Funciones Ejecutivas
Funciones Ejecutivas
Funciones Ejecutivas
2, N1, 34-45
Artculo de Revisin
Resumen: En esta revisin se presentan diferentes problemas relacionados a la evaluacin de las Funciones Ejecutivas (FE) mediante tests neurocognitivos. Ante el problema de su definicin, se presenta una estructura de cuatro elementos constitutivos. Se repasan los modelos tericos de FE de acuerdo a diferentes clasificaciones propuestas e intentos de integracin de listados inductivos de funciones. En relacin a la historia de los tests de FE, se destaca su surgimiento en contextos ajenos a la neuropsicologa, lo que permite formular hiptesis sobre las consecuencias que esto tiene en la evaluacin actual. Finalmente, se propone una clasificacin de tests que miden FE y se analiza la idea de una nueva generacin de instrumentos, apoyada por avances tecnolgicos y tericos, as como por el desarrollo de ontologas, inferencias inversas y anlisis de validez ecolgica y etolgica. Palabras claves: Funciones Ejecutivas- Evaluacin neuropsicolgica- Test NeurocognitivosValidez Ecolgica- Validez Etolgica Recibido el 22 de Noviembre de 2009; Recibido la revisin el 12 de Diciembre de 2009; Aceptado el 7 de Enero de 2010 Abstract: This review presents different problems related to executive functions (EF) assessment with neuropsychological tests. It shows an overview of EF definitions and theoreticals models created to overcome the problem of inductive lists. Also EF tests history and their emerging contexts are reviewed, to hypothetisize about its consequences over actual conditions of EF assessment practice. Later, an EF tests classification is proposed, taking into account criterias like tests origins, constructs relates and systemic or simple forms of aplication. Finally the idea of a new generation of tests supported by theoreticals and technological advances was analyzed. This includes the development of EF scientifical ontologies, reverse inferences analysis and ecological and etological validity studies.
Key Words: Executive functions - neuropsychological assessment - neurocognitive tests - ecological validity - etological validity
1. Introduccin Funciones Ejecutivas (FE) es un concepto que tiene una complejidad particular dentro de la literatura neuropsicolgica, ya que implica el estudio de fenmenos cercanos a la psicologa funcionalista, como la organizacin del comportamiento dirigido a metas, la orientacin de la conducta hacia el futuro y la seleccin de pensamientos y acciones para una mejor adaptacin al ambiente (James, 1890). Se lo considera un concepto paraguas (Huizinga, Dolan & Van Der Molen, 2006) porque incluye un listado de funciones sumamente amplio y con muchas diferencias entre autores. Las definiciones de FE tambin son muy variadas y pocas veces se encuentran coincidencias entre ellas. No obstante, hay criterios supraordinales que permiten proponer la siguiente estructura (ver Figura 1): a) trmino ontolgico, que califica a las FE mediante un
* Enviar correspondencia a: Dr. Julin C. Marino D. E-mail: [email protected]
categorizador supraordinal, como proceso, conjunto, serie, organizacin 2) inventario de elementos o constitutivos que forman parte de las FE, teniendo estrecha relacin con el trmino ontolgico anterior, ya que si FE es definida como conjunto, luego aparece el listado de funciones que lo integran, por ejemplo memoria de trabajo, planificacin, toma de decisiones, control inhibitorio y 3) argumento finalista, que describe para qu sirven las FE, cul es su objetivo y su contribucin al procesamiento de la informacin; ejemplos tpicos son: para lograr la adaptacin al medio ambiente, para lograr que la conducta se dirija hacia metas, para permitir la seleccin de acciones y pensamientos (Sylvester et al. 2003). Generalmente el trmino ontolgico, el inventario de elementos y el argumento finalista van acompaados
34
35
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 necesidades por parte de una persona, le sigue la planificacin de la conducta para satisfacerlas y luego la ejecucin de la misma, mediante la regulacin del lenguaje. Finalmente, hay un miramiento por la efectividad de la perfomance. En esta conceptualizacin, Lezak reconoci influencias del neuropsiclogo ruso Alexander Luria, quien formul el concepto de unidad funcional de programacin, regulacin y verificacin de la conducta, asociada a la actividad de los lbulos frontales (Luria, 1984). Otro antecedente importante, desde una perspectiva cognitiva, fueron los trabajos de Baddeley y Shallice (De Vega, 1998), quienes sistematizaron los conceptos de sistema central ejecutivo y Sistema Atencional Supervisor (SAS), en investigaciones centradas en memoria y atencin. La mayor complejidad de FE se encuentra en su carcter supraordinal respecto de las capacidades bsicas. Esto se apoya en observaciones neuroanatmicas sobre la organizacin jerrquica de la corteza humana, donde existe una zona de integracin localizada en las zonas prefrontales, que recibe aferencias multimodales del resto del sistema nervioso y enva informacin de control sobre la corteza posterior y la subcorteza (Fuster, 2001). Esto ha motivado que se identifique FE con actividad prefrontal, pero estudios con neuroimgenes y hallazgos clnicos indican que es una inferencia incorrecta (Fassbender et al. 2004), ya que se han encontrado activaciones parietales, temporales y subcorticales durante la realizacin de pruebas que demandan actividad ejecutiva (Collette, Hogge, Salmon& Van Der Linden, 2006).. La actividad ejecutiva se considera tambin como una conducta temporalmente trascendente, al integrar paquetes de informacin almacenados a largo plazo (pasado) con informacin entrante del contexto de operacin (presente) y con los objetivos que dirigen la persona hacia el futuro. Para Fuster (2001), el tiempo es la esencia del funcionamiento ejecutivo. Desde una perspectiva crtica a los desarrollos citados, Sugarman (2002) considera que FE es un concepto sumamente difcil de evaluar y conceptualizar por cuanto implica una ciberntica de segundo orden, donde el agente de la accin est involucrado en la misma, modificndose a medida que cambia su curso. Para este autor las FE son un proceso de organizacin de la actividad cognitiva, con una secuencia y duracin temporal imposible de aprehender mediante los tests de uso corriente. De acuerdo a lo anterior, establece que hablar de FE equivale a situarse en un proceso homeostsico
de una serie de modalizadores que indican como se relacionan con otras capacidades cognitivas, qu regiones neuroanatmicas implican y qu consecuencias tiene su estudio en contextos pragmticos como el trabajo clnico y la investigacin. Las definiciones a la vez tienen rasgos ontolgicos (lo que las FE son), pragmticos (lo que las FE hacen) y nominales (aludiendo de qu tipo de constructo se trata).
NOMINAL E S : en tanto c onc epto P R A G M T IC AS : lo que hac en
ONT OL OG IC AS : lo que s on
1 C ategorizador s upraordinal
4 Modalizadores
FE
3 Argumento finalis ta
2 Inventario de elementos
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 irrepetible, donde un simulador interno que establece relaciones entre los eventos a travs del tiempo acta a la vez sobre si mismo, insertndose en procesos que slo pueden ser descriptos mediante conceptos como los de lgicas complejas, darwinismo ideacional y autopoiesis. El autor, finalmente, aboga por un tipo de evaluacin dinmica de FE, que supere la reduccin a distribuciones estadsticas como las que brindan los tests psicomtricos. Sin embargo, no resulta claro como sera ese tipo de evaluacin y las coordenadas tericas que se brindan tampoco resultan muy ilustrativas al respecto. En conclusin, FE es un concepto neuropsicolgico que incluye aspectos del comportamiento humano como el planteo de objetivos, la toma de decisiones y la seleccin de pensamientos y acciones que estn cerca del vocabulario psicolgico clsico y ms an de la psicologa funcionalista. La bsqueda de una determinacin especfica de los fenmenos que implica ha derivado en una larga lista de funciones, resultando imprecisos los lmites de su concepto. Por esto, la complejidad de la idea de FE, ms su permeabilidad semntica, son puntos de partida para analizar las dificultades en seleccionar y crear instrumentos confiables de evaluacin. 2. Listado de Funciones Pese a que en la literatura sobre FE se encuentran modelos tericos que proponen una visin integral del funcionamiento ejecutivo y trabajos que intentan reducir la cantidad de funciones mediante procedimiento estadsticos como anlisis factorial o anlisis de variable latente (Hull, Martin, Beier, Lane & Hamilton, 2008; Miyake, Friedman, Emerson, Witzki, Howerter & Wager, 2000; Pineda, Merchn, Rosselli & Ardila, 2000), la distribucin funcional predomina en la literatura de FE, y escapa a los intentos de integracin conceptual. Las enumeraciones funcionales que estn presentes en varias definiciones de FE suelen carecer de un reconocimiento jerrquico que permita traducir sus inclusiones en modelos concretos de flujo de informacin, apareciendo como listados inductivos de funciones que pueden superponerse tanto en sus aspectos cognitivos, conductuales y neuroanatmicos. En la Tabla 1 se ilustra este aspecto inductivo de la presentacin de funciones. Hay intentos de clasificacin de las funciones, siguiendo diversos criterios. Uno de ellos consiste en agruparlas en funciones clidas (hot) y fras (cold) (Chan, Shum, Toulopulou & Chen, 2007) de acuerdo a la implicancia o no del procesamiento emocional. Las funciones fras seran aquellas ms relacionadas con la
36
actividad dorsolateral prefrontal, permitiendo un tratamiento ms racional de la informacin, mientras que las funciones clidas seran las implicadas en el tratamiento de la informacin emocional que proviene de la subcorteza, y que tiene su principal representacin frontal en la zona orbital ventral. Dentro de las funciones clidas se encontrara el sistema ejecutivo social, que incluye el control de impulsos, la interpretacin de seales corporales, la toma de decisiones y el reconocimiento de la perspectiva del otro. En las funciones fras, en cambio, ingresaran las relacionadas con el razonamiento y el procesamiento de informacin abstracta, como por ejemplo la memoria de trabajo, conceptualizacin y categorizacin, entre otras.
Tabla 1. Listado de funciones propuestas dentro del concepto Funciones Ejecutivas, clasificadas en fras, calientes y relacionadas con la finalidad conductual.
Funciones fras: Monitoreo Inhibicin Secuenciacin Updating Planificacin Flexibilidad Cognitiva Memoria de trabajo Control atencional Feedback Razonamiento Categorizacin Iniciacin Formacin de conceptos Funciones clidas: Toma de decisiones Control de impulsos Feedback emocional Volicin Estrategias de cooperacin Empata Teora de la mente Administracin de refuerzos Conceptos que describen la finalidad conductual: Autosatisfaccin Adaptacin Metas Autoservicio Conducta independiente
Por su parte Huettel, Misiurek, Jurkowsky & Mc Carthy (2004) clasifican las funciones en estratgicas y dinmicas, siendo las estratgicas aquellas que estn dirigidas hacia una meta, y las dinmicas las referidas al control activo y transitorio de una actividad en desarrollo, cambiante de acuerdo a entradas de informacin sensorial externa. Las funciones dinmicas garantizan la flexibilidad del comportamiento, momento
37
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 Slachevsky (2008) como los de Chan et al. 2008 pertenecen a pocas muy diferentes entre s: hay ms de cuarenta aos de diferencia entre los pioneros trabajos de Luria y los desarrollos recientes de Koechlin & Summerfield (2007). Entonces, asumiendo una perspectiva histrica, es posible distinguir entre modelos de FE clsicos y derivados. Como primer modelo clsico se encuentra el de Alexander Luria, quien identific el lbulo frontal con la capacidad de orientarse hacia los datos, definir estrategias para seleccionar operaciones y verificar el xito de las repuestas dadas. Postul que en el sistema nervioso hay tres unidades funcionales, siendo la tercera la encargada de programar el comportamiento mediante el establecimiento de metas, la regulacin del lenguaje y la verificacin de las consecuencias de las acciones realizadas. Luria mencion el trmino ejecutivo en un artculo publicado en 1968 (Karpov, Luria & Yarbuss, 1968), como etapa final del procesamiento de datos. Sin embargo, quien sistematiz por primera vez el concepto de FE fue Lezak, mediante un modelo de logro de la conducta autosatisfactoria, independiente y socialmente responsable (Lezak, 1995) (ver Figura 2).
a momento durante la actividad en ejecucin, mientras que las estratgicas estn relacionadas con la iniciacin de un tipo de respuesta y la consecucin de una meta, definiendo globalmente una estrategia en un set conductual. Como se puede apreciar, estos criterios estn directamente relacionados con la clasificacin de las funciones de acuerdo a bases neuroanatmicas. Al respecto, Slachevsky et al. (2005) han distinguido cuatro tipo de funciones: las dorsolaterales prefrontales, implicadas en la jerarqua superior del procesamiento de la informacin (memoria de trabajo, updating o actualizacin, secuenciacin); las orbitofrontales, relacionadas con el procesamiento ejecutivo de la personalidad y las emociones; las ventromediales, relacionadas con la motivacin, el monitoreo, el control inhibitorio y la deteccin de errores y las frontopolares, relacionadas con el control jerrquico y prospectivo de la conducta. Este criterio de clasificacin tiene cierta claridad pedaggica, sin embargo, investigaciones clnicas han demostrado que los lmites no son tan precisos y que pacientes con daos en una de las cuatro regiones pueden presentar fenmenos correspondientes a otra (Ardila & Rosselli, 2007). Adems, corre riesgos de caer en una nueva frenologa, incurriendo en el error sealado por William James (1890) de considerar una funcin como el alma de una regin cerebral. Para este autor es necesario indagar los fenmenos que acompaan una funcin junto a las condiciones que determinan su actividad en relacin a otras. Esto implica trabajar con la nocin de modelos de FE. 3. Modelos Tericos Neuropsicolgicos Ejecutivos y Tests
Planificacin
Conducta propositiva
Lezak
Volicin Conducta adaptativa, eficaz, independiente, se sirve a si mismo, socialmente responsable, orientada hacia el futuro
Diversos autores han presentado una revisin de los modelos tericos en FE. Reyes Snchez & Slachevsky (2008) los clasifican de acuerdo a la funcin o capacidad cognitiva que es destacada como central para el funcionamiento ejecutivo. De este modo, los autores discriminan distintos modelos como aquellos cuyo componente principal es la memoria de trabajo, la atencin y el control temporal y jerrquico. Chan et al. (2008) considera que existen bsicamente seis modelos dentro de la literatura de FE: el modelo de las unidades funcionales de Luria, el SAS de Shallice y Norman, el tripartito de Stuss y Benson, el de organizacin de metas de Duncan, el centrado en los circuitos dopaminrgicos de memoria de trabajo de GoldmanRakic y el modelo del marcador somtico de Damasio (Bechara, Damasio, H, Damasio, A & Anderson, 1994). Tanto los modelos que describen Reyes Snchez &
William James
Figura 2. Principales conceptos del modelo de FE de M. Lezak (1995), destacando su filiacin terica con la psicologa funcionalista de James
Otros modelos clsicos corresponden al sistema central ejecutivo de Baddeley, en tanto unidad central encargada de coordinar la informacin proveniente de sistemas esclavos, y el mencionado SAS de Shallice y Norman, como unidad de control y activacin supraordinal ante situaciones novedosas y de peligro. El SAS funcionara de un modo dicotmico con el dirimiente de conflictos (scheduling contention), que efectuara elecciones simples (si o no) en una especie de rutina de accin cognitiva. La activacin del SAS, en cambio, estara relacionada con demandas
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 extraordinarias y sera un sistema de control general. Goldman- Rakic (1997) consider que la tarea de control le corresponde a las mltiples divisiones de la memoria de trabajo. Para esta autora los diversos subsistemas son localizables hasta un nivel neuronal, estn mediatizados por el sistema dopaminrgico y sus redes se proyectan jerrquicamente sobre las parietales y temporales. Fuster (1997) denomin a estos sistemas memorias ejecutivas, cuya accin controla las memorias perceptuales, que son filogentica y ontogenticamente ms antiguas. Para este autor, todas las funciones son memorias distribuidas, superponindose las ejecutivas de forma progresiva sobre las perceptuales. La organizacin conductual se logra entonces por la integracin temporal de la conducta, el control inhibitorio y la permanencia de las representaciones internas. Los modelos mencionados (Luria, Lezak, Shallice, Baddeley, Fuster y Goldman- Rakic) podran ser considerados clsicos de las FE, manteniendo su influencia sobre desarrollos posteriores. Entre los ms novedosos, se destaca el modelo ejecutivo de procesamiento de la informacin (Koechlin & Summerfield, 2007), que postula la existencia de un eje rostrocaudal de jerarqua de control de la conducta. El procesamiento ejecutivo de la informacin pasara de una organizacin sensoriomotriz, donde la informacin del estmulo desborda la accin dirigiendo automticamente la respuesta, hasta el control estratificado, donde coexisten varias seales en suspenso que la persona episdicamente mantiene para dirigir su conducta de acuerdo a una jerarqua de metas. Entre estos dos extremos se encuentran el control contextual y el control episdico, avanzando la localizacin de cada uno desde una zona ms posterior a otra anterior del eje mencionado. Un aspecto destacado de este modelo es que permite un trasvasamiento del vocabulario funcional al lenguaje del procesamiento de la informacin. Por su parte, Miyake et al. (2000), si bien no proponen un modelo en s mismo, presentan las FE como operaciones bsicas relativamente simples que se combinan para formar FE ms complejas. Para estos autores, las FE son en parte independientes y en parte interdependientes, siendo las operaciones ms bsicas el cambio (shifting), el control inhibitorio y la actualizacin (updating) en la memoria de trabajo. Tambin postulan en este nivel a las operaciones multitareas (multitasking) que consisten en colocar varias metas en la memoria prospectiva de manera que la persona tiene que distribuir los recursos de su actividad actual en funcin de las mismas. En las
38
actividades multitareas la actividad que la persona est llevando a cabo implica una disminucin en el tiempo para hacer otras tareas, que tambin se encuentran en espera, por lo que debe hacer un clculo prospectivo siempre en direccin a una meta. La consecuencia terica del trabajo de Miyake et al (2000) es reducir la pluralidad semntica mediante constructos ms bsicos que expliquen la varianza de los datos de los instrumentos diseados para evaluar FE. Esta operacin es valiosa por la simplificacin en si misma, pero las operaciones bsicas que formaran las FE ms complejas son postuladas por estos autores de forma apriorstica. Los tests ms populares de FE fueron creados en contextos ajenos a la neuropsicologa. Por ejemplo, las pruebas de fluidez verbal fueron diseadas por Thurstone en 1920 (Ruff, Light, Parker & Levin, 1997); el Porteus Maze Test (PMT) fue construido en 1928 para medir la edad mental (Marino, Fernndez & Alderete, 2001); el Wisconsin Card Sorting Test (WCST) (Berg, 1948) fue parte de una tesis de maestra presentada en 1948 como una prueba de razonamiento abstracto, formacin de conceptos y creacin de estrategias de respuesta ante cambios ambientales contingentes; el Trail Making Test (TMT) fue adaptado por la armada de Estados Unidos para seleccionar soldados durante la segunda guerra mundial (Lezak, 1995). Su incorporacin a la neuropsicologa aconteci varios aos despus, con la necesidad contar con herramientas que brinden datos conductuales para relacionar con la actividad nerviosa. En la incipiente neuropsicologa norteamericana, se utilizaron en principio tests para evaluar conceptos tan globales como dao cerebral y organicidad, orientndose preferentemente hacia el uso clnico, bajo la concepcin predominante de que la neuropsicologa era una herramienta auxiliar del mdico neurlogo (Luria, 1984). A su vez, Luria, en la ex-Unin Sovitica, dise numerosas pruebas, articulndolas con la actividad de sus unidades funcionales, sin el nfasis caracterstico de la escuela anglosajona por el control psicomtrico. De esta manera, tests clsicos como el WCST fueron permanentemente reinterpretados por los modelos tericos de FE (Nyhus & Barcel, 2009), llegando a desarrollarse incluso programas de redes neuronales artificiales para simular su ejecucin (Kaplan, engr, Grvit, Gen & Gzeli, 2006). Estos casos se pueden considerar los ms frecuentes, donde tests o tareas que fueron diseados para otros fines son reutilizados por modelos neuropsicolgicos de FE. Como se ver ms adelante, esto puede tener relacin
39
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 otras que puedan constituir un campo exhaustivo donde se posicione cada test.
Tabla 2 Ejemplos de tests de FE de acuerdo a la clasificacin propuesta.
Tests Clsicos: Stroop tests Fluidez Verbal (fonolgica, categorial, gramatical, combinadas) Wisconsin Card Sorting Test Halstead Category Test Porteus Maze Test Trail Making Test Towers Tests Tareas en contextos experimentales: Digit odd Keep tracking Tone monitoring task Letter memory Plus minus task HTD Zanolie Test Wason Selection Task Paradigmas: Dual tasks Go no go N back tasks Question tasks Resolucin de problemas Antisaccade tasks Dual tasks Flanker tasks Estimacin cognitiva Random generation tasks Tests surgidos de modelos tericos de FE: Brixton test Hayling test BADS Roytman Baycrest battery CANTAB Kasanin- Haufmann CFT Iowa Gambling Task D- KEFS
con la carencia de adecuados desarrollos en una ontologa cientfica de FE. Por esto, la propuesta de Chan et al. (2008) de vincular modelos tericos con tests debe examinarse con cautela, ya que no todos los modelos son creadores directos de tests ni siempre demuestran con claridad operacionalizar sus conceptos. Ejemplos del surgimiento de tests a partir de modelos tericos neuropsicolgicos son el Iowa Gambling Task (IGT) (Bechara, Damasio, H, Damasio, A & Anderson, 1994), desprendido de la hiptesis del marcador somtico de Damasio, el Brixton Test, el Hayling Test y el Six Elements Test, desprendidos del modelo del SAS (Shallice & Burgess, 1991) y la batera conocida como ROBBIA (Rotman- Baycrest Battery to Investigate Attention) (Stuss, Shallice, Alexander & Picton, 1995), del modelo tripartito de Stuss y Benson. El modelo de Goldman- Rakic, centrado en la memoria de trabajo, inspir algunas pruebas, como el CANTAB (Cambridge Neuropsychological Automated Battery) (Strauss, Sherman y Spreen, 2006), muy til para evaluar sus constructos. Los progresivos desarrollos en procesamiento de la informacin, dominantes en la psicologa cognitiva, ms el creciente inters por incluir la neuropsicologa en el marco general de las neurociencias, motivaron la bsqueda de tests especficos y tiles para aportar datos sobre la dinmica cerebral. Esta mayor especificidad hizo que, dentro de las neurociencias cognitivas sean considerados como muestras altamente estructuradas de conducta, susceptibles de generar comparaciones para potenciar los datos. Esta concepcin abri el camino para la inclusin de tareas y diseos conductuales propias del contexto experimental con una slida interpretacin terica de respaldo. 4. Clasificacin de los Tests de FE La siguiente es una propuesta para clasificar la gran cantidad de tests que evalan FE. Un listado no exhaustivo de los mismos puede verse en la Tabla 2. Para clasificar los tests de FE se pueden utilizar diferentes criterios. Hay algunos que pueden trazar lneas demarcatorias sumamente claras, como tener en cuenta su origen o si se trata de bateras ejecutivas o tests individuales. Tambin hay criterios ms complejos, como tener en cuenta las funciones que dicen estar midiendo o establecer dimensiones bsicas que permitan situar a cada test como coordenadas en un espacio multidimensional. Estas dimensiones bsicas corresponderan a exigencias de velocidad de procesamiento de la informacin, carga en memoria de trabajo, activacin de modalidades sensoriales especficas, cmputos y transformaciones necesarias, y
De acuerdo a su origen, se pueden mencionar tres tipos de pruebas relacionadas con las FE: a. Tests clsicos, provenientes de contextos ajenos a la neuropsicologa. Han sido elaborados desde principios del siglo veinte hasta aproximadamente 1980. Son los ms difundidos en la clnica neuropsicolgica y tienen una gran dispersin en cuanto a los procesos y funciones que activan. Ejemplo: WCST b. Tareas provenientes de contextos experimentales: son diseadas ad hoc para una investigacin particular. Muchas veces son adaptaciones de pruebas clsicas o de modelos tericos a contextos con restricciones particulares, como el resonador magntico. Suponen un elevado conocimiento terico, ya que el investigador determina que dadas las operaciones que exige la tarea se est midiendo el concepto de inters. En sus etapas iniciales
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 no tienen los estudios para habilitarlos al uso clnico. Se los emplea como muestras de conducta que pueden interpretar neuropsiclogos altamente calificados. Ejemplo: tarea de las puertas diseada por Zanolie, Van Leijenhorst, Rombouts & Crone (2008) para evaluar flexibilidad cognitiva c. Paradigmas: estn estrechamente relacionados con las tareas, pero son ms amplios e incluyen variaciones dentro de los mismos. Un ejemplo tpico son los paradigmas go/ no go (Simmonds, Pekar & Mostofsky, 2008), que consisten en hacer aprender una respuesta prepotente a partir de un estmulo para luego inhibir esa respuesta ante una variacin del estmulo o presentacin de una clave inhibitoria. En numerosas investigaciones se han presentado distintas versiones de los paradigmas go no-go. d. Tests surgidos en el interior de un modelo terico. Son diseados para operacionalizar un proceso o constructo y se diferencian de los creados para tareas experimentales porque sus autores realizan los mismos estudios de validez y confiabilidad que tienen los tests clsicos. Tienen un origen reciente, ubicndose aproximadamente desde 1980 hasta la actualidad. Se utilizan tanto en clnica como en investigacin y la gran diferencia con los tests clsicos reside en que sus creadores los describen conceptualmente utilizando modelos neurocognitivos desde su origen. Por ejemplo, el Hotel Test (modelo del SAS) (Manly, Hawkins, Evans, Woldt & Robertson, 2002). De acuerdo a su condicin de elemento o conjunto, se pueden distinguir dos tipos de tests: a. De aplicacin conjunta, que supone un sistema de tests coordinados tanto en su interpretacin terica como en su aplicacin prctica, constituyendo una batera centrada en el funcionamiento ejecutivo, como el Delis Kaplan Executive Function System (Strauss, Sherman & Spreen, 2006) b. Individuales: Los de este tipo constituyen un conjunto en si mismos. Por ejemplo, la Torre de Londres (Shallice, 1982). Las aplicaciones conjuntas remiten al carcter multivariado de las FE. El sndrome disejecutivo, por ejemplo, presenta tal variedad de signos y tal dispersin en los patrones de rendimientos en los tests, que resulta estratgico tomar sistemticamente varias pruebas ejecutivas y obtener perfiles. Como se seal anteriormente, es poco frecuente que se aplique un solo test de FE en una valoracin, pero se reserva la descripcin de aplicacin conjunta para sistemas estandarizados de aplicacin de tests ejecutivos, cuya informacin final tiene un carcter correlacional. Los criterios de clasificacin ms complejos
40
implican la relacin que tiene un test con conceptos que describen la actividad nerviosa y la cognicin. Ms all de que un test se considere globalmente como del campo de las FE, todos concretamente se relacionan con uno o ms elementos del listado funcional. Ahora, si se tiene en cuenta que el listado debe aumentar su rigor terico y que la historia de desarrollos de modelos tericos y tests sigue vas paralelas, se comprende que exista un amplio campo de investigacin destinado a indagar las propiedades conceptuales de los tests ejecutivos. En esta direccin, hay numerosos estudios sobre validez de constructo. Estos pueden utilizar metodologas correlacionales, como la regresin mltiple, anlisis de estructuras latentes, como el anlisis factorial y anlisis de variables latentes (Miyake et al., 2000; Pineda, Merchn, Rosselli & Ardila, 2000). Los resultados indican que en general hay que considerar los tests de FE como impuros, con cargas diferenciales de distintas funciones sobre cada uno y factibles de ser descompuestos en procesos u operaciones ms bsicas. Esto resalta que no es tarea sencilla clasificar los tests de acuerdo a la funcin que miden. Una aproximacin para profundizar al respecto consiste en indagar sobre su expresin ecolgica y etolgica (Ardila, 2008; Chan et al. 2007). Los mbitos de la vida cotidiana son muy diferentes entre s en cuanto a los espacios informacionales que implican, y esto hace que la exigencia de procesamiento tambin sea desigual. La demanda de actividad ejecutiva es heterognea en relacin a los espacios informacionales, y en esto contribuyen dimensiones como que tan novedoso, estructurado, peligroso y cognitivamente exigente resulten. Se entiende por validez ecolgica a la propiedad que tiene un test de establecer una relacin funcional entre el rendimiento de una persona y la expresin conductual en mbitos cruciales de la vida, como el trabajo, las relaciones sociales y la actividad escolar (Burin, Drake y Harris, 2007). La preocupacin por la expresin ecolgica de los tests de FE es considerable, ya que diferentes estudios han encontrado que no siempre hay relacin entre un rendimiento deficiente en pruebas de FE y dificultades en la vida cotidiana (Chan et al. 2007; Semenova, 2005). Como los tests clsicos de FE son altamente estructurados, se han diseado tareas que implican solucionar problemas en condiciones similares a los que presenta la vida diaria, para intentar aumentar su validez ecolgica. Un ejemplo consiste en hacer que el paciente encuentre un edificio pblico cercano al punto
41
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 esta prueba mide desde flexibilidad cognitiva, control inhibitorio, memoria de trabajo, atencin sostenida, categorizacin, reglas de induccin, procesamiento visual, nivel adecuado de motivacin, procesamiento numrico, mantenimiento de un set, retroalimentacin hasta formacin de conceptos, entre otras funciones. Por su parte, se ha reportado que las pruebas de fluidez verbal implican memoria de trabajo, atencin sostenida, monitoreo, capacidad de iniciacin y habilidades de bsqueda de la memoria, entre otras (Abraham, Della Valentina, Gauchat y Marino, 2008; Fernndez, Marino y Alderete, 2002; Ruff et al. 1997). Una de las causas propuestas de esta impureza radica en el origen de estos tests, muchos de ellos diseados en contextos tericos ajenos a la neuropsicologa. Cuando se reutilizaron en este marco, se propuso que medan funciones y capacidades relacionadas con modelos cognitivos, pero como en su origen estaban diseadas para evaluar constructos tan generales como inteligencia, eso no pudo ser controlado tericamente, pese a las estrategias multivariadas para incorporarlos a la explicacin neurocognitiva. Otra de las dificultades en el uso de tests para evaluar FE reside en la carencia de pruebas aptas para volver a ser utilizadas por la misma persona. Debido a que las FE implican la formacin de estrategias para resolver tareas, una vez que la persona elabor una, la conserva, y al presentrsele otra vez la misma actividad puede identificar la manera de cmo afrontarla, aunque cabe reconocer que esta no es condicin exclusiva de los tests ejecutivos. El involucramiento de aspectos estratgicos para responder ante estos tests afecta tambin la confiabilidad en mediciones inter-sujetos, ya que las estrategias varan cualitativamente y puede resultar errneo comparar dos personas solo por el puntaje final obtenido. Adems, las estrategias suelen tener el carcter todo o nada, generando resultados finales dicotmicos (se resolvi o no), lo cul puede provocar puntajes finales cercanos a los extremos. En este sentido, resultaran sumamente tiles los anlisis dirigidos por la teora de respuesta al tem, en detrimento de la teora clsica de los tests (Chan et al. 2007). Otra de las dificultades ms citadas en la literatura es la estructuracin de las tareas. Como las FE implican crear estrategias para adaptarse a una situacin ambigua o poco estructurada, los tests muchas veces tienen un espacio de problemas demasiado claro como para activar estas funciones. Frente a esto, se han diseado tests como el Hotel Test o el Route Finding Test (RFT) que mantienen la ambigedad de la vida cotidiana, y que presentan como disponibles recursos que la persona
de evaluacin, acompaado por el neuropsiclogo (Strauss, Sherman & Spreen, 2006). Tambin los inventarios conductuales fueron creados para captar las dificultades que puede presentar una persona y que escapan a los tests clsicos, como el Behavioral Assessment of the Disexecutive Syndrome (BADS) (Wilson, 1993). Pruebas diseadas con miramiento a su validez ecolgica son: el Wason Selection Task, el Executive Golf Task (Morris, Downes, Sahakian, Evenden, Heald & Robbins, 1998) y el Route Finding Task (Chaytor, Schmitter-Edgecombe & Burr, 2006). Chan et al. (2007) proponen tambin evaluar las pruebas de FE de acuerdo a su validez etolgica. Desde esta perspectiva, cada funcin cognitiva debe ubicarse en el marco del devenir evolutivo de la especie humana, es decir, se analiza bajo qu condiciones puede haber sido ventajosa la aparicin de una capacidad o funcin. De este modo, se estudia de qu manera ciertas condiciones evolutivas de la humanidad, como la creacin de alianzas sociales, la evitacin de predadores, la cooperacin, la bsqueda de pareja y la conducta de crianza, determinan el contexto en el cul tienen sentido estas funciones (Ardila, 2008). Esto se relaciona con las funciones ejecutivas calientes y le otorga sentido a aquellos sesgos en el procesamiento de la informacin que no pueden ser captados mediante la presentacin de estmulos abstractos. La mirada etolgica limitara la multiplicacin de funciones, ya que cada una tendra que tener una justificacin evolutiva. De esta manera, se podra evitar que la neuropsicologa de las funciones y capacidades se convierta en una nueva frenologa o repita la doctrina de las facultades del alma. 5. Dificultades en la Evaluacin de las Funciones Ejecutivas Mediante Tests Neuropsicolgicos Teniendo en cuenta lo desarrollado hasta aqu, se aprecia que las principales dificultades en el uso de tests en FE provienen tanto de la naturaleza de los desarrollos tericos como de caractersticas de las pruebas. Cuando se repasan los problemas de la evaluacin neuropsicolgica en FE es difcil separar qu responsabilidad compete a los modelos conceptuales y a las propiedades psicomtricas de los tests. Por ejemplo, el problema de la impureza de los tests implica que hay tal cantidad de funciones, capacidades y operaciones asociadas, que cada prueba est lejos de corresponder unvocamente a una funcin (Miyake et al., 2000). Un ejemplo tpico es el WCST, el test ms utilizado en Estados Unidos para evaluacin de FE (Strauss, Sherman & Spreen, 2006): se ha reportado que
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 puede aprovechar o no, ms all de la consigna que se le brinde. Por ejemplo, en el RFT la persona puede utilizar preguntas a agentes externos para guiarse hacia la meta, sin que se le indique claramente a quin y cmo hacerlo. Tambin se reporta como una dificultad la escasa coherencia entre los rendimientos de una persona en diferentes tests de FE, evidenciando tanto que se trata de un constructo complejo como que la denominacin ontolgica FE no responde claramente a un mdulo encapsulado de funcionamiento. Es comn encontrar que una persona rinde de modo normal en una prueba de FE, luego decae notablemente en otra y vuelve a obtener un puntaje aceptable en la siguiente. Una respuesta a esta problemtica es el diseo de conjuntos de tests de FE, como los explicados en la seccin de clasificacin de tests. En conclusin, teniendo en cuenta los desacuerdos conceptuales que tienen las FE, es lgico esperar que los mismos acarreen consecuencias sobre sus instrumentos de evaluacin. A esto se le agrega que el concepto mismo tiene una complejidad ontolgica difcil de operacionalizar, y que la unidad de anlisis de su evaluacin excede al sistema cognitivo y alcanza tambin a la conducta de la persona misma. El desarrollo de ontologas e inferencias inversas representa un camino para encontrar soluciones al respecto. 6. Desarrollo de Ontologas e Inferencias Inversas Importantes lneas de investigacin actuales proponen dos vas para organizar el conocimiento sobre la relacin entre tests, procesamiento de la informacin y actividad nerviosa. Estos caminos podran aportar soluciones al problema en cuestin. Uno es el desarrollo de ontologas, que suponen un campo interdisciplinario para aumentar la interoperabilidad entre datos provenientes de investigaciones de niveles de anlisis muy diversos (Kola et al., 2010). Las ontologas intentan establecer cules son los elementos que componen un universo de inters, buscando consensos pretericos para incluir los conceptos tericos en una matriz integradora. A diferencia del concepto filosfico clsico de ontologa (pregunta por el ser en cuanto ser), las ontologas cientficas buscan determinar lo que es en cuanto universo de conocimiento especfico, con aplicaciones informticas prcticas. Un ejemplo es el Cognitive Map, que integra informacin en los siguientes niveles: gentico, neurotransmisin, redes neuronales, conceptos cognitivos, cuadros clnicos y tests neurocognitivos (Poldrack, 2006). Su misin es integrar investigaciones
42
en neurociencias cognitivas que hayan utilizado imgenes cerebrales en contextos clnicos (Temal, Dojat, Kassel & Gibaud, 2008). Se considera que es necesario el desarrollo de una ontologa relacionada con las FE, para limitar la dispersin terica y pasar a un nivel supraordinal que coordine las propuestas que se presentan. El otro camino es trabajar en inferencias inversas, de acuerdo a los teoremas bayesianos. Las inferencias inversas son una propuesta de Poldrack (2006) para cambiar el orden habitual de pensamiento en cuanto a la relacin test- funcin cognitiva- zona cerebral. La organizacin ms comn de estos elementos es disear un experimento donde un test implica determinadas funciones cognitivas y se observa que zonas cerebrales resultan activadas. El test y las funciones cognitivas se dan por conocidos, mientras la incgnita recae en las zonas cerebrales que se ven comprometidas. Una vez obtenida la imagen cerebral, se afirma que X test, relacionado con Y funcin, produce la activacin de Z zona cerebral. Sin embargo, este procedimiento corre el riesgo de arrastrar las ambigedades tericas de los tests y modelos cognitivos al lenguaje cerebral, ya que, como se ha visto, los vnculos entre los tests y los modelos de procesamiento de la informacin no tienen un consenso confiable. Poldrack (2006) se pregunta entonces bajo qu condiciones las imgenes cerebrales permitirn inferir los procesos cognitivos, dejando como incgnita la funcin cognitiva, tomando el test como tarea y la imagen cerebral como dato. La pregunta pasa a ser: Dada esta actividad cerebral, y conociendo el test qu funcin o capacidad cognitiva est siendo activada? Qu procesos cognitivos acontecen para que las imgenes cerebrales funcionales presenten este patrn de activacin? Este tipo de razonamiento se encuentra dentro de la lgica abductiva (Samaja, 1994). Poldrack (2006) propone aplicar el teorema de Bays (ver Figura 3) para calcular probabilidades inversas. Este tipo de razonamiento se ubica dentro de las denominadas probabilidades subjetivas, un campo fecundo de anlisis sobre cmo se construyen las probabilidades en el conocimiento cotidiano. En el presente se ilustrar como se puede trabajar con tests de funciones ejecutivas en inferencias inversas, a partir de una hipottica experimentacin sobre una prueba de fluidez verbal de letra excluida (PFV- LE). Esta se aplica en un contexto de obtencin de imgenes funcionales a partir de un resonador magntico.
43
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 La frmula del teorema de Bays es la siguiente: probabilidades a priori los valores conocidos (procesamiento semntico ejecutivo= 0.51; memoria de trabajo= 0.37; control inhibitorio= 0.12) para un contexto PFV-LE. Ahora, las probabilidades a posteriori cambian porque el resonador magntico inform del evento TPDLPFI. Entonces, se aplica la frmula del teorema de Bays, y se tiene: Probabilidad de activacin del procesamiento semntico ejecutivo:
P(Ai/B)= ___________0.12*0.51____________ (0.12*0.51)+ (0.24*0.37) + (0.05*0.12) Probabilidad de activacin de memoria de trabajo: P(Ai/B)= ___________0.24*0.37____________ (0.24*0.37) + (0.12*0.51) + (0.05*0.12) Probabilidad de activacin del control inhibitorio: P(Ai/B)= ___________0.05*0.12____________ (0.05*0.12) + (0.24*0.37) + (0.12*0.51) = 0.04 = 0.57 = 0.39
Donde B es una activacin detectada en el tercio posterior de la regin dorsolateral prefrontal izquierda (TP- DLPFI). Este es un evento B qu sirve como dato para el experimentador y lo importante es que tiene el valor de evidencia. Ahora, dada la evidencia de B cul es la actividad cognitiva que se puede inferir, teniendo en cuenta que se est aplicando PFV- LE? Aqu se debe revisar la literatura correspondiente a PFV- LE para conocer los procesos cognitivos relacionados con su ejecucin. A un nivel ontolgico se ponen en juego los modelos cognitivos y su capacidad descriptiva de la ejecucin de tests. Esto es muy exigente, ya que en el teorema de Bays el evento A (la actividad cognitiva que se desea conocer) debe ser un evento cuya probabilidad sumatoria sea 1, lo que supone un modelo de regresin R2 =1 (tres veces por encima de los valores realmente hallados). Esto implica descomponer el test en componentes cognitivos asociados de una manera exhaustiva. Suponiendo que una investigacin psicomtrica determina que en PFV- LE la participacin de los componentes cognitivos es la siguiente:
Procesamiento semntico ejecutivo= 0.51 Memoria de trabajo= 0.37 Control inhibitorio= 0.12
Se obtienen as las probabilidades A en el evento PFV-LE. Luego, se deja de lado este evento porque el teorema de Bays hace otra exigencia de conocimientos fuertemente desafiante para los tests neuropsicolgicos: Cul es la probabilidad de que se active TP- DLPFI en tests especficos de cada componente cognitivo, independientes de PFV- LE? Para responder esto es necesario recurrir a bases de datos como Cognitive Map, donde se encontraran estas hipotticas probabilidades:
En pruebas de procesamiento semntico ejecutivo= 0.12 En pruebas de memoria de trabajo= 0.24 En pruebas de control inhibitorio= 0.05
De esta manera, dada una activacin en TP-DLPFI, en el contexto PFV-LE, la mayor probabilidad reside en actividad de la memoria de trabajo. Como se pudo apreciar, el ejercicio de inferencia inversa presupone un conjunto de conocimientos previos que pueden alcanzarse mediante el desarrollo de modelos tericos potentes sobre la relacin entre actividad cognitiva y tests, y de ontologas ejecutivas que permitan la acumulacin de datos de investigaciones en un banco comn provisto de niveles de anlisis. Alcanzar este grado de desarrollo permitira perfeccionar el lenguaje cognitivo, poniendo lmites matematizables a la proliferacin de trminos funcionales y servira para identificar los procesos que implican los tests. 7. Una Nueva Generacin de Instrumentos de Evaluacin de FE Chan et al. (2007) destaca que la nueva generacin de tests en evaluacin de FE tendr una relacin diferente con la teora, porque se desprender directamente de marcos conceptuales genuinos de la neuropsicologa aplicada a este concepto. De acuerdo con Miyake et al. (2000), los tests podrn evaluar operaciones bsicas ejecutivas, potencindose el aprovechamiento de los diseos que surjan desde contextos experimentales. Tambin se pueden incorporar avances tecnolgicos, como lo hizo Morris et
Las probabilidades que aqu se obtienen son las relativas al entrecruzamiento entre el suceso B y los componentes cognitivos A. En la frmula representan los valores de (B/A). Se recuerda la evidencia: efectivamente se activ TP- DLPFI (suceso B) en el contexto PFV-LE. Las probabilidades de cada funcin se dividen ahora en a priori y a posteriori, siendo las
Marino D., Julin C. / RACC, 2010, Vol. 2, N1, 34-45 al. (1998) creando tests ejecutivos mediante realidad virtual. El anlisis del contenido conceptual de los tests estara en condiciones de utilizar estudios multidimensionales, donde cada uno pueda ser determinado como una combinacin de coordenadas dentro de un conjunto de dimensiones bsicas, tales como exigencia de velocidad, entrada sensorial, cantidad de informacin procesada, uso de recursos y tipos de memoria, unidades semnticas procesadas, unidades de permanencia prospectiva, entre otras. Adems, estas dimensiones podran relacionarse con ontologas ejecutivas diseadas de forma multidisciplinaria y aprovechar las inferencias inversas para considerar cada test como un grado de rotacin de las dimensiones en un espacio comn, relacionndose cada cambio de coordenadas con cambios en la actividad nerviosa. A esto debe sumarse que los tests tendran que tener un estudio etolgico y ecolgico, con codificaciones adecuadas de los espacios informacionales. Como seala Chan et al. (2007), la nueva generacin de tests tendr en cuenta todos los desarrollos tericos de componentes especficos. Con esto quiere significar que una depuracin del lenguaje ejecutivo provendr no solo de la inventiva de modelos tericos, sino de datos provenientes de las imgenes cerebrales, la tecnologa y la interoperabilidad ontolgica. Es importante considerar que las FE deberan poder ser evaluadas en mbitos fuera de la situacin de evaluacin de tests, con captaciones fenomenolgicas claras y discernibles de otras capacidades. Quiz esto tenga una dificultad metodolgica mayor, ya que, como qued establecido en el anlisis de la estructura de las definiciones de FE, este concepto puede tener como unidad de anlisis variables tanto de la cognicin como de la conducta y de la persona como una entidad global. Lo que se acaba de sealar se relaciona con la concepcin de sujeto de la neuropsicologa de las FE y su cercana al sujeto de la psicologa funcionalista. Entonces, una revisin del concepto de FE y de sus instrumentos de medicin podra significar tambin una interfase para analizar las consecuencias del desarrollo de la neuropsicologa sobre las concepciones de sujeto propias de la psicologa. Quiz en las FE se encuentre una clave para analizar tal impacto, interesante desde el punto de vista histrico y epistemolgico de esta ciencia. Referencias
Abraham, M., Della Valentina, R., Gauchat, S. & Marino, J.
44
(2008) Valores Normativos de la Prueba de Fluidez de Accin (Nombramiento de Verbos). Neuropsicologa, Neuropsiquiatra y Neurociencias. 8, 11-19. Ardila, A. (2008). On the evolutionary origins of executive functions. Brain and Cognition, 68, 92-99. Ardila, A. & Rosselli, M. (2007). Neuropsicologa clnica. Mxico: El Manual Moderno. Bechara, A., Damasio, H, Damasio, A & Anderson, S. (1994). Insensitivity to future consequences following damage to human prefrontal cortex. Cognition, 50, 7-12. Burin, D., Drake, M. & Harris P. (2007). Evaluacin neuropsicolgica en adultos. Buenos Aires: Paids. Chan, R., Shum, D., Toulopoulou, T. & Chen, E. (2008). Assessment of executive functions: Review of instruments and identification of critical issues. Archives of Clinical Neuropsychology 23, 201-216. Chaytor, N., Schmitter-Edgecombe, M., & Burr, R. (2006). Improving the ecological validity of executive functioning assessment. Archives of Clinical Neuropsychology, 21, 217-227 Collette, F, Hogge, M, Salmon, E & Van Der Linden, M (2006). Exploration of the neural substrates of executive functioning by functional neuroimaging. Neuroscience, 139, 209-221. De Vega, M. (1998). Introduccin a la Psicologa Cognitiva. Madrid: Alianza. Fassbender, C., Murphy, K., Foxe, J., Wylie, G., Javitt, D., Robertson, I. & Garavan, H. (2004). A topography of executive functions and their interactions revealed by functional magnetic resonance imaging. Cognitive Brain Research, 20, 132-143. Fernndez, A., Marino, J. & Alderete A. (2002). Estandarizacin y validez conceptual del Test del Trazo en una muestra de adultos argentinos. Revista Neurolgica Argentina 27, 83-88 Fuster, J.M. (2001) The Prefrontal Cortex An Update: Time is of the Essence. Neuron. 30, 319-333. Goldman Rakic, P. (1997). The cortical dopamine system: role in memory and cognition. Advances in pharmacology, 42, 707-711. Berg, E. (1948). A simple objective technique for measuring flexibility in thinking. Journal of General Psychology, 39, 15-22. Hull, R., Martin, R., Beier, M., Lane, D. & Hamilton, A. (2008). Executive function in older adults: a structural equation modeling approach. Neuropsychology. 22 (4). 508-522. Huettel, S., Misiurek, J., Jurkowski A & McCarthy, G. (2004). Dynamic and strategic aspects of executive processing. Brain Research, 1000, 78-84. Huizinga, M., Dolan, V. & Van Der Molen , M. (2006). Agerelated change in executive function: developmental trends and a latent variable analysis. Neuropsychologia. 44, 2017-2036 James, W. (1890). Principios de psicologa. En: J. Brennan (Ed.) Psicologa: historia y sistemas. Mxico: Pearson. Kaplan, G., engr, N., Grvit, H., Gen, I. & Gzeli, C.
45
(2006). A composite neural network model for perseveration and distractibility in the Wisconsin Card Sorting Test. Neural Networks 19, 375-387 Karpov, B., Luria, A. & Yarbuss, A. (1968). Disturbances of the structure of active perception in lesions of the posterior and anterior regions of the brain. Neuropsychologia, 6, 157-166. Koechlin, E. & Summerfield, C. (2007). An information theoretical approach to prefrontal executive function. Trends in cognitive science, 11, 229-235. Kola, J., Harris, J., Lawrie, S., Rector, A., Goble, A. & Martone, M. (2010). Towards an ontology for psychosis. Cognitive Systems Research, 11 (1), 42-52. Lezak, M. (1983). Neuropsychological assessment. (2nd ed.) New York: Oxford University Press. Lezak, M. (1995) Neuropsychological assessment. (1st ed.) New York: Oxford University Press. Luria, A. (1984). El cerebro en accin. Barcelona: Martnez Roca. Manly, T., Hawkins, K., Evans, J., Woldt, K. & Robertson, I. (2002). Rehabilitation of executive function: facilitation of effective goal management on complex tasks using periodic auditory alerts. Neuropsychologia, 40, 271-281. Marino, J., Fernndez, A. & Alderete A. (2001) Valores normativos y validez conceptual del test de laberintos de Porteus en una muestra de adultos argentinos. Revista Neurolgica Argentina, 26, 102-107 Miyake, A., Friedman, N., Emerson, M., Witzki, A., Howerter, A. & Wager, T. (2000) The Unity and Diversity of Executive Function and Their Contributions to Complex Frontal Lobe Tasks: A Latent Variable Analysis. Cognitive Psychology, 41, 49-100. Morris, R., Downes, J., Sahakian, B., Evenden, J., Heald, A. & Robbins, T. (1998). Planning and spatial working memory in Parkinsons disease. Journal of Neurology, Neurosurgery and Psychiatry, 51, 757-766. Nyhus, M. & Barcel, F. (2009). The Wisconsin Card Sorting Test and the cognitive assessment of prefrontal executive functions: A critical update. Brain and Cognition, 71, 437-451 Pineda,D., Merchn, V., Rosselli, M, & Ardila, A. (2000) Estructura factorial de la funcin ejecutiva en estudiantes universitarios jvenes. Revista de Neurologa, 12, 1112- 1118 Poldrack, R. (2006). Can cognitive processes be inferred from neuroimaging data? Trends in cognitive science, 10, 59-63. Reyes Snchez, P. & Slachevsky, A. (2008). Anatoma funcional del crtex prefrontal. En: E.Labos, F.Manes, A.Slachevsky & J. Fuentes (Eds.) Tratado de neuropsicologa clnica. Mxico: Akadia. Ruff, R, Light, R, Parker, S, & Levin H (1997). The psychological construct of word fluency. Brain and language 57, 394-405 Samaja, J. (1994). Epistemologa y Metodologa. Buenos Aires: Eudeba. Semenova, O. (2005). Problems of studying executive