Consolidación de Venezuela
Consolidación de Venezuela
Consolidación de Venezuela
Oligarquía Conservadora
El término "Oligarquía Conservadora" fue utilizado por primera vez por el historiador
venezolano Dr. José Gil Fortoul, quien lo usó para referirse a los gobiernos venezolanos
desde 1830 a 1846. La Oligarquía Conservadora puede definirse como una élite política,
social y económica que gobernó al país en función de sus propios intereses como grupo, y
que se hallaba reunida bajo el liderazgo del General José Antonio Páez.
Es importante señalar que en la Venezuela del siglo XIX, más que un partido y una doctrina
conservadora, lo que hubo en realidad fue un sector de la clase dominante que defendía sus
intereses como grandes propietarios y comerciantes. Para ello utilizaron argumentos y
políticas de corte liberal. Sin embargo, esta defensa los llevó a adoptar posiciones políticas
cerradas e intolerantes, siendo de este hecho de donde proviene la calificación de
"Conservadores" con la que Gil Fortoul los denominó: los gobiernos de la Oligarquía
Conservadora.
Contradicciones que se expresan en la lucha entre los seguidores de Bolívar y los de Páez, y que
quedan en evidencia durante la "Revolución de las Reformas". El movimiento liberal presenta poco o
nada de liberalismo en sus doctrinas y planteamientos, ya que surge más como un grupo de
oposición a los gobiernos de los conservadores.
Algunos historiadores (no sin razón) prefieren referirse a este periodo como la era del
"Nepotismo de los Monagas", para destacar el carácter personalista, familiar y despótico del
gobierno de ambos hermanos (nepotismo es la definición de una forma de gobierno en que se
favorece a un grupo familiar en particular). Generalmente se ha descrito la década de los Monagas
como una etapa en que se acentuó el deterioro de la nación, aumentó la desintegración política y la
ineficacia administrativa, por lo que, para la mayoría de los historiadores, este periodo tiene un
balance general negativo.
El 22 del mismo mes, desembarcó en la Vela de Coro el General Ezequiel Zamora, quien de
inmediato asumió el liderazgo del movimiento. Se procedió entonces a dotar a Coro de una
organización como Estado Federal, para proseguir de inmediato en campaña militar hacia el centro
del país. De esta manera, se daba inicio a la guerra de los cinco años, guerra sangrienta en la que
todo el odio contenido por los distintos sectores sociales quedó durante cinco años al descubierto.
Al enterarse de lo sucedido en Coro, el gobierno de Castro envió tropas a esa ciudad al mando del
General León Febres Cordero, quien restableció rápidamente el orden al no hallar resistencia en
ese sitio, pues Zamora se había marchado para iniciar su campaña militar hacia el centro del país.
Con la intención de conquistar Puerto Cabello, Zamora marchó hacia la costa derrotando a las
tropas del Gobierno en El Palito y en Araure. Ante la debilidad numérica de sus fuerzas y la falta
de suministros, desistió de atacar ese Puerto, por lo que se dirigió a San Felipe, ciudad que ocupó
sin encontrar resistencia. Procedió luego a crear el segundo Estado Federal, Yaracuy.
Luego marchó sobre Barinas, ciudad que tomó después de realizar una hábil maniobra militar para
burlar al enemigo. Declaró a Barinas Estado Federal y le cambió el nombre por el de Estado
Zamora.
Mientras Zamora llevaba a cabo estas acciones con gran rapidez, al otro lado del país, en oriente,
tropas federales al mando del General Juan Antonio Sotillo, iniciaban una invasión desde la Isla de
Margarita, dándole con ello mayor fuerza al movimiento federalista.
Guerra Federal
La Guerra Federal (1859 - 1863), también conocida como Guerra Larga o Guerra de los Cinco
Años, fue el enfrentamiento militar entre tendencias conservadoras y liberales en la
Venezuela del siglo XIX. Está considerado el enfrentamiento bélico más costoso para
Venezuela tras su independencia. Los conservadores, oligarquía surgida de la guerra
independentista, se oponían a modificar el orden social establecido desde la colonia,
imperturbable luego de la guerra de independencia de Venezuela, incluyendo entre otras
cosas el sistema electoral. Por otro lado, los liberales, proclamaban los ideales de libertad e
igualdad.
Durante la guerra, los liberales eran conocidos con el nombre de federalistas ya que el
federalismo y la autonomía de las provincias eran sus reivindicaciones principales.
El Liberalismo amarillo:
Dominó la escena política desde 1870 hasta 1899, inspirado en las ideas y programas del
viejo partido liberal de Antonio Leocadio Guzmán. Sin embargo, esta agrupación no fue un
partido político como los actuales, pues no tenia programa ni doctrina. Sus miembros se
agrupaban alrededor de los caudillos, por esos se llamaban liberales, guzmancistas,
crespistas, etc.
La llegada de Antonio Guzmán Blanco al poder representó el final del gobierno de los azules.
Con él, Venezuela experimentó uno de sus períodos más fecundos, de administración
ordenada y eficiente; a la vez que se adueñaron del mando hombres apegados a la doctrina
liberal.
Aspectos relevantes del período histórico de poder desde el partido del mmo nombre:
Partido Conservador: A principios del segundo período presidencial del general José Antonio
Páez (1839), los campos políticos se definen. Ante el empuje de la oposición, los
conservadores empiezan a organizarse. Su jefe es el general Páez; él es el caudillo, la
personificación del gobierno, el prestigio que sostiene el andamiaje político. Se habla de la
necesidad de los partidos y éstos empiezan a delinearse. El que defiende al gobierno es el
Partido Conservador. Sus dirigentes son los altos funcionarios, por lo que sus organismos de
dirección se confunden con los órganos del Estado. Se le ha nombrado también «godo»,
«constitucional», «legalista», «civilista», «ministerial» y «oligárquico». Su núcleo económico es
el sector mercantil y un pequeño resto del mantuanismo aristocrático. Por eso el término
«conservador» es adecuado para distinguirlo en el campo de las luchas políticas. Fue el partido
gobernante hasta comienzos de 1848, aun cuando, por las razones expuestas, no tuvo
propiamente una estructura organizada como partido.
Tadeístas y gregorianos: El primero de los Monagas que llega al poder es José Tadeo (1847-
1851), a quien sucede su hermano José Gregorio (1851-1855). Al principio se cree que el
primero habría de tener una influencia decisiva en la dirección del gobierno del segundo; pero,
en la práctica, no fue así. José Gregorio Monagas formó su propio grupo y los partidarios de
ambos se enfrentaron como adversarios. Por lo tanto, a partir de 1851, se manifiestan 2
tendencias, la de los gregorianos, que detentan el poder, y la de los tadeístas, quienes
sintiéndose perseguidos, se aprestan a la lucha; ésta, sin embargo, no llega a la contienda
armada, sino que se manifiesta sólo en el plano político; al mismo tiempo, tadeístas y
gregorianos permanecen unidos, por encima de sus divergencias, a la hora de enfrentar los
intentos de Páez y los conservadores para desalojarlos del poder.
Partidos de Guzmán Blanco: A los pocos meses de haber sido derrocado el gobierno de la
federación que presidía el mariscal Falcón (26.6.1868), regresó a Venezuela Antonio Guzmán
Blanco. Inmediatamente se dio a la tarea de estructurar un movimiento político que culminó en
la Unión Liberal. Circunstancias adversas hicieron que Guzmán saliera nuevamente al exilio
(agosto 1869). En poco tiempo organiza una expedición e invade por Curamichate, en el estado
Falcón, desde donde inicia una campaña que lo trae triunfante hasta Caracas, que toma por
asalto (abril 1870). Tan pronto como llega al poder, transforma la Unión Liberal en Partido
Liberal de Venezuela, el que más tarde se denominará Gran Partido Liberal Amarillo. Este
partido actuó en las 3 etapas del gobierno de Guzmán Blanco: El Septenio (1870-1877), el
Quinquenio (1879-1884) y el Bienio de la Aclamación (1886-1888).
Partidos regionales: En las luchas de provincia, los bandos políticos liberales o conservadores
tenían los nombres más originales. Por ejemplo, en laselecciones de 1834 peleábanse en
Maracaibo el gobierno local los «Tembleques» (liberales) y los «Campesinos» (conservadores).
Desde 1840 se enfrentaron en Ciudad Bolívar los «Filántropos» (liberales) y los
«Antropófagos» (conservadores). En 1848, se oponen en el Táchira los «Güífaros»
(monagueros-liberales) y los «Calungos» (paecistas-conservadores); lo mismo sucedía en
Barcelona con los «Chorreados» (liberales guzmancistas) y los «Chupapiedras» (liberales
antiguzmancistas). En Barquisimeto el pleito fue entre los «Chuíos» (guzmancistas) y los
«Chuaos» (antiguzmancistas). En Coro eran irreconciliables los «Independientes»
(antiguzmancistas) y los «Incondicionales» (guzmancistas); igual actitud tenían en el Guárico
los «Turupiales» (liberales) y los «Arrendajos» (conservadores). En Barinas los liberales eran
llamados «Capuceros» y en los Andes «Lagartijos»; en Trujillo existían además los
«Langostas» (antiguzmancistas). También en los Andes los conservadores eran calificados de
«Ponchos» y finalmente, a principios del siglo XX, en San Felipe (Edo. Yaracuy) disputábanse
el dominio político los «Morrocoyes» y los «Bicicletas», ambos de tendencia liberal. M.V.M.