T. gondii en lquido amnitico (sugerido entre semana 20 y 26) por PCR y/o cultivo celular o inoculacin en ratones. La OMS y el CDC de Atlanta recomiendan como principal esquema de tratamiento la combinacin de pirimetamina a dosis de 25-100 mg/da, sulfadiazina 1-1,5 g cada 6 horas y cido folnico 10-25 mg simultneamente a cada dosis de pirimetamina. En ciertas situaciones la clindamicina 300 mg cada 8 horas puede ser una opcin. Estos esquemas se sugieren administrar ininterrumpidamente o durante 3-4 semanas con descanso de 1 semana entre ciclo y ciclo hasta por lo menos 2 semanas antes de la culminacin del embarazo, acompaado con controles hematolgicos cada 1-2 semanas (102,163,164). Para el ao 2009 en Brasil, Costa I y col. (165) demostraron mayor efectividad de la azitromicina al inhibir la transmisin vertical de toxoplasmosis en roedores Calomys callosus, al compararse con un grupo tratado con espiramicina y otro tratado con la combinacin: pirimetamina, sulfadiazina y cido folnico. Por otro lado el grupo de estudio SYROCOT (Revisin sistemtica en toxoplasmosis congnita) recientemente luego de llevar a cabo un metanlisis comenta: Es muy poco claro si el tratamiento prenatal antitoxoplasma tiene algn beneficio (166), necesitndose la confirmacin urgente de los resultados serolgicos, en bsqueda de bases para un
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posible cambio radical en el manejo prenatal (154). Igualmente la Biblioteca Cochrane realiz una revisin de 3 332 trabajos de investigacin publicados entre los aos 1966 y 2001, con el objetivo de evaluar si el tratamiento contra la toxoplasmosis durante el embarazo reduce o no el riesgo de infeccin congnita por T. gondii; concluyen textualmente: A pesar de la gran cantidad de estudios realizados durante las ltimas tres dcadas an no se sabe si el tratamiento prenatal en las mujeres con toxoplasmosis presunta reduce la transmisin congnita de Toxoplasma gondii. El cribaje es costoso, de manera que se necesitan evaluar los efectos del tratamiento y la repercusin de los programas de cribaje. En los pases donde el cribaje o el tratamiento no es habitual, estas tecnologas no deben introducirse fuera del contexto de un ensayo cuidadosamente controlado (167). Podemos apreciar que no se detienen las publicaciones de estudios no incluidos en la revisin Cochrane, los cuales realizan conclusiones similares (168,169). Quedamos a la espera de la realizacin de estudios multicntricos que evalen efectos del tratamiento prenatal para toxoplasmosis congnita. La creacin de una vacuna efectiva contra el Toxoplasma gondii es un deseo que hasta los momentos ha sido difcil de conseguir; se han utilizado para este fin cepas mutantes y atenuadas, antgenos de superficie purificados o recombinates y ADN parasitario entre otros intentos, sin lograr eficacia ni consenso (170,171). Dos estudios recientes pero an en etapa experimental proponen como potencial vacuna en el futuro a las protenas MIC6 del Toxoplasma gondii y a taquizotos vivos atenuados MIC1-3KO
(172,173).

Un nio infectado debe ser tratado con sulfadiazina y pirimetamina hasta por lo menos cumplir el ao de edad, teniendo en cuenta que en ocasiones estas drogas pueden producir lesiones de piel y alteraciones hematolgicas (10).
PREVENCIN Y RECOMENDACIONES

La prevencin puede ser: 1) primaria: dirigida a prevenir la enfermedad desde el principio, es decir, evitar la infeccin por parte de la embarazada, por medio de prevencin epidemiolgica; 2) secundaria: su fin es disminuir la transmisin de la madre al feto y al mismo tiempo disminuir la severidad de la toxoplasmosis congnita a travs de cribaje serolgico materno, identificacin de hallazgos anormales fetales, diagnstico fetal en fase aguda y tratamiento en tero; 3) terciaria: consiste en disminuir la severidad de las secuelas de la enfermedad con
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diagnstico, seguimiento y tratamiento del producto de la concepcin en vida extrauterina. El recomendar las normas higinicas y de salud culinaria es prcticamente el nico aspecto consensuado en todo lo que respecta a toxoplasmosis y embarazo, es as y en base a esta revisin que aconsejamos: Higiene personal estricta (lavado de manos). Consumo de carnes bien cocidas (por lo menos a 70 C). Consumo de frutas y verduras lavadas. Evitar trabajos de jardinera o en reas donde hay tierra, de realizarlos se debe usar guantes y lavarse las manos al culminar. Lavar utensilios y superficies que hayan servido para preparacin de alimentos. Lavar utensilios y superficies antes de preparar alimentos o antes de ingerirlos, as parezcan estar limpios. Limpiar y desinfectar regularmente la nevera. No tener gatos o educarlos. No alimentar el gato con comida cruda. Hacer la limpieza todos los das de la cubeta de excretas con uso de guantes, mscara y agua hervida. Hervir el agua para consumo humano y la que se usa para el preparado de alimentos, o tratarla con filtros adecuados o con tintura de yodo al 2durante por lo menos 3 horas. A personas que practiquen excursiones o realicen actividades al aire libre recomendar no ingerir agua de lagos, ros, arroyos, charcos naturales o tanques (recomendar llevar su propio suministro de agua). Limitar el acceso de felinos reas de reservorios de agua para consumo humano. Evitar comer en sitios donde no se tenga la certeza de las normas de salubridad y de preparacin de alimentos. Durante la manipulacin de carnes crudas, frutas y vegetales utilizar guantes, evitar el contacto de las manos enguantadas o no, con los ojos y la boca. Procurar eliminar roedores e insectos coprofgicos como cucarachas y moscas. Promocionar la tan necesaria pero tan infrecuente consulta preconcepcional donde se podrn identificar pacientes de riesgo y aquellas que no lo presenten, aportando informacin veraz y minimizar el miedo a esta patologa antes que logren embarazarse. Existen estudios que demuestran que el riesgo de seroconversin es 9 veces menor en pacientes bien informadas (4). Educarnos con respecto a los laboratorios del
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rea de influencia de nuestras pacientes referente a cuales tcnicas de cribaje utilizan y exigirles el reporte especfico de la tcnica utilizada y sus titulaciones, as como la negacin a realizar ensayos que no se corresponden con lo solicitado. No recomendamos realizar cribaje serolgico de rutina en base a la evidencia cientfica referida en este artculo, preferimos dejarlo a criterio de cada clnico. Debemos tener en cuenta que serolgicamente al identificar una supuesta infeccin antigua, puede que estemos en presencia de un falso positivo y realmente esta paciente est en riesgo de primoinfeccin. Igualmente el manejar falsos positivos de infeccin aguda puede generar consecuencias como: Ansiedad en las pacientes y todo su entorno familiar. Mtodos invasivos injustificados. Tratamiento en pacientes sin enfermedad, con posibles efectos secundarios e indeseados por estos frmacos. Gasto monetario innecesario para la paciente. En los casos donde el mdico decida realizar el cribaje serolgico se recomienda investigar previamente con que pruebas serolgicas contamos en cada localidad, cuales Ig determinan, como podemos lograr investigar IgA, IgE, avidez de IgG, Tincin de Sabin Feldman, pruebas moleculares, cultivos, inoculaciones o Western blots en el sitio en que trabajamos o como hacer para realizar estas investigaciones fuera del mismo.
AGRADECIMIENTO

A la Licenciada Rosala Gumina: Directora y Referencista de la Biblioteca del Instituto Autnomo Hospital Universitario de Los Andes, por su valiosa colaboracin al facilitar informacin cientfica necesaria para la culminacin de esta revisin.
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