Unidad I - Manual Eduacion Ambiental Unesco

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Fundamentos de la
Educación Ambiental
Autor: José Félix Martínez Huerta

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

La crisis ambiental
Desde siempre la especie humana ha interaccionado con el medio y lo ha modificado, los problemas ambientales no son
nuevos. Sin embargo, lo que hace especialmente preocupante la situación actual es la aceleración de esas
modificaciones, su carácter masivo y la universalidad de sus consecuencias.

Los problemas ambientales ya no aparecen como independientes unos de otros sino que constituyen elementos que se
relacionan entre sí configurando una realidad diferente a la simple acumulación de todos ellos. Por ello, hoy en día
podemos hablar de algo más que de simples problemas ambientales, nos enfrentamos a una auténtica crisis ambiental y
la gravedad de la crisis se manifiesta en su carácter global.

Sin embargo, no podemos limitarnos a percibir


esta crisis como conflicto en el que determinados
planteamientos sobre el mundo y sobre la vida
resultan inadecuados. Si somos conscientes de que
sólo en un ambiente de crisis se consideran y se
desarrollan soluciones innovadoras, parece claro
que tenemos ante nosotros el desafío de encontrar
en la crisis una ocasión para "reinventar" de forma
creativa nuestra manera de entender y
relacionarnos con el mundo.

Pero estas soluciones no pueden ser solamente


tecnológicas, el desafío ambiental supone un reto
a los valores de la sociedad contemporánea ya que
esos valores, que sustentan las decisiones
humanas, están en la raíz de la crisis ambiental. En CONCEPCION ACTUAL DE MEDIO AMBIENTE
este contexto, la educación ambiental tiene un
importante papel que jugar a la hora de afrontar El concepto de medio ambiente ha ido evolucionando de tal forma que se
ha pasado de considerar fundamentalmente sus elementos físicos y
este desafío, promoviendo un "aprendizaje biológicos a una concepción más amplia en la que se destacan las
innovador" caracterizado por la anticipación y la interacciones entre sus diferentes aspectos, poniéndose el acento en la
participación que permita no sólo comprender, vertiente económica y sociocultural.
sino también implicarse en aquello que queremos
entender. Por lo tanto, hoy en día se identifican como ambientales no sólo los
problemas clásicos relativos a contaminación, vertidos, etc., sino también
otros más ligados a cuestiones sociales, culturales, económicas...,
La Educación Ambiental: una relacionadas en definitiva con el modelo de desarrollo.

respuesta a la crisis ambiental De hecho, actualmente la idea de medio ambiente se encuentra


íntimamente ligada a la de desarrollo y esta relación resulta crucial para
comprender la problemática ambiental y para acercarse a la idea de un
Desde los años sesenta, cuando se cuestionó el desarrollo sostenible que garantice una adecuada calidad de vida para las
modelo de crecimiento establecido y se denunció generaciones actuales y para las futuras.
el impacto que sobre el medio ambiente producía,
los diagnósticos realizados sobre la crisis De esta forma, el medio ambiente puede entenderse como un
macrosistema formado por varios subsistemas que interaccionan entre sí.
ambiental han sido numerosos. Poco a poco, el ser Cuando se produce algún fallo en esas interacciones surgen los problemas
humano empieza a realizar una nueva lectura del ambientales.
medio en el que está inmerso y una nueva
cosmovisión, una nueva percepción de la relación
ser humano-sociedad-medio, va abriéndose paso.

En no pocos de los informes y manifiestos que van


apareciendo a lo largo de estos años se plantea la
necesidad de adoptar medidas educativas (entre
otras) para frenar el creciente deterioro del
planeta.

Las relaciones entre educación y medio ambiente no son nuevas, sin embargo, la novedad que aporta la educación
ambiental es que el medio ambiente, además de medio educativo, contenido a estudiar o recurso didáctico, aparece con
entidad suficiente como para constituírse en finalidad y objeto de la educación.

De esta forma, aunque sus raíces son antiguas, la educación ambiental, como la entendemos hoy en día, es un concepto
relativamente nuevo que pasa a un primer plano a finales de los años sesenta.

Estos planteamientos alcanzan rápidamente un reconocimiento institucional. Así por ejemplo, en el ámbito
internacional, ha sido la Organización de las Naciones Unidas, a través de sus organismos (UNESCO y PNUMA
fundamentalmente), la principal impulsora de estudios y programas relativos a la educación ambiental. Sin embargo, no
podemos reducir este proceso de desarrollo a su vertiente institucional. Es preciso reconocer el esfuerzo de
innumerables entidades, organizaciones de carácter no gubernamental y educadores que
han contribuído, a veces de forma anónima, no sólo a la conceptualización de la
educación ambiental sino, sobre todo, a su puesta en práctica.

Funciones de la Educación Ambiental


Un propósito fundamental de la educación ambiental es lograr que tanto los individuos
como las colectividades comprendan la naturaleza compleja del medio ambiente
(resultante de la interacción de sus diferentes aspectos: físicos, biológicos, sociales,
culturales, económicos, etc.) y adquieran los conocimientos, los valores y las habilidades
prácticas para participar responsable y eficazmente en la prevención y solución de los
problemas ambientales y en la gestión de la calidad del medio ambiente.

La educación ambiental resulta clave para comprender las relaciones existentes entre los
sistemas naturales y sociales, así como para conseguir una percepción más clara de la
importancia de los factores socioculturales en la génesis de los problemas ambientales. En
esta línea, debe impulsar la adquisición de la conciencia, los valores y los comportamientos que favorezcan la
participación efectiva de la población en el proceso de toma de decisiones. La educación ambiental así entendida puede
y debe ser un factor estratégico que incida en el modelo de desarrollo establecido para reorientarlo hacia la
sostenibilidad y la equidad.

Por lo tanto, la educación ambiental, más que limitarse a un aspecto concreto del proceso educativo, debe convertirse en
una base privilegiada para elaborar un nuevo estilo de vida. Ha de ser una práctica educativa abierta a la vida social para
que los miembros de la sociedad participen, según sus posibilidades, en la tarea compleja y solidaria de mejorar las
relaciones entre la humanidad y su medio.

Objetivos de la Educación Ambiental


Conciencia: Ayudar a las personas y a los grupos sociales a que adquieran mayor sensibilidad y conciencia del medio
ambiente en general y de los problemas conexos.

Conocimientos: Ayudar a las personas y a los grupos sociales a adquirir una comprensión básica del medio ambiente en
su totalidad, de los problemas conexos y de la presencia y función de la humanidad en él, lo que entraña una
responsabilidad crítica.

Actitudes: Ayudar a las personas y a los grupos sociales a adquirir valores sociales y un profundo interés por el medio
ambiente que los impulse a participar activamente en su protección y mejoramiento.

Aptitudes: Ayudar a las personas y a los grupos sociales a adquirir las aptitudes necesarias para resolver los problema
ambientales.

Capacidad de evaluación: Ayudar a las personas y a los grupos sociales a evaluar las medidas y los programas de
educación ambiental en función de los factores ecológicos, políticos, económicos, sociales, estéticos y educacionales.

Participación: Ayudar a las personas y a los grupos sociales a que desarrollen su sentido de responsabilidad y a que
tomen conciencia de la urgente necesidad de prestar atención a los problemas del medio ambiente, para asegurar que se
adopten medidas adecuadas al respecto.

Definidos en el Seminario Internacional de Educación Ambiental de Belgrado. 1975

Educación y gestión ambiental


Previamente ha quedado planteado el carácter estratégico que la educación ambiental tiene en el proceso hacia el
desarrollo sostenible. Sin embargo, es evidente que la acción educativa, por sí sola, no es suficiente para responder al
reto ambiental. "Para contribuir con eficacia a mejorar el medio ambiente, la acción de la educación debe vincularse con
la legislación, las políticas, las medidas de control y las decisiones que los gobiernos adopten en relación al medio
ambiente humano". (UNESCO).

La educación es, a la vez, producto social e instrumento de transformación de la sociedad donde se inserta. Por lo tanto,
los sistemas educativos son al mismo tiempo agente y resultado de los procesos de cambio social. Ahora bien, si el resto
de los agentes sociales no actúa en la dirección del cambio, es muy improbable que el sistema educativo transforme el
complejo entramado en el que se asientan las estructuras socioeconómicas, las relaciones de producción e intercambio,
las pautas de consumo y, en definitiva, el modelo de desarrollo establecido.

Esto implica la necesidad de incluir los programas de educación ambiental en la planificación y en las políticas
generales, elaboradas a través de la efectiva participación social. Demasiadas veces se cae en la tentación de realizar
acciones atractivas, con una vistosa puesta en escena y grandes movimientos de masas, que no comprometen demasiado
ni cuestionan la gestión que se realiza. La educación ambiental debe integrarse con la gestión ("la mejor educación es
una buena gestión") y no ser utilizada como justificación ante las posibles deficiencias de ésta.

El reto que tenemos planteado hoy en día es el de favorecer la "transición" hacia la sostenibilidad y la equidad, siendo
conscientes de que esta transición requiere profundos cambios económicos, tecnológicos, sociales, políticos, además de
educativos. Así pues, aun reconociendo las enormes potencialidades de la Educación Ambiental, no podemos
convertirla en una falsa tabla de salvación.

La Educación Ambiental, más que limitarse a un aspecto concreto del proceso


educativo, debe convertirse en una base privilegiada para elaborar un nuevo
estilo de vida

EVOLUCION DEL CONCEPTO DE EDUCACION AMBIENTAL


Conviene recordar que el concepto de educación ambiental no es estático, evoluciona de forma paralela a
como lo hace la idea de medio ambiente y la percepción que de él se tiene. Tradicionalmente se trabajaban
los aspectos físico-naturales del medio desde planteamientos próximos a las ciencias de la naturaleza.
Posteriormente se planteó la necesidad de contemplar de forma explícita el medio ambiente en los procesos
educativos, pero la atención se centró en cuestiones como la conservación de los recursos naturales, la
protección de la fauna y flora, etc.

Actualmente sabemos que aunque los elementos físico naturales constituyen la base de nuestro medio, las
dimensiones socioculturales, políticas y económicas son fundamentales para entender las relaciones que la
humanidad establece con su medio y para gestionar mejor los recursos naturales. También somos
conscientes de la interdependencia existente entre medio ambiente, desarrollo y educación. Precisamente
esa consciencia nos conduce a reclamar la reorientación de la educación ambiental de modo que, además de
preocuparnos por el uso racional de los recursos, debemos ocuparnos del reparto de esos recursos y
modificar los modelos de desarrollo que orientan su utilización.

La educación ambiental, según su concepción actual, no representa una respuesta coyuntural sino que
supera la perspectiva tecnológica, que sin duda tiene, para constituirse en elemento esencial de una
educación global y permanente que aporta un nuevo paradigma educativo y supone una profunda
innovación cultural.

Participación en la resolución de problemas


Uno de los principios básicos que debe regir nuestra labor educativa es la de adoptar un enfoque orientado a la solución
de los problemas. No podemos olvidar que de poco sirve la educación ambiental que propugnamos si no desemboca en
la acción, en la participación para buscar y aplicar soluciones a los problemas ambientales. Efectivamente, entre los
objetivos de la educación ambiental, el de participación es el que debe orientar todo el proceso.

En muchas ocasiones, esperamos lograr la sensibilización trabajando más en el reconocimiento de los problemas que en
su solución. Confiamos, asimismo, en que esta sensibilización conduzca directamente a una acción responsable.
Debemos ser conscientes, sin embargo, de que el conocimiento, incluso las actitudes favorables, son necesarias pero no
suficientes para conseguir un comportamiento adecuado. Conviene mantener, por lo tanto, cierta cautela y no suponer
que la mera toma de conciencia lleva asociada automáticamente la adopción de comportamientos y hábitos correctos.
En palabras de Gowin, "para educar verdaderamente acerca del medio ambiente se necesita más que conocer sólo los
hechos, se requiere una interacción entre pensar, sentir y actuar". Esto exige entrenamiento, definir objetivos y
planificar actividades específicas para trabajar las actitudes y los comportamientos. Supone asimismo pasar del análisis
de los problemas a la acción, aprender implicándose en los problemas reales y participando en actividades de protección
y mejora del medio.

Esta participación, además de ser beneficiosa, tiene una gran fuerza educativa, por lo que es un referente inestimable a
la hora de plantear el diseño y la aplicación de los programas de educación ambiental.

Algunos hitos en el desarrollo de la Educación Ambiental

• Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano. Estocolmo. 1972. La Comunidad Internacional
reconoce como indispensable una labor de educación en cuestiones ambientales y recomienda desarrollar un
programa de educación ambiental de carácter interdisciplinar.
• Seminario Internacional de Educación Ambiental. Belgrado. 1975. Se establecen las metas y los objetivos de la
educación ambiental así como una serie de recomendaciones sobre diversos aspectos relativos a su desarrollo.
• Conferencia Intergubernamental sobre Educación Ambiental. Tbilisi. 1977. Se definen la naturaleza, y los
principios pedagógicos de la educación ambiental, así como las grandes orientaciones que deben regir su
desarrollo en el ámbito nacional e internacional.
• Congreso Internacional sobre Educación y Formación relativas al Medio Ambiente. Moscú. 1987. Se ponen en
clave de acción las orientaciones anteriores y se aprueba la Estrategia Internacional de Acción en materia de
Educación y Formación Ambiental para el decenio de 1990.
• Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y Desarrollo. Río de Janeiro. 1992. Se plantea la
reorientación de la educación ambiental hacia el desarrollo sostenible y se pone de relieve el carácter
fundamental que la relación desarrollo-medio ambiente tiene para la educación ambiental. Es preciso remarcar
que, paralelamente a la Conferencia oficial, se desarrolló el Foro Internacional de ONG y Movimientos
Sociales, donde la sociedad civil manifestó su percepción y sus planteamientos sobre el reto que tiene ante sí la
educación ambiental actualmente.
• Conferencia Internacional sobre Medio Ambiente y Sociedad: Educación y Conciencia Pública para la
Sostenibilidad. Tesalónica. 1997. Clarificación del concepto y de los mensajes claves de la educación para la
sostenibilidad e inicio de un inventario de buenas prácticas de cara a elaborar un programa de trabajo sobre
educación, conciencia y formación.

Bibliografía

• "Educación ambiental en Euskadi. Situación y perspectivas". Martínez Huerta, J. F. (1996). Vitoria-Gasteiz: Gobierno Vasco.
• "Río 92. Programa 21. Conferencia de las Naciones Unidas sobre el medio ambiente y desarrollo." Tomo 2. (1993). Madrid: Ministerio de
Obras Públicas y Transportes.
• "La educación ambiental. Bases éticas, conceptuales y metodológicas". Novo, M. (1995). Madrid: Universitas.
• "La educación ambiental. Las grandes orientaciones de la Conferencia de Tbilisi" UNESCO. (1980). París: UNESCO.
• "Conferencia Intergubernamental sobre Educación Ambiental." Tbilisi (URSS), Octubre de 1977. Informe final. UNESCO.
• "Estrategia internacional de acción en materia de educación y formación ambientales para el decenio de 1990." UNESCO-PNUMA. (1988).
Congreso sobre educación y formación ambiental. Moscú 1987. Nairobi/París. UNESCO-PNUMA.
• "Tendencias de la Educación Ambiental." VVAA.(1979). París: UNESCO.
• "Aprender para el siglo XXI: educación ambiental." VII Semana Monográfica.. VVAA.(1992). Madrid: Fundación Santillana.
• "Construyendo el futuro. Foro Internacional de ONG y Movimientos Sociales. Tratados alternativos de Río'92." (1994). Madrid: Ministerio
de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente.

Biodiversidad
Autor: Francisco Heras Hernández

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

La diversidad de la vida
La vida en la tierra muestra una diversidad que parece no encontrar límites. Los seres vivos han conquistado medios tan
diferentes como los océanos y el aire; se han asentado en las cálidas y húmedas franjas tropicales, y también en las frías
y áridas zonas polares. Para resolver los retos de la locomoción, la alimentación, la comunicación o la reproducción han
desplegado una apabullante variedad de soluciones. La diversidad de la vida, gestada a lo largo de 4.000 millones de
años, es el gran tesoro del planeta tierra.

Niveles de diversidad
Un análisis atento de la biodiversidad nos revela que ésta se manifiesta en distintos niveles, que se corresponden con
distintas escalas a las que se manifiesta el fenómeno de la vida.

Nivel específico: La gran variedad de especies que pueblan la tierra constituye la manifestación más espectacular de la
diversidad biológica. Las enciclopedias de animales y plantas contienen un muestrario sorprendente. Y tan sólo se trata
de una pequeña parte de la abultada relación de especies descrita por los científicos, que ronda el millón. Éstas, a su
vez, parecen ser sólo una porción del total existente, ya que se calcula que quedan millones de formas de vida sin
describir.

Nivel genético: la mayoría de las especies que conocemos cuentan con individuos que son, en alguna medida,
diferentes. Estas diferencias son, en parte, el reflejo de una diversidad en el código genético que posee cada individuo.

Nivel ecológico: Los seres vivos han desarrollado relaciones características con otros seres vivos y con el medio físico
en el que se desenvuelven. Una vez más, la vida ha desarrollado una gran variedad de soluciones en este nuevo nivel de
análisis. Baste pensar en la tundra, la taiga, los bosques templados, las praderas, los arrecifes de coral, las sabanas o las
selvas, que a su vez cuentan con un montón de variantes locales características.

EL LENTO PROGRESO DE LA DIVERSIDAD


BIOLOGICA

A lo largo de los últimos 600 millones de años, la


vida ha ido haciéndose progresivamente más
diversa, aunque no sin sufrir épocas de retrocesos
temporales y episodios de "extinciones en masa".
Hoy en día, gracias a los estudios paleontológicos, se
conocen cinco de estos episodios, que se aprecian en
el gráfico por la caída brusca del número de familias
existente.

La pérdida de diversidad
A lo largo de la historia de la vida se ha sucedido la aparición de nuevas especies mientras que otras se han extinguido
ante la llegada de cambios que les resultaban desfavorables. En este continuo trasiego de formas de vida por el
escenario terrestre, la diversidad biológica ha ido ampliándose, aunque sufriendo estancamientos, e incluso retrocesos
temporales en épocas especialmente desfavorables.

En los últimos 10.000 años la diversidad animal y vegetal que hoy nos maravilla, fruto de una historia de miles de
millones de años de evolución, está sufriendo un retroceso devastador debido a la actividad humana. El ritmo de
extinción de las especies se ha acelerado drásticamente, calculándose que en la actualidad es por los menos 400 veces
mayor que el que existía antes de la aparición del ser humano. En opinión del científico E.O. Wilson, se trata del
proceso principal de transformación ambiental, ya que el cambio producido cuando desaparece una especie o una
variedad es totalmente irreversible.

La destrucción de los hábitats naturales

La destrucción de los hábitats naturales es una de las principales causas de pérdida de biodiversidad en el mundo. Los
bosques tropicales, sin duda los principales almacenes de biodiversidad del planeta, están desapareciendo a un ritmo
vertiginoso. Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), entre
1980 y 1990 su extensión se ha reducido a una media de 15,4 millones de Has. al año, lo que equivale a casi un tercio
de la superficie de España.

La deforestación de las áreas tropicales es, en gran medida, responsabilidad de los países desarrollados, ya que son éstos
los principales consumidores de las maderas extraídas de estas zonas.

Fragmentación

Campos de cultivo, áreas urbanas, carreteras y autopistas constituyen barreras infranqueables para numerosas especies.
Para estos seres vivos, su hábitat natural ha pasado de ocupar extensas áreas ininterrumpidas a quedar dividido en
fragmentos aislados de menor extensión. Es el efecto conocido como fragmentación de los hábitats, responsable de la
extinción local de numerosas especies. Cuando un cierto número de individuos de una especie queda confinado en una
pequeña porción de territorio, el peligro de extinción es mucho mayor, ya que el tamaño de la población es pequeño y es
más probable que una perturbación dé al traste con la viabilidad del grupo.

Campos sin vida

Algunos paisajes rurales tradicionales han sabido combinar de forma admirable la producción con la conservación de la
vida silvestre: las dehesas mediterráneas, los paisajes en mosaico de la vertiente cantábrica, las montañas, explotadas
tradicionalmente de forma estacional, son algunos de estos ejemplos. La aparición de la moderna agricultura industrial,
basada en la especialización y el uso masivo de fertilizantes y pesticidas produce una brusca disminución de especies.
En los países más intensamente explotados por estas nuevas formas de agricultura industrial se ha acuñado el término
de desierto verde, para referirse a estos nuevos paisajes rurales, muy pobres en vida silvestre.

Razones para conservar


Apariencias que engañan

En las modernas ciudades del primer mundo, tan ajenas a los ritmos naturales, los ciudadanos tenemos a menudo la
sensación de habernos "liberado" de nuestra ancestral dependencia de la vida silvestre. Pero se trata tan sólo de un
espejismo: en realidad, cada día, sin saberlo, utilizamos cientos de productos que deben su origen a las plantas y los
animales silvestres. He aquí algunos ejemplos:
El pan que comemos cada día: Las producciones de trigo o maíz se mantienen gracias a cruzamientos frecuentes de
las razas comerciales con sus parientes silvestres. En definitiva, podemos disfrutar de nuestro pan de cada día gracias a
la variabilidad genética que queda en los parientes silvestres de las plantas cultivadas.

Medicinas: Cuando el médico nos receta un medicamento existe un 50% de posibilidades de que esa medicina deba su
origen a un ser vivo silvestre.

Modelos: Las especies silvestres no sólo nos proporcionan materias primas, sino también modelos que inspiran a los
investigadores en el diseño de medicinas sintéticas o productos industriales. Por ejemplo, los científicos habrían tenido
grandes dificultades para diseñar el caucho sintético si no hubieran tenido un esquema que copiar en la estructura
molecular del caucho natural.

Para que la vida siga

Paradógicamente es la vida la que mantiene las condiciones necesarias para que la vida siga. Los seres vivos participan
en los grandes ciclos terrestres (ciclo del carbono, ciclo del nitrógeno) tan esenciales para los seres vivos. La propia
composición de la atmósfera terrestre está regulada por la vida Es un círculo vicioso lleno de sentido.

Ética

Los argumentos de tipo ético para la conservación de la biodiversidad podrían resumirse en estos dos interrogantes:
¿Tenemos derecho a hurtar ese patrimonio magnífico que es la biodiversidad a las generaciones que vienen detrás de
nosotros? ¿Tenemos derecho a eliminar a los seres vivos que comparten con nosotros esta "casa común" que es el
planeta tierra?

Estética

La diversidad de la vida no sólo es fuente de beneficio material sino también de bienestar espiritual. Para muchos la
biodiversidad es sinónimo de belleza y de inspiración y su contemplación o estudio resulta una actividad enormemente
gratificante.

La diversidad de la vida, gestada a lo largo de


4.000 millones de años, es el gran tesoro del planeta

NIVELES DE BIODIVERSIDAD.
LOS PINZONES DE LAS ISLAS GALAPAGOS
Los pinzones que habitan en las islas Galápagos (Ecuador) se han convertido en ejemplo universal de la
diversidad de las especies generada en el transcurso de la evolución. En las islas habitan 13 especies de
pinzones, que poseen evidentes parecidos (plumaje oscuro, cola corta, dimensiones pequeñas, nido en forma
de bola), pero también diferencias significativas, especialmente en la forma del pico, lo que les permite
consumir alimentos diferentes. Así el pico fuerte de Geospiza magnirostris le permite alimentarse de
semillas grandes y duras; el pico grande de Geospiza fortis le permite consumir semillas tiernas e insectos;
el género Camarhyncus posee picos especializados para morder con la punta, útiles para una dieta
insectívora, pero también para las semillas tiernas; el género Platyspiza posee un pico similar al de los
papagayos, muy apropiado para yemas, hojas, frutos y semillas; el género Certhidea tiene el pico más
delgado, sólo apto para la captura de insectos. La observación de este grupo de aves sirvió a Darwin para
elaborar su teoría de la selección natural. Su predicción todos procederían de una única especie de pinzón
sudamericano que, después de llegar a las islas, habría empezado a diferenciarse ha sido posteriormente
corroborada por estudios de otros biólogos.

Ideas para trabajar a favor de la Biodiversidad.


(Experiencias y propuestas)
Valorar la diversidad en nuestra vida cotidiana

En un montón de aspectos que tienen que ver con nuestra vida cotidiana la diversidad es sinónimo de posibilidad de
elección, de variedad de estímulos; la antítesis de la monotonía.

Pensemos en lo que significa para nosotros la diversidad en la música, en el arte, en la gastronomía, en la literatura, en
el deporte, en la moda ¿Cómo sería nuestra vida si no hubiera variedad de estilos, de posibilidades?

La biodiversidad también significa para las sociedades humanas capacidad de elección, posibilidad de desarrollo,
calidad de vida. Podemos hacer el ejercicio de analizar elementos de nuestra vida cotidiana y su relación con la
biodiversidad. Sigamos la pista de los productos que encontramos en nuestra cocina o en nuestra mesa y, en un trabajo
digno de un gran detective, busquemos sus relaciones (que las hay) con el mundo silvestre Valorar el papel de la
biodiversidad en nuestra vida cotidiana y descubrírselo a los que tenemos cerca, puede ser una buena forma de empezar

Sobre la ética de la conservación de las especies

La lectura de algún texto conservacionista puede proporcionar una buena ocasión para el debate y la reflexión sobre la
dimensión ética de la conservación de la biodiversidad. "Todavía vivo" (1), un libro formado por 37 cartas remitidas a
los humanos por otras tantas especies de la fauna ibérica , puede ser uno de esos textos que propicien la reflexión.

Proyectos de acción a favor de la biodiversidad

¿Cómo podemos trabajar en favor de la biodiversidad?. Para empezar, resulta conveniente realizar un análisis previo de
nuestras posibilidades y opciones como grupo. Podemos plantear el proceso en la línea metodológica de los
procedimientos de resolución de problemas:

• Análisis del problema de la pérdida de la biodiversidad en un ámbito o escala que nos sea asequible
• Búsqueda de posibles alternativas para incidir de forma positiva
• Diseño de un plan de acción
• Intervención
• Valoración de los resultados

He aquí algunas posibles líneas de intervención.

Abrir espacios para la vida silvestre en nuestro entorno más cercano

Nuestro entorno más cercano, el barrio, pueblo o ciudad en que vivimos, no debe convertirse en un desierto de cemento.
Con algo de imaginación y trabajo, podemos proporcionar interesantes oportunidades para la vida silvestre muy cerca
de nosotros. Podemos construir nidos o comederos para pájaros, plantar especies que atraigan mariposas a nuestros
jardines, limpiar o restaurar una pequeña charca, plantar setos vivos en zonas de linde entre parcelas, Las posibilidades
son muchas y podemos orientarnos utilizando alguno de los manuales publicados con recomendaciones prácticas (2, 3,
4)

El consumo y la biodiversidad

Ya hemos señalado que es muy lejos de nuestros espacios cotidianos, en las zonas tropicales, donde se están
produciendo las más drásticas pérdidas de biodiversidad. Y que tenemos una responsabilidad en este proceso, a pesar de
tratarse de escenarios lejanos. Por suerte, también tenemos posibilidades de influir positivamente, por ejemplo mediante
nuestro comportamiento como consumidores.

Podemos evitar consumir determinados productos que están muy ligados a la destrucción de los bosques tropicales
(ciertas maderas exóticas, obtenidas de forma destructiva, por ejemplo). Para utilizar esta herramienta del consumo
responsable es necesario contar con una buena información sobre cuáles son los productos cuya adquisición resulta
negativa.

Pero el "arma" del consumidor no sólo está en evitar comprar ciertos productos; también puede estar en la adquisición
de otros. Diversas empresas y organizaciones traen productos de países del "sur" con la filosofía del Comercio Justo
(pagando a los productores un precio digno por su trabajo y fomentando una producción que no destruya el medio
ambiente). Entrar en contacto con organizaciones que promueven el comercio justo y difundir sus actividades, por
ejemplo, organizando una feria de productos de comercio justo, puede ser una iniciativa muy positiva para evitar la
miseria y la degradación ambiental (ambas se auto-refuerzan) en las zonas donde la biodiversidad es mayor en nuestro
planeta.

Jardineros del paisaje

Tras una cuidadosa valoración de los espacios mejorables, podemos emprender un proyecto de estudio y restauración de
un espacio local. Existen diversos manuales con recomendaciones útiles para acometer este tipo de trabajos.

Intervenir en un procedimiento de Evaluación de impacto ambiental

Muchas de las decisiones trascendentes para el futuro de la biodiversidad en nuestra ciudad o nuestra región afectan a
muchos y, por tanto tienen un carácter colectivo.

Por ejemplo, proyectos como autopistas, repoblaciones forestales, grandes fábricas o canteras deben someterse , de
acuerdo con la ley, a una evaluación de impacto ambiental, un procedimiento destinado a conocer la incidencia que
pueden tener sobre el medio ambiente, antes de que se lleven a cabo, para poder, en su caso, descartarlos, o modificarlos
y reducir al máximo sus efectos perjudiciales. El procedimiento conlleva la realización de un informe técnico y
contempla la posibilidad de que cualquier ciudadano aporte información o su punto de vista sobre el tema en el periodo
de "información pública". Desgraciadamente son aún muy pocos los ciudadanos que conocen el procedimiento y lo
ejercitan. Para saber más sobre él es muy recomendable consultar el material divulgativo elaborado por el Gobierno
Vasco (5).

Bibliografía

• (1) "Todavía vivo." Araujo, J. (1991). Calenda. Madrid. 136 págs.


• (2) "Ideas para interpretar y mejorar nuestros paisajes." Benayas, J. y Heras, F. (1994). En J. Benayas (coord.) Viviendo el paisaje. Fundación
Natwest. Madrid.
• (3) "Hacer para comprender." Clapham, V. (1987) Fichas de experimentos para la conservación. ADENA-WWF.
• (4) "Consejos y recomendaciones para reforestar con especies autóctonas." Siguero Llorente, P.L.(1991). Quercus nº 62 y 63
• (5) "Las evaluaciones de impacto ambiental." Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno Vasco (1991). Servicio de Publicaciones del
Gobierno Vasco.
• BIBLIOGRAFIA BASICA
• "Biodiversidad." VVAA (1993). ICONA, 47 págs.
• "La biodiversidad, amenazada." Wilson, E.O. (1988). Investigación y Ciencia, 158: 64-71
• "A wealth of wild species." Myers, N. (1983). Westview Press. 273 págs.
• "Materiales de Educación Ambiental. Biodiversidad." CEIDA (Coord.) 1997. Gobierno Vasco. (Carpeta de material didáctico)
La Atmósfera
Autor: Carmen Orozco Barrenetxea. Antonio Pérez Serrano
(Dpto. Química. Esc. Univ. Politécnica. Burgos)

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

La biosfera es un sistema que engloba a todos los seres vivientes de nuestro planeta así como
el aire, el agua y el suelo que constituyen su hábitat o lugar donde se desarrolla normalmente
su ciclo vital. Para el mantenimiento de este ciclo vital es esencial que el equilibrio ecológico no
se altere, lo que implica la necesidad de evitar acciones que puedan modificarlo de alguna
manera o puedan introducir cambios en cualquiera de los agentes implicados en el mismo, uno
de los cuales, de importancia extraordinaria, es sin ninguna duda la atmósfera.

¿Cuáles son los indicadores más importantes de la contaminación que sufre la


atmósfera?

Responder a esta pregunta de forma exhaustiva nos exigiría un análisis pormenorizado de la


cantidad y naturaleza de las especies existentes actualmente en la atmósfera terrestre.
Analicemos únicamente tres hechos que son materia de preocupación por parte de la sociedad:

• El posible cambio climático ocasinado por el denominado "efecto invernadero" y la


disminución de la capa de ozono de la estratosfera.
• El incremento de radiaciones de alta energía en la superficie de nuestro planeta como
consecuencia también de esa destrucción del ozono estratosférico.
• El deterioro de los ecosistemas y los materiales terrestres ocasionado por la lluvia
ácida.

Radiación solar incidente sobre la tierra-Reemisión de radiación de la tierra a la


atmósfera

La radiación que, proveniente del sol, alcanza la atmósfera terrestre corresponde


fundamentalmente a las zonas del ultravioleta, visible e infrarrojo (UV, VIS e IR). Las
radiaciones de la zona del UV son muy energéticas y por tanto capaces de producir
alteraciones en las sustancias; la mayor parte de ellas son detenidas en las capas más
externas de la atmósfera terrestre, ionosfera y mesosfera; las que consiguen atravesar estas
capas son frenadas por el ozono (O3) presente en la estratosfera. Las radiaciones de IR son
también absorbidas por algunos de los componentes de la atmósfera como el dióxido de
carbono (CO2), el vapor de agua y el monóxido de dinitrógeno (N2O). El resultado de todo ello
es que a la superficie de nuestro planeta la radiación que llega es, esencialmente, de la zona
del visible. Esta radiación es absorbida por la tierra salvo una pequeña parte que es reflejada,
acumulándose en forma de calor, y por la noche es reemitida al espacio. Sin embargo, hay una
diferencia muy importante entre esta radiación y la que provenía del sol: la radiación que
emite la superficie terrestre pertenece en su mayor parte a la zona del infrarrojo, es decir, es
una radiación eminentemente térmica. Sólo una pequeña parte de la misma es capaz de
atravesar la troposfera pues la mayor parte es absorbida por los componentes naturales del
aire que hemos señalado, quedando retenidas entre la tropopausa y la superficie de la tierra,
lo que provoca un calentamiento de esta zona de la atmósfera.

Efecto Invernadero
El calentamiento que acabamos de mencionar se conoce con el nombre de "efecto invernadero
natural" y gracias a él es posible la vida en nuestro planeta. Sin embargo, el espectro de
absorción de los gases de efecto invernadero no es continuo, existen ciertas zonas en el
mismo, denominadas ventanas, en las que la absorción es muy baja, por lo que permiten el
paso de la radiación a través de ellas. Cualquier alteración de la atmósfera que contribuya a
cerrar las ventanas mencionadas se traducirá en una mayor retención de radiación y, en última
instancia, en un mayor calentamiento del aire de la troposfera. Este calentamiento adicional al
efecto invernadero natural es lo que se denomina "efecto invernadero antropogénico" o,
simplemente, "efecto invernadero" cuando estamos hablando del fenómeno que actualmente
nos preocupa.

¿Cuáles son las causas que pueden contribuir a cerrar las "ventanas"?

Existen dos posibilidades:

• Aumento de la concentración de algunos gases, que son componentes naturales del


aire, por emisiones antropogénicas de los mismos: CO2, CH4, y N2O responsables,
respectivamente, de un 50%, 18% y 6% del efecto invernadero.
• Emisión de gases que no forman parte de la composición del aire de forma natural. Es
el caso de los clorofluorocarbonos y el ozono troposférico, considerados causantes del
17% y 9% del efecto invernadero.

Las actividades humanas que provocan el incremento de estos gases en la atmósfera


son muchas pero podríamos resumirlas así:

• El aumento del consumo de carburantes fósiles, la deforestación, la obtención de


importantes cantidades de cemento, conducen a un incremento de las emisiones de
CO2.
• Los procesos de tratamiento de carburantes, fugas en explotaciones mineras,
distribución de gas natural, cría de ganado y cultivos intensivos aumentan las emisiones
de metano, CH4.
• Los CFC´s se emplean en numerosas actividades, aunque su uso está disminuyendo.
• La concentración de ozono en la troposfera está aumentando debido a que las
combustiones liberan a la atmósfera compuestos capaces de originarlo.
• Las emisiones de N2O aumentan debido al incremento del uso de abonos nitrogenados
en la agricultura que al descomponerse generan este gas.

RELACION ENTRE EL AUMENTO DE DIOXIDO DE


CARBONO Y LA TEMPERATURA A LO LARGO DEL TIEMPO

Fuente: "El Clima" Investigación y Ciencia, pág. 92

¿Qué daños ocasiona el efecto invernadero?


Fundamentalmente un aumento de la temperatura media del planeta. Se acepta que, si el
ritmo de incremento se mantiene, hacia finales del año 2100 el aumento oscilará entre 3,5 -
4,2 ºC. Esta variación de temperatura inducirá un cambio climático, entre cuyas principales
consecuencias podríamos citar los siguientes fenómenos: habrá un régimen de tormentas más
intenso, una distribución desigual de las precipitaciones, lo que originará fuertes sequías y
desertización de unas zonas, mientras que en otras se producirán graves inundaciones, los
bosques se desplazarán a latitudes mayores, los casquetes polares se fundirán en parte con la
consiguiente elevación de los niveles del mar.

El deterioro de la capa de ozono: causas y efectos


La estratosfera tiene un contenido en ozono que oscila entre un mínimo de ~25 ppb y un
máximo de ~190 ppb (partes por billón = cc/m3) a causa del equilibrio alcanzado entre los
procesos de formación-destrucción de esta especie por acción de la radiación UV que llega a la
misma.

Es un hecho constatado la disminución paulatina de estas concentraciones de ozono


estratosféricas, hecho que es particularmente notable durante los meses de septiembre y
octubre en las zonas polares, aunque también sobre otras regiones del mundo se viene
observando el mismo problema.

¿Cuáles son las causas de esta disminución de ozono en la estratosfera?

Las investigaciones realizadas han conducido a establecer que son principalmente los
clorofluorocarbonos CFC´s, y, en menor medida, los óxidos de nitrógeno emitidos directamente
en la estratosfera los causantes de este grave problema.

Debido a su gran estabilidad, los CFC´s son capaces de difundirse hasta la estratosfera donde,
al verse sometidos a radiaciones más energéticas, liberan un átomo de cloro que es el que
actúa como catalizador de la reacción de destrucción de ozono. De hecho, se estima que un
solo átomo de cloro es capaz de destruir del orden de 100.000 moléculas de ozono. El porqué
la tasa máxima de destrucción del ozono se observa en la Antártida durante la primavera
austral se explica por el mecanismo a través del cual transcurre esta reacción. En la
actualidad, aunque las emisiones de CFC´s han disminuído notablemente y experimentarán
una reducción aún mayor en los próximos años por los acuerdos internacionales que acerca de
ellos se han firmado, no podemos olvidar que existen ya en la atmósfera cantidades
importantes de estos compuestos y que permanecerán en ella durante muchos años, por lo
que el problema del deterioro de la capa de ozono continuará todavía en los próximos años.

¿Qué consecuencias podría tener la destrucción del ozono estratosférico?

Si la concentración de ozono en la estratosfera disminuye, llegarán hasta la superficie de


nuestro planeta más radiaciones de la zona del UV. Estas radiaciones tienen un alto contenido
energético, y por tanto una alta capacidad de destruir enlaces químicos, lo que en la práctica
se traduce en una alteración de los compuestos, tanto de los que forman parte de los seres
vivos como de materiales (especialmente los poliméricos). En resumen, se producirán
alteraciones de todo tipo, biológicas, genéticas, de materiales,

Nuestro estilo de vida influye en efectos tan globales como el


efecto invernadero, la lluvia ácida o el deterioro de la capa de ozono
LA CIUDAD COMO ECOSISTEMA
Podríamos señalar tres hechos que son materia de preocupación para la sociedad:

El posible cambio climático ocasionado por el denominado "efecto invernadero" y la disminución de la capa de ozono de la
estratosfera.

El incremento de radiaciones de alta energía en la superficie de nuestro planeta como consecuencia también de esa destrucción
del ozono estratosférico.

El deterioro de los ecosistemas y los materiales terrestres ocasionado por la lluvia ácida.

Lluvia ácida: causas y efectos


Como consecuencia del arrastre de diversas sustancias, componentes naturales del aire, partículas sólidas, y debido
fundamentalmente a la disolución del dióxido de carbono en el agua de lluvia, ésta tiene una ligera acidez que oscila
entre valores de 5,5-5,7 unidades de pH.

Se ha medido el grado de acidez del agua de lluvia en zonas donde existía una elevada concentración de ciertos
contaminantes y se ha visto que su pH es mucho más bajo de lo normal, de hecho algunas lluvias llegan a tener pH del
orden de 4,2-4,3, lo que indica un grado de acidez muy alto, esto es lo que conocemos con el nombre de "lluvia ácida",
denominación con la que se designa cualquier agua de lluvia de pH inferior al natural de 5,5.
¿Cuáles son las causas del incremento COMPOSICION QUIMICA DEL AIRE
de acidez del agua de lluvia?
TIEMPO
GASES % EN VOL.
PERMANENCIA
Son fáciles de resumir: el modo de vida PERMANENTES
que hemos desarrollado ha incrementado
la emisión a la atmósfera de determinados Nitrógeno N2 78,08 10.000.000 años

gases que son capaces de experimentar una Oxígeno O2 20,95 5 X 10.000 años
serie de reacciones químicas que los
transforman en ácidos al disolverse en el Argón Ar 0,93 -/-
agua de lluvia. Helio He 0,00052 100.000.000
Neón Ne 0,00018 -/-
¿Cuáles son estos gases y qué Krypton Kr 0,0001 -/-
actividades originan su emisión? Xenon Xe 0,000008 -/-
VARIABLES
Principalmente son dos: el dióxido de Dióxido Carbono CO2 0,03 15 años
azufre (SO2, se estima que contribuye en Metano CH4 0,00015 5 años
un 60-70%) y los óxidos de nitrógeno Hidrógeno H2 0,00005 7 años
(NOx, contribuyen en torno al 30%); el Monóx. Dinitrógeno N2O 0,00002 8 años
porcentaje restante, en torno a un 6%, sería Ozono O3 0,000002 2 años
responsabilidad de otras especies MUY VARIABLES
químicas. Agua H2O entre 0,01 y 5 10 días
Monox. Carbono CO 0,00001 1/2 años
¿Qué actividades humanas originan la Amoniaco NH# 0,0000006 7 días
emisión de estos gases?
Dióx. Nitrógeno NO2 0,0000001 6 días
Dióx. Azufre SO2 0,00000002 3 días
Todos ellos son consecuencia de los
Sulfuro de Hidrógeno H2S 0,00000002 2 días
procesos de combustión. Los óxidos de
azufre se emiten al quemar combustibles
de baja calidad, que contienen azufre, en
general son carbones o fracciones pesadas
del petróleo.

Los óxidos de nitrógeno se producen, en


mayor o menor cantidad, en todas las
reacciones de combustión por reacción del
oxígeno y nitrógeno del aire a
temperaturas elevadas.

Tengamos en cuenta que los procesos de


combustión son unos de los que más
habitualmente efectuamos, tanto a nivel
doméstico (calefacciones), como a nivel
industrial (obtención de energía eléctrica
por vía térmica, combustiones en
calderas,) y que los medios de transporte,
individuales y colectivos, incorporan
motores en los que se queman
combustibles de mejor o peor calidad.

¿Qué daños origina la lluvia ácida?

La lluvia ácida causa multitud de efectos


nocivos tanto sobre los ecosistemas como
sobre los materiales. Intentemos
sintetizarlos:

• Aumentan la acidez de las aguas de ríos y lagos, lo que se traduce en importantes daños en la vida acuática,
tanto piscícola como vegetal.
• Aumenta la acidez de los suelos, lo que se traduce en cambios en la composición de los mismos,
produciéndose la lixiviación de nutrientes importantes para las plantas, tales como el calcio, y movilizándose
metales tóxicos, tales como el cadmio, níquel, manganeso, plomo, mercurio, que de esta forma se introducen
también en las corrientes de agua.
• La vegetación expuesta directamente a la lluvia ácida sufre no sólo las consecuencias del deterioro del suelo,
sino también un daño directo que puede llegar a ocasionar incluso la muerte de muchas especies.
• El patrimonio construído con piedra caliza experimenta también muchos daños, pues la piedra sufre la
siguiente reacción química, proceso conocido como mal de la piedra: CaCO3 (piedra caliza)+H2SO4 (lluvia
ácida) ----> CaSO4 (yeso) + CO2 + H2O es decir, se transforma en yeso, y éste es disuelto por el agua con
mucha mayor facilidad y además, al tener un volumen mayor, actúa como una cuña provocando el
desmoronamiento de la piedra.
• Los materiales metálicos se corroen a mucha mayor velocidad.

Acciones positivas para evitar la contaminación


¿Qué podemos hacer?

Nuestro papel es múltiple pues, por un lado, somos ciudadanos capaces de plantear exigencias a la Administración, y
por otro, somos generadores directos de contaminación y consumidores de bienes o servicios, por lo que deberemos
desarrollar una actitud personal favorable al medio ambiente en todos estos campos.

En lo que respecta a nuestro comportamiento frente a la Administración debemos exigir medidas de política
medioambiental encaminadas a lograr el desarrollo de una sociedad con un modo de vida cada vez más respetuoso con
la naturaleza; así mismo es importante ejercer el derecho a la libertad de acceso a la información sobre medio ambiente
y el derecho a intervenir en la evaluación del impacto ambiental de los grandes proyectos y a la comprobación del
comportamiento de las grandes empresas (públicas y privadas) mediante el acceso a los inventarios de emisiones,
vertidos y residuos y auditorías medioambientales.

En cuanto a nuestro comportamiento como consumidores, debemos tender a potenciar el consumo de artículos y
servicios en cuya fabricación o generación se empleen técnicas respetuosas con el medio ambiente: es una manera muy
eficaz de obligar a las empresas a incorporar en su producción tecnologías limpias.

Por último, en el campo de la actividad cotidiana, debemos tender a una menor generación de contaminantes,
reduciendo y racionalizando:

• El consumo de energía y potenciando el empleo de energías limpias, hay muchas acciones individuales que
pueden implicar una reducción del consumo energético: aislar las viviendas, no despilfarrar la luz, utilizar
bombillas de bajo consumo, controlar el empleo de calefacciones,
• El uso de transportes con motores de combustión, en este sentido las opciones son múltiples: menor uso del
vehículo, empleo de transporte público, transportes no contaminantes,
• El consumo de envases no reciclables, potenciando además la recogida selectiva de residuos y el reciclado de
todo tipo de artículos, el consumo energético es menor al fabricar muchos productos como el papel, metales,
etc a partir de los correspondientes materiales reciclados.
• El consumo en general, asumiendo la falsedad de la igualdad "calidad de vida" = "cantidad de consumo". Es
necesario que incorporemos a nuestro pensamiento y código de comportamiento conceptos como el desarrollo
sostenible; parámetros de medida de bienestar distintos de indicadores meramente económicos, que
comprendamos que el mundo es único y que, no por tener el privilegio de habitar en una zona con un grado de
desarrollo mayor, tenemos derecho a despilfarrar recursos y materiales.

Todo ello nos llevará a reducir el consumo y a modificar nuestros parámetros de elección, prefiriendo artículos y
servicios producidos por medio de técnicas respetuosas con el medio ambiente, con lo que disminuirá la cantidad de
energía empleada y las empresas se verán obligadas a adoptar tecnologías limpias.

Podríamos terminar insistiendo en que nada de lo que hagamos es indiferente respecto al medio ambiente. Es preciso
analizar nuestro comportamiento, nuestras costumbres, reflexionar acerca de ellas y potenciarlas si son respetuosas con
el medio, por el contrario, tratar de cambiarlas si constituyen un atentado -aunque sea pequeño- respecto al mismo, es
decir, podríamos hacernos una "auditoría medioambiental personal".

Problema de contaminación a escala local


Los habitantes, la naturaleza y el patrimonio que constituye una ciudad sufre, además de los tres grandes problemas de
contaminación atmosférica mencionados, la acción de otros muchos contaminantes que habitualmente se emiten a la
atmósfera al desarrollar actividades que resultan habituales en nuestro modo de vida. Sería de interés comentarlos,
aunque sea brevemente, pues son sustancias que, cada vez con más frecuencia, figuran en las informaciones que, de
manera habitual, se dan a conocer en las ciudades, mediante prensa, paneles anunciadores, para que sus habitantes
tengan conocimiento de la calidad del aire que respiran.

• Monóxido de carbono (CO), producido por combustión incompleta de materiales carbonados. Altamente
tóxico para el ser humano y animales en general.
• Dióxido de azufre (SO2), lo hemos mencionado al hablar de la lluvia ácida; además de ser una de sus causas,
es un gas irritante que ocasiona efectos nocivos sobre la salud humana, materiales y plantas. Su efecto se
acentúa en presencia de ciertas partículas.
• Hidrocarburos o Compuestos Orgánicos Volátiles, emitidos como consecuencia de la combustión incompleta
de combustibles líquidos (transporte), incineración de residuos y procesos industriales. Poseen una toxicidad
variable y están implicados en la formación de la neblina de contaminación ("smog fotoquímico o seco" de las
grandes ciudades). Este smog es una mezcla muy compleja de compuestos de alto poder de oxidación que
originan efectos muy nocivos sobre los seres vivos y algunos materiales.
• Oxidos de nitrógeno (NO y NO2), generados en los procesos de combustión. Tienen una toxicidad media, pero
contribuyen también al smog fotoquímico y al fenómeno de lluvia ácida ya mencionado.
• Ozono, se refiere al generado en las capas bajas de la atmósfera y que forma parte de las neblinas de
contaminación ya citadas. Es irritante y tóxico para el ser humano, también afecta de manera importante a
materiales poliméricos al ser un fuerte oxidante.
• Partículas, son especies sólidas o líquidas en suspensión en el aire; su origen es muy diverso, originan efectos
dañinos según tamaño y naturaleza, tanto sobre las personas y seres vivos, como sobre los materiales (por
ejemplo, el plomo procedente de las gasolinas).

Bibliografía

• "Calidad del Aire en España". (Series Monográficas). AA.VV. (1993) Dirección General de Política Ambiental. MOMPTA. Madrid
• "Cuadernos de Contaminación Atmosférica". (Series Monográficas). AA.VV. (1994) Dirección General de Política Ambiental. MOPTMA.
Madrid
• "El Clima". AA.VV. (1991) Libros de Investigación y Ciencia. Ed. Prensa Científica Barcelona.
• "El Efecto Invernadero". Mundo Científico, nº 126. Julio - Agosto 1992. Ed. Fontalba (Barcelona)
• "El Efecto Invernadero. El desastre de mañana, hoy". Jon Erickson. (1992) Serie MacGraw-Hill de Divulgación Científica. Ed. MacGraw-Hill.
Madrid.
• "Glosario de Contaminación del Aire". (Textos y Documentos) Secretaría General de Medio Ambiente. MOPT. Madrid, (1987)
• "La Capa de Ozono. La Tierra en Peligro". Marshall Fischer. (1995). MacGraw-Hill de Divulgación Científica. Ed. MacGraw-Hill. Madrid.
• "La Contaminación Atmosférica". Dereck Elsom. (1990). Ed. Cátedra. Madrid
• "Lluvia Acida. Impacto Ambiental de las Grandes Instalaciones de Combustión". Humberto Da Cruz (coordinador). (1989) Fed. Amigos de la
Tierra. Buró Europeo de Medio Ambiente. Miragüano Ediciones. Madrid.
• "Química Ambiental. Contaminación del Aire y del Agua". Stocker-Seager. (1989).Ed. Blume. Madrid.
• "Química Atmosférica. Origen y Efectos de la Contaminación". Xabier Doménech. (1995). Miragüano Ediciones. Madrid.

Agua Dulce
Autor: Carmelo Marcén (I.E.S. Pilar Lorengar. Zaragoza)
Javier Benayas y Francisco José Sanz
(Dpto. Ecología Univ. Autónoma.Madrid)

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo


El recurso agua: un bien preciado siempre
Hablar del agua es comentar una paradoja. Es el elemento más abundante de la Tierra y, a su vez, escasea en muchos
lugares. Da la vida y, en ocasiones, la quita. Une y separa. No le concedemos valor y su falta paralizaría nuestra vida.
No figura en las grandes cifras macroeconómicas y es el principal activo... A pesar de todo, cualquier cosa que tiene que
ver con el agua ejerce una atracción irresistible. Los ríos, la expresión más recurrente del agua dulce, han tenido y
tienen un papel esencial en la vida del globo. Han sido inspiradores de muchas obras de arte, motores de la civilización
de los pueblos, dinamizadores de las economías,...

No debemos olvidar que el agua dulce potable supone solamente el 0,008% del agua terrestre, lo que hace que en
ocasiones su uso plantee complejos problemas. Todos se podrían resumir en una frase: "existe un desajuste entre la
demanda, en cantidad y en calidad, y las disponibilidades en un momento dado y en un lugar concreto".

Es de todos conocido que el agua dulce está distribuída de forma muy irregular en la superficie terrestre. Los grandes
depósitos naturales se encuentran en los glaciares de Groenlandia y la Antártida y en los Lagos de América del Norte o
de Rusia. Las zonas húmedas tropicales contienen porcentajes elevados del total de la reserva mundial. El resto de las
zonas terrestres se abastece como puede ya que a la carencia de agua se une la estacionalidad de la escorrentía.

Los distintos pueblos, las diferentes civilizaciones, han


dedicado múltiples esfuerzos a proveerse de agua en cantidad y
calidad para su vida cotidiana y para sus economías. En
ocasiones le dedican un esfuerzo personal diario como sucede
en ciertos países en donde la sequía es endémica; en otros
lugares han construído ingenios técnicos y mecánicos para
recoger un recurso que siempre ha sido considerado
imprescindible. El agua potable domiciliaria es una conquista
reciente en muchos lugares. Hoy día nos parece un servicio
irrenunciable pero, desgraciadamente, no lo es en muchos lugares del planeta. En las áreas urbanas del tercer mundo
170 millones de personas carecen de agua limpia para satisfacer sus mínimas necesidades: beber, cocinar o lavarse; en
las áreas rurales de estos países el panorama es más sombrío ya que alcanza a casi 885 millones.

Pero no todos los recursos pueden ser utilizados en todo su potencial. Existe un límite al que progresivamente nos
vamos acercando. La sucesiva construcción de diques y presas ocasiona múltiples afecciones y no garantiza, por sí sola,
la satisfacción de las demandas futuras. Se habla de que globalmente hay un exceso de agua pero, debido a los límites
operativos y a la contaminación, las cifras totales de este momento sólo se pueden llegar a duplicar y eso se supone que
se puede alcanzar de aquí a unos 20 o 30 años. Urgen, por tanto, otras acciones correctoras de la desviación de los
consumos.

El agua ejerce un papel importante


en la organización del espacio
Desde antiguo, los ejes fluviales han ofrecido a los grupos sociales unas condiciones apropiadas para el establecimiento
de focos de civilización. Cualquier mapa histórico de España o del mundo, de épocas pasadas o recientes, ilustra la
potencialidad de los ejes fluviales. La agricultura hidráulica, la hidroelectricidad, la posibilidad de comunicaciones o de
transporte han sido siempre opciones para el desarrollo en las diferentes culturas.

El papel fecundante de las vías de agua todavía es perceptible en la actualidad si atendemos a la localización de los
mayores asentamientos urbanos e industriales. Sin caer en el determinismo del agua, pues los medios técnicos de
transporte lo cuestionarían, el agua ha tenido y tiene un papel relevante en la organización del espacio. Los conflictos
internacionales por el uso del agua, las polémicas entre Comunidades Autónomas en el Estado Español por el uso del
agua de cuencas compartidas evidencia el papel del agua como vertebrador del territorio.

Qué duda cabe que también ha originado constreñimientos al desarrollo, lo mismo en épocas antiguas que en la
actualidad, ya que todos los problemas no se resuelven con la técnica, sobre todo los que afectan a la calidad de las
aguas. Solamente por estos motivos habría que intentar desarrollar nuevas actitudes, hábitos diferentes de cara a
preservar los ríos, los acuíferos y garantizar el futuro.

Algunas causas y ciertos efectos de


la contaminación de las aguas continentales
Los seres humanos se concentran en las proximidades de los cursos de agua y provocan que los sistemas de agua dulce
sean los primeros hábitats en degradarse. Usan el agua, consumen sus especies animales, utilizan sus cauces para
desplazarse y como colectores de sus vertidos.

Hay que considerar también que los ecosistemas de agua dulce son muy vulnerables. Por un lado los cauces soportan
los flujos de materiales constantes y con cambios rápidos; por otro, los lagos y estanques tienen ciclos naturales muy
lentos con lo que tardan mucho en expeler los agentes contaminantes.

No debe extrañarnos por tanto la afirmación de que la contaminación del agua es uno de los problemas más graves con
los que se enfrenta la civilización actual. Lluvias ácidas, vertidos de aguas residuales, productos químicos agrícolas,
metales pesados, etc. se incorporan al caudal de agua de los ríos. Este problema es particularmente grave en todos los
países: en los industrializados por la cantidad y la diversidad de agentes contaminantes y en los países en desarrollo
debido a la imposibilidad de hacer frente al coste económico que suponen las tecnologías para la depuración del agua y
la regeneración de las aguas residuales. Por otra parte, muchos de estos contaminantes son difíciles de eliminar por los
métodos convencionales de depuración. Su recuperación va a ser muy costosa.

El agua dulce no es solamente agua. La biodiversidad de ríos, lagos, torrentes y zonas húmedas es el conjunto de
ecosistemas más amenazados de la Tierra. Casi el 20% de los peces de agua dulce han desaparecido o están el peligro
de hacerlo. Esta cifra es mucho mayor en algunos países industrializados como sucede en Europa Oriental. Pero no son
sólo los peces. Anfibios, moluscos y otras muchas especies peligran también aunque no se conoce suficientemente la
biodiversidad de agua dulce.

El Plan de Saneamiento y Depuración de Aguas Residuales aprobado en 1995 incluía varias medidas para mejorar la
calidad de las aguas y preveía la aportación de cuantiosas cantidades económicas pero su desarrollo no ha alcanzado
todavía la velocidad deseada.

Hablar del agua es comentar una paradoja.


Es el elemento más abundante de la tierra
y, a su vez, escasea en muchos lugares

EL CICLO DEL AGUA


El concepto de ciclo indica claramente el carácter limitado de los
recursos. Como puede observarse, la cantidad de agua existente en la
Tierra siempre es la misma y se halla en constante movimiento debido
a la acción de la energía solar y a la fuerza de la gravedad. De esta
forma, se repite una y otra vez un proceso que llamamos "ciclo del
agua".

La sobreexplotación de las aguas subterráneas va en aumento


El uso del agua subterránea no es una moda de nuestros tiempos. Existen documentos históricos que hablan de las
cualidades del agua de manantial. Pero el uso del agua subterránea se ha incrementado en España a un ritmo vertiginoso
desde la década de los 60.

La contaminación, o la falta, de las aguas superficiales ha motivado el empleo de aguas subterráneas. En principio
podemos decir que abundan las aguas de este tipo. De hecho, según el Instituto Geológico y Minero de España, los
acuíferos o embalses subterráneos que albergan recursos hídricos de cierta importancia cubren casi el 60% de la
superficie del Estado Español.

Pensemos que de los 30.000 hm3/año de agua-recurso, casi 25.000 se emplean en agricultura con una superficie regada
de más de 3.000.000 ha. De éstas, casi el 30% se riegan con aguas subterráneas. De los 4.500 hm3/año que se emplean
para uso urbano e industrial casi 1.500 corresponden a aguas subterráneas. Ello supondría que del orden del 40% de la
población se estaría abasteciendo con estas aguas y aproximadamente el 80% del total de los municipios. Estas cifras de
utilización en España se ven ampliamente superadas en el resto de los países de la Unión Europea.

Estas actividades humanas y agrícolas principalmente están reduciendo considerablemente el nivel de reservas de aguas
subterráneas. Sin embargo, el mayor problema de esta utilización es que ha originado un incremento considerable del
contenido de compuestos nitrogenados en las aguas subterráneas, además de un aumento del contenido de Cl- en los
acuíferos próximos a la costa como consecuencia de la entrada del agua del mar en éstos.

Los acuíferos se encuentran, de entrada, mejor protegidos frente a la contaminación que las aguas superficiales pero
cuando ésa se produce suele ser irreversible en la mayoría de los casos. De ahí la urgencia de articular un sistema de
protección que preserve los acuíferos de su pérdida irreparable.

La Ley de Aguas 29/1985 recoge cuestiones relativas a la contaminación y a la protección de los acuíferos pero la
maquinaria administrativa va demasiado lenta en la articulación y en la aplicación de directivas protectoras.

El consumo humano del agua dibuja una situación compleja


El consumo del agua va creciendo en todas las culturas pero representa en cada una de ellas valores muy contrastados.
Los consumos per cápita difieren notablemente tal como se puede apreciar en el cuadro sobre los Usos del Agua, pero
esta cifra enmascara en cierta manera la verdad puesto que ha de ser analizada contrastándola con los diferentes usos
del agua. En la tabla se puede apreciar también, es una tónica general en la mayor parte de los países que incluyen los
informes internacionales, el elevado porcentaje que suponen los usos agrícolas de agua dulce; también hay que señalar
que el porcentaje de usos con respecto a recursos hay que contemplarlo dentro de unas cifras globales de recursos
anuales de agua internos renovables que no siempre son utilizables ni se cumplen debido a la irregularidad de los
aportes. Con todo, constatamos que algunos países están explotando aguas fósiles en demasía frente a otros que apenas
llegan a alcanzar porcentajes del 2% de los recursos anuales.

USOS DEL AGUA

ESTADOS UNIDOS BULGARIA JAPON

Uso per cápita (m3/año): 1.868 Uso per cápita (m3/año): 1.545 Uso per cápita (m3/año): 732
Abastecimiento (%): 13 Abastecimiento (%): 3 Abastecimiento (%): 17
Industria (%): 45 Industria (%): 76 Industria (%): 33
Regadío (%): 42 Regadío (%): 22 Regadío (%): 50
Usos/recursos (%): 19 Usos/recursos (%): 7 Usos/recursos (%): 16
ESPAÑA EGIPTO MADAGASCAR

Uso per cápita (m3/año): 1.188 Uso per cápita (m3/año): 1.028 Uso per cápita (m3/año): 1.642
Abastecimiento (%): 12 Abastecimiento (%): 7 Abastecimiento (%):1
Industria (%): 26 Industria (%): 5 Industria (%): 0
Regadío (%): 62 Regadío (%): 88 Regadío (%): 99
Usos/recursos (%): 41 Usos/recursos (%): 97 Usos/recursos (%): 41

FUENTE: World Resources Institute. 1996. Datos referidos a años entre 1987 y 1992

En España el riego agrícola es, con mucho, el máximo demandante de agua aunque parece que se observa una cierta
tendencia al descenso. Hay que significar que la máxima demanda de agua para la agricultura se produce con la época
veraniega, que es la de menor registro pluviométrico. El resto de los consumos no tiene ese carácter estacional.

Existe una convicción generalizada que habla de unos elevados consumos domiciliarios de agua potable en los países
que disfrutan de una renta per cápita más elevada; dentro de estos países, los consumos urbanos duplicarían sin duda los
consumos de los núcleos rurales. Los países en vías de desarrollo tendrían un menor consumo pero no siempre es así si
nos atenemos a las cifras publicadas. En general tienen, aunque las comparaciones son difíciles de comprobar pues
enmascaran situaciones de enormes diferencias, consumos del orden de la mitad o de la tercera parte. La
internacionalización de la economía puede estar en el origen de los elevados consumos agrícolas de algunos como
Madagascar, o la obsolescencia de la industria puede ser la causa de los elevados consumos de otros como Bulgaria. Sin
embargo, estas cuestiones exigirían un análisis más detallado y manejar un número mayor de variables.

El papel de los Convenios y Tratados para el uso del agua


El agua es un bien común. Esta afirmación es compartida por la mayoría de los ciudadanos y debe ser el punto de
partida ante cualquier controversia acerca del agua.

Muchas de las cuencas hidrográficas importantes son compartidas por varios países. Los pactos que regulan la
utilización conjunta de estos recursos superan la cifra de 2.000. Pero en muchas ocasiones las pretensiones de unos
países, de unas regiones, originan conflictos con otras. La cuenca del Nilo, el sudoeste de Asia y Oriente Próximo
evidencian con excesiva frecuencia esta problemática. El conflicto bélico de Oriente Medio tiene, además de otros
muchos componentes, un claro enfrentamiento por la utilización del agua del Jordán. Algo parecido sucede con las
aguas de los ríos Tigris y Eúfrates que ocasionan disputas continuadas entre Turquía, Siria e Irak. Los códigos de
derecho internacional establecen que ningún estado puede perjudicar a otros mediante el uso del recurso agua pero no
existen mecanismos que permitan resolver las acciones opuestas.

Las directivas comunitarias que obligan al establecimiento de estaciones depuradoras de aguas residuales en localidades
importantes van cumpliéndose poco a poco y están contribuyendo a que el panorama vaya adquiriendo tintes menos
dramáticos. Sin embargo, queda todavía bastante camino por recorrer sobre todo en lo que se refiere al tipo de
depuración realizada.

La Ley de Aguas establecía un marco general de actuación para el futuro que había de plasmarse en un Plan
Hidrológico Nacional y en los Planes Hidrológicos de Cuenca, pero hasta el momento no se ha avanzado en la
articulación de unas medidas eficaces que satisfagan a una mayoría de los sectores implicados.
Los problemas a escala local se EL PRECIO DEL AGUA
viven más intensamente 210 Barcelona: 211,1

190 Las Palmas: 204, 8 Murcia: 190,9


Cada lugar, cada pueblo, experimenta la
problemática del agua de manera diferente. 150
Alicante: 131,7 Mallorca: 120,0
El abastecimiento de agua potable se 120 Cordoba: 126,9
Madrid: 122,0
identifica con desarrollo. Así lo entendía
lacampaña "Agua limpia y medidas sanitarias
para todos en 1990" de la ONU dirigida a la Valencia: 113,6 Almería: 118,8
Sevilla: 112,3
mejora de las condiciones sanitarias en los 110 Logroño: 116,0
Ceuta: 115,8
países menos desarrollados. Sin embargo, Cáceres: 116,1
parece que las condiciones, y estamos ya en
los albores del año 2000, no han mejorado.
Tarragona: 107,1
Las cantidades presupuestarias que proyectó Girona: 101,7 Bilbao: 99,1
la Conferencia del Agua y del Medio Oviedo: 92,2
90 Huelva: 92,5
Ambiente de Dublín superaban los 36.000 Castellón: 96,7
Pamplona: 90,7
millones de dólares; demasiado dinero para el
momento actual. Cuenca: 88,5
Zamora: 86,6
Mientras las soluciones llegan, la utilización 80 Badajoz: 87,3 Zaragoza: 85,5

del agua en mal estado sigue originando


problemas. En los países desarrollados tienen
una expresión casi cotidiana en los medios de Guadalajara: 79,8
Cádiz: 74,7
comunicación; en los países no desarrollados Lugo: 72,7
Soria: 76,4
se cobran vidas a diario. Resultaría difícil Malaga: 75,8 Lleida: 71,8
encontrar una solución mágica que procurase
70 Albacete: 71,1
S. Sebastián: 71,0
agua en cantidad y calidad suficiente para las Santander: 70,6
demandas exigidas actualmente en todas las
zonas del Planeta; es posible que incluso sea
irrealizable.
Orense: 69,7
Valladolid: 60,5 Salamanca: 68,7
Las demandas se incrementan, las calidades 60 Vitoria/Gasteiz: 60,3 Burgos: 60,3
se deterioran y no existe una distribución Avila: 60,2
equitativa entre las distintas zonas en cada
momento. Descartada, por tanto, una solución
Granada: 58,1
global, se imponen una serie de acciones Ciudad Real: 54,8
Palencia: 57,3
parciales destinadas a buscar la adecuación 50 La Coruña: 52,5
Teruel: 57,3
León: 50,1
entre las demandas y las disponibilidades. Pontevedra: 55,2

Segovia: 47,8
Esta situación problemática no resulta ajena Toledo: 36,1
en España ya que asistimos con cierta Huesca: 35,3
regularidad a conflictos entre Administración 10 Jaén: 38,8
Melilla: 15,0
y usuarios, entre Comunidades, entre
localidades y entre potenciales usuarios para
dotarse de agua en cantidad y calidad DEPURAN SUS NO DUPURAN SUS
suficientes. AGUAS AGUAS

Coste medido en
Todavía son posibles acciones Ciudades con
restricciones severas o
pesetas/m3

positivas para proteger el reservas muy escasas


Uso doméstico
recurso agua
La escasez de agua suena a unos a realidad, a
otros a exageración y para algunos es sólo el
resultado de una mala gestión. Se argumenta
que la evaluación de necesidades comporta
un margen de imprecisión considerable por lo
que es difícil prever el futuro, aunque
también se dice que cualquier proyección
tiene el valor de puesta en guardia. De
A primera vista, en el conjunto global, quedan pocas dudas de que es necesaria una reconsideración de las tendencias
actuales. Entre las medidas que se apuntan sobresalen dos: el ahorro de los recursos y el incremento de los recursos.
Estas acciones, con ser necesarias, no son suficientes. Debemos consolidarlas pero hemos de intentar superarlas: hemos
de configurar una nueva dialéctica que vaya desde la economía del agua a la cultura del agua para llevar a cabo una
adecuada gestión del agua.

En primer lugar, hemos de recuperar el valor primitivo del agua, su valor social y personal. El agua, como antaño, sigue
siendo un tesoro. Un tesoro dinámico que se acrecienta con una filosofía del uso en la que participa toda la sociedad.
Una filosofía del uso que se fundamenta en dos pilares: el ahorro y la progresiva disminución de la contaminación. En
fin, una sociedad que se implica también gestionando adecuadamente el recurso para repartirlo con parámetros de
solidaridad.

Para reconstruir ese valor es necesario un debate social que estimule una nueva cultura de grupo basada en una
información veraz, en un diálogo continuado que vaya más allá de las leyes; que despoje al agua de unas presiones
demasiado mercantilistas que nos impiden comprender su relevancia social. Una cultura que contemple una alternativa
olvidada como es el multiuso, uso selectivo del agua, antes que su utilización indiscriminada. Una cultura que sepa que
reducir el desperdicio del presente es una de las más valiosas opciones de futuro.

Pero para ir construyendo progresivamente esa cultura debemos empezar cada uno de nosotros mismos reduciendo
consumos, adoptando hábitos diferentes y participando en la gestión social integrada del agua. Una gestión social que
demande una adecuada gestión administrativa por parte de los poderes públicos. Sólo de esta manera contribuiremos a
mejorar el presente y empezaremos a construir el futuro.

Bibliografía

• "Agua Dulce", Amigos de la Unesco y Centre Unesco de Catalunya. Rev. TODOS núm. 4, 1993, Amigos de la Unesco-País Vasco, Bilbao.
• "Geografía de la utilización de las aguas continentales", Bethemon, Jacques (1980). Oikos-Tau.
• "La economía del agua en España", Fundación Argentaria (1997), Fundación Argentaria-Visor.
• "El agua en España", Instituto Tecnológico Geominero de España (1991), I.T.G.E.
• "La nueva cultura del agua en España", Martínez, Fco. Javier (1997) Bakeaz, Bilbao.
• "Mas allá de los límites del crecimiento", Meadows & Randers (1992) El País Aguilar.
• "La Guía Global del Medio Ambiente", World Resources (1996), Ecoespaña Ed.e.

Mares y Océanos
Autor: Jordi Miralles. Fundación Tierra

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

El desarrollo del litoral marino


Cuando hablamos del litoral y, en general, del mar debemos precisar a qué zona nos referimos. El mar lo podemos
delimitar de acuerdo con las directrices jurídicas que tipifican la zona marítimo-terrestre (la playa), las aguas interiores,
el mar territorial, la zona económica y plataforma continental y, a partir de las 200 millas mayoritariamente, las aguas
internacionales. Pero también lo podemos definir por sus características biológicas y entonces distinguimos entre las
zonas nerítica, pelágica y batial.
En realidad, sea cual sea el concepto, la problemática ecológica marina la sufren básicamente las llamadas aguas
costeras, pues concentran la mayor parte de las actividades de tráfico marítimo, de extracción de recursos pesqueros y
minerales, de actividades recreativas, de vertidos y eliminación de desechos, de conservación del medio y defensa del
litoral y de urbanización de la costa.

Cada mar u océano tiene su particular situación ambiental en función de sus características geográficas y ecológicas, las
actividades humanas que se dan en el litoral y de la economía de los países ribereños. El Mediterráneo, por ejemplo,
funciona casi como un mar cerrado. Sin embargo, recibe grandes cantidades de agua dulce a través del Danubio y los
ríos rusos que desembocan en el mar Negro. Del océano Atlántico, a través del estrecho de Gibraltar, recibe agua más
salada. Con estas condiciones particulares, el agua del Mediterráneo se renueva con una frecuencia de unos 97 años.
Esto nos indica que vive sus ciclos particulares. Junto con esta circulación específica del agua está la de los seres vivos
que migran entre el Mediterráneo y el Atlántico y junto a ellos se modifican estacionalmente las relaciones
autoecológicas entre los seres vivos que lo habitan.

La región occidental del mediterráneo cuenta con unos 250 millones de habitantes repartidos en un 70% en los países
del norte y en un 30% en los del sur. El impacto que recibe de la población se concentra sobre unos 7,5 millones de
Km2 con densidades medias de entre 2 (como en Argelia) y 190 habitantes por km2 (caso de Italia). La influencia sobre
esta región marina nada tiene que ver con la del mar Báltico, por ejemplo.

En todo caso, aunque el mar y el océano se nos presentan como una realidad contigua a la tierra ésta no es sino una
porción de un sistema global cuyos mecanismos y reacciones son de carácter planetario.

La polución marina
Las vías por las cuales llegan al mar los productos contaminantes son numerosas. Aunque sin duda, la lluvia es uno de
los principales agentes de dispersión. La limpieza salvaje de los tanques en alta mar y las descargas involuntarias
aportan el 45% de la contaminación difusa de hidrocarburos. Los accidentes, en concreto el naufragio de
superpetroleros, a pesar de ser localmente muy graves no aportan más del 20% de la contaminación por hidrocarburos,
el resto procede de las operaciones de carga y descarga en puertos marítimos.

También se dispone de datos sobre la liberación de sustancias tóxicas al mar provenientes de fenómenos naturales tales
como movimientos sísmicos o afloramientos geológicos. El efecto de la acumulación de sustancias tóxicas en el agua
marina se detecta por la presencia de éstas en la carne de los peces. En el Mediterráneo, por ejemplo, en atún rojo,
especie migradora y pelágica, que por tanto esquiva las altas concentraciones costeras, se han hallado valores que
superan los 500 µg/kg. de mercurio con una media de entre 3 y 3,5 veces superior a los valores hallados en el Atlántico.
Entre 1987 y 1988 más de 700 delfines embarrancaron en las costas del mar del Norte y murieron más de 15.000 focas
comunes. Todos estos mamíferos marinos tenían niveles de PCBs y otros pesticidas significativamente elevados.

Otro indicador de la contaminación marina litoral es la eutrofización o aumento de la concentración de materia orgánica
disuelta aportada por las aguas residuales urbanas. Sólo la cuenca mediterránea ?con 46.000 km. de costa? recibe
2.500.000 de m3 de aguas residuales. En verano, por ejemplo, el litoral español con 1.200 km. de costa concentra 35
millones de turistas. En condiciones particulares, tales como quietud de las aguas y temperaturas elevadas, la gran
abundancia de nutrientes pueden propiciar casos graves de polución orgánica, que se manifiesta con explosiones de
algas marinas que pueden alterar la calidad de las aguas litorales. Este sería el caso de las famosas mareas rojas de algas
tóxicas que afectan periódicamente algunas zonas costeras. Las áreas de producción mejillonera pueden padecer
verdaderas catástrofes económicas frente a esta forma de contaminación biológica.

La polución orgánica en las áreas litorales también afecta a la calidad sanitaria para el baño debido a la gran
concentración de bacterias colifecales que pueden ser perjudiciales para la salud humana. Finalmente, el mar también se
ha convertido en diluyente de elementos radioactivos procedentes de las fugas en centrales nucleares, de los ensayos
con bombas atómicas o de la lluvia radioactiva. Aunque la mayor parte de la radioactividad es debida a causas
naturales, al menos un 1% deriva de la acción humana.
LA POLUCION EN EL MAR

- Areas de contaminación costera


severa (contaminación muy
concentrada en todo o en parte del
año, afectando seriamente la vida
marina y los ecosistemas)

- Areas de contaminación costera


persistente (a largo plazo, aunque
necesariamente contaminación severa)

- Vertederos en alta mar

La sobrepesca

La actividad de la pesca se puede dividir en tres grandes grupos: la de arrastre o captura de las especies que viven
masivamente situadas en el fondo y sus inmediaciones; la pesca de círculo por la cual se capturan las especies que
forman bancos cerca de la superficie en aguas litorales o a mar abierto; y la pesca artesanal que utiliza desde grandes
artes como las almadrabas hasta las pequeñas nasas, o el palangre (con el cual se extraen las merluzas de gran tamaño.

El agotamiento de los recursos pesqueros en los principales caladeros mundiales se perfila como uno de los problemas
más acuciantes que padecen mares y océanos. Los avances tecnológicos no sólo en los sistemas de detección de los
bancos de peces, sino también de los barcos factoría que pueden faenar, manipular y almacenar ingentes cantidades de
pescado antes de regresar a puerto, ha permitido un aumento espectacular de los índices de capturas en las últimas
décadas. Sin embargo, en los últimos cinco años se ha podido percibir que la pesca se ha reducido en los principales
caladeros del mundo.

El pescado y los productos alimentarios de origen marino constituyen el 16% de las proteínas animales que se
consumen en el planeta. Las repercusiones económicas tanto para los pescadores como para muchos pueblos que tenían
como principal fuente de proteínas el pescado son ya estremecedoras, aunque sólo represente un 1% de la economía
mundial. Tal como apuntábamos, el declive de la pesca se debe sobre todo al espectacular crecimiento entre 1970 y
1990 de la flota global y, especialmente, a la tecnificación del sector.

Pero la sobrepesca no sólo tiene efectos directos sino también indirectos. Una de las pérdidas más importantes de
especies es a través de lo que se denomina la morraja; es decir, el pez que se desestima por falta de interés comercial en
una redada. Sin ir más lejos para pescar 1 kg. de gamba se destruyen alrededor de 30 kg. de pescados diversos que se
vierten como residuo. Otra causa indirecta de alteración de los ecosistemas marinos son las famosas redes de deriva en
alta mar. Se trata de enormes artes que pueden tener varios kilómetros que atrapan fauna marina de forma no selectiva.
En 1990 la Administración americana calculó que las redes de deriva para la pesca de atún y calamares habían apresado
a unos 42 millones de aves pelágicas, mamíferos marinos, tortugas, tiburones, etc.

Para que la pesca pueda entrar en una vía de uso sostenible se deberá, como mínimo, reducir la captura en los
principales caladeros para que se recuperen. Esto supondrá cuantiosas inversiones para reconvertir las flotas y los
pescadores que existen en la actualidad. Este es el camino que han emprendido países como Islandia, Taiwan, Canadá o
Estados Unidos.

CALADEROS DE LA FLOTA PESQUERA


EN TORNO A LA PESCA
En el mundo más de 200 millones de personas dependen de la pesca e industrias
anexas como modo de subsistencia. Esta dependencia de nuestra sociedad con la
pesca ha supuesto también conflictos diplomáticos diversos por el hecho de que
muchos países han reclamado el límite de la jurisdicción de las aguas marinas a 200
millas. Actualmente, son unas 120 las naciones que las ostentan. Esto ha provocado
que algunos países con una importante flota pesquera vieran amenazada su
actividad. Por su parte, los países con caladeros importantes defienden su posesión.
Este sería el caso de España que cuenta con una importante flota y Canadá en cuyas
aguas se encuentran algunos de los caladeros más productivos. La llamada guerra del
fletán fue una acción defensiva canadiense para frenar el agotamiento de los recursos
pesqueros de sus aguas territoriales.

La reducción de la flota pesquera afecta a todos los países del mundo. En el Estado
Español, por ejemplo, en los últimos años se ha reducido en un 25% la flota
pesquera y ha puesto en el paro a una gran cantidad de personas. Sin embargo,
nuestro país, que es un gran comedor de pescado, ha compensado este déficit
propiciando las importaciones desde otros mercados internacionales; en términos
absolutos, el consumo de pescado en España ha ido en aumento alcanzando las
834.000 toneladas en 1993. El resultado ha sido la pérdida de la tradicional
estabilidad del precio del pescado que conservaba nuestro país y ha acrecentado la
pérdida de competitividad de nuestro sector pesquero que faena en el litoral.

La amenaza de las bioinvasiones


Antaño, hace unos 2.500 millones de años, el mar sirvió de caldo de cultivo para el desarrollo
de la vida en la Tierra. Gracias a algas capaces de desprender oxígeno, que saturaron primero
el agua marina y después la atmósfera, se formó la capa de ozono hace unos 600 millones de
años. Merced a la protección del ozono estratosférico contra la radiación, la vida pudo
asentarse en la tierra firme protegida de los letales rayos ultravioletas que el ozono absorbía.
Durante milenios las comunidades de organismos marinos siguieron evolucionando según las
leyes de la naturaleza. Actualmente, la actividad humana ya ha sido capaz de modificar este
ecosistema. Las consecuencias de estas variaciones en el ecosistema marino debido a la
introducción de organismos alóctonos son imprevisibles, especialmente a escala local que es
donde con mayor virulencia pueden manifestarse.

Uno de los agentes implicados en el fomento de las invasiones en los ecosistemas marinos es
el transporte internacional de gran tonelaje puesto que los barcos llevan un lastre con agua
marina que toman en un puerto y liberan en otro que puede estar en las antípodas del lugar de
origen. Entre las principales flotas del mundo hay más de 30.000 barcos mercantes cuya
capacidad de lastre es de 2.250 millones de litros. Comunidades enteras de plancton,
crustáceos, peces y otros organismos que viven en los sedimentos se convierten en polizones
al ser succionados para llenar los tanques de lastre. Por ejemplo, en una bahía en el estado
americano de Oregón fueron detectados 367 organismos marinos de la fauna japonesa cuatro
años después de que unos barcos procedentes de este país soltaran el agua de lastre en la
misma. Entre las bioinvasiones provocadas por el agua de lastre podemos citar la de
ctenóforos en el mar Negro, las floraciones de dinoflagelados en la costa australiana o los
mejillones zebra en los Grandes Lagos americanos.

Areas singulares amenazadas en el litoral

Las praderas de posidonia

Una de las comunidades vivas más interesantes del litoral son las praderas de Posidonia
oceánica. Se trata de una planta superior, no de un alga, que habita agrupándose en extensas
formaciones vegetales como si de un bosque se tratara. Viven frente a la costa sobre fondos
arenosos entre 0 y 25 m hasta un máximo de 40 m de profundidad. Sólo en el litoral
mediterráneo ibérico se calcula una extensión de praderas marinas de unos 3.551 Km2. Sin
embargo, en las últimas décadas, estas comunidades marinas han sufrido los efectos de la
contaminación orgánica, térmica y agraria, así como la de las extracciones pesqueras con
cercos de fondo, arrastre o el marisqueo con gánguil. Igualmente, han incidido negativamente
sobre las posidonias la hiperfrecuentación del litoral (fondeo de embarcaciones deportivas,
instalaciones náuticas, construcción de puertos deportivos, regeneración de playas, etc). Entre
las principales causas de su regresión se constata la eutrofizacion de las aguas costeras así
como la degradación del litoral marino.

Los arrecifes coralinos

Los arrecifes coralinos conforman el ecosistema marino con mayor diversidad y fueron, sin
duda, el crisol del nacimiento de la vida en nuestro planeta. No ocupan más del 0,17% de la
superficie marina pero constituyen el hábitat de un 25% de las especies marinas. De ahí que
les valga el apodo de "selvas tropicales marinas". Al igual que las selvas tropicales los arrecifes
coralinos son auténticos reservorios de sustancias de gran interés para la ciencia médica. Para
los 109 países que albergan los más de 100.000 km2. de arrecifes coralinos estos constituyen
una riqueza económica de primer orden puesto que el nivel de producción pesquera es entre
10 y 100 veces superior al del mar abierto. Los pescadores que faenan de forma artesanal en
los arrecifes coralinos proporcionan alrededor de un 25% del pescado capturado en los países
en vías de desarrollo.

La principal preocupación por la conservación de los arrecifes coralinos proviene de las


observaciones científicas de su desaparición alarmante. Las causas principales son la
contaminación y probablemente el cambio climático.

Los manglares

El manglar es un ecosistema cuya estructura viene dada por el árbol del mangle, cuya
característica biológica es la de soportar cambios constantes de salinidad, altas temperaturas y
escasez de oxígeno. El manglar se distribuye por las costas tropicales y subtropicales, en áreas
protegidas de los vientos dominantes y aguas poco profundas tales como bahías, lagunas
litorales, deltas fluviales, etc. El ecosistema del manglar destaca por su elevada biodiversidad.
En sus aguas se reproducen y viven gran multitud de peces, langostinos y una gran variedad
de mariscos. Tradicionalmente, han sido áreas muy apreciadas para la pesca artesanal. Sin
embargo, en estos últimos lustros se ha destruído gran cantidad de superficie de manglares en
todo el mundo. La causa principal ha sido la conversión de estas zonas litorales en espacios
destinados a la acuicultura. Esta transformación de los manglares en lagunas para la
acuicultura supone uno de los mayores atentados a la biodiversidad mundial.

Tratados marinos internacionales


En la última mitad de este siglo, los países con intereses en mares y océanos se han visto
obligados a reunirse en comisiones ejecutivas o a firmar acuerdos para intentar paliar los
crecientes problemas ecológicos relacionados con la explotación de los recursos marinos y su
utilización en general. En estos momentos, el derecho marino internacional empieza a ser tan
vasto como el propio océano, aunque a menudo no se respeta.

Sin ánimo de ser exhaustivos, mencionamos algunas de las organizaciones y convenios más
relevantes.

A mediados de los años 60 se creó la International Maritime Organization (IMO) con el objetivo
de establecer regulaciones internacionales sobre la navegación a raíz de las grandes
catástrofes de petroleros accidentados. La regulación de muchos aspectos relacionados con el
transporte marítimo ha permitido disminuir en un 60% la polución causada por petroleros.

La International Whaling Comission (IWC) fue creada en 1947 para coordinar la pesca de
ballenas entre los países que la llevaban a cabo. En 1985 consiguió establecer una moratoria a
favor de la pesca de la ballena que fue ratificada en 1993. A pesar de ello, algunos países
como Noruega y Japón se han negado a respetarla.

La Comission for the Conservation of Antarctic Marine Living Resources regula la extracción de
los recursos marinos alrededor de la Antártida exceptuando ballenas y focas. El año 1991
estableció un límite en la captura de krill, el diminuto zooplancton que configura la base de la
cadena alimenticia antártica.

La Convención de Londres es un organismo compuesto por 70 países creado en 1972. Su


objetivo es el de regular la emisión de residuos tóxicos al medio marino. Su principal labor ha
consistido en conseguir detener los vertidos de residuos nucleares. Desde 1992 existe una
moratoria para no tirar al mar ningún desecho radioactivo. La Agencia de Energía Nuclear de la
OCDE supervisó entre 1967 y 1982 la descarga de unas 95.000 t. de residuos radioactivos en
el Atlántico. Según los expertos, antes de la moratoria se estaban vertiendo alrededor de
2.665.000 toneladas de productos radioactivos.

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre las Reservas de Peces Sedentarios y Migradores
celebrada en 1995 adoptó un tratado internacional vinculante para regular la pesca de estos.

Bibliografía

• "El mar que nos rodea." Carson, Rachel. (1980). Grijalbo. Barcelona.Este es el libro que lanzó a la fama como
escritora a Rachel Carson en julio de 1953 en Estados Unidos, aunque en nuestro país esencialmente es conocida por
La primavera silenciosa.
• "El mar que nos rodea" es un ensayo sobre la vida marina en todas sus dimensiones, pero además es una
verdadera joya de la literatura de no ficción.
• "El abandono de los océanos." Weber, Peter. (1996). Cuadernos Worldwatch. Bakeaz, Bilbao.Monográfico de los
cuadernos del prestigioso Worldwatch Institute de Washington donde se plantean los aspectos claves de la
degradación del entorno marino y las propuestas para recuperarlo.
• "Transporte marítimo y medio ambiente. Un binomio reconciliable." Piniella Corbacho, Francisco. (1996).
Universidad de Cádiz. Cádiz. Manual conciso que recopila la información sobre las normativas y convenios que tratan
de la prevención de la contaminación de los mares.
• "Atlas del Medio Ambiente" G.Lean, D.Hinrichsen, A.Markham. (1993). Algaida Editores. Sevilla.

La Energía
Autor: Centro de Rec. Ambientales Lapurriketa.
(Dima. Bizkaia)

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

Acerca de la energía
La necesidad de energía es una constatación desde el comienzo de la vida misma. Un organismo para crecer y
reproducirse precisa energía, el movimiento de cualquier animal supone un gasto energético, e incluso el mismo hecho
de la respiración de plantas y animales implica una acción energética. En todo lo relacionado con la vida individual o
social está presente la energía.

La obtención de luz y calor está vinculada a la producción y al consumo de energía. Ambos términos son
imprescindibles para la supervivencia de la tierra y consecuentemente de la vida vegetal, animal y humana.

El ser humano desde sus primeros pasos en la tierra, y a lo largo de la historia, ha sido un buscador de formas de
generación de esa energía necesaria y facilitadora de una vida más agradable. Gracias al uso y conocimiento de las
formas de energía ha sido capaz de cubrir necesidades básicas: luz, calor, movimiento, fuerza, y alcanzar mayores cotas
de confort para tener una vida más cómoda y saludable.

El descubrimiento de que la energía se FUNDAMENTOS BASICOS DEL SISTEMA ENERGETICO


encuentra almacenada en diversas
formas en la naturaleza ha supuesto a
1. Demanda de energía para satisfacer necesidades.
las diferentes sociedades a lo largo de
los tiempos, el descubrimiento de la
existencia de "almacenes energéticos 2. Determinación de la cantidad de energía requerida.
naturales" que aparentemente eran de
libre disposición. Unido a esto, el 3. Asignación de costes y beneficios de producción.
hombre ha descubierto que estos
almacenes de energía disponibles en la 4. Selección de fuentes de energía y formas de
naturaleza (masas de agua, direcciones producción.
de viento, bosques,) eran susceptibles
de ser transformadas en la forma de 5. Oferta de energía que cubra la demanda.
energía precisa en cada momento (luz y
calor inicialmente, fuerza y electricidad
6. Mecanismos de abastecimiento: Almacenaje,
con posterioridad), e incluso adoptar
transporte y distribución.
nuevos sistemas de producción y
almacenamiento de energía para ser
utilizada en el lugar y momento 7. Consumo de energía y sus usos.
deseado: energía química, hidraúlica,
nuclear,... 8. Efectos del uso de energía sobre el medio ambiente.

Sin embargo, parejo a este descubrimiento de almacenes naturales, se ha producido una modificación del entorno y un
agotamiento de los recursos del medio ambiente. Así, el uso de la energía ha acarreado un efecto secundario de
desertización, erosión y contaminación principalmente, que ha propiciado la actual problemática medioambiental y el
riesgo potencial de acrecentar la misma con los desechos y residuos de algunas de las formas de obtención de energía.

Fuentes de energía y sus efectos sobre el Medio Ambiente


Hoy en día, la energía nuclear, la energía de procedencia de combustibles fósiles, la energía procedente de la biomasa
(principalmente combustión directa de madera) y la energía hidraúlica, satisfacen la demanda energética mundial en un
porcentaje superior al 98%, siendo el petróleo y el carbón las de mayor utilización. (ver gráfico)

La utilización de estos recursos naturales implica, además de su cercano y progresivo agotamiento, un constante
deterioro para el medio ambiente, que se manifiesta en emisiones de CO2, NOx, y SOx, con el agravamiento del efecto
invernadero, contaminación radioactiva y su riesgo potencial incalculable, un aumento progresivo de la desertización y
la erosión y una modificación de los mayores ecosistemas mundiales con la consecuente desaparición de biodiversidad
y pueblos indígenas, la inmigración forzada y la generación de núcleos poblacionales aislados tendentes a la
desaparición.

Estas agresiones van acompañadas de grandes obras de considerable impacto ambiental (difícilmente cuantificable)
como las centrales hidroeléctricas, el sobrecalentamiento de agua en costas y ríos generado por las centrales nucleares,
la creación de depósitos de elementos radiactivos, y de una gran emisión de pequeñas partículas volátiles que provocan
la lluvia ácida, agravando aún más la situación del entorno: parajes naturales defoliados, ciudades con altos índices de
contaminación, afecciones de salud en personas y animales, desaparición de especies animales y vegetales que no
pueden seguir la aceleración de la nueva exigencia de adaptación,

El futuro amenazador para nuestro entorno, aún se complica más si se tiene en cuenta que sólo un 25% de la población
mundial consume el 75% de la producción energética. Este dato, además de poner de manifiesto la injusticia y
desequilibrio social existente en el mundo, indica el riesgo que se está adquiriendo al exportar un modelo agotado y
fracasado de países desarrollados a países en desarrollo.

El modelo es un paradigma en el que la producción energética se sustenta en una visión del mundo en la que el ser
humano es el dominador de la naturaleza y del entorno, en vez de sentirse parte integrada del mismo, y en el que el
consumo se manifiesta como un grado de confort.

PRODUCCION ENERGETICA EN EL MUNDO

- 75%: Combustibles fósiles

- 12%: Combustión de madera

- 6%: Energía hidráulica

- 5%: Energía nuclear

- 2%: Otros

Consumo y energía
La necesidad de aumento productivo de las sociedades industrializadas lleva parejo un incremento de los bienes de
consumo y la creación de un mecanismo en el que se establece una equivalencia entre el confort y el consumo. Ello ha
supuesto en las últimas décadas una avidez consumista, en donde el consumo es una finalidad en sí misma. La
acumulación de bienes útiles o no, el despilfarro como signo de poder adquisitivo y distinción social, la exigencia de
gasto de elementos perecederos, son consecuencias del mecanismo de sostenimiento que el sistema económico de las
sociedades desarrolladas ha establecido para mantener la capacidad productiva creciente que lo sustenta.

Así, la demanda de energía no sólo ha tenido que crecer en la industria, sino también en los consumidores de los
productos manufacturados, dado que estos precisan mayoritariamente energía para cumplir con su finalidad. Para
satisfacer esta demanda no sólo de bienes, sino de exigencia de nuevas cotas de confort, se hace precisa una mayor
generación y oferta de energía. Por ello, se ha hecho necesario dotar de grandes centros generadores de energía
excedentaria, ante la eventualidad de poder satisfacer la demanda que pueda ser requerida.

El estado del bienestar, ha generado el "estado del gasto y de la dependencia energética". No es de extrañar por tanto,
que uno de los parámetros más importantes para clasificar el grado de desarrollo de un país, sea su gasto energético per
cápita.

La energía ha pasado a lo largo de la historia, de ser un instrumento al servicio del ser humano para satisfacer sus
necesidades básicas, a ser la gran amenaza -motor y eje de la problemática ambiental-que se cierne sobre el planeta,
hipotecando la existencia de las generaciones venideras.

Una de las aportaciones a la solución, o al menos paralización de esta problemática medioambiental, es lograr que
satisfaciendo las necesidades actuales de energía, ésta sea producida sin alterar esos almacenes energéticos que cumplen
una función de equilibrio ecológico, y que su uso, además de ser más eficiente, no sea origen de fuentes de
contaminación ni aumento del deterioro actual y futuro del entorno, evitando el derroche de energía y aprovechando al
máximo la producción realizada.

En resumen, tres son los problemas a los que nos ha abocado el consumo desmedido de la energía: En primer lugar, un
deterioro del entorno; en segundo lugar, un paulatino agotamiento de los recursos naturales; y en tercer lugar, un
desequilibrio irracional en el reparto del consumo y uso de la energía.

Ante esta situación, las energías de origen renovable, adquieren un papel primordial, necesario y urgente tanto en su
aplicación como en la difusión de su uso.

Tres son los problemas a los que nos ha abocado el consumo desmedido de energía:
un deterioro del entorno, un paulatino agotamiento de los recursos naturales
y un desequilibrio irracional en el reparto del consumo y uso de la energía

ENERGIAS ALTERNATIVAS

Los criterios de rentabilidad económica deben


contemplar el coste de las agresiones al medio.
Esto se traducirá en un incremento de las
fuentes energéticas renovables (en función de
los recursos disponibles: agua, sol, materia
orgánica, viento,...) frente a otras más agresivas
con el entorno, sin olvidar que la energía menos
contaminante es la que no se consume, ni se
produce.

Energías renovables
La disponibilidad energética de las fuentes de energía renovable es mayor que las fuentes de energía convencionales, sin
embargo su utilización es más bien escasa.

El desarrollo de la tecnología, el incremento de la exigencia social de utilización de energías limpias, los costos más
bajos de instalación y rápida amortización, y el control que pueden realizar sobre los centros de producción las
compañías eléctricas, están impulsando un mayor uso de las fuentes de energía de origen renovable en los últimos años.

De igual modo, el cuestionamiento del modelo de desarrollo sostenido y su cambio hacia un modelo de desarrollo
sostenible, implica una nueva concepción sobre la producción, el transporte y el consumo de energía.

En este modelo de desarrollo sostenible, las energías de origen renovable, son consideradas como fuentes de energía
inagotables, pero que cuentan con la peculiariedad de ser energías limpias, definidas por las siguientes características:
sus sistemas de aprovechamiento energético suponen un nulo o escaso impacto ambiental, su utilización no tiene riesgos
potenciales añadidos, indirectamente suponen un enriquecimiento de los recursos naturales, la cercanía de los centros de
producción energética a los lugares de consumo puede ser viable en muchas de ellas, y son una alternativa a las fuentes
de energía convencionales, pudiendo generarse un proceso de sustitución paulatina de las mismas.

La energía eólica:
El potencial de la energía eólica se estima en veinte veces superior al de la energía hidraúlica. Está adquiriendo cada vez
mayor implantación gracias a la concreción de zonas de aprovechamiento eólico y a una optimización en la utilización
de nuevos materiales en las máquinas: aerogeneradores.

Desde aplicaciones aisladas para el bombeo de agua, hasta la producción de varios MW con parques eólicos. El impacto
ambiental de los parques eólicos es mucho menor que cualquier tipo de central productora de energía convencional, y su
agresión al entorno estriba en la incidencia de accidentes de la avifauna y el impacto de los grandes parques, cuestiones
que pueden ser minimizadas estudiando adecuadamente la ubicación y el sistema de distribución. El emplazamiento de
la instalación de aprovechamiento eólico, la velocidad del viento y su rango de valor constante va a determinar su
capacidad y autonomía productiva.

La energía geotérmica:

La energía procedente del flujo calorífico de la tierra es susceptible de ser aprovechada en forma de energía mecánica y
eléctrica. Es una fuente energética agotable, si bien por el volumen del almacenamiento y la capacidad de extracción se
puede valorar como renovable. Su impacto ambiental es reducido, y su aplicabilidad está en función de la relación entre
facilidad de extracción y de ubicación.

La energía hidraúlica:

La energía del mar: Se estima que la potencialidad energética del agua de toda la tierra es equivalente a 500 centrales de
1000 MW cada una. Con la finalidad de minimizar el impacto ambiental y favorecer la cercanía de los centros de
producción a los de consumo, se está potenciando mediante las minicentrales un mayor aprovechamiento energético de
cauces de los ríos y una paulatina sustitución de las macrocentrales hidroeléctricas que originan problemas
medioambientales y demográficos. En lo que respecta a la energía disponible en el mar, se está contando con nuevos
grandes proyectos de aprovechamiento, tanto de energía maremotriz o energía contenida en las olas aprovechando de
forma simultánea las mareas de modo que puedan accionarse turbinas hidraúlicas en el flujo de ascención y descenso
del mar, como de energía de transferencia térmica, consistente en aprovechar la diferencia existente entre la temperatura
de la superficie y la de las corrientes profundas, que puede llegar a alcanzar hasta veinticinco grados centígrados y es
utilizable las 24 horas del día.

La energía de la biomasa:

Es la energía contenida en la materia orgánica y que tiene diversas formas de aprovechamiento, según se trate de
materia de origen animal o vegetal. Sólo en materia vegetal, se estima que se producen anualmente doscientos millones
de toneladas. El principal aprovechamiento energético de la biomasa es la combustión de la madera, que genera
contaminación atmosférica y un problema indirecto de desertización y erosión, salvo que se realice una planificación
forestal correcta. Los desechos orgánicos también son utilizables mediante transformaciones químicas principalmente,
siendo las más conocidas las aplicaciones de digestores anaeróbicos para detritus orgánicos y la producción de biogás
procedente de residuos sólidos urbanos. Sin embargo, la creciente innovación tecnológica de materiales y equipos está
afianzando nuevos sistemas de aprovechamiento de los residuos ganaderos y forestales, y consolida un esperanzador
futuro en la línea de los biocombustibles, de modo que se pueda compatibilizar una agricultura sostenible con un diseño
de producción energética que respete el entorno.
La energía solar:

Es la mayor fuente de energía disponible. El sol


proporciona una energía de 1,34 kw/m2 a la
atmósfera superior. Un 25% de esta radiación no
llega directamente a la tierra debido a la presencia
de nubes, polvo, niebla y gases en el aire. A pesar de
ello, disponiendo de captadores energéticos
apropiados y con sólo el 4% de la superficie
desértica del planeta captando esa energía, podría
satisfacerse la demanda energética mundial,
suponiendo un rendimiento de aquellos del 1%.
Como dato comparativo con otra fuente energética Instalación mixta autónoma de abastecimiento
importante, sólo tres días de sol en la tierra energético mediante paneles fotovoltaicos,
proporcionan tanta energía como la que puede colectores térmicos y aerogenerador
producir la combustión de los bosques actuales y los
combustibles fósiles originados por fotosíntesis
vegetal (carbón, turba y petróleo). El problema más
importante de la energía solar consiste en disponer
de sistemas eficientes de aprovechamiento
(captación o transformación).

Tres son los sistemas más desarrollados de aprovechamiento de la energía solar:

El calentamiento de agua, de utilidad para proporcionar calor y refrigerar, mediante colectores planos y tubos de vacío
principalmente.

La producción de electricidad, con la utilización del efecto fotovoltaico. Dado que determinados materiales tienen la
cualidad de ser excitados ante un fotón lumínico y crear corriente eléctrica (efecto fotovoltaico), una forma de
aprovechar la radiación consiste en instalar células y paneles fotovoltaicos que suministren energía eléctrica.

El aprovechamiento de la energía solar en la edificación, también denominada "edificación bioclimática", consiste en


diseñar la edificación aprovechando las características climáticas de la zona en donde se ubique y utilizando materiales
que proporcionen un máximo rendimiento a la radiación recibida, con la finalidad de conseguir establecer niveles de
confort térmico para la habitabilidad.

Ahora bien, a pesar de ser la fuente energética más acorde con el medio, inagotable y con capacidad suficiente para
abastecer las necesidades de energía del planeta, el aprovechamiento de la energía solar habrá de solventar el conflicto
derivado del hecho de que se produce sólo durante unas determinadas horas (a lo largo del día), y por tanto el
almacenamiento de energía y los diferentes sistemas para realizarlo habrán de ser simultaneados.

El problema a escala local


En las sociedades industrializadas, la energía tiene que ser producida, almacenada, transformada y transportada para ser
utilizada por el consumidor (persona, fábrica, maquinaria,) en las diversas formas de luz, calor, fuerza y trabajo
principalmente. Los costes económicos y medioambientales inherentes a este proceso son reducidos en función de la
cercanía entre el centro de producción y el del consumo final. De igual modo, del uso que se realice de esta energía va a
depender una mayor o menor exigencia de su demanda. Como consecuencia de ello, un uso ajustado de la energía,
limita no sólo el consumo, sino también la producción.

En una visión global en la que la energía es un mero instrumento al servicio del desarrollo y en la que éste se encuentra
ligado al bienestar, el aumento de aquella significa un incremento de éste, y por tanto, cuanto mayor sea la producción y
consumo de aquella mayor será el bienestar de la sociedad que lo disfruta.

Ahora bien, las sociedades industrializadas quieren disponer también de un entorno saludable, y por ello, tratan de
minimizar al máximo las consecuencias medioambientales que acarrea una producción energética con fuentes
convencionales. Por ello, la apuesta que se realiza es la de favorecer el ahorro de energía a través de una mayor
eficiencia en los materiales de consumo, habitabilidad, procesos industriales, transporte,..., al mismo tiempo que se
aplican sistemas de limitación del consumo mediante diferentes automatismos, e incluso se buscan fórmulas de
aprovechamiento energético mediante sistemas de cogeneración, de modo que la energía desprendida en los procesos de
transformación sea reutilizada, evitando así un nuevo gasto de producción. Todo ello con campañas institucionales-
gubernamentales de difusión acerca de la necesidad del ahorro energético, y sensibilización sobre los hábitos de
consumo.

Así mismo, los países industrializados con la finalidad de evitar una dependencia energética hacia terceros, y
favoreciendo la cercanía geográfica entre producción y consumo, abogan por una diversificación de las fuentes de
energía, de modo que sea posible lograr un autoabastecimiento mediante sistemas productivos endógenos.

Con todo ello, se logra minimizar los costes ambientales, manteniendo los mismos niveles de "bienestar alcanzados",
reduciendo en parte la contaminación, y se da cumplimiento a acuerdos internacionales de conservación del entorno.

Sin embargo, se siguen sin solucionar los grandes temas pendientes del agotamiento de los recursos, y de la eliminación
total de los hechos que provocan la problemática ambiental. Al mismo tiempo que se obvia el abordar una solución a la
desigualdad energética entre los países.

Convenios y Tratados Internacionales


Agencias nacionales e internacionales de la energía, elaboran informes y recomendaciones acerca de la problemática
general de la energía. De igual modo, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el medio ambiente y el desarrollo
realiza aportaciones acerca de los planes y objetivos que deben intentar cumplirse para paliar y modificar el deterioro
ambiental y el uso de las energías convencionales que lo provocan. Sin embargo, es de destacar que en septiembre de
1.992, se celebra en Madrid, el XV Congreso Mundial de la Energía. Las pautas que regirán los próximos años un
diseño de estrategia energética están condicionadas por los acuerdos tácitos allá alcanzados, en donde el futuro de la
producción energética se sustenta en la aún desconocida fusión nuclear, y el modelo de desarrollo aboga por el consumo
de energía ligado al crecimiento del bienestar.

Esta descripción ahoga en gran parte cualquier posible opción de dar una solución integral al problema de la energía, y
deja sin efecto real cualquier tipo de acuerdo y declaración de intenciones de los gobiernos.

No obstante, la Declaración de Madrid de 1994, hace una apuesta por la ejecución y cumplimiento de un Plan de acción
para las fuentes de energías renovables en Europa, apoyada por las DG XII, XIII y XVII de la Comisión Europea. Los
frutos del mismo son acciones incluídas en la continuidad y creación de programas energéticos (Thermie, Altener,
Valoren,) y el apoyo a iniciativas como la de la Cumbre Solar Mundial promovida por la Unesco, que muestran que sí
existe una declaración de intenciones acompañada de acciones efectivas, tendentes a hacer viable que entre los años
2.010 y 2.015, el 15% del consumo de la energía primaria convencional en Europa sea de origen renovable, y que ello
sirva como ideario para la promoción de nuevas iniciativas encaminadas a lograr un desarrollo sostenible.

Acciones positivas
o Limitar la contaminación, ejerciendo un mayor control de las emisiones de elementos contaminantes
de los centros de producción energética y disminuyendo el uso de combustibles de origen fósil.
o Favorecer el ahorro de energía por medio de la sensibilización, la modificación de hábitos de
consumo, la investigación y la exigencia de fabricación de equipos de mayor eficiencia energética y
bajo consumo.
o Diversificar las fuentes de energía con la paulatina sustitución de fuentes de energía convencionales
por fuentes de energía de origen renovable y su propia combinación.
o Investigar nuevas formas de aprovechamiento y almacenamiento energético a través de la promoción
de planes de I+D, y el apoyo a experiencias piloto de posterior aplicación.
o Acercar los centros de producción a los lugares de consumo mediante el aprovechamiento del
potencial energético de las energías de origen renovable, aumentando los centros de producción y
tendiendo a dejar de operar con centros de gran capacidad productiva.
o Establecer una legislación energética adoptando normativas nacionales, regionales y supraregionales
que den cumplimiento a las recomendaciones y acuerdos en materia de conservación del entorno y de
igualdad entre los pueblos.
o Realizar planes de sensibilización energética mediante campañas de difusión acerca de la
problemática que generan determinados usos y formas de producción energética, y el desarrollo de
planes educativos que muestren la viabilidad del uso de las energías de origen renovable, y la
necesidad de un uso racional de la energía para lograr un desarrollo sostenible.
Bibliografía

• "Energía Solar Diseño y Dimensiones de Instalaciones". Adolfo de Francisco y Manuel Castillo. (1985). Publicaciones del Monte de Piedad y
Caja de Ahorros de Córdoba.
• "Fundamentos, Dimensionamiento y Aplicaciones de la Energía Solar Fotovoltaíca". Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales
y Tecnológicas (CIEMAT). Ministerio de Industria y Energía. (1992). Editorial CIEMAT.
• "La Energía: Tema Interdisciplinar para la Educación Ambiental". J.B. Deleage y C. Souchon. (1991). Ministerio de Obras Públicas y
Transportes.
• "Comportamiento Energético de Edificios Solares Pasivos". Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas
(CIEMAT). (1990). Editorial CIEMAT.
• "Tecnología de las Energías: Solar, Hidraulica, Geotérmica y Combustibles Quimícos". VV.AA. (1989). Publicaciones Marcombo, S. A.
• "Habitat y Energía". Adriano Cornoldi y Sergio Los. (1982). Editorial Gustavo Gili.
• "La Ruta de la Energía". Josep Puig y Joaquin Corominas. (1990). Editorial Anthropos.
• "Manual de Arquitectura Solar". VV.AA. (1990). Editorial Trillas.
• "Energía Solar - Aplicaciones Prácticas". VV.AA. (1987). Progensa (Promotora general de estudios, S.A.).
• "Energy Conscious Design". VV.AA. (1993). Comisión de las Comunidades Europeas.
• "La energía solar". Ente Vasco de la Energía. (en prensa).

Los Bosques
Autor: Juan Carlos Guix. Fac. Biología. Univ.
Barcelona

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

Las tendencias actuales


Según estimaciones de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), la
superficie actual de los bosques representa un 25% de la superficie total de las tierras emergidas del planeta
(aproximadamente unos 3.400 millones de hectáreas de bosque). Más de la mitad de la cubierta arbórea del mundo se
encuentra en países en desarrollo, que tienen una tasa anual de pérdida forestal de 0,65%. Por otra parte, los bosques
están en plena expansión en los países más ricos, sea como
consecuencia de las repoblaciones comerciales, sea por el abandono y
reforestación natural de antiguas superficies agrícolas. Un análisis
superficial de estos datos parecería indicar que, de forma general, los
países más ricos conservan mejor los bosques que los países pobres.
Sin embargo, un análisis más detallado indica que esto no es
exactamente así.
Es cierto que los países ricos conservan mejor sus bosques. Por razones
estratégicas o de mercado, algunos países ricos prefieren consumir
madera y pasta de celulosa procedente de otros países antes que agotar
sus propios recursos forestales. De este modo, los países ricos son los
principales importadores de madera de los países tropicales. Además,
son los principales impulsores de proyectos agropecuarios (ganadería extensiva) y de infraestructuras (por ejemplo:
grandes centrales hidroeléctricas y carreteras) en los países pobres, que muchas veces provocan la destrucción de
grandes superficies forestales. Así pues, se podría decir que las economías de los países desarrollados son las que más
bosques consumen en el mundo.
No obstante, la pobreza también es una gran consumidora de árboles. En gran parte de las zonas rurales de los países
tropicales, la leña es aún la principal fuente de combustible. Además, la ancestral estrategia de agricultura de
subsistencia denominada "roza, tumba y quema" todavía persiste, a pesar de que ya existen conocimientos y tecnología
suficientes para el desarrollo de una agricultura más rentable en suelos tropicales, que no precisa de una búsqueda casi
permanente de nuevas tierras fértiles.
¿Qué es un bosque?
Existen muchas aproximaciones y definiciones de lo que debe o lo que no debe entenderse por bosque.
Lo que caracteriza a un bosque no es la presencia de árboles más o menos altos, sino su densidad, o sea, el grado de
cobertura de las especies arbóreas en relación a la superficie cubierta. Dependiendo de la densidad, una formación
vegetal podrá tener una fisonomía más abierta (tipo sabana) o más cerrada (tipo bosque). Existen formaciones vegetales
complejas, con estratos arbóreos bien definidos que, sin embargo, son difíciles de clasificar. Así, por ejemplo, lo que
para unos es un "bosque medio abierto", puede ser una "sabana medio cerrada" para otros. La existencia de un suelo
predominantemente cubierto por gramíneas (Poaceae) es un buen indicador de que la cantidad de luz que alcanza el
suelo es elevada y, por lo tanto, que la densidad de especies arbóreas es demasiado baja para considerar una formación
vegetal como bosque.

¿Quién planta los bosques naturales?


Se puede decir que los animales frugívoros, el viento y el agua son los principales diseminadores de semillas en los
bosques de todo el mundo. Las ventajas más evidentes de disponer de agentes bióticos (animales) y abióticos (viento,
agua e incluso el propio fuego) de transporte de semillas son: a- mayores posibilidades de colonización y supervivencia
y b- un intercambio genético más efectivo entre las poblaciones de plantas.
Existen grupos de plantas que producen semillas con estructuras específicas para aumentar la flotabilidad en el aire
(semillas anemocóricas) o en el agua (semillas hidrocóricas). Otras están cubiertas por tejidos nutritivos (pulpa, arilos)
que las hacen atractivas para diversos animales, que las consumen y transportan en sus tractos digestivos (ej: semillas
endozoocóricas). Entre los animales transportadores de semillas por vía gástrica destacan los vertebrados, tanto por su
mayor movilidad como por su capacidad de transporte.
En los bosques tropicales son importantes diseminadores de semillas las aves, los primates arborícolas, los murciélagos
frugívoros y algunos roedores; en los bosques de tipo mediterráneo las aves frugívoras, los mamíferos carnívoros y
algunos roedores juegan también un papel muy importante en el transporte de semillas. Estos mecanismos de
distribución de semillas por animales funcionan bien porque las plantas que producen frutos y los animales frugívoros
establecen con frecuencia relaciones mutualistas en las que la planta cede alimento al animal y éste, a cambio,
transporta sus semillas a sitios distantes de la planta madre.

La participación ciudadana es esencial para


un cambio de rumbo hacia ciudades habitables

EVOLUCION DE LAS COMUNIDADES VEGETALES


La vegetación es un ente dinámico que evoluciona desde estructuras simples hacia otras complejas maduras
en función de las condiciones ecológicas existentes. Si se produce un impacto, siempre que éste no sea
irreversible, la vegetación puede evolucionar progresivamente hacia los estadios más maduros, que, sin
embargo, no tienen un carácter estático, ya que en ellos siguen produciéndose cambios.

Interferencias en los sistemas de diseminación de semillas


Cuando el ser humano produce cambios en un ecosistema que conllevan la rarefacción o extinción local, regional o
global de animales frugívoros, no sólo está afectando negativamente a las poblaciones de estos animales, sino que
también está rompiendo o simplificando relaciones mutualistas que afectan a los mecanismos naturales de diseminación
de semillas y, por lo tanto, afecta indirectamente a las poblaciones de las especies de plantas que en ellas se implican.

Un ejemplo de cómo las interferencias producidas por el ser humano sobre la fauna pueden también afectar
negativamente a las poblaciones de algunas plantas es el patrón de diseminación de semillas del palmito europeo
(Chamaerops humilis), la única especie de palmera nativa del viejo continente. El palmito europeo produce frutos
carnosos y crece en los matorrales que cubren los suelos pedregosos a lo largo de buena parte del litoral mediterráneo.
Los frutos y semillas de esta especie son demasiado grandes para ser ingeridas enteras por las aves frugívoras que
habitan estos ambientes y, por lo general, son ingeridos y dispersados únicamente por mamíferos carnívoros como el
zorro (Vulpes vulpes) y la gineta (Genetta genetta). Ambas especies son consideradas como alimañas y frecuentemente
son eliminadas utilizando lazos, escopetas o veneno. Si en una región donde vive el palmito se producen descensos
acentuados en las poblaciones de estos y otros carnívoros, la efectividad de la diseminación de las semillas de esta
planta se verá seriamente afectada.

Otras especies de plantas, al producir semillas con gran cantidad de reservas nutritivas para el futuro embrión, atraen
animales que se nutren de estas reservas. Aunque dichos animales destruyen un elevado porcentaje de dichas semillas,
muchas otras son transportadas y abandonadas, garantizando de este modo la reproducción y diseminación de la planta
consumida. En los bosques mediterráneos, uno de los animales que se comportan de este modo es el arrendajo (Garrulus
glandarius).

Los arrendajos son aves que se nutren del material de reserva del embrión (endosperma) de las bellotas de encinas
(Quercus ilex) y robles (ej: Quercus cerrioides). Con frecuencia, estos córvidos -también considerados por muchas
personas como alimañas- esconden bellotas en el suelo del bosque para consumirlas durante los períodos de escasez de
alimento. Se estima que un único arrendajo puede llegar a esconder entre 5.700 y 11.000 bellotas en un solo otoño. Si
durante el año siguiente hay abundancia de otros alimentos o si el arrendajo muere, habrá decenas, centenares o incluso
miles de posibilidades de que las bellotas escondidas en el suelo germinen y produzcan plantas jóvenes capaces de
llegar a producir una encina o roble adultos.
Supongamos la posibilidad de que la caza incidiera de forma muy severa sobre la población de arrendajos de un
determinado bosque aislado. En los primeros años siguientes al descenso en la población de estas aves, habría una gran
cantidad de bellotas en condiciones de germinar, pero años más tarde habría pocas bellotas diseminadas. Esto significa
que la caza afectaría la efectividad de la diseminación de semillas y colonización de plantas jóvenes de distintas
especies de Quercus de este bosque y, por tanto, a la propia regeneración y supervivencia del bosque a largo plazo.

Incendios forestales
Se piensa que el ser humano viene prendiendo fuego a los bosques secos y sabanas de distintos continentes desde hace
más de 20.000 años. Algunos paleontólogos consideran que ya en la segunda mitad del período cuaternario los
cazadores-recolectores de Australia y África prendían fuego de forma habitual a la vegetación abierta y semiabierta para
acorralar animales o provocarles la muerte con objeto de aprovechar su carne. Posiblemente, el ser humano aprendió
primero a recoger los despojos de animales muertos por el fuego tras los incendios naturales, y en una segunda etapa
podrían haber aprendido a provocarlos.

De hecho, la presencia de capas de plantas quemadas bajo la superficie de algunos suelos indica que algunos tipos de
bosque mantenían con los incendios una relación más o menos armoniosa antes incluso de que el ser humano apareciera
en continentes como Australia (hace más de 50.000 años) o América del Sur (hace más de 20.000 años). Si mucho antes
de la aparición del ser humano algunos tipos de formaciones vegetales convivían con los fuegos esporádicos, esto
quiere decir que estas formaciones se incendiaban de forma natural. Entre las causas principales de incendios naturales,
entonces y hoy en día, se encuentran los rayos que se producen durante tempestades eléctricas acompañadas por poca o
ninguna precipitación.

Buena parte de las especies vegetales de los bosques más secos y de las sabanas que sufrían incendios esporádicos
desarrollaron mecanismos especiales para evitar la muerte de la planta tras el fuego. Entre estas adaptaciones figuran,
por ejemplo, las cortezas gruesas de muchos árboles (p.e.: el alcornoque en los bosques mediterráneos) y una gran
capacidad de rebrote de ciertas especies leñosas y herbáceas. Es posible que la capacidad de rebrote de algunas plantas
mediterráneas no sea una adaptación directa al fuego, sino que haya surgido en buena parte por exaptación. Esto
significa que los eficaces mecanismos desarrollados por las plantas mediterráneas para vivir en las extremas
condiciones impuestas por el estrés hídrico estival por ejemplo, el desarrollo de raíces muy profundas les habrían
servido también para convivir mejor con los episodios de fuego.
A pesar de todo, se estima que los incendios naturales en los bosques mediterráneos no eran frecuentes, sino
esporádicos, lo que dejaba tiempo suficiente para la recuperación natural del bosque. Lo que el hombre viene haciendo
(de forma voluntaria o inadvertida) es incrementar la frecuencia de aparición de los incendios en un mismo lugar, lo que
limita mucho la capacidad de recuperación de las formaciones vegetales.

Cuando un área forestal sufre incendios a intervalos de tiempo excesivamente cortos, no sólo la estructura de la
vegetación se ve alterada, sino también la composición de especies de la comunidad. A medida que se suceden los
episodios de incendio y regeneración, cada vez rebrotan menos especies leñosas, y cada vez aparecen más especies
colonizadoras que no aparecían originalmente, principalmente gramíneas. A causa de la proliferación de estas plantas,
se origina en el suelo un fenómeno denominado "sabanización", que se produce de forma similar en distintas regiones
del mundo. La sabanización, cuando se acompaña de nuevos fuegos repetidos y lluvias torrenciales, conduce a la
erosión y la pérdida de suelo fértil, lo cual, en las regiones de clima semiárido, puede conducir a una situación de
esterilidad casi total del suelo, limitando la capacidad de recolonización de las plantas autóctonas. Este fenómeno es lo
que frecuentemente se denomina desertización del paisaje.

Acciones positivas para la conservación de nuestros bosques


Existe un amplio abanico de acciones encaminadas a la conservación de los bosques que se encuentran más cerca de
nuestros hogares. Estas acciones pueden llevarse a cabo tanto individualmente como a través de asociaciones y grupos
ecologistas.

Entre las actuaciones de grupo que pueden realizarse destacan la recogida de basura en los bosques y sus márgenes, en
especial botellas, espejos, latas u otros objetos brillantes que pueden provocar igniciones espontáneas en la vegetación
cuando el sol incide en ellos.

A nivel individual es importante mantener hábitos de respeto hacia estos ecosistemas, evitando acciones tales como
fumar o arrojar cualquier objeto extraño al entorno.

Existen varias especies vegetales alóctonas que pueden ser introducidas de forma accidental en los bosques naturales,
durante nuestros paseos, llegando incluso a colonizarlos. Una vez establecidas, estas plantas exóticas frecuentemente
compiten por el espacio y la luz, con especies nativas, pudiendo producirse una pérdida progresiva de bosque autóctono.
Algunas especies cultivadas de Prunus incluso pueden hibridarse con las especies autóctonas del mismo género.

Es especialmente importante no tirar en el suelo semillas de níspero del Japón (Eriobotrya japonica), manzana,
mandarina, naranjas, melocotón, granado (Punica granatum), guinda (Prunus cerasus), ciruela (Prunus domestica) y
ciruela mirobalana (Prunus cerasifera).

Bibliografía

• "El bosque: Una historia educativa." Boada, M. (1996). El Campo 134: 7-22..
• "Sostenibilidad virtual / La desunión forestal europea / En busca del monte perdido." Bravo, M. J. (1997). Ecosistemas 20/21: 24-33.
• "Forests in trouble. A review of the status of temperate forests worldwide."Dudley, N. (1992). WWF International, Gland.
• "Socioecologia dels incendis forestals." Folch, R. (1996). In: J. Terradas (ed.). Ecologia del foc (pp. 255-261). Edicions Proa. Barcelona.
• "El paisatge vegetal de la península del Cap de Creus." Franquesa, T. (1995). Institut d'Estudis Catalans. Secció de Ciències Biològiques.
Barcelona.
• "Forests: The shadow of civilization". Harrison, R.P. (1992). The University of Chicago Press. Chicago.
• "Erosión y desertificación en España." Puigdefàbregas, J. (1995). El Campo 132: 63-83.
• "Developing the current international forests regime: some legal and policy issues." Tarasofsky, R.G. (1995). Discussion Paper, IUCN
Environmental Law Centre, Bonn.
• "Bosques, silvicultura y desafíos ambientales." Terradas, J. (1997). Ecosistemas 20/21: 8-13.

Las Ciudades
Autor: Julen Rekondo. Asesor Medioambiental

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

Las ciudades están ahí y casi todos nosotros vivimos en alguna. Por muchos problemas que causen, hay que contar con
ellas. Hace una década, las ciudades tenían poco que ofrecer a las generaciones más inquietas. Hoy, en un mundo donde
prima la búsqueda de estímulos y sensaciones, las urbes le están ganando la partida a la naturaleza. Existe todo un
movimiento de reivindicación del espacio urbano que parte de esa realidad e intenta sacarle el máximo partido
ecológico a las ciudades. El tema lo merece, pues no olvidemos que en ellas habita la especie que nos resulta más afín
de todas: los seres humanos.

Las ciudades se han convertido en el hábitat típico de la humanidad actual. Más del 80% de la población de la Unión
Europea vive en núcleos urbanos y el 60% de la población mundial será urbana en el año 2005. Son cifras frías y
concretas que sirven para comprender la dimensión de un fenómeno complejo y de trascendental importancia para el
futuro del planeta.

Como en tantos otros temas, todos están de acuerdo en la enfermedad, pero no en los remedios: para caminar hacia una
sociedad ecológica es necesario cambiar los hábitos y las dinámicas urbanas. En un planeta con más de 5.000 millones
de habitantes volver al campo no es una solución global. La respuesta puede estar en la dirección contraria: convertir los
núcleos urbanos en una nueva síntesis entre urbe y naturaleza, donde la arquitectura, el transporte, el uso del suelo, la
recuperación de los suelos degradados, las decisiones comunitarias así como las costumbres sociales, la educación y la
cultura estén íntegramente relacionadas entre sí.

El desafío al que han de hacer frente los poderes públicos durante los próximos decenios, especialmente en las ciudades
de máximo crecimiento demográfico del Tercer Mundo, parece inmenso. Sus posibilidades de éxito no sólo dependerán
de las capacidades locales, sino también de la posibilidad de transformar favorablemente el estado de las relaciones
internacionales y sociales sobre dos cuestiones clave: un sustantivo avance en la convergencia real de las economías y
oportunidades entre países ricos y pobres; y la asunción de una nueva ética ambiental universal que, reconociendo la
inviabilidad de los actuales patrones de desarrollo, asuma la necesidad de alumbrar otros nuevos, que resulten viables y
generalizables al conjunto de la humanidad.

Para vivir en ciudades habitables

En 1850 había en todo el mundo cuatro ciudades de más de un millón de habitantes; en 1900 ya eran veinte y en 1950
ciento cuarenta. Actualmente sobrepasan esa cifra mágica más de 200 y el 50% de la población de la Tierra vive en las
ciudades. Según todos los pronósticos en el 2030 las áreas urbanas acogerán a las dos terceras partes de la población
mundial.

Las ciudades, durante largas épocas destacados centros de producción, desarrollo social, innovación y creatividad, han
devenido en los últimos tiempos en espacios cada vez más inhóspitos en los que se multiplican la pobreza, la violencia,
la marginación y la degradación del entorno. El desmesurado auge urbano de estas últimas décadas, tan veloz como
desequilibrado, ha desencadenado una crisis ambiental sin precedentes con efectos preocupantes también sobre la salud.
Según Naciones Unidas, el deterioro del medio ambiente urbano es responsable de que más de 600 millones de
habitantes de las ciudades de todo el mundo, principalmente en los países en desarrollo, vivan en condiciones que
amenazan seriamente su salud y supervivencia, y que otros 1300 millones se expongan cotidianamente a unos niveles
de contaminación del aire que sobrepasan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.

Además de los impactos internos, la huella "ecológica" de la ciudad traspasa las fronteras locales para afectar a toda la
biosfera. Fenómenos globales como la disminución de la capa de ozono, "lluvias ácidas" o el denominado "efecto
invernadero", tienen su origen en las emisiones contaminantes de óxidos de nitrógeno, anhídrido carbónico, monóxido
de carbono, dióxido de azufre, etc., cuyo principal foco emisor son las ciudades, sobre todo en los países más
industrializados y desarrollados. Frente a este inquietante panorama, el reto de las ciudades cuando abordamos el
cambio de milenio es plantear modelos de desarrollo urbano sostenible, que permitan conciliar la mejora de las
condiciones de vida de los ciudadanos con la preservación del patrimonio natural.

Reducir el tráfico
En las ciudades, el tráfico es la principal fuente de contaminación atmosférica; supone
prácticamente el 100% de las concentraciones de monóxido de carbono y de plomo, el 60% de
los óxidos de nitrógeno -que contribuyen a la formación de las "lluvias ácidas"-, y el 50% de las
partículas. Asimismo, el sector del transporte en la ciudad es uno de los de mayor consumo
energético y, por consiguiente, de las emisiones de CO2, gas responsable en un 50% del "efecto
invernadero".

El ruido, una de las formas de contaminación más genuinamente urbana, también tiene su origen en el estruendo sonoro
que la creciente motorización provoca. A estos impactos, se añade la incesante apropiación de espacio engullido por las
infraestructuras viarias en aumento, que en las grandes ciudades europeas ocupan ya en la actualidad por término medio
entre el 10 y el 15% del suelo.

Todos estos datos negativos no hacen sino confirmar la ineficiencia de los sistemas de transporte urbano, basados en el
dominio casi absoluto del vehículo privado. En muchas ciudades europeas el coche representa ya el 80% del transporte
motorizado. En este contexto, en el que cada vez es más cuestionada la presencia abusiva y hegemónica del coche, se
viene defendiendo de unos años para acá y desde diversos ámbitos ciudadanos un cambio de los sistemas de transporte
urbano, apostando por un modelo más equilibrado en términos ecológicos, sociales y económicos. Un modelo cuyo
objetivo principal deberá ser la mejora de la accesibilidad y no la mera movilidad. La clave de este nuevo enfoque está
en reducir las necesidades de desplazamientos, y no en acortar los tiempos de los viajes. Un planteamiento de esta
naturaleza exige como requisito fundamental la integración de las políticas de transporte y planificación urbana. Como
sugiere el Libro Verde del Medio Ambiente Urbano, los esfuerzos en esta dirección deberían encaminarse a frenar en lo
posible el desarrollo urbano disperso, y a promover, por el contrario, la mezcla de usos y actividades. Un ideal con
nombre de cuento: "la ciudad de las cortas distancias".

Y junto a estos aspectos claves de planificación de los usos del suelo, deberán ponerse en marcha otra serie de medidas
que posibiliten un reparto más equitativo del espacio viario, limitando el uso del coche en la ciudad y, potenciado los
medios más ecológicos, como el transporte colectivo, el peatonal y la bicicleta.

Gestión ecológica de los residuos

La elevada densidad demográfica y la hiperactividad económica desarrollada en las ciudades provoca también una
cantidad de residuos de muy diversa índole: domésticos, industriales, etc., cuya eliminación es uno de los mayores
problemas con los que se enfrentan los gestores de las ciudades.

Hasta ahora, el incómodo asunto se ha resuelto con la construcción de vertederos, pero esta solución, cómoda y sencilla
en principio, se está convirtiendo en otro foco de conflicto para las ciudades, debido a la escasez de suelo disponible,
sin olvidar las protestas de los residentes en las zonas adyacentes. La incineración es otra opción, pero también tiene sus
problemas. Las emisiones pueden ser tóxicas si no se cumplen normas estrictas y no se encuentran con facilidad
emplazamientos adecuados para estas instalaciones.

En los últimos años, la norma de las tres "ERRES" (Reducción, Reutilización y Reciclaje) puede considerarse como una
alternativa importante y más ecológica a los otros sistemas de eliminación. Reducir la producción y consumo de
envases o embalajes excesivos y superfluos, de usar y tirar, es la parte de la solución que va directamente a detener el
aumento actual de los Residuos Sólidos Urbanos. Reutilizar, reparar y remendar cualquier objeto cuya vida útil pueda
alargarse significa empezar a valorar como es debido el trabajo, la energía y los materiales empleados en producirlo. El
Reciclaje permite recuperar las materias primas para producir otros nuevos. Para lograr las tres ERRES, las basuras
deben seleccionarse en origen en varias fracciones y depositarlas en contenedores apropiados. Aún así, a pesar de los
avances en esta técnica, seguirán produciéndose importantes cantidades de residuos que deberán tratarse en las mejores
condiciones medioambientales.

Diseñar viviendas más eficientes y saludables

En un contexto generalizado de crisis ambiental, nadie duda de que la ecología se convertirá en un referente
insoslayable en las ciudades del siglo XXI. Impronta medioambiental que, lógicamente, también tendrá su reflejo en las
tendencias arquitectónicas y las técnicas de construcción. La clave está en ahorrar energía. El objetivo será lograr unas
casas más eficientes desde el punto de vista energético y del consumo de recursos y, por consiguiente, más respetuosas
con el entorno. La energía solar, hasta ahora escasamente utilizada, tendrá mucho que decir en un futuro amenazado por
los cambios climáticos. Su empleo para proporcionar calefacción, agua caliente, etc., unido a la mejora de los sistemas
de aislamiento, supondrá una reducción substancial de la factura energética convencional. Un objetivo al que también
contribuirán unos sistemas de iluminación que favorecerán la luz natural mediante un cuidado diseño arquitectónico y el
empleo generalizado de bombillas fluorescentes de última generación, que gozan de un consumo muy reducido y larga
vida.

También el consumo de agua que llega en los países industrializados a 300 litros al día por habitante, deberá limitarse
mediante instalaciones de fontanería más eficientes, como grifos con pulsador de cierre temporizado, redes propias y
separadas para las aguas residuales negras (inodoros) y grises (cocinas, baños, duchas) y utilización de flujos
reguladores en cisternas. En algunas viviendas incluso se podrá aprovechar el agua de lluvia para su empleo en inodoros
y para riego de plantas y jardines.

Asimismo, el desarrollo de técnicas de construcción "verdes" permitirá la selección de aquellos materiales -incluídos los
reutilizados y reciclados- menos dañinos tanto para el medio ambiente como para las personas, procurando mejorar el
ambiente interior de los edificios. Y es que como evidencia un reciente informe del prestigioso Worldwatch Institute,
aproximadamente el 30% de los edificios modernos exponen a sus usuarios a diferentes tipos de emanaciones tóxicas
por el empleo de sustancias como amianto, formaldehidos y determinadas pinturas.

La participación ciudadana es esencial para


un cambio de rumbo hacia ciudades habitables

LA CIUDAD COMO ECOSISTEMA


"Como los ecosistemas naturales, los ecosistemas urbanos están
compuestos de elementos físicos y biológicos interdependientes y
dependientes a su vez de otros ecosistemas (...) Lo que distingue a los
sistemas urbanos de los demás ecosistemas es la enorme preponderancia de
su componente humano, con sus características sociales, culturales,
económicas y políticas." (UNESCO - Programa MAB).

Defensa de la biodiversidad urbana


La demanda de superficie urbanizable, debido al flujo de inmigración hacia las ciudades,
provoca que el déficit de áreas verdes en los núcleos urbanos sea cada vez mayor. La creación
o rehabilitación de espacios verdes, el fomento de la agricultura periurbana, e incluso de la
permacultura a escala doméstica, con pequeños huertos o "balcones comestibles", son
actividades que, además de favorecer la calidad de vida del ciudadano, ayudan a restaurar la
diversidad biológica.

Huir de los exotismos vegetales y de las plantas sedientas, plantar especies autóctonas,
arbustos, frutales, y utilizar sistemas de microrriego con aguas residuales depuradas y abonos
orgánicos son las pautas a seguir para una gestión sostenible de la ecología urbana.

Participación ciudadana
La participación ciudadana es esencial para un cambio de rumbo hacia ciudades habitables. Los
planes de reducción del tráfico, fomento del transporte colectivo y la bicicleta, ahorro de
energía y agua, reducción y reciclaje de residuos, protección de las zonas verdes y de cultivo,
no pueden fraguarse a puerta cerrada en los despachos de los responsables políticos y técnicos
municipales. Por buenos que éstos sean, sin la participación ciudadana lo más probable es que
acaben siendo anulados. Las iniciativas que se encaminen al cambio de modelo de ciudad
deben emprenderse conjuntamente con las asociaciones ciudadanas. Fomentar la información
y potenciar la participación de los ciudadanos resulta imprescindible para afrontar el cambio de
modelo urbano y para fortalecer la vertebración social alrededor de futuros proyectos.

Ciudades sostenibles: un cambio de rumbo


La recuperación ecológica de la ciudad como base de un desarrollo sustentable arranca de un
contexto que, al menos en el terreno de los principios, no puede ser más favorable. La práctica
totalidad de los grandes organismos internacionales Naciones Unidas, OCDE y la misma Unión
Europea consideran el desarrollo sostenible como un tema central en la toma de decisiones
políticas. Bien es cierto que el concepto de desarrollo sostenible, una expresión tan atractiva
como ambigua, encuentra fácil acomodo en los más variados discursos. A este respecto, la
Cumbre de la Tierra, celebrada en Río de Janeiro en 1992, marcó un hito muy importante. Y
aunque en Río hubo más palabras que hechos, uno de sus principales logros, la Agenda 21,
empieza a utilizarse como referente central en las políticas municipales de numerosos países.
En Europa, más de 100 ciudades han suscrito la "Carta de Ciudades Europeas Sostenibles",
comprometiéndose a participar en las iniciativas locales de la Agenda 21 y a desarrollar
programas a largo plazo hacia un desarrollo sostenible.

Por otra parte, se multiplican las experiencias de recuperación de barrios o de creación de


nuevas áreas residenciales desde una perspectiva ecológica. Buen ejemplo de esto son
experiencias como "Ecolonia" conjunto residencial ubicado en la ciudad holandesa de Alphen
aan den Rijn-; o "Auf dem Schafbrühl" urbanización levantada a las afueras de la ciudad
alemana de Tübingen e inspirada en los principios de la "baubiología" o biología de la
construcción, y a una escala mucho mayor, el ambicioso proyecto de reconversión ecológica de
la región industrial de Emscher valle de la cuenca del Ruhr que agrupa a 17 ciudades con cerca
de dos millones de habitantes, una zona muy deteriorada como consecuencia de la fuerte
industrialización e intensa actividad minera que ha alterado profundamente el entorno.

En América, sobresale la experiencia de Curitiba, ciudad brasileña con una población cercana a
los 2,2 millones de habitantes, capital del Estado de Paraná, que ha hecho de la protección del
medio ambiente una de sus principales prioridades. Destaca entre sus realizaciones más
importantes, una modélica red integrada de transportes de bajo costo, rápida y gran calidad
que es utilizada diariamente por 1,3 millones de personas. Sin precedentes en un país en vías
de desarrollo, este sistema ha limitado de forma importante el tráfico rodado en la ciudad y ha
permitido aumentar notablemente los espacios verdes. Curitiba cuenta en la actualidad con 20
millones de m2 de área verde, lo que representa 52,2 m2 de verde por habitante, cuando las
ciudades de nuestro entorno apenas cuentan con 5 m2 por habitante. A través del reciclado de
papel, la ciudad deja de talar al día 1.516 árboles, siendo reciclados el 80% de sus residuos.

Carta de ciudades europeas sostenibles


(Principios en que se basa)
Una nueva filosofía del desarrollo local. Basada en la capacidad de formular nuevos objetivos
desde una visión integrada y compatible entre medio ambiente, necesidades sociales y
economía, tomando en consideración el nivel local y el global, el corto y el largo plazo.

Incorporar el análisis del comportamiento de las ciudades como ecosistemas. Ello posibilita una
expresiva visión sobre el balance ambiental de cada ciudad, y la delimitación de los problemas,
sectores y agentes claves, así como la formulación de nuevas políticas sobre energía, agua,
transportes, residuos
Recuperar viejos-nuevos valores que favorecen la convivencia y la calidad ambiental y de la
vida urbana. Se trata de superar la fuerte segregación de la urbe moderna, para volver a
valorar las ventajas de la ciudad compacta, integrada, accesible, próxima y capaz de
rentabilizar todas sus potencialidades de forma compatible con la preservación de su entorno
ambiental.

Superar la idea del "crecimiento sin límites" como paradigma, para plantear otras bases del
desarrollo urbano. Se trata de optar por un escenario alternativo que, sin ignorar las
necesidades sociales, centre sus prioridades en otra forma de vivir la ciudad, aplicando el
principio de "reciclaje permanente" frente a la práctica de "crecer, usar, abandonar, volver a
crecer", todavía dominante en muchas de nuestras urbes.

Recuperar la idea de ciudad como un proyecto común de los ciudadanos. Fomentar la


información y potenciar la participación de los ciudadanos resulta imprescindible para afrontar
el cambio del modelo urbano y para fortalecer la vertebración social alrededor de los futuros
proyectos.

Actuaciones ejemplares
De la IIª Conferencia Mundial "Hábitat II" (Estambul, 1995) salió el Catálogo de "Buenas
Prácticas" urbanas, integrado por las actuaciones ciudadanas más interesantes puestas en
marcha en todo el mundo para resolver problemas como la vivienda, los servicios de
infraestructura, la integración social o la resolución de los problemas medioambientales.

Estas 12 actuaciones fueron consideradas ejemplares:

• Nuevo sistema de compra de terrenos en Buenos Aires para que familias con bajo nivel
de renta puedan comprar terrenos con infraestructura básica al norte de la ciudad.
• Rehabilitación de 400 barrios en Fortaleza (Brasil), que integra los aspectos humanos y
materiales en el proceso de rehabilitación.
• Programa de integración en Toronto (Canadá), de servicios culturales y lingüísticos para
las comunidades extranjeras.
• Desarrollo de Abidjan (Costa de Marfil), que ha institucionalizado la fuerza
representativa de las estructuras comunitarias y ha fomentado su autogestión e
iniciativa empresarial.
• Rehabilitación de chabolas en Agadir (Marruecos) con programas para mejorar los
asentamientos marginales de la ciudad.
• Gestión municipal de Tilburg (Holanda) que lanza un sistema de servicios de calidad,
trata a los ciudadanos como clientes y les reconoce su participación en el desarrollo
urbano.
• Centro de información de Alexandra (Sudáfrica) que facilita el intercambio de
información entre ciudadanos y Ayuntamiento.
• Rehabilitación del sur del Bronx (EE.UU.) gestionada por la comunidad bajo el lema de
"No te muevas, renueva" y que ensambla sanidad, guarderías, educación, medio
ambiente, transporte y desarrollo.
• Banco Indio de Mujeres Autoempleadas, que da créditos para el desarrollo económico
de éstas.
• Reconstrucción de Anhui (China) de las comarcas rurales arrasadas en las inundaciones
que en 1991 destruyeron 2,78 millones de viviendas. El Gobierno ha reconstruído las
casas con materiales más resistentes y ha contado con la participación de los
damnificados.
• Iniciativas y gestión en Lublin (Polonia) caracterizadas por la participación de la
comunidad en la inversión y gestión de los barrios, así como en la regularización de los
derechos de propiedad de los inmuebles.
• Proyecto anticontaminación de Chattanooga (EE.UU.), que ha convertido la ciudad más
contaminada del país en la ciudad del futuro, gracias a la participación ciudadana.
Bibliografía

• "The Aalborg Charter: Charter of European Cities and Towns Toward Sustaninability" Aalborg, Dinamarca,
27 de mayo de 1994
• "CE: Libro Verde sobre el Medio Ambiente Urbano" COM (90)218 final, Bruselas, 1990.

• "Ciudades". Cuadernos de educación ambiental del Centro Unesco. 1993.


• "La explosión del desorden. La metrópoli como espacio de la crisis global" Fernández Durán, R. (1993).
Fundamentos, Madrid.
• "Ciudades. Alternativas para una vida urbana sostenible" Girardet, H. (1992). Celeste Ediciones, Madrid.

• "Imagen reciclada" López de Uralde, J. Gaia, 4, pp. 57-60.


• "Nuevas formas para las ciudades" Lowe, M. (1.992) Worldwatch Institute: La situación en el mundo. 1992. CIP,
Barcelona . pp. 199-229.
• "Ciudades sostenibles" Tello, E. Gaia, 8, pp. 36-41.

• "La sociedad del automóvil. Un callejón sin salida" Wolf, W. (1.995). Mientras Tanto, 61, pp. 97-108.

Espacios Naturales
Protegidos
Autor: Javier Gómez - Limón García y J.Vicente de Lucio
Fernández. C.Investigaciones Ambientales de la C.A.M.
"Fernando González Bernáldex"

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

¿Qué es un espacio natural protegido?


Los espacios naturales protegidos son demarcaciones administrativas establecidas con la finalidad de favorecer la
conservación de la naturaleza.

En muchos casos se trata de preservar un enclave singular o una porción de naturaleza privilegiada; en otros se pretende
además mantener ciertas actividades humanas finamente ajustadas a las condiciones naturales. Actualmente se ha
comenzado a plantear el objetivo de mantener los procesos ecológicos.

El concepto de espacio natural protegido ha evolucionado a lo largo del tiempo. Los primeros espacios naturales
protegidos buscaban preservar una naturaleza idílica en estado primigenio. El paraíso es el concepto de referencia para
justificar la necesidad de impedir la explotación de estos lugares. El Parque Nacional de Yellowstone en E.E.U.U.,
creado en 1872, y los Parques Nacionales de Covadonga y Ordesa y Monte Perdido, en 1918, ilustran muy bien el
estereotipo romántico utilizado en aquellos tiempos.

A lo largo del siglo problemas como la desaparición de especies, la perdida de enclaves o paisajes, la destrucción de los
procesos ecológicos o la extinción de culturas han provocado la declaración de espacios con un sin fin de objetivos.

Un mejor conocimiento de la naturaleza, de las funciones de muchos de sus seres y fenómenos y de las posibilidades
que encierran, están cambiando la percepción del concepto de calidad del medio ambiente y de vida. Los espacios
naturales protegidos se consideran actualmente ejemplos de buena práctica ambiental donde se busca un equilibrio entre
distintas actividades. Como decía González Bernáldez habría que pensar en sistemas de conservación de la naturaleza.
Algunos puntos del territorio permanecerán inalterados como ejemplos de naturaleza virgen y en una gradación
continua de actividades nos acercaremos a la ciudad o la vivienda de cada uno donde los procesos naturales son
controlados al máximo para proporcionarnos sensaciones de confort y seguridad.
Conservación de la naturaleza
Uno de los principales resultados de la Cumbre de la Tierra celebrada en Río de Janeiro en 1992 fue el Convenio de
Biodiversidad ratificado por un gran número de países. Este Convenio reformula los objetivos de la conservación de la
naturaleza estableciendo principios rectores de carácter universal.

Inspirándose en Río, la comisión de Parques Nacionales y Areas Protegidas de la UICN en colaboración con la
Federación EUROPARC, el WWF y otras organizaciones europeas publicó en 1994 "Parques para la vida: Plan de
acción para las áreas protegidas de Europa". Este documento contiene una estrategia y numerosas recomendaciones
prácticas para los responsables de las áreas protegidas.

Los espacios naturales protegidos que siguen un modelo de gestión avanzado trabajan actualmente para mantener la
diversidad de especies, sus variedades y genotipos silvestres y domésticos, asegurando el funcionamiento de los
ecosistemas.

Funciones de los espacios naturales protegidos

Según el Profesor Francisco Díaz Pineda la filosofía de conservación de la naturaleza puede esbozarse bajo tres grupos
de intereses: Disfrute del entorno, reconocimiento de la importancia de procesos físicos y ecológicos y mantenimiento
de recursos que permitan el bienestar humano.

El papel de los espacios naturales protegidos en la conservación de la naturaleza es muy amplio. A veces, sirven como
instrumento preventivo de la ordenación territorial impidiendo la dispersión urbanística en el territorio o invirtiendo
para mantener la singularidad de un paisaje. En otras ocasiones, promueve el mantenimiento de actividades económicas
beneficiosas para el territorio. A menudo, concentran sus esfuerzos en la comunicación con el público y la prestación de
servicios recreativos y turísticos. También, con cierta frecuencia, se concentran en la vigilancia y en el control de las
actividades lesivas para ciertas especies.

El Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, en la Comunidad de Madrid, ha impedido la urbanización de un
corredor de 20 kilómetros de ancho, entre la Sierra de Guadarrama y la metrópolis con 5.000.000 de habitantes,
protegiendo así un elemento sustancial de calidad ambiental para los madrileños.

Los espacios naturales protegidos también contribuyen a estimular las actividades que más favorezcan la conservación.
La Countryside Commission en Inglaterra realiza acuerdos de conservación con los propietarios de fincas situadas en
áreas protegidas, ayudándoles a mejorar la calidad de sus actividades a la vez que mantienen determinadas especies.

En el Parque Natural de Doñana hubo que realizar cuidadosas tareas de eliminación de plantaciones de eucaliptos con
objeto de favorecer la recuperación de la vegetación natural de los sistemas dunares y lagunares.

Algunos espacios prestan un interés especial al mantenimiento de paisajes singulares y de las culturas que los han hecho
posibles. La Reserva de la Biosfera de Urdaibai y el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa junto con los
Parques Nacionales de Exmoor y Dartmor mantienen el programa conjunto "Conservando Paisajes y Formas de vida"
donde se comparten experiencias de trabajo con las poblaciones locales de estos parques.

Categorías Internacionales de Conservación de la Naturaleza

La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) en su Asamblea General del año 1994 estableció
las siguientes categorías:

I.- Reserva natural integral: espacio protegido gestionado principalmente con fines científicos o con fines de protección
de la naturaleza.

II.- Parque nacional: espacio protegido gestionado principalmente para la conservación de ecosistemas y el recreo.

III.- Monumento natural: espacio protegido gestionado principalmente para la conservación de características naturales
específicas.
IV.- Area de gestión de hábitat/especies: espacio protegido principalmente para la conservación, y con intervención a
nivel de gestión.

V.- Paisaje protegido terrestre/marino: espacio protegido gestionado principalmente para la conservación y protección
de paisajes terrestres y marinos y el recreo.

VI.- Area protegida con recursos gestionados: espacio protegido gestionado principalmente para la utilización sostenible
de los recursos naturales.

Otras categorías internacionales de conservación de la naturaleza

Diversas instituciones internacionales otorgan títulos a algunas áreas protegidas que


cumplen con ciertas condiciones o características especiales.

Por ejemplo la UNESCO otorga el título de Reserva de la Biosfera. Cada Reserva


conserva modelos de ecosistemas característicos de cada una de las regiones naturales
del mundo. En las Reservas de la Biosfera tiene gran importancia la integración de la
conservación de la naturaleza con las actividades humanas.

La Reserva de la Biosfera de Urdabai (Bizkaia) es un buen ejemplo en donde la declaración internacional de Reserva se
ha adoptado legalmente creándose un espacio natural protegido de importancia internacional.

La UNESCO, otorga asimismo el título de Sitio Natural del Patrimonio Mundial a lugares representativos de la
evolución biológica o por albergar hábitats naturales de especies amenazadas. Un ejemplo es Garajonay en la isla de
Gomera.

Por otra parte, acogiéndose a convenios, acuerdos o leyes internacionales, los países firmantes se comprometen a
conservar áreas naturales de acuerdo a las condiciones establecidas en estas leyes o convenios. Entre otros cabe
destacar:

- Convenio Ramsar. Convenio sobre las Zonas Húmedas de Importancia Internacional, especialmente como hábitat de
las aves acuáticas.

- ZEPAs: Zonas de Especial Protección para las Aves. Creadas al amparo de la Directiva Aves de la Unión Europea. En
España hay 139 ZEPAs que ocupan unos 24.000 km2.

- ZECs: Zonas de Especial Protección. Se crean al amparo de la Directiva Hábitats de la Unión Europea. Las ZECs
integrarán en el futuro la Red Natura 2000.

¿Cómo funciona un espacio natural protegido?


Para llevar a cabo sus objetivos los espacios naturales protegidos disponen de medios legales, materiales y de personal.
Además suelen contar con instrumentos de participación de la sociedad como por ejemplo, los patronatos y las
asociaciones de amigos.

Medios legales: La ley de declaración es el medio habitual por el que se establece un parque o una reserva. Los planes
de gestión son herramientas más detalladas donde se determinan las actividades a realizar en un período concreto de
tiempo (4 a 6 años). Suelen contener normativas, presupuestos y proyectos o planes temáticos. El Plan Rector de Uso y
Gestión, contemplado en la ley estatal de conservación de la naturaleza es el modelo más usado.

El patronato es el órgano de participación social en la gestión de un parque. En él están representadas las autoridades
municipales, regionales y estatales (en el caso de los parques nacionales), asociaciones y organizaciones agrarias, de
cazadores, ecologistas, de montañeros, de empresas, culturales, etc., instituciones de investigación y otras que puedan
realizar alguna aportación o representen algún interés en la mejora del espacio protegido.

Personal: Un parque está representado por su director-conservador. Dada la variedad de actividades de los parques, el
director debe estar respaldado por un equipo técnico en el que encontraremos desde abogados, sociólogos o arquitectos
hasta geógrafos, biólogos o ingenieros de montes. Aún son frecuentes los espacios naturales protegidos que procediendo
de una administración forestal sólo disponen de un único tipo de profesionales en su estructura. El personal de campo
está formado por guardaparques, responsables de realizar principalmente tareas de vigilancia, y por los guías,
interpretadores o informadores, quienes se ocupan de los programas educativos y las relaciones con los visitantes.

Instalaciones: Además de la oficina del parque, donde pueden resolverse asuntos de trámite, están abiertos al público
los centros de visitantes o interpretación donde se ofrecen servicios de información y actividades. Muchos parques
disponen también de una escuela de naturaleza dedicada a la educación ambiental, a veces con posibilidades de
alojamiento.

Voluntariado: Las personas más motivadas pueden colaborar en muchos parques a través de las asociaciones de
amigos, jornadas de trabajo voluntario y otras actividades. La Asociación de Amigos del Parque Natural del Montseny
cuenta con unos 2.000 socios. Disponen de ciertas ventajas como la oportunidad de realizar visitas guiadas, estancias y
otras actividades de conocimiento del parque. Al mismo tiempo contribuyen a la mejora del parque mediante trabajo
voluntario.

Turismo: La Federación EUROPARC presentó en 1993 el documento "Loving them to death" (amándolos hasta la
muerte), sobre los conflictos entre conservación de la naturaleza y turismo en las áreas protegidas. Los parques
nacionales españoles tienen 8,1 millones de visitas al año y el conjunto de parques en el estado español, con seguridad,
supera los 20.000.000. Estas cifras millonarias son elocuentes acerca de la relación entre nuestra sociedad y la
naturaleza.

Evidentemente una de las funciones de los parques consiste en facilitar el disfrute y conocimiento de la naturaleza y
lograr una actitud favorable de la sociedad, sin embargo la presencia incontrolada de público en lugares muy frágiles
puede producir daños. Procurar un mayor disfrute de la naturaleza disminuyendo el impacto ambiental es una de las
principales tareas de los gestores de parques. El concepto LCA (Límite del Cambio Aceptable) establece técnicamente
el umbral por encima del cual la presión de visitantes deteriora los recursos del parque.

Población local: Los espacios naturales protegidos introducen cambios en el uso de los recursos naturales.
Determinadas actividades deben ser limitadas por su fuerte impacto ambiental, mientras que impulsadas por el
desarrollo del parque surgen otras de nueva factura.

Las poblaciones locales se sienten fuertemente implicadas en este proceso siendo necesario dar audiencia a todos los
intereses. Tras algunos años de ajuste los parques donde se ha dado un proceso de participación pública aparecen como
impulsores del desarrollo local. Este es el caso de los parques naturales/regionales franceses, donde existe una gran
demanda por parte de las poblaciones locales para ser incluídos en parques de nueva creación.

Los espacios naturales protegidos deben ser ejemplos de buena


práctica ambiental, donde se busque el equilibrio entre distintas
actividades
ESPACIOS NATURALES PROTEGIDOS EN EL ESTADO ESPAÑOL
La conservación es parte fundamental de la estrategia de gestión sostenible del territorio y sus
recursos. Por ello, los Espacios Naturales Protegidos no son entidades aisladas del resto del
territorio sino que han de formar parte de un sistema de conservación en el que se contempla
una gradación continua desde áreas naturales, prácticamente inalteradas, hasta la ciudad,
donde los procesos naturales son controlados al máximo.

Espacios naturales protegidos en el estado español


En el estado español existen en la actualidad cerca de 500 espacios naturales protegidos, que ocupan una superficie de
casi 3.000.000 de ha (el 6% de la superficie total).

Según la legislación vigente, los espacios naturales se clasifican en las siguientes categorías: Parques, Reservas
Naturales, Monumentos Naturales y Paisajes Protegidos.

Parques

"Son áreas naturales, poco transformadas por la explotación u ocupación humana que, en razón de la belleza de sus
paisajes, la representatividad de sus ecosistemas o la singularidad de su flora, de su fauna o de sus formaciones
geomorfológicas, poseen unos valores ecológicos, estéticos, educativos y científicos cuya conservación merece una
atención preferente".

Parques Nacionales: "Son Parques Nacionales aquellos espacios naturales de alto valor ecológico y cultural, que siendo
susceptibles de ser declarados parques, se declare su conservación de interés general de la nación. Este interés se
apreciará en razón de que el espacio sea representativo del patrimonio natural y de que incluya alguno de los principales
sistemas naturales españoles". "Los parques Nacionales serán gestionados conjuntamente por la Administración General
del Estado y la Comunidad o las Comunidades Autónomas en cuyo territorio se encuentren situados".

Parques Naturales: En los Parques naturales se promoverán los aprovechamientos tradicionales compatibles con la
conservación de los recursos naturales y se facilitará la entrada de visitantes. En estos espacios la gestión compete
exclusivamente a la Comunidad Autónoma en cuyo territorio se encuentren situados. En la actualidad, en España
existen unos 100 Parques (Naturales o Regionales)

Reservas Naturales
Son espacios naturales cuya creación tiene la finalidad de "protección de ecosistemas, comunidades o elementos
biológicos que, por su rareza, singularidad, importancia o fragilidad merecen una valoración especial".

Monumentos Naturales

"Son espacios o elementos de la naturaleza constituídos básicamente por formaciones de notoria singularidad rareza o
belleza, que merecen ser objeto de una protección especial."

Paisajes Protegidos

"Son aquellos lugares concretos del medio natural que, por sus valores estéticos y culturales, sean merecedores de una
especial protección."

Las distintas Comunidades Autónomas del estado español, han creado otras figuras de protección para los espacios
naturales y, aunque algunas pueden asimilarse a las figuras recogidas en la legislación del Estado, otras no pueden
equipararse e incluso tienen denominaciones diferentes.

Sistemas de planificación de espacios naturales protegidos


La gestión de los espacios naturales protegidos se realiza mediante planes que contienen medidas o actuaciones a
realizar tanto por la Administración del espacio protegido, como por otras administraciones públicas y los particulares.
La finalidad de estas actuaciones es cumplir con los objetivos de conservación, expresado en la norma legal que recoge
la declaración del espacio protegido.

En el Estado Español son dos los instrumentos básicos de planificación utilizados:

Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN)

El PORN es un plan de ordenación para un territorio amplio, como una región o una comarca, donde se identifican las
zonas que requieren medidas especiales de protección. En la práctica es frecuente limitar el ámbito de los PORN al
territorio de un espacio previamente protegido, utilizando la excepción que permite la Ley.

Establece las medidas necesarias para asegurar la protección, conservación, mejora y utilización racional del espacio
protegido. Su duración es ilimitada.

• Debe realizarse con anterioridad a la declaración del espacio protegido.


• Su ámbito espacial de aplicación supera los límites del espacio protegido.
• Debe contener al menos los siguientes puntos:

- Límite del ámbito territorial objeto de ordenación, describiendo e interpretando sus características físicas y biológicas.

- Definición del estado de conservación de los recursos naturales.

- Delimitación de la zonificación de usos.

- Determinación de las limitaciones respecto a los usos y ordenación de las actividades a desarrollar en las diferentes
zonas del espacio protegido.

- Tipos de actuaciones sujetas a Evaluación de Impacto Ambiental.

- Establecimiento de planes de restauración y recuperación de los recursos naturales.

Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG)

El PRUG es el instrumento básico de gestión de todo espacio natural protegido.


• Desarrolla y concreta las determinaciones de gestión, protección y conservación recogidas en el PORN en
materia medioambiental.
• Es un documento eminentemente técnico donde se definen claramente cómo alcanzar los objetivos tanto a
nivel técnico, presupuestario y de medios. Poseen un período de vigencia de entre 4 y 6 años.
• Su realización y aprobación es posterior a la declaración del espacio protegido.
• Debe contener al menos los siguientes puntos:

- Normas, directrices y criterios necesarios para gestionar el espacio protegido.

- Zonificación del espacio protegido a efectos de actuaciones.

- Normativa de regulación de actividades económicas y recreativas.

- Directrices para elaborar los programas que desarrollen los objetivos concretos del espacio protegido.

- Relación de ayudas técnicas y económicas.

Aunando esfuerzos
La Federación de Parques Naturales y Nacionales de Europa (EUROPARC) fue creada en 1973 para trabajar a favor de
la idea que expresa su eslogan: "conservación sin fronteras". Tiene socios en más de 30 países y constituye un
importante foro de debate sobre aspectos técnicos de estas áreas protegidas. Asimismo, proporciona a sus miembros
formación especializada de cara a garantizar una permanente actualización sobre los diversos aspectos profesionales
que interesan a quienes trabajan en estos parques. Todo ello encaminado, en definitiva, a lo que es el propósito último
de esta Federación: inducir avances significativos en el desarrollo de los diferentes espacios naturales.

Bibliografía

• "Parques para la vida. Plan de acción para las áreas protegidas de Europa." ICONA. (1994). UICN.
• "Loving them to death. Sustainable tourism in Europe´s Nature and National Parks." Federation of Nature and National Parks. (1993).
• "ESPARC´95. Actas del 1º Seminario de Espacios Naturales Protegidos." Sección del Estado Español de la Federación de Parques Naturales y
Nacionales de Europa. (1995).
• "Actas del Seminario sobre educación ambiental en espacios naturales protegidos." Partnership Exchange Programme. EUROPARC-España.
Parque del Ticino. Lombardia. Italia. 9 al 20 de junio de 1997.
• "Riqueza y conservación. Planificación de espacios naturales protegidos." Consejería de Medio Ambiente. Junta de Andalucía. (1997).
• "Espacios Naturales Protegidos." El Campo nº 128. Banco Bilbao-Vizcaya. (1993).
• "Espacios naturales protegidos de España." Guías Periplo. Ed. Incafo. (1992.)
• "Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de Asturias." Consejería de Medio Ambiente y Urbanismo. Principado de Asturias. (1994).

La Población
Autor: Carmen González Muñoz. Dra. en Geografía e Hª

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

La relación población/desarrollo: una cuestión ambiental clave


El explosivo aumento de la población mundial y los desequilibrios que caracterizan su composición y estructura, junto
con el contexto socio económico en el que estos fenómenos se producen son, en nuestros días, cuestiones claves para
entender la crisis ambiental. Durante milenios, según nos muestra el gráfico, la población del mundo creció lentamente,
dado que los nacimientos apenas superaban a las defunciones y que se producían periódicas y catastróficas
sobremortalidades, debidas a la escasa alimentación, las epidemias y las guerras. La superación de estos factores, las
revoluciones agrícola e industrial, la mejora en las condiciones higiénicas y otros adelantos explican el acelerado
crecimiento de la población mundial desde finales del s. XVIII y la explosión demográfica especialmente evidente en el
s. XX.

La población mundial, así, ha crecido más en estos dos últimos siglos que en todos los anteriores, doblando sus
efectivos en los años posteriores a la 2ª Guerra Mundial. En la última década se han registrado tasas de crecimiento del
1,7% anual (1985-90), con incrementos anuales de 90 millones de personas. El resultado es que la población de la tierra
cuenta en la actualidad (1997) con 5.850 millones de habitantes, mientras que hacia mediados del s. XVIII apenas
estaba constituída por 728 millones, a mediados del s. XIX por 1.171 millones y a mediados del siglo XX por 2.516
millones de habitantes. Y en el futuro, según algunas estimaciones, la tierra podría superar los diez mil millones de
personas (9.400 millones en el año 2050, 11. 200 millones en el año 2100).

La preocupación por los efectos sobre el medio ambiente de una población de tal magnitud y por las disponibilidades de
recursos para atenderla, resultan comprensibles a la luz de estas cifras y se agrava al coexistir la explosión demográfica
con un modelo socioeconómico que propicia otra explosión no menos preocupante, la del consumo, masivo ya en las
sociedades industrializadas, y que favorece situaciones de grave desigualdad, en la que el 20% rico de la población
mundial se reparte el 80% de los recursos. Ambas cuestiones, explosión demográfica y explosión del consumo no
pueden, pues, considerarse por separado ni aislarse de los modelos de desarrollo que se planteen; por ello, es necesario
afrontar la cuestión desde ambos aspectos, población y recursos, y buscar modelos de desarrollo más justos.

La explosión demográfica y los desequilibrios de la población


La explosión demográfica es, pues, una de las grandes preocupaciones ambientales de fines del s. XX. Y, aunque el
ritmo de incremento parece haberse hecho más pausado, con "sólo" 81 millones de personas al año, si no se reduce, en
el año 2025, según cálculos de los expertos de la ONU, que nos muestra el gráfico, la tierra habrá aumentado en 2.200
millones de personas más y estará poblada por más de 8.039 millones de habitantes.

Pero la población de la tierra presenta, además, acusados contrastes en su distribución espacial y notables desequilibrios
en su composición. Así el 90% vive en el hemisferio norte; el 50% se sitúa entre los 20º y 40º de latitud norte y
preferentemente en la periferia o por debajo de 500 m. Ciertos factores naturales, como el clima o el relieve, justifican
la atracción de algunas regiones y los vacíos de otras, pero son factores humanos, sociales, económicos, políticos y de
comportamiento demográfico, los que explican la distinta ocupación del espacio.

Se producen también desequilibrios en la estructura de la población y en su distribución por edad, sexo y niveles de
desarrollo, los cuales no han hecho más que acrecentarse con la explosión demográfica, dado que, en nuestros días, se
da básicamente en los países subdesarrollados o en desarrollo, cuya fecundidad se mantiene alta, mientras que declina
en los desarrollados, los cuales hace ya tiempo han superado la fase de transición demográfica.

Consecuencia de este desigual crecimiento son las muy distintas cifras de población entre regiones y sus diferencias en
la edad. Así, en los años cincuenta de nuestro siglo, con una población en torno a los 2.500 millones, unos 800 millones,
el 32%, vivían en los países desarrollados, mientras que los restantes 1.700, el 68%, lo hacían en los subdesarrollados o
en vías de desarrollo. Mediados los noventa, de los 5.500 millones censados sólo un 24%, unos 1.300 millones vivían
en países desarrollados, representando los subdesarrollados un 76% del total, unos 4.200 millones de personas.

EVOLUCION HISTORICA DE LA POBLACION


EL FUTURO INMEDIATO
MUNDIAL
Horizontal: Desde (-5000) millones
de años hasta 1997

Vertical: De 0 a 6000 millones de habitantes

Y en el futuro todos los cálculos apuntan en el mismo sentido: en el 2025 sólo 1.220 vivirán en regiones desarrolladas,
aproximadamente un 20%; 1.159 en países subdesarrollados y nada menos que 6.818 se situarán en las regiones menos
desarrolladas, lo que significará que un 80% vivirá en los países más desfavorecidos económicamente. Considerados
por zonas, será en Asia Meridional, África y los Países Árabes donde se producirán los crecimientos demográficos más
fuertes, siendo más moderados en Asia Oriental, América Latina y Caribe. En el lado contrario, tanto en América del
Norte como en Europa la población, salvo por vía de inmigración, no aumentará casi nada o descenderá, dado que su
media de fecundidad, apenas 1,7 por mujer, está por debajo de la tasa de reemplazo, 2,1 hijos por mujer. Así, Europa,
que en 1990 tenía 498 millones de habitantes, pasará, si estos datos no cambian, a tener sólo 486 millones en el 2050.

En los países ricos y desarrollados la población, además,


envejece de forma alarmante. El contraste de esta situación
con la de países en desarrollo que mantienen alta su
POBLACION JOVEN / POBLACION
fecundidad en presencia de mortalidades bajas es evidente en
ENVEJECIDA
los casos que ilustra el gráfico, que enfrenta la Pirámide de
Población de Suecia con la de Uganda. Nos encontramos ante
un mundo joven y pobre o con dificultades de desarrollo y
otro envejecido y rico.

Otro desequilibrio básico es el que afecta al reparto de la


población por sexos y a la situación de la mujer. De los 5.300
millones de habitantes que tenía el mundo en 1990, menos de
la mitad, 2.630 millones, eran mujeres, aunque las
desigualdades regionales fuesen y sigan siendo considerables.
En muchos países esta población femenina sufre una clara
discriminación, que afecta a sus derechos cívicos y a su nivel
de nutrición, de atención sanitaria o de educación. Su papel
es, sin embargo, esencial en el comportamiento demográfico;
la fecundidad está muy relacionada con cuestiones tales como
la edad de contraer matrimonio alrededor del 50% de las
mujeres africanas, el 40% de las asiáticas y el 30% de las
latinoamericanas se casan antes de los 18, lo que constituye
un indicador de alta fecundidad, su nivel de educación, el uso
o no de anticonceptivos, etc.

En los países ricos y desarrollados la población, además, envejece de forma alarmante. El contraste de esta situación
con la de países en desarrollo que mantienen alta su fecundidad en presencia de mortalidades bajas es evidente en los
casos que ilustra el gráfico, que enfrenta la Pirámide de Población de Suecia con la de Uganda. Nos encontramos ante
un mundo joven y pobre o con dificultades de desarrollo y otro envejecido y rico.

Otro desequilibrio básico es el que afecta al reparto de la población por sexos y a la situación de la mujer. De los 5.300
millones de habitantes que tenía el mundo en 1990, menos de la mitad, 2.630 millones, eran mujeres, aunque las
desigualdades regionales fuesen y sigan siendo considerables. En muchos países esta población femenina sufre una
clara discriminación, que afecta a sus derechos cívicos y a su nivel de nutrición, de atención sanitaria o de educación.
Su papel es, sin embargo, esencial en el comportamiento demográfico; la fecundidad está muy relacionada con
cuestiones tales como la edad de contraer matrimonio alrededor del 50% de las mujeres africanas, el 40% de las
asiáticas y el 30% de las latinoamericanas se casan antes de los 18, lo que constituye un indicador de alta fecundidad, su
nivel de educación, el uso o no de anticonceptivos, etc.

Las políticas demográficas y los planes de desarrollo han tendido con frecuencia a olvidar estos aspectos, reforzando a
veces su papel reproductor. Hoy en día se considera que la mejora de su estatus y su participación en la gestión de los
programas demográficos es de suma importancia para el tratamiento de los problemas ambientales.

Pobreza y Migración. La brecha Norte-Sur


La brecha que separa a los países desarrollados del Norte de los del Sur en desarrollo ha aumentado en las últimas
décadas. Pero, a su vez, el Norte tiene dentro su propio Sur sus marginados y el Sur, dentro del cual se manifiestan
también crecientes desigualdades, su propio Norte- sus potentados. Los niveles de riqueza y pobreza, y la dinámica
poblacional son dos buenos indicadores de esta situación.

Más de una quinta parte de la humanidad vive todavía en unas condiciones extremas. El gráfico nos ilustra sobre las
dimensiones y evolución de la pobreza en los países en desarrollo, observándose en él algunas mejoras globales, pero
con una distribución muy desigual. En los países asiáticos, con algunas excepciones, la situación está mejorando, pero
todos los indicadores de pobreza empeoraron en el África, al Sur del Sahara y en América Latina y, en menor medida,
en otras zonas. Las desigualdades se manifiestan también entre sexos y edades: el mayor porcentaje de pobres se da
entre las mujeres y casi los dos tercios de la población por debajo de los umbrales de pobreza tiene menos de 15 años.

Esta situación significa un fuerte contraste con el despilfarro y la sobrealimentación de los países ricos del Norte y una
gran presión sobre los recursos, que es también una presión sobre el espacio: las poblaciones se desplazan de sus zonas
de origen en busca de lugares más seguros o más respetuosos con los derechos humanos, y con mejores condiciones de
vida, abandonado el campo por la ciudad o persiguiendo en los países desarrollados el bienestar que no encuentran en
los suyos de origen. Así, en 1990, la mayoría de la gente vivía en zonas rurales; en el 2030 la población urbana será el
doble de la rural; en el año 2000, pese a algunos signos de desaceleración, 21 ciudades tendrán más de 10 millones de
habitantes y de ellas 17 estarán en países en desarrollo.

En el ámbito internacional, la mayor parte de las migraciones se están produciendo desde los países del Sur países
jóvenes con un elevado crecimiento demográfico y bajo nivel de vida hacia los países del Norte, con una población
envejecida, escaso o nulo crecimiento demográfico y alto nivel de vida, pero que se resisten a compartirlo encerrándose
en sus fronteras- castillos. Más de 60 millones de ciudadanos de países pobres pueden estar en disposición de "invadir"
los países ricos en busca de recursos, con un flujo actual ya de más de 2 millones de inmigrantes al año. Se estima en
más de 125 millones de personas los migrantes internacionales en todo el mundo, la mitad de ellos en países en
desarrollo.

LA POBREZA EN EL MUNDO EN DESARROLLO

Porcentaje de la población por


Nº de personas pobres (mill.)
debajo del umbral de pobreza

Regiones 1985 1990 2000 1985 1990 2000


Todos los países en desarrollo 30,5 29,7 24,1 1,051 1,133 1,107
Asia Meridional 51,8 49,0 36,9 532 562 511
Asia Oriental 13,2 11,3 4,2 182 169 73
Africa (al Sur del Sahara) 47,6 47,8 49,7 184 216 304
Oriente Medio y Norte de Africa 30,6 33,1 30,6 60 73 89
Europa Oriental (a) 7,1 7,1 5,8 5 5 4
America Latina y El Caribe 22,4 25,5 24,9 87 108 126
(a) No incluye a la antigua URSS.

Fuente: Ravallion, Datt y Chen, 1992. (Tomado de "Informe sobre el Desarrollo Mundial 1992" Washington. Banco Mundial-1992)

Hacia un nuevo modelo de desarrollo sostenible


Hacer frente a los problemas hasta aquí descritos requiere un análisis y unas soluciones que van bastante más allá de lo
meramente demográfico. No cabe cargar toda la "culpa" sobre el crecimiento poblacional, si bien éste deba ser
controlado, sino que hay que revisar el modelo productivista y consumista en que vivimos. La población está influída
por factores sociales, culturales, económicos, etc. y, a su vez, los influye; es al tiempo, causa y efecto; las
interrelaciones son continuas. Existe hoy un amplio consenso en considerar que la pobreza persistente y generalizada y
las graves desigualdades sociales y económicas entre países ricos y pobres, entre mujeres y hombres, tienen una gran
influencia en el comportamiento demográfico y en que, a su vez, éste repercute de modo importante en el estado del
medio ambiente y, en fin, en el ritmo y la calidad del desarrollo económico y social.

La riqueza despilfarradora de una pequeña parte de la población mundial frente a la pobreza extrema de una gran parte
son elementos importantes del problema ambiental; la actitud depredadora presiona sobre los recursos del mundo
occidental pero también sobre los países en vías de desarrollo, convertidos en áreas de suministro de materias primas,
en fuente de mano de obra y en vertedero de residuos tóxicos, al tiempo que, en estos, la pobreza contribuye a un
crecimiento demográfico explosivo y a una gran presión sobre los recursos. Debe así atenderse a las causas profundas
de estos fenómenos, en cuya base se encuentra un modelo económico el de la sociedad de consumo propio de los países
industrializados cuya generalización produciría su propio colapso. Si todos los países se comportaran como países
desarrollados, con sus altos consumos y producción de desechos, seguramente ninguno podría seguir siéndolo; la
capacidad de carga de la tierra no lo resistiría. Habrá que repartir mejor para crecer juntos.

Es necesario, por tanto, caminar hacia un nuevo modelo de desarrollo que vaya más allá del simple crecimiento
económico y que aproxime, y no distancie, al mundo desarrollado y a los países en vías de desarrollo; un desarrollo que
no sobrepase las posibilidades de renovación de los recursos y que sea solidario con las generaciones presentes y con
las futuras. Se trata de un desarrollo que se ha dado en llamar "Desarrollo Sostenible".

Pero, ¿cómo alcanzar ese modelo? ¿Qué se está haciendo?


La transición hacia un sistema sostenible ha sido analizada en algunos estudios (MEADOWS, MEADOWS &
RANDERS, 1992), combinando la situación de la población y de los recursos con las demandas económicas, la
tecnología y otros factores en el horizonte del año 2000 y del 2100; en ellos se comprueba que existen relaciones
recíprocas inevitables entre la cantidad de personas que la tierra puede soportar y el nivel de vida material a que pueden
aspirar; y las cifras varían en función de la modificación de los distintos elementos que intervienen, todos los cuales
deben, pues, ser atendidos.

La necesidad de políticas adecuadas de regulación demográfica, se ha puesto de manifiesto desde hace tiempo en las
Conferencias mundiales de población convocadas por la ONU. En ellas (Roma 1954, Belgrado 1965, y sobre todo
Bucarest 1974, México 1984, El Cairo 1994) se han dado posiciones enfrentadas, pero, en la actualidad, se aceptan
políticas de planificación, ya aplicadas en distintos países, aunque relacionadas con otras actuaciones. En El Cairo se
consiguió un acuerdo internacional entre 180 países para universalizar estas políticas antes del año 2015, a fin de
estabilizar la población mundial en 8000 millones de personas (2025), lo que depende en gran medida de la aplicación
de políticas de salud e información reproductiva y del acceso de la mujer a la educación.

La erradicación de la pobreza extrema es también una de las prioridades del PNUD (Programa de Naciones Unidas para
el Desarrollo), considerándose factible en los dos primeros decenios del s. XXI. El "Informe sobre el Desarrollo
Humano 1997", señala algunas de las acciones necesarias.

Pero en el transfondo de todo ello está siempre el orden económico internacional y la necesidad de cambiar algunas
reglas de juego injustas, como el reparto de la riqueza y otras que acentúan los desequilibrios Norte-Sur y mantienen en
situación de pobreza a millones de personas. Por eso las Propuestas de Acción de recientes conferencias internacionales
plantean todas estas cuestiones de forma interrelacionada, así el Programa 21 de la Cumbre de Río de Janeiro (1992) o
los 15 Principios en que se despliega el Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el
Desarrollo (El Cairo, 1994), que considera a la persona el elemento central del desarrollo sostenible.

Muchos países han modificado sus políticas para incorporar este enfoque, enfatizando las cuestiones de salud y
derechos sexuales, de reproducción y de género. La Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer (Beijing, 1995) acentuó
aún más este proceso. El reciente informe sobre el "Estado de la Población Mundial" de la ONU (FNUAP, 1997) analiza
las luces y las sombras de este programa.

Todos los países deben reconocer sus responsabilidades en este sentido, pero a los desarrollados incumbe un especial
esfuerzo por promover el desarrollo y reducir los desequilibrios mundiales.
Población y recursos
La preocupación por los efectos de la población
sobre el medio ambiente y la disponibilidad de
recursos crece si tenemos en cuenta que la explosión
demográfica coexiste con un modelo socioeconómico
que propicia otra explosión no menos importante, la
del consumo, masivo ya en las sociedades
industrializadas, y que favorece situaciones de grave
desigualdad, en la que el 20% rico de la población
mundial se reparte el 80% de los recursos.

Ambas cuestiones, explosión demográfica y


explosión del consumo no pueden, pues, considerarse
por separado ni aislarse de los modelos de desarrollo
que se planteen; por ello, es necesario afrontar la
cuestión desde ambos aspectos, población y recursos,
y buscar modelos de desarrollo más justos.

Pobreza y Migración. La brecha Norte-Sur


La brecha que separa a los países desarrollados del Norte de los del Sur en desarrollo ha
aumentado en las últimas décadas. Pero, a su vez, el Norte tiene dentro su propio Sur sus
marginados y el Sur, dentro del cual se manifiestan también crecientes desigualdades, su
propio Norte- sus potentados. Los niveles de riqueza y pobreza, y la dinámica poblacional son
dos buenos indicadores de esta situación.

Más de una quinta parte de la humanidad vive todavía en unas condiciones extremas. El
gráfico nos ilustra sobre las dimensiones y evolución de la pobreza en los países en desarrollo,
observándose en él algunas mejoras globales, pero con una distribución muy desigual. En los
países asiáticos, con algunas excepciones, la situación está mejorando, pero todos los
indicadores de pobreza empeoraron en el África, al Sur del Sahara y en América Latina y, en
menor medida, en otras zonas. Las desigualdades se manifiestan también entre sexos y
edades: el mayor porcentaje de pobres se da entre las mujeres y casi los dos tercios de la
población por debajo de los umbrales de pobreza tiene menos de 15 años.

Esta situación significa un fuerte contraste con el despilfarro y la sobrealimentación de los


países ricos del Norte y una gran presión sobre los recursos, que es también una presión sobre
el espacio: las poblaciones se desplazan de sus zonas de origen en busca de lugares más
seguros o más respetuosos con los derechos humanos, y con mejores condiciones de vida,
abandonado el campo por la ciudad o persiguiendo en los países desarrollados el bienestar que
no encuentran en los suyos de origen. Así, en 1990, la mayoría de la gente vivía en zonas
rurales; en el 2030 la población urbana será el doble de la rural; en el año 2000, pese a
algunos signos de desaceleración, 21 ciudades tendrán más de 10 millones de habitantes y de
ellas 17 estarán en países en desarrollo.

En el ámbito internacional, la mayor parte de las migraciones se están produciendo desde los
países del Sur países jóvenes con un elevado crecimiento demográfico y bajo nivel de vida
hacia los países del Norte, con una población envejecida, escaso o nulo crecimiento
demográfico y alto nivel de vida, pero que se resisten a compartirlo encerrándose en sus
fronteras- castillos. Más de 60 millones de ciudadanos de países pobres pueden estar en
disposición de "invadir" los países ricos en busca de recursos, con un flujo actual ya de más de
2 millones de inmigrantes al año. Se estima en más de 125 millones de personas los migrantes
internacionales en todo el mundo, la mitad de ellos en países en desarrollo.

Hacia un nuevo modelo de desarrollo sostenible


Hacer frente a los problemas hasta aquí descritos requiere un análisis y unas soluciones que
van bastante más allá de lo meramente demográfico. No cabe cargar toda la "culpa" sobre el
crecimiento poblacional, si bien éste deba ser controlado, sino que hay que revisar el modelo
productivista y consumista en que vivimos. La población está influída por factores sociales,
culturales, económicos, etc. y, a su vez, los influye; es al tiempo, causa y efecto; las
interrelaciones son continuas. Existe hoy un amplio consenso en considerar que la pobreza
persistente y generalizada y las graves desigualdades sociales y económicas entre países ricos
y pobres, entre mujeres y hombres, tienen una gran influencia en el comportamiento
demográfico y en que, a su vez, éste repercute de modo importante en el estado del medio
ambiente y, en fin, en el ritmo y la calidad del desarrollo económico y social.

La riqueza despilfarradora de una pequeña parte de la población mundial frente a la pobreza


extrema de una gran parte son elementos importantes del problema ambiental; la actitud
depredadora presiona sobre los recursos del mundo occidental pero también sobre los países
en vías de desarrollo, convertidos en áreas de suministro de materias primas, en fuente de
mano de obra y en vertedero de residuos tóxicos, al tiempo que, en estos, la pobreza
contribuye a un crecimiento demográfico explosivo y a una gran presión sobre los recursos.
Debe así atenderse a las causas profundas de estos fenómenos, en cuya base se encuentra un
modelo económico el de la sociedad de consumo propio de los países industrializados cuya
generalización produciría su propio colapso. Si todos los países se comportaran como países
desarrollados, con sus altos consumos y producción de desechos, seguramente ninguno podría
seguir siéndolo; la capacidad de carga de la tierra no lo resistiría. Habrá que repartir mejor
para crecer juntos.

Es necesario, por tanto, caminar hacia un nuevo modelo de desarrollo que vaya más allá del
simple crecimiento económico y que aproxime, y no distancie, al mundo desarrollado y a los
países en vías de desarrollo; un desarrollo que no sobrepase las posibilidades de renovación de
los recursos y que sea solidario con las generaciones presentes y con las futuras. Se trata de
un desarrollo que se ha dado en llamar "Desarrollo Sostenible".

Pero, ¿cómo alcanzar ese modelo? ¿Qué se está haciendo?


La transición hacia un sistema sostenible ha sido analizada en algunos estudios (MEADOWS,
MEADOWS & RANDERS, 1992), combinando la situación de la población y de los recursos con
las demandas económicas, la tecnología y otros factores en el horizonte del año 2000 y del
2100; en ellos se comprueba que existen relaciones recíprocas inevitables entre la cantidad de
personas que la tierra puede soportar y el nivel de vida material a que pueden aspirar; y las
cifras varían en función de la modificación de los distintos elementos que intervienen, todos los
cuales deben, pues, ser atendidos.

La necesidad de políticas adecuadas de regulación demográfica, se ha puesto de manifiesto


desde hace tiempo en las Conferencias mundiales de población convocadas por la ONU. En
ellas (Roma 1954, Belgrado 1965, y sobre todo Bucarest 1974, México 1984, El Cairo 1994) se
han dado posiciones enfrentadas, pero, en la actualidad, se aceptan políticas de planificación,
ya aplicadas en distintos países, aunque relacionadas con otras actuaciones. En El Cairo se
consiguió un acuerdo internacional entre 180 países para universalizar estas políticas antes del
año 2015, a fin de estabilizar la población mundial en 8000 millones de personas (2025), lo
que depende en gran medida de la aplicación de políticas de salud e información reproductiva
y del acceso de la mujer a la educación.

La erradicación de la pobreza extrema es también una de las prioridades del PNUD (Programa
de Naciones Unidas para el Desarrollo), considerándose factible en los dos primeros decenios
del s. XXI. El "Informe sobre el Desarrollo Humano 1997", señala algunas de las acciones
necesarias.

Pero en el transfondo de todo ello está siempre el orden económico internacional y la


necesidad de cambiar algunas reglas de juego injustas, como el reparto de la riqueza y otras
que acentúan los desequilibrios Norte-Sur y mantienen en situación de pobreza a millones de
personas. Por eso las Propuestas de Acción de recientes conferencias internacionales plantean
todas estas cuestiones de forma interrelacionada, así el Programa 21 de la Cumbre de Río de
Janeiro (1992) o los 15 Principios en que se despliega el Programa de Acción de la Conferencia
Internacional sobre la Población y el Desarrollo (El Cairo, 1994), que considera a la persona el
elemento central del desarrollo sostenible.

Muchos países han modificado sus políticas para incorporar este enfoque, enfatizando las
cuestiones de salud y derechos sexuales, de reproducción y de género. La Cuarta Conferencia
Mundial sobre la Mujer (Beijing, 1995) acentuó aún más este proceso. El reciente informe
sobre el "Estado de la Población Mundial" de la ONU (FNUAP, 1997) analiza las luces y las
sombras de este programa.

Todos los países deben reconocer sus responsabilidades en este sentido, pero a los
desarrollados incumbe un especial esfuerzo por promover el desarrollo y reducir los
desequilibrios mundiales.

Bibliografía

• "Nuestro futuro común". Comisión Mundial del Medio Ambiente y el Desarrollo. (1988) Alianza.

• "La explosión demográfica". Ehrlich, P.R. y A.H. (1993). Barcelona. Salvat.

• "Estado de la población mundial (1997)". FNUAP. Naciones Unidas. Nueva York, (1997) (varios años)
• "Más allá de los límites del crecimiento". Meadows, D. et al. (1992). El País/Aguilar. Madrid.
• "Los desequilibrios demográficos". Novo, M. (1993). UNED/Fundación Universidad-Empresa. Madrid.
• "Río 92. Textos y Documentos". ONU. Conferencia de las naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el
Desarrollo. Madrid. MOPT. 1993
• "Informe de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo". ONU. El Cairo. 5/13
septiembre, 1994
• "Informe sobre el desarrollo humano. 1997". PNUD. Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. Nueva
York, 1997 (varios años)
• "Los grandes problemas actuales de la población". Pujol, R. et al. (1993). Síntesis, Madrid.

• "La situación en el mundo". Worldwatch Institute. Madrid, 1997 (varios años)

Educación Ambiental Formal


Autor: Evaristo Subijana Salazar.
(CEIDA. Vitoria-Gasteiz)

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

E.A. y contenidos transversales del currículo


Uno de los aspectos más destacados del nuevo sistema educativo es la incorporación en el currículo de las llamadas
Líneas Transversales, entre las cuales se encuentra la Educación Ambiental (EA). La inclusión de estos contenidos
transversales se justifica, entre otros motivos, por la necesidad de relacionar las vivencias del alumno o la alumna con
sus experiencias escolares, mediante la introducción en los currículos de una serie de temas que están "vivos" en la
sociedad y que, por su importancia y trascendencia, en el presente y en el futuro, requieren una respuesta educativa.
Además, a pesar de que las Líneas Transversales se presenten separadamente, sus objetivos son convergentes y en ellos
subyace un modelo común que debería constituir la base de una educación integral centrada en los valores. Son, pues,
temas que entroncan con una base ética, tanto a nivel social como personal, que resulta fundamental para &laqno;un
proyecto de sociedad más libre y pacífica, más respetuosa hacia las personas y hacia la propia naturaleza que constituye
el entorno de la sociedad humana».

VIDA ESCOLAR Y EDUCACION


Adecuación de
AMBIENTAL
contenidos y
metodología Gestión adecuada de los
recursos del centro
Relaciones de
colaboración entre
personas y estamentos
de la comunidad Organización de un
escolar sistema de relaciones
con la comunidad
Cuidado de la calidad
del entorno físico

Se pretende con ello incorporar al currículo una serie de contenidos de enseñanza no contemplados en exclusividad por
las diversas disciplinas académicas, sino que pueden estar asociados a todas (o a muchas de ellas), como es el caso de la
Educación Ambiental. Este carácter transversal aporta una manera, diferente a la tradicional, de entender las relaciones
entre los conocimientos disciplinares y los problemas ambientales. Según esto, los contenidos de las diferentes áreas
curriculares han de ser analizados y formulados teniendo en cuenta las finalidades educativas, especialmente de carácter
procedimental y actitudinal, derivadas de los grandes problemas ambientales.

Desde la transversalidad, la integración de la EA en el currículo requiere la elaboración de una perspectiva que


considere lo ambiental como un principio didáctico, es decir, como una dimensión que ha de estar siempre presente en
la toma de decisiones respecto a cualquier elemento curricular. Esto conlleva la elaboración de un marco teórico de
referencia basado en una triple perspectiva:

• perspectiva epistemológica sistémica y compleja, válida no sólo para la comprensión del medio y de la
propia realidad escolar, sino también para la caracterización del conocimiento escolar como organizado,
relativo y procesual.
• perspectiva constructivista, que nos orienta sobre las condiciones que favorecen el aprendizaje significativo;
• perspectiva ideológica crítica, que busca enriquecer y complejizar el conocimiento cotidiano mediante un
proceso de negociación social basado en la comunicación y la cooperación.

Por otra parte, el desarrollo de la EA requiere contemplar no sólo elementos científicos y tecnológicos, sino también
éticos. Los primeros nos ayudarán a comprender los fenómenos y a buscar soluciones a los problemas, mientras los
segundos nos permitirán realizar una gestión correcta del medio ambiente, aun cuando no conozcamos científicamente
todas y cada una de las relaciones causa-efecto que producimos. Y para todo ello han de entrar en juego
posicionamientos éticos que conllevan valores como equidad, solidaridad, cooperación, responsabilidad en el uso de los
recursos, respeto por la diversidad biológica y cultural...

Diseño y desarrollo de programas de Educación Ambiental en el centro


En el ámbito que estamos contemplando, un Programa de EA es la exposición general de intenciones, estrategias y
acciones que una comunidad educativa desea emprender para desarrollar coherentemente la acción educativa ambiental
en su contexto escolar.

Un aspecto fundamental de un Programa de EA es su dimensión estratégica, pues no sólo ha de manifestar las


intenciones que lo mueven sino que ha de establecer, de forma sistemática, las vías a través de las cuales pretende
conseguir sus finalidades en el contexto para el que está diseñado. Esta implicación en el contexto requiere considerar a
éste no sólo como un &laqno;medio para el aprendizaje» sino también como un &laqno;ámbito de vida», por lo que ha
de salir al paso de las necesidades reales y los retos que esa comunidad educativa tiene planteados.

El Programa, para que sea viable, ha de ser coherente con los planteamientos recogidos en el Proyecto Educativo de
Centro, tanto en lo relativo al análisis del contexto como a las metas que se proponen y a los aspectos organizativos y de
funcionamiento. Además, el Programa es un sistema que puede estar constituído por varios Proyectos que funcionan
como subsistemas, por lo que éstos han de cumplir las condiciones mínimas de coherencia (cohesión entre los objetivos,
contenidos y actividades, congruencia entre los métodos utilizados, adecuación al nivel del alumnado, etc.) que el
Programa como tal requiere.

Así, el Programa cumplirá una función organizativa, favoreciendo la planificación educativa, mientras que los
Proyectos funcionarán como concreciones del Proyecto Curricular referidas a temas específicos (problemas o centros de
interés ambientales: pérdida de biodiversidad, energía, residuos, agua, desarrollo, etc.), presentándose frecuentemente
como unidades didácticas a desarrollar en determinados cursos. En el desarrollo de los Programas puede intervenir toda
la comunidad educativa, aunque lo más frecuente es que sea el trabajo de un grupo docente de una etapa o ciclo
concreto, y pueden requerir la colaboración de agentes externos (asesores o asesoras, agentes sociales diversos, etc.). De
cualquier forma, los diseños de los Programas han de contemplarse como hipótesis de trabajo que guiarán la acción
educativa, siendo susceptibles de cuantos ajustes y cambios requiera el proceso de su desarrollo.

ESCUELA ECOLOGICA

"La modificación del comportamiento que se requiere


necesita un 'ambiente educativo' en el medio escolar y
extraescolar Se trata de hacer del medio escolar un
ejemplo de lo que podría ser un medio ambiente, de la
manera en que sería conveniente protegerlo, mejorarlo
y sanearlo para crear al final generaciones de
ciudadanos conscientes de su medio ambiente"
(UNESCO-PNUMA). Hacer consciente a la comunidad
educativa de esta idea es fundamental para conseguir -
en y desde el centro educativo unas actuaciones más
respetuosas con el medio ambiente. Así, el centro será
un importante recurso para la educación ambiental, a
la vez que un campo de acción privilegiado para
ponerla en práctica.

Sugerencias metodológicas, recursos e instrumentos didácticos


La elección de los métodos, así como los medios, no es algo banal, pues son parte importante del mensaje que captan
las personas que aprenden. El modelo metodológico deseable debería resultar adecuado a los procesos de aprendizaje
significativo de alumnos y alumnas, además de permitir abordar, de manera no forzada ni artificiosa, el estudio de las
problemáticas ambientales. Estas características se dan en un modelo de metodología basado en la investigación del
alumno o de la alumna (y del profesor o de la profesora), entendida ésta como un proceso de tratamiento de problemas
relacionados con el medio ambiente. Todo ello vendrá condicionado por las características del grupo (edad, madurez,
perfil cultural, etc.), sus concepciones y las disponibilidades de recursos susceptibles de ser utilizados como fuentes de
nuevas informaciones y contraste con las ideas del alumnado. Estas últimas son determinantes en el proceso y pueden
obligar a reformular el problema y/o rediseñar el plan de trabajo puesto en marcha.

El profesor o la profesora, haciendo un uso adecuado de los recursos y las actividades, podrá favorecer la superación de
los obstáculos que vayan apareciendo o, en otros casos, ampliar el campo de intereses del alumnado y promover la
aparición de conflictos en sus esquemas previos. Los recursos didácticos disponibles en EA son muy variados:
• el aula, con sus factores ambientales y materiales de uso colectivo (publicaciones y materiales de tipo
audiovisual, gráfico, interactivo, o informático);
• el centro escolar, considerado en sí mismo como un sistema cuyos componentes impregnan de mensajes todo
el currículo, condicionan las actitudes y comportamientos del alumnado y donde éste puede encontrar modelos
aplicables a su realidad cotidiana y posibilidades de actuación;
• la comunidad, la localidad y el medio externo en general, ámbito donde, además de encontrarse infinidad de
recursos capaces de generar aprendizajes distintos (espacios naturales, itinerarios, equipamientos, museos,
bibliotecas, archivos, factorías, servicios, etc., y profesionales, técnicos o grupos diversos), surgen las
problemáticas ambientales que permiten contextualizar la acción educativa y la intervención del alumnado.

No se puede olvidar, además, que los recursos de EA han de ser coherentes con los principios y objetivos de ésta, en los
planos conceptual, metodológico y ético, además de ajustarse a las necesidades del modelo educativo en el que nos
movemos.

Bibliografía

• "Educar a favor del medio". AA. VV. (1995) Postgrado de Educación Ambiental (1993-94). Vitoria-Gasteiz. Gobierno Vasco.
• "Seminarios permanentes de educación ambiental". AA. VV. (1996) Madrid. Ministerio de Medio Ambiente.
• "Sugerencias para la elaboración de los Proyectos Educativos de Centro desde la perspectiva de la Educación Ambiental". CEIDA-CEEP
(1993) Vitoria-Gasteiz. Gobierno Vasco.
• "Eco-auditoría escolar / Eskola Ekoauditoria". Fernández, A. (1996) Vitoria-Gasteiz. Gobierno Vasco.
• "Principios, objetivos y desarrollo de la Educación Ambiental en la Enseñanza Primaria y Secundaria". García, J.E. y García, F. (1995)
Málaga. Master en Educación Ambiental.
• "La educación ambiental: guía práctica". Giordan, A. y Souchon, CH. (1995) Sevilla. Diada.
• "La educación ambiental. Fundamentos teóricos, propuestas de transversalidad y orientaciones extracurriculares". Gutierrez, J. (1995)
Madrid. La Muralla.
• "Integrando la educación ambiental en el currículo de ciencias". Jiménez Aleixandre, M.P. et al. (1995) Alambique, 6, 9-17.
• "La educación ambiental. Bases éticas, conceptuales y metodológicas". Novo, M. (1995) Madrid. Universitas.
• "La educación ambiental como proyecto". Pardo, A. (1995) Barcelona. ICE-Horsori.

Un ejemplo de experiencia de E. A. en el centro


y en el aula: el Programa Escuela Ecológica
El Programa Escuela Ecológica tiene por objeto el propio centro escolar y su entorno más próximo. El centro escolar
constituye el medio ambiente primordial en el que se realiza la tarea educativa. Es un sistema abierto en el que se
producen unos aportes de materia y energía (agua, materiales diversos, productos químicos, alimentos, electricidad,
combustibles...) que, tras ser utilizados, generan residuos (aguas residuales, basuras) y contaminación. Además,
constituye una estructura social con una organización y un sistema complejo de relaciones, tanto internas como con el
entorno, cuya principal función es dar respuesta a las demandas educativas de esa sociedad en la que está inmersa.
Produce, por tanto, un impacto (ya sea positivo o negativo) en su medio ambiente próximo. Hacer consciente tanto al
alumnado como al profesorado y al resto de elementos de la comunidad educativa de este hecho es el primer paso a fin
de conseguir en y desde el centro educativo unas actuaciones más respetuosas con el medio ambiente. De esta forma, el
centro escolar no sólo será un escenario de la acción educativa medioambiental, sino también un importante recurso
para la misma, favoreciendo la adquisición de conocimientos, valores, comportamientos y competencias para contribuir,
desde lo más cercano y significativo, a la solución de los problemas del medio ambiente.

El objetivo de Escuela Ecológica es implicar a todos los estamentos de la comunidad educativa para que este ámbito de
experiencias y aprendizaje resulte coherente con los principios de la EA. Las actuaciones pretenden mejorar la calidad
ambiental del centro como sistema y sus relaciones con el entorno, incidiendo tanto en sus elementos físicos (espacios,
decoración, etc.) como en los aspectos pedagógicos, estructurales, organizativos o de funcionamiento, y en la propia
&laqno;cultura» escolar.

En consecuencia, este Programa plantea realizar -siguiendo un esquema similar al de una ecoauditoría convencional- un
análisis de la situación del centro desde el punto de vista medioambiental.

Los ámbitos de actuación que se proponen son los siguientes:

• El medio físico, tanto en lo relativo al propio recinto del centro como a su entorno exterior.
• El transporte.
• El uso de los recursos: agua, energía, papel, productos químicos y de limpieza, otros materiales fungibles, etc.
• El clima del centro, prestando atención a las principales variables que lo configuran: comportamentales
(individuales y de grupo) y organizativas (la estructura, los recursos y condiciones materiales o el estilo de
funcionamiento de la organización).
• La cultura escolar, entendida como la confluencia de todos los elementos del sistema relacional del centro: la
comunicación, la participación, los conflictos, el estilo directivo y el clima como procesos interactivos que
generan un entramado o tejido de creencias, supuestos, valores y ritos compartidos.
• La práctica didáctica: la ambientalización del currículo, la selección, secuenciación y organización de
contenidos, la metodología, los recursos didácticos, la evaluación

El Programa se inicia con la recopilación de información y documentación de alguno/s (o todos) de los ámbitos
anteriores sobre los que se quiere incidir. A partir de ella se realiza la revisión inicial del centro, lo que permite definir
unos objetivos de mejora en base a los cuales establecer un plan de actuación; una vez puesto en práctica éste, se
realizará su seguimiento y, posteriormente, su evaluación. De todo este proceso se realizará un informe, en el que se
fundamentará la formulación de nuevos objetivos de mejora y las correcciones que el proceso en su conjunto requiera.
Se establece de esta forma un proceso continuo de mejora en el que va aumentando progresivamente la sensibilización,
concienciación, compromiso, capacitación y participación medioambiental de los distintos elementos de la comunidad
educativa implicados, impregnándose de ambientalismo la cultura de la institución; al mismo tiempo, se va logrando
una mayor calidad ambiental del centro y aumentando la coherencia entre los planteamientos y las actuaciones, así
como la cohesión interna de la organización.

Bibliografía

• "Educar a favor del medio". AA. VV. (1995) Postgrado de Educación Ambiental (1993-94). Vitoria-Gasteiz. Gobierno Vasco.
• "Seminarios permanentes de educación ambiental". AA. VV. (1996) Madrid. Ministerio de Medio Ambiente.
• "Sugerencias para la elaboración de los Proyectos Educativos de Centro desde la perspectiva de la Educación Ambiental". CEIDA-CEEP
(1993) Vitoria-Gasteiz. Gobierno Vasco.
• "Eco-auditoría escolar / Eskola Ekoauditoria". Fernández, A. (1996) Vitoria-Gasteiz. Gobierno Vasco.
• "Principios, objetivos y desarrollo de la Educación Ambiental en la Enseñanza Primaria y Secundaria". García, J.E. y García, F. (1995)
Málaga. Master en Educación Ambiental.
• "La educación ambiental: guía práctica". Giordan, A. y Souchon, CH. (1995) Sevilla. Diada.
• "La educación ambiental. Fundamentos teóricos, propuestas de transversalidad y orientaciones extracurriculares". Gutierrez, J. (1995)
Madrid. La Muralla.
• "Integrando la educación ambiental en el currículo de ciencias". Jiménez Aleixandre, M.P. et al. (1995) Alambique, 6, 9-17.
• "La educación ambiental. Bases éticas, conceptuales y metodológicas". Novo, M. (1995) Madrid. Universitas.
• "La educación ambiental como proyecto". Pardo, A. (1995) Barcelona. ICE-Horsori.
Educación Ambiental
No Formal
Autor: Mª Mar Asunción y Enrique Segovia.
(Dpto. E.A. WWF/ADENA)

Dirección: José Félix Martínez Huerta

Coordinación: Marta Ruíz Cerrillo

Se necesitan nuevos conocimientos, valores y aptitudes a todos los niveles y para


todos los elementos de la sociedad. Para este fin nos educaremos a nosotros
mismos, a nuestras comunidades y a nuestras naciones"

Declaración de la Tierra de los Pueblos.

Foro Río 92

Todo el proceso educativo debe desembocar


en la acción positiva sobre el entorno

FINALIDAD DE LA EDUCACION AMBIENTAL NO FORMAL


La finalidad de la educación ambiental no formal es pasar de personas no sensibilizadas a personas informadas,
sensibilizadas y dispuestas a participar en la resolución de los problemas ambientales. Sin embargo, no podemos esperar
que de la mera adquisición de información se derive necesariamente un cambio de conducta. Parece suficientemente
demostrado que las relaciones entre conocimientos, actitudes y comportamientos no son causa-efecto aunque sí se
influyen mutuamente. Debemos, por lo tanto, planificar actividades específicas para trabajar las actitudes y los
comportamientos.

Hablar de Educación Ambiental significa hablar de conocimientos, aptitudes, valores, actitudes


y acciones. De todos ellos, los valores juegan un importante papel, ya que a través de éstos
los conocimientos y aptitudes pueden transformarse en actitudes y acciones, elementos claves
en la Educación Ambiental no Formal. Los ámbitos donde los adquirimos son principalmente la
escuela, la familia y la sociedad.

Definición
Entendemos por Educación Ambiental no Formal la transmisión (planificada o no) de
conocimientos, aptitudes y valores ambientales, fuera del Sistema Educativo institucional, que
conlleve la adopción de actitudes positivas hacia el medio natural y social, que se traduzcan en
acciones de cuidado y respeto por la diversidad biológica y cultural, y que fomenten la
solidaridad intra e intergeneracional.

En esta definición se incluye también lo que algunos definen como Educación Informal, para
referirse a aquellos conocimientos, aptitudes y valores que se transmiten de manera no
planificada o involuntaria, ya que consideramos que hacer explícitas las premisas éticas de los
agentes sociales ( gobiernos, empresas, religiones, medios de comunicación...), podría
contribuir al esclarecimiento de la situación actual, y sentar bases de partida más sólidas y
reales a la hora de planificar actuaciones.

Como puede apreciarse, en esta definición se contemplan también factores sociales y de


desarrollo. La conferencia de las Naciones Unidas (Río 92) puso de manifiesto que ya no es
posible separar Medio Ambiente y Desarrollo. La E.A. de los años 90 debe contemplar la
redefinición de conceptos como desarrollo, progreso y bienestar social.

La E.A. no es neutra, sino ideológica, ya que está basada en valores para la transformación
social.

Destinatarios:
Los destinatarios de la Educación Ambiental No Formal son toda la población, exceptuando las
instituciones educativas (colegios, institutos, y universidades) que son objeto de la Educación
Ambiental Formal.

Para optimizar las actuaciones emprendidas es necesario seleccionar destinatarios concretos


para cada tema, y ajustar los mensajes y estrategias a los distintos colectivos. Algunos de los
grupos objeto de la E.A. No Formal son : consumidores, jóvenes, políticos, empresarios,
sectores profesionales, etc.

Es interesante buscar alianzas con asociaciones o colectivos que podrían actuar como
amplificadores de los contenidos ambientales incorporándolos en sus programas. Los
denominamos destinatarios intermedios, e incluímos en esta categoría a líderes religiosos,
líderes de opinión, asociaciones, sindicatos, medios de comunicación etc.

HACIA DONDE DEBE IR LA EDUCACION AMBIENTAL NO FORMAL


FACTORES SOBRE SITUACIÓN HACIA DÓNDE HAY QUE TENDER
LOS QUE ACTUAR
Gran cantidad de información Para la toma de conciencia se necesita además la
ambiental. construcción de nuevas maneras de ver y analizar los
CONOCIMIENTOS Y problemas
APTITUDES:
No toda es de calidad
VALORES DE LA E.A.
necesarios pero no suficientes.
Desigualdad en la distribución
Espíritu crítico, responsabilidad, tolerancia, respeto por
VALORES: todas las formas de vida, simplicidad, la coherencia,
La sociedad moldea constantemente espíritu participativo y solidario
nuestro sistema de valores.
claves del cambio, pero difíciles
de cambiar Emplear centros de interés reales, próximos y localizados
Valores predominantes en nuestra que despierten el interés de los destinatarios así como
sociedad: individualismo, consumismo y diseñar acciones concretas que estos puedan realizar.
ACTITUDES Y ACCIONES: utilitarismo
tan importante es el fin como el
proceso Preparar programas positivos, que fomenten la
Existe una inercia de la sociedad que participación
produce resistencia al cambio

Algunos objetivos de la E.A. no formal


• Fomentar la participación e implicación en la toma de decisiones, la capacidad de
liderazgo personal y el paso a la acción. Entendemos la capacitación no sólo como
adquisición de técnicas, sino también como compromiso de participación.
• Pasar de pensamientos y sentimientos a la acción.
• Promover la cooperación y el diálogo entre individuos e instituciones.
• Promover diferentes maneras de ver las cosas; facilitar el intercambio de puntos de
vista.
• Crear un estado de opinión
• Preparar para los cambios
• Estimular y apoyar la creación y el fortalecimiento de redes.

Tipos de actuaciones en la E. A. no formal


Nota: no hemos pretendido hacer una tipología de actuaciones, tan sólo recoger grupos de
actividades que se pueden englobar en la Educación Ambiental no Formal.

Actividades de ocio y tiempo libre: Cada vez con mayor auge. Englobamos las siguientes
actividades: vacaciones con niños y jóvenes, como campamentos o actividades de verano en la
naturaleza; actividades extraescolares, principalmente en equipamientos específicos para ello;
turismo rural, con todos sus componentes: cultural, ecológico, etc.

Campañas de Presión política: Son aquellas dirigidas a responsables para que emprendan
reformas políticas o legislativas que conlleven una mejora ambiental. Suelen basarse en
informes elaborados por Asociaciones o colectivos sociales que ponen de manifiesto la
necesidad de tomar medidas. Incluyen actuaciones como envíos de cartas o tarjetas a
autoridades o empresas, manifestaciones, etc.

Campañas de sensibilización sobre el consumo: Se incluyen actuaciones encaminadas a


informar a los consumidores de la repercusión que tiene determinado tipo de productos sobre
el medio ambiente. Incluyen llamadas a la participación ciudadana en materia de ahorro de
recursos y energía, reciclaje etc. Pueden incluso llegar a promover el boicot a determinados
productos. Generalmente van acompañadas de material informativo (folletos, carteles,
anuncios). Suelen tener repercusión en los medios de comunicación.

Campañas sobre problemas ambientales coyunturales o estacionales: Aquí se recogen


actuaciones de sensibilización sobre problemas que se producen estacionalmente (incendios
forestales), o aquellas en las que por causas de oportunidad (catástrofe ambiental,
convenciones internacionales etc.), interesa recoger y canalizar el apoyo de la población.
Grupos de trabajo mixtos: Es interesante promover grupos de trabajo sobre determinados
temas con sectores sociales relevantes (líderes religiosos, sindicatos, empresarios...) para
tratar de acercar posturas que conlleven la incorporación de valores ambientales en sus
códigos de conducta.

Información en Medios de comunicación: Televisión, radio, prensa diaria semanal


especializada, nuevas tecnologías como CD Rom, Internet y otras autopistas de la información,
etc. Cada vez con un papel más importante en la educación o deseducación ambiental. Son
vehículos para llegar a mucha gente a la vez, y por consiguiente con mensajes cortos y
sencillos. Muy copados por los periodistas es difícil encontrar, aunque existen, programas de
corte ambiental con algo más que mera información ambiental. Poco trabajados, quizá muchas
veces por lo costoso que es, sin embargo pueden llegar a tener una gran importancia para la
transmisión de ciertos valores y el fomento de acciones concretas de respeto hacia el medio
ambiente.

Interpretación ambiental: Se dirige al público en general con mensajes en relación al


entorno, en contacto directo con él, y en los momentos de ocio o vacaciones. Tiene unos
componentes muy claros: es una comunicación atractiva, ofrece una información concisa, es
entregada en presencia del objeto en cuestión. Utiliza muchos recursos y equipamientos;
desde los grandes centros de interpretación en espacios naturales protegidos, a los itinerarios
interpretativos autoguiados ; desde las aulas de naturaleza hasta los guías de naturaleza.

Jornadas, cursillos, mesas redondas dirigidas a determinados sectores de la población:


profesionales de distintos ámbitos, empresarios, vecinos, estudiantes, etc. Pueden tratar sobre
problemática ambiental en general, aunque la tendencia es a centrar más los temas. Son un
foro adecuado para exponer distintos puntos de vista, y es recomendable que sean abiertas a
las aportaciones de los destinatarios.

Participación
TIPOS DE PARTICIPACION
La participación es otro tipo de actuación de
Educación Ambiental no formal, que está
despertando con fuerza en nuestro país. También PARTICIPACION FORZADA
puede considerarse el resultado final de todas las
demás. Por su importancia hemos decidido ampliar Las autoridades tratan de imponer a los usuarios
más la información sobre este punto. una forma de comportarse frente al medio
ambiente.
Entendemos como participación el proceso PARTICIPACION PASIVA
metodológico que queda definido por el fin que
pretende lograr, que es el de conseguir que los Encuestas y sondeos sobre las necesidades y
destinatarios realicen acciones positivas sobre el deseos de las personas, orientadas a informar a las
entorno. autoridades y los gestores de la opinión de la
mayoría, para que las tengan en consideración en
Dentro de estas acciones positivas, la resolución de sus decisiones.
los problemas ambientales, fin último de la PARTICIPACION ESPONTANEA
Educación Ambiental, adquiere todo su sentido e
importancia cuando hablamos de participación. Y la Se produce al margen de los planificadores,
entendemos como un proceso educativo, con cuando un grupo de ciudadanos toma la iniciativa
momentos educativos claros: identificación de para hacerse oir e intenta imponer su voluntad.
problemas, búsqueda de soluciones alternativas,
análisis del cambio viabilidad, actuaciones sobre el
entorno y evaluación.

Una consideración previa que hacemos es que aunque la participación la entendemos como un
proceso metodológico en sí, también puede aparecer como el momento final de otros procesos,
como por ejemplo de investigación del medio dentro de la Educación Ambiental Formal, que
llevan a cerrar esos métodos con una acción directa y positiva y por tanto participativa sobre el
propio entorno, bien sea la propia clase o colegio, el barrio, el municipio, un bosque o un río
cercano, etc.

Algunos ejemplos de participación


Asociaciones de vecinos, experiencias no siempre bien valoradas

Hay muchos ejemplos de acciones de transformación y mejora del espacio cotidiano el barrio,
la calle, la plaza que han sido promovidas por las asociaciones de vecinos, en procesos
participativos muchas veces espontáneos. Estas experiencias, verdaderamente enriquecedoras,
vienen a demostrar cómo es posible solucionar problemas cuando las personas están
sensibilizadas con los mismos y dispuestas a solucionarlos. Se resalta el papel de
sensibilización y toma de conciencia que juegan estas asociaciones vecinales, pero no es
posible hablar de un proceso educativo estructurado y tal vez tampoco es necesario.

Campañas de sensibilización y cambios de hábitos de consumo: puntuales e intensas

En la actualidad hay bastantes campañas y actuaciones, promovidas por diferentes agentes,


desde instituciones a sindicatos y ONGs, que alertan sobre la necesidad de cambiar nuestros
hábitos de consumo para frenar y revertir la degradación ambiental. Muchas inciden en la
participación forzada, sobre todo las procedentes de administraciones todas las campañas de
ahorro de agua. Hay otras que intentan provocar un cambio de actitud incitando a la reflexión
y sensibilización sobre las verdaderas causas de estos problemas y cómo podemos
solucionarlos.

Programas de voluntariado en espacios naturales, incipientes núcleos de


participación

Desde la innovadora experiencia de Collserola en 1991, promovida por el equipo de educación


ambiental del parque, se han venido poniendo en marcha diferentes programas de
voluntariado en espacios naturales, como pueden ser los voluntarios ambientales de la región
de Murcia, promovido por la Consejería de Medio Ambiente; de los espacios naturales
valencianos entre la Consejería de Medio Ambiente y los Centros excursionistas valencianos; o
el programa de voluntariado ambiental promovido por la Consejería de Medio Ambiente de la
Junta de Andalucía. Programas muchos de ellos dirigidos y coordinados por responsables y
técnicos en educación ambiental, las tareas destinadas a los voluntarios son diversas como
limpiezas y señalización de los espacios, restauración, acciones de sensibilización a visitantes,
etc.

Las asociaciones (de consumidores, ecologistas, de desarrollo, por la paz...), la


sociedad civil organizada

Muchas actuaciones en Educación Ambiental no Formal las han desarrollado en los últimos 15
años diferentes asociaciones. También han promovido acciones de participación, muchas veces
forzada imposición de criterios o formas de comportarse ante el medio ambiente, uso de la
palabra y no de la vivencia a la hora de intentar cambiar actitudes, y otras veces verdadera
participación activa realizando y promoviendo análisis de la realidad, detección de problemas,
propuestas de solución y acciones.

Una acción de interés por lo que está suponiendo de cambio para una asociación que lleva casi
30 años de vida, WWF/Adena, es la creación de una red de grupos locales formados por socios
voluntarios. Siguiendo procesos educativos y métodos de animación sociocultural, se están
creando núcleos de participación activa con altos grados de decisión.

Recomendaciones
• Para lograr unos valores y una conducta ambiental positiva, las estrategias de E. A
deben involucrar todos los aspectos de los destinatarios (su inteligencia, sus emociones
y experiencias), todas las cuales son factores que influyen en la predisposición hacia el
compromiso y la acción.
• Mantener la coherencia en todos los aspectos del programa. En Educación Ambiental los
medios y la metodología son tan importantes como los fines.
• Todo el proceso educativo debe desembocar en la acción positiva sobre el entorno de
mejora, de sensibilización, de resolución de problemas, de prevención, etc.
• Aprovechar las campañas publicitarias para nuestros objetivos: Analizar críticamente el
uso de estrategias publicitarias que inducen al consumo irracional. Dar a conocer los
mecanismos de la publicidad y los instrumentos que ayudan a protegerse de sus
efectos.

Bibliografía

• "Tratado sobre educación ambiental para sociedades sustentables y responsabilidad global", en


Construyendo el futuro. Foro internacional de ONG y Movimientos Sociales. Tratados alternativos de Río 92. MOPTMA
(1994).
• "La educación ambiental no formal y la participación ponencia marco" Heras, F. 2as Jornadas de Educación
Ambiental en Castilla y León, Aguilar de Campoo, 3-5 de noviembre de 1994. Junta de Castilla y León, Consejería de
Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. (1996)
• "Guía para la enseñanza de valores ambientales." Caduto, M.J. (1992) Programa Internacional de Educación
Ambiental UNESCO-PNUMA. Junta de Castilla León.
• "Una nova relació amb la natura i amb la gent." L'experiencia dels voluntaris de Collserola. Franquesa T.,
Cervera M. y Espigulé J. (1996) Monografics psico-socio-ambientals. Unviersitat de Barcelona.
• "Guía de actividades para la Educación Ambiental" Franquesa T. et al. (1996) Ministerio de Medio Ambiente.
Madrid.
• "Seminarios permanentes de Educación Ambiental" Ministerio de Medio Ambiental. (1996). Madrid.
• "Manual para comprender "Cuidar la Tierra"". Comisión Española de Educación de la UICN. (1995). Madrid.
MOPTMA
• "Cómo proteger la naturaleza desde nuestra casa" WWF/Adena. Madrid. 1990

• "Revista Ciclos" Gea, nº 1. (1997) Valladolid.

Actividades
o Unidad 1: El cristal con que se mira

o Unidad 2: Rincones vivos

o Unidad 3: Estilo de vida y CO2

o Unidad 4: ¡¡¡Mójate!!!

o Unidad 5: Un pequeño mar de posibilidades pedagógicas

o Unidad 6: A vueltas con la energía


o Unidad 7: Actividades de campo

o Unidad 8: La ciudad vivida

o Unidad 9: Programa educativo en torno a un espacio natural protegido

o Unidad 10: Documentos

o Unidad 11: Un ámbito de trabajo en la Ecoauditoría Escolar: la Energía

o Unidad 12: ¿Cómo organizar una campaña?

UNIDAD 1
El cristal con que se mira

Objetivos

La actividad pretende ayudar a:

entender que las maneras de mirar los hechos y acontecimientos condicionan nuestras
acciones y decisiones.

reflexionar sobre cómo los temas sociales y ambientales dependen de los puntos de
vista.

Actividad

Consiste en un enigma en tres fases, que plantea cómo las perspectivas que tenemos sobre los
hechos y acontecimientos condicionan nuestras acciones y decisiones.

Contexto

"Nada es verdad ni es mentira, todo es según el color del cristal con que se mira".

En cierto sentido cada persona funciona como una lente: recibimos, transmitimos y reflejamos todas
las imágenes estáticas y dinámicas que experimentamos a lo largo de nuestra vida. A menudo
actuamos en función de estas imágenes, bien porque condicionan lo que pensamos, bien porque nos
dan modelos de cómo hacer las cosas y de cómo relacionarnos los unos con los otros.

Cada cultura puede considerarse también como una lente, construida conjuntamente por las
personas y transmitida a lo largo de las generaciones, a través de la cual se delimitan las formas de
vivir y se valora y percibe el entorno donde se vive. Los diferentes colectivos humanos tienen
diferentes culturas, a menudo condicionadas por los ambientes y la disponibilidad de recursos.
También suelen estar condicionadas por la percepción de las generaciones anteriores. Así, por
ejemplo, a nuestros antepasados el mundo les parecía infinito. Pero hace ya unos cuantos siglos que
se descubrió que la Tierra era redonda y esta visión de la Tierra es muy distinta de la que ha estado
vigente durante siglos; antes se creía que era plana y nadie sabía dónde estaban los límites, o ni tan
siquiera se sospechaba que los tuviese. La evidencia de la esfericidad nos aporta un dato
incuestionable: puesto que es redonda, es finita. Y limitada. Y si el planeta es limitado, los recursos
que almacena también lo son. No obstante, los continuamos utilizando como si no lo fueran.

Por otro lado, nuestros antepasados tampoco sabían cuántos seres humanos había en el mundo.
Ahora lo sabemos y sabemos que cada vez somos más, con unos recursos que no crecen y que
consumimos sin plantearnos que son agotables y que están mal repartidos. Esto nos ocurre, en gran
parte, porque no miramos el planeta con perspectiva, sólo enmarcamos una parte de la imagen. Así,
vemos nítidamente nuestro entorno inmediato, la porción del mundo donde vive una quinta parte de
la población mundial, aquella que goza de una vida cotidiana confortable, con disponibilidad y
abundancia de alimentos, servicios y productos, quizás con la sensación de que todo va bien y de
que no existe ninguna razón para preocuparse.

Pero si enfocamos hacia donde viven las restantes 4/5 partes de la población mundial, las escenas
que nos aparecen contradicen la sensación de que el bienestar sea compartido por todos los
habitantes de la Tierra.

Una visión global nos mostrará también algunos efectos indeseados de nuestra forma de vivir:
deforestación, desertización, cambios en las condiciones ambientales, contaminación, etc.

Necesitamos una lente "gran angular" que nos permita ver al Planeta entero, y partiendo de esta
visión, actuar en consecuencia. Los problemas globales implican soluciones colectivas y
conjuntamente hemos de definir nuestras actuaciones como ciudadanos planetarios. Saber que la
manera como miramos los hechos y acontecimientos condicionan nuestras acciones es un primer
paso para intentar diseñar soluciones y resolver con eficacia los retos actuales.

Desarrollo paso a paso

Preparación

1. Se hace una fotocopia para cada grupo del dibujo entero (nº3) en hojas DIN A-4. Se dobla y
se coloca en un sobre, se cierra y se anota el número 3 de forma visible.
2. Se fotocopian los detalles nº1 y nº2 también en DIN A-4 y se sigue el mismo procedimiento
del caso anterior, marcando cada sobre con el número que les corresponde.
3. Téngase presente que cada grupo de participantes (3 ó 4) deberá recibir los tres sobres y
materiales para escribir.

Desarrollo de la actividad

1- Pedid a los participantes que se repartan en grupos de 3 ó 4. Entregadles los sobres nº1 y
avisadles de que, por el momento, no deben abrirlos.
2- Informadles de que se trata de resolver un enigma encerrado en tres sobres, de los cuales el que
tienen ahora es el primero. En cada sobre hay un dibujo con personajes. En cada uno de ellos
deberán escribir qué les parece que les ocurre a los personajes, qué piensan y qué dicen los unos a
los otros, etc.

Podéis sugerirles que hagan "bocadillos" (como en los cómics) enmarcando lo que podría estar
pensando el personaje, o columnas para comentar el acontecimiento (como si fueran periodistas), o
cualquier otro sistema que decidáis. Al final deberán dar un título de una sola palabra a la escena.
Tendrán de 5 a 10 minutos para llenar cada hoja.

3- Dad la señal para abrir el sobre y empezad a contar el tiempo. Una vez hayan hecho el trabajo,
deberán volver a guardar la hoja dentro del sobre y pasarlo a un grupo vecino que no lo podrá abrir.

4- Distribuid luego los sobre nº2 y seguid el procedimiento anterior. En el sobre nº2 cada grupo
meterá la hoja nº 2 y, además, el sobre anterior (nº1) que le habían pasado. Después pasará el sobre
cerrado a un grupo vecino.

5- Finalmente repartid el sobre nº3 y pedid que pongan los comentarios en la hoja que contiene. Al
acabar, cada grupo se queda con su hoja nº3.

6- Pedidles que comenten entre ellos:

a) si les ha sorprendido el segundo y el tercer dibujo.

b) si ha habido algún cambio en las respuestas y actitudes del primer detalle al dibujo entero.

c) si las respuestas de cada uno de los miembros han afectado las respuestas de los demás.

d) qué situaciones les han hecho recordar cada uno de los dibujos y qué sentimientos relacionan con
estas situaciones.

7- Dad la orden de abrir todos los sobres y pedid que cada equipo lea, por orden, las hojas 1, 2 y 3
que tienen encima de la mesa...

8- Puesta en común: los portavoces de cada grupo leen o resumen el contenido de los tres dibujos.
Se verifica entre todos si las historias se completan siguiendo el mismo sentido o son distintas entre
ellas y por qué. Se puede relacionar cada historia con uno o más cristales de diferente color.

9- Abrir un diálogo ordenado sobre los puntos siguientes:

tendemos a pensar y actuar en función de cómo vemos una determinada situación (en
función de tener una información parcial o global) y del esfuerzo que nos implica cambiar
nuestros puntos de vista.
nuestras maneras de ver están influenciadas a menudo por la información que
recibimos, por las personas con quienes nos relacionamos, por los medios de comunicación,
etc.
los problemas ambientales tienen diferentes aspectos o dimensiones: locales,
regionales, globales...
pueden ser cercanos o lejanos.
dependen de un contexto.
10- Pedid que vuelvan a mirar los dibujos y que escriban en forma de cómic una pequeña historia
considerando que el pájaro con el pez es un habitante de un país rico y los otros pájaros lo son de un
país pobre; a otros les pedís que escriban la historia considerando que ellos son el pájaro con el pez;
finalmente, pedid a los grupos restantes que se consideren el grupo de pájaros que no tienen peces.

Después podéis hacer una edición casera de los cómics y repartirla.

Evaluación

Para estructurar ejercicios de evaluación se sugiere que los participantes:

indiquen dos o tres problemas ambientales que conozcan y digan cómo se han enterado
de ellos.
mencionen dos cuestiones ambientales globales que consideren próximas y dos
problemas ambientales locales que les sean lejanos.
recuerden una experiencia personal en la cual hayan modificado su visión de algún
asunto y expliquen cuál fue la causa.

Sugerencia

Cada grupo podrá escoger un nombre y anotarlo en sus hojas. De esta forma podrán recuperarlos y,
si quieren, podrán hacer un cómic de su historia.

Extensiones

Hacer una escenificación de una o más de la historia de los dibujos.


Leer algunos artículos (ver unidad 10 del Manual) y profundizar en lo que conocen
sobre la cuestión recursos-población-medio ambiente. Investigar también algunos acuerdos
de acciones, programas y actividades de solidaridad que se destinen a resolver desigualdades
en los ámbitos local, nacional e internacional, ya sean de instituciones gubernamentales u
organizaciones no gubernamentales (ONG). Analizar qué otras acciones se podrían realizar
y cómo. Divulgar las iniciativas que les parezcan más interesantes.
Establecer correspondencia con niños y niñas o jóvenes de la misma edad, que vivan en
otros países, sobre cómo viven y cómo ven los problemas locales y globales que se han
detectado.
Esta actividad ha sido tomada de: "Hábitat. Guía de actividades para la educación ambiental".
Franquesa, T. (Dir.) (1996). Ministerio de Medio Ambiente. Madrid

UNIDAD 2
Rincones vivos
¿Tenemos que resignarnos a que, poco a poco, nuestro entorno se vaya convirtiendo en un
desierto para la vida?

En los campos, pueblos y ciudades hay pequeños rincones que pueden proporcionar refugio o
alimento a la fauna y la flora silvestres. ¿Qué tal si intentamos recuperar alguno de estos sitios para
la naturaleza? Los espacios y las ideas pueden ser infinitos. Citaremos sólo unos pocos ejemplos:

Una linde entre dos parcelas agrarias puede convertirse en un hermoso seto que dé
refugio a multitud de animales y plantas
Un rincón de un patio nos puede servir para crear un jardín de mariposas
En una zona tranquila de un jardín podemos colocar un comedero para aves
Un muro bien cubierto de hiedra es un buen dormidero para los pajaritos y, en el otoño,
una fuente de néctar para las abejas.
Seguro que a tu grupo se le ocurrirán más ideas interesantes...

Un poco de método

A continuación apuntamos brevemente algunas cuestiones que conviene plantearse desde el


principio.

Encontrar el lugar adecuado

El espacio sobre el que se va a intervenir puede condicionar bastante nuestro proyecto, por lo que es
conveniente plantearse esta cuestión en las primeras fases del trabajo. Es importante contar con el
acuerdo del propietario del lugar. Si contamos con varias posibilidades, podríamos valorar
cuestiones como su accesibilidad, su potencial para acoger vida silvestre...

Preparar un proyecto de trabajo

¿Qué vamos a hacer exactamente y cómo lo vamos a hacer? ¿Necesitaremos realizar algún trabajo
de mantenimiento? ¿Qué recursos necesitaremos? ¿Cómo vamos a conseguirlos? ¿Cómo vamos a
valorar si hemos tenido éxito en el trabajo? ¿Quién se puede encargar de cada cosa? Estas son
algunas de las preguntas a las que debemos dar respuesta en esta fase del trabajo. Una buena
planificación previa hará más eficaz y sencillo el trabajo de todos.

Aprender algunas técnicas de trabajo necesarias

¿Qué técnicas de trabajo necesitamos dominar para realizar la parte práctica del proyecto?

¿Cómo podemos aprenderlas?

Si todo el mundo está listo... ¡manos a la obra!

Valorar cómo ha ido todo

¿Ha funcionado todo bien? ¿nos hemos quedado satisfechos?

Otros pueden aprender de nuestra experiencia

¿Sería interesante que otros conocieran nuestra experiencia? Si es así, ¿cómo vamos a hacer para
que la conozcan?

* Esta actividad de intervención ambiental es conveniente realizarla tras haber analizado qué es la biodiversidad,
conocido su valor y el problema de su pérdida; el grupo debe estar motivado para acometer algún tipo de acción
positiva en relación con el tema. Este tipo de prácticas pueden adaptarse a un rango de edades y tipos de formación
muy amplio. Es importante plantearse objetivos realistas, alcanzables con los recursos del grupo.

A través de esta actividad pueden cubrirse objetivos educativos tales como: la adquisición de habilidades prácticas en
tareas de restauración y conservación o el descubrimiento del propio poder para intervenir sobre los problemas de la
comunidad.

Un ejemplo concreto: plantar un seto vivo


Los beneficios de los setos

Si deseamos proponer al grupo la restauración o creación de un seto, es recomendable empezar


analizando su valor para crear diversidad biológica. Así se podrá entender el interés del trabajo que
se propone realizar.

Los setos se utilizan desde antiguo para separar parcelas de terreno (normalmente tierras que
pertenecen a dueños diferentes o que tienen distintos usos).

Los setos retienen el suelo y actúan como una barrera frente al viento. Protegen al ganado del sol
excesivo y de las lluvias o vientos fuertes. Son una fuente de alimento, tanto para la vida silvestre,
que aprovecha los frutos, semillas y bayas de árboles y arbustos, como para los animales
domésticos, que consumen los brotes tiernos de diversos árboles y arbustos.

Pero, además, los setos constituyen un formidable refugio para la naturaleza en zonas que han sido
muy transformadas para el uso humano. Los arbustos, muchos de ellos espinosos, que forman los
setos, forman un intrincado escondite que acoge a multitud de aves, como el mirlo, el zorzal, las
currucas, el chochín, el petirrojo, el papamoscas... así como para sapos, lagartijas, pequeños
roedores, erizos o comadrejas. Los setos y pequeños rodales de vegetación densa constituyen la
clave para la supervivencia de éstas y muchas otras especies.
Consejos prácticos para plantar un seto

El proceso de creación de un seto no resulta especialmente complicado, sin embargo, pueden


resultar de interés algunos consejos específicos:

Elegir un lugar apropiado

Conviene que el lugar no esté sometido a una presión ganadera fuerte. Es especialmente importante
evitar que el ganado dañe los plantones en el primer año de vida del seto.

Estudiar otros setos de la zona

Si en la comarca donde vamos a trabajar existen otros lugares con setos, es importante conocerlos
bien: estudiar las especies que los forman, qué precauciones se toman para conservarlos...

Elegir las especies que se plantarán

Es recomendable plantar varias especies diferentes. Cada una aportará diferentes oportunidades de
refugio y alimento a la vida silvestre. Si seleccionamos especies que se dan de forma natural en la
zona (autóctonas) aseguraremos su supervivencia con unos cuidados mínimos. Las especies
autóctonas suelen ser también las más adecuadas para favorecer la biodiversidad local.

Estas son algunas de las especies útiles para formar setos que prosperan con facilidad, pero hay
más...

Zarzamora (Rubus sp.)


Bonetero (Euonimus europaeus)
Rosal silvestre (Rosa sp.)
Cornejo (Cornus sanguinea)
Espino albar (Crataegus monogyna)
Sauco (Sambucus nigra)
Aligustre (Ligustrum vulgare)
Sauce (Salix sp.)
Endrino (Prunus spinosa)
Avellano (Corylus avellana)

Conseguir las plantas

Plantas con raíz: Si no contamos con nuestro propio vivero, deberemos conseguir las plantas en
viveros comerciales o públicos. Algunos viveros ceden las plantas de la temporada que no han
conseguido vender para actividades sin ánimo de lucro.

Estaquillados: Buena parte de los arbustos típicos de los setos se pueden multiplicar mediante
"estaquillas" (ver cuadro)

Realizar la plantación

En la península Ibérica las estaciones más adecuadas para organizar una plantación son el otoño (la
última mitad) y el invierno.
Los hoyos para meter las plantas deben ser "generosos".

Si los campos donde se ponen los setos van a ser frecuentados por el ganado es muy conveniente
proteger nuestras jóvenes plantas con malla metálica, hasta que crezcan lo suficiente.

Cuidados de mantenimiento

Riegos: En zonas con veranos muy secos y calurosos resulta muy interesante dar algún riego a las
plantas en el primer verano.

Reposición de plantas muertas: normalmente, no todas las plantas consiguen enraizar y sobrevivir.
Por eso, es habitual "reponer" las plantas muertas un año después.

(*) El estaquillado

Buena parte de los arbustos más típicos de los setos se reproducen bien mediante la técnica del
estaquillado. La recogida de estaquillas (ramitas jóvenes) de los árboles y arbustos de hoja caduca
se realiza en invierno, una vez las plantas han perdido ya la hoja. Los pasos a seguir son los
siguientes (1):

1. Localiza una planta vigorosa, sana y que posea una gran cantidad de ramas. Escoge las
ramillas que hayan crecido más en el último año.
2. Corta los tallos con unas tijeras de podar sin producirle desgarros. Procura que las
estaquillas tengan entre 15 y 20 cm de longitud.
3. Para que enraícen mejor, pela la punta inferior de la estaquilla.
4. Introduce dos terceras partes de la estaquilla en una jardinera con un 50% de arena y un 50%
de humus. Asegúrate de que la tierra queda apretada.
5. Coloca el recipiente en un lugar protegido del sol y de las heladas.
6. Riega a menudo. Pasados unos meses, cuando las estaquillas han enraizado, se deben
transplantar a macetas.
7. Con el tiempo, conseguiremos una planta con buenas raíces que podremos transplantar al
campo.

(1) Tomado del "Manual del Plantabosques" (COMADEN, 1991)

UNIDAD 3
Estilo de vida y CO2
¿Y tú qué?

Objetivo: toma de conciencia de la importancia del comportamiento individual en la


contribución al problema de la contaminación

Teniendo en cuenta los datos que figuran en la tabla siguiente, debe procederse a calcular la
contribución de la familia de cada alumno o alumna a las emisiones de dióxido de carbono. Para
ello es suficiente proceder en cada hogar a la recogida de datos tales como consumo anual de
energía eléctrica, litros de fuel oil consumidos anualmente, gasto anual de bombonas de gas, km.
recorridos en automóvil,... Posteriormente, y dado que actualmente se está discutiendo en la Unión
Europea el tratar de disminuir las emisiones de este gas (disminución en la que es difícil llegar a un
acuerdo pero para la que se barajan cifras en torno al 20%), sería de interés establecer una discusión
en grupo acerca de qué podríamos hacer en cada hogar para proceder a esta reducción (para ello se
incluye un desglose aproximado del consumo de energía eléctrica).

FACTOR DE
VALOR
ACTIVIDAD UNIDAD EMISION DE
OBTENIDO
CO2
Energía eléctrica

Desglose:

Lavadora 2,7 kwh/lavado Kwh 0.41 kg/kwh

Televisión 0,14 kw/h

Calentador 0,023 kw/litro


Fuel o gas oil litro 2.6 kg/litro
Gas natural m3 1,7 kg./m3
Propano, butano kg 2.7 kg/kg
Automóvil litro 2.6 kg/litro
Bus urbano km 0.06 kg/km
Bus interurbano km 0.05 kg/km
Tren o metro km. 0.03 kg/km
Basura
kg. 3 kg/kg
producción: 0,9 kg.
persona/día
Emisión total de dióxido de
carbono
kg.
Reducción de un 20%
Actividades en las que se propone reducir:

Grandes diferencias
Objetivo: introducir los conceptos de desarrollo sostenible y establecer discusiones sobre las
diferencias en el grado de desarrollo de los distintos países y en la responsabilidad respecto al
problema de la contaminación.

Considerando los valores que a continuación se exponen (que corresponden a las emisiones anuales
de dióxido de carbono y del total de gases de efecto invernadero originadas por los países
desarrollados de la OCDE y el total de los países del mundo) y teniendo en cuenta que la población
de la OCDE a finales de los años 80 era de 825 millones, mientras que la población mundial total
era aproximadamente 5120 millones, calcula:

a) ¿Qué emisiones totales de estos contaminantes se producirían si todos los países del mundo
tuvieran la misma tasa de emisión per cápita que los integrantes de la OCDE?

b) A la vista de los resultados obtenidos en el apartado a) pueden plantearse discusiones acerca de


temas como los que se sugieren, o cualquier otro relacionado con el desarrollo sostenible, concepto
recogido en la declaración de Río de Janeiro:

(...) el modelo de desarrollo actual ¿es el correcto?, ¿qué significa el desarrollo sostenible?;
¿cada país o zona geográfica debe desarrollarse sin tener en cuenta el resto del planeta?; de cara
al desarrollo sostenible ¿deben los países desarrollados aumentar, mantener, disminuir o modificar
algunos de los aspectos de su modo de vida?; el modelo de desarrollo actual ¿es exportable, sin
modificaciones, a los países en vías de desarrollo...?

GASES DE EFECTO
PAISES EMISION CO2
INVERNADERO
POR UNIDAD PER POR UNIDAD
PER CAPITA
PIB kg/1000$ CAPITA PIB kg/1000$
t/habitante
USA t/habitante USA
OCDE 3,4 286 6,1 516
Resto 1,2 635 2,5 662

Siguiendo el rastro
Se propone hacer un seguimiento (o, en su caso, revisión de hemeroteca) de 1 a 3
meses de duración de dos tipos de informaciones:

a) Noticias de prensa relacionadas con contaminación atmosférica. Agruparlas en función de los


diferentes temas expuestos en la ficha: efecto invernadero y cambio climático, capa de ozono, lluvia
ácida y problemas de contaminación local.

Hacer una puesta en común, comentarlas y valorarlas. Estudiar la incidencia positiva o negativa de
las diferentes Administraciones, industrias, asociaciones ecologistas y ciudadanos en la generación
y posicionamiento ante las mismas.

b) Valores de concentración de contaminantes medidos habitualmente por las estaciones de control


de contaminación atmosférica existentes en tu ciudad. Caso de que estos valores no se publiquen en
la prensa local, se pueden solicitar a los Ayuntamientos, haciendo de esta forma uso del derecho de
acceso a la información sobre medio ambiente pública.

Pregunta a la Administración si los valores están dentro de los límites admitidos por la legislación o
por el contrario los superan. Discutir en grupo los resultados.

UNIDAD 4
¡Mójate!

Actividades iniciales motivadoras


Planteamiento de la situación problemática

"Los medios de comunicación son unánimes estos días. Recogen una noticia preocupante: A la
sequía que padecíamos se ha unido un problema nuevo: la contaminación de las aguas. Dicen que
las condiciones higiénico-sanitarias del agua de ciertos ríos obligan a restringir su uso y consumo
y que se precisan, a corto plazo, cuantiosas inversiones para la regeneración de las condiciones
naturales. Unas consecuencias parecen inmediatas: el racionamiento del agua, la imposibilidad de
emplearla para beber y la necesidad de elevar considerablemente su precio. Las condiciones se
agravan en ciertas regiones y aguas abajo de las grandes ciudades."

Estrategia:

Lectura en pequeño grupo

Torbellino de ideas/discusión libre en gran grupo

De las ideas expuestas por los distintos grupos se realiza una selección de ciertas cuestiones; se
buscan causas e implicados, se proponen soluciones y agentes, se aventura la posibilidad de
realización. Para que esta fase no nos desborde hay que prever los tiempos a dedicar.

Necesita un resumen posterior y la elaboración de conclusiones.

Debate dirigido/discusión guiada

Aunque la actividad previa ya debe haber servido de introducción al tema, se les entregan dos
fotocopias de artículos de prensa en las que se da información más detallada acerca de la cuestión
planteada inicialmente. Puede que cada una de las preguntas planteadas requiera unos diez minutos
de discusión. Tras ellos, la persona que guíe el debate debe hacer un resumen. Intentará que
participe la mayor parte de los miembros del grupo, pero su finalidad no es intervenir mucho, sino
conducir, guiar, estimular.

El conjunto de actividades que se proponen necesita unos criterios/protocolos de organización y


unos instrumentos para la recogida de conclusiones y la "tipificación" del grupo social concreto.

Otras cuestiones que se pueden considerar

1. ¿Cuáles han podido ser las causas que han llevado a esta situación? ¿Quiénes las han provocado?

2. ¿Qué soluciones se os ocurren ahora mismo? ¿Y para el futuro?

3. ¿Creéis que algunos hábitos de vida influyen en las condiciones del agua?
4. ¿Qué estaríais dispuestos a hacer para evitar situaciones parecidas: renunciar a ciertas
comodidades, realizar cuantiosas aportaciones económicas, o acaso creéis que deben ser otros
(Ayuntamientos, Gobierno Autónomo, Estado, etc.) quienes solucionen los problemas?

Diálogo a partir de un texto


Noticia de prensa recogida de un periódico provincial:

Entre las opciones que se plantean para asegurar el abastecimiento de agua a una gran ciudad de un
millón de habitantes está el recrecimiento de un pantano. Esta nueva obra va a originar el desalojo
de 5.000 personas de unos pueblos pequeños. Estas personas se niegan a marcharse de su casa
porque no tienen otro sitio donde ir y siempre han vivido allí. Si el pantano no se recrece la ciudad
puede pasar sed. Otros colectivos se oponen a la construcción por causas diversas y se origina una
fuerte contestación en la ciudad de partidarios y opuestos al pantano. El Gobierno se encuentra con
este problema: los vecinos no quieren irse y los habitantes de la gran ciudad presionan para que se
acometa la obra.

1. ¿Debe realizarse la obra?

2. ¿Qué medidas tomaría el Gobierno si los vecinos se niegan a abandonar las casas?

3. Imagina que eres uno de los habitantes de la ciudad. ¿Qué puedes hacer para que se realice el
pantano y no os quedéis sin agua?

4. ¿Crees que tu postura variaría si fueses uno de los habitantes de esos pueblos?

5. ¿Qué salidas propones para litigios de este tipo?. ¿La votación democrática quizás?

Algunos indicadores que se pueden utilizar para realizar una


valoración crítica de los aspectos sociales del uso del agua
Revisamos algunas cuestiones sobre el agua.

Pon una equis en la opción más adecuada según tu grado de acuerdo.

LA UTILIZACION DEL AGUA EN


Totalm. Bastante Regular Poco Nada
NUESTROS DIAS
¿Crees que es muy importante poseer agua en cantidad
suficiente?
¿Consideras que el agua de que dispones es de buena
calidad?
¿Tienes idea de los metros cúbicos de agua que se
consumen en tu casa en un mes?
¿Adoptas alguna precaución de cara a disminuir el
consumo diario de agua?

¿Aprecias alguna relación entre consumo de agua y


calidad de vida?
¿Estarías dispuesto/a a reducir el consumo de agua para
compartirla con otras regiones, con otros pueblos?

¿Crees que los trasvases de agua son necesarios?


Si te asegurasen que el agua que consumes está
contaminada estarías dispuesta/o a:

A. Cambiar tus hábitos para contaminar menos.

B. Aportar dinero para la construcción de depuradoras.

Opciones de trabajo posterior: análisis por filas y por columnas, cálculo de medias y desviaciones,
ejercicio de tipificación individual y social, selección de problemáticas más preocupantes, debates,
programación de acciones, etc.

Escalas multidimensionales de diferencial semántico


Estudiar el problema del agua en clase es algo

Imprescindible -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Prescindible

Necesario -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Innecesario

Conveniente -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Inconveniente

Agradable -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Desagradable

Útil -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Inútil

Importante -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Sin importancia

Modificar nuestros hábitos de cara a consumir menos agua y a


contaminarla menos es
Imprescindible -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Prescindible

Necesario -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Innecesario

Conveniente -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Inconveniente

Agradable -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Desagradable

Útil -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Inútil

Importante -3 -2 -1 0 +1 +2 +3 Sin importancia


UNIDAD 5
Un pequeño mar de posibilidades pedagógicas
Introducción

Incluso para los habitantes de pueblos y ciudades costeros, el mar, el océano es algo ajeno a la
realidad humana. En el mejor de los casos, sólo para las familias de pescadores es algo vital y que
hay que conocer. El ser humano es un animal terrestre y el mar siempre le ha inspirado un fuerte
respeto. En estos cuatro apuntes sobre posibles actividades pedagógicas con el mar como telón de
fondo vamos a proponer no sólo adentrarnos en la dimensión ecológica del mar sino también en la
influencia que éste tiene sobre nuestras vidas cotidianas. Al fin y al cabo nuestro origen es marino.

El mar como medio natural

El mar conforma un ecosistema único aunque desde un punto de vista práctico es conveniente
dividirlo. En este sentido distinguimos:

• el piso supralitoral cuya característica más importante es que los organismos que lo habitan
necesitan una emersión continua, se corresponde a la zona donde llegan las salpicaduras de
las olas.
• el piso mediolitoral que sería la zona entre mareas o con alternancia más o menos regular de
emersiones e inmersiones. Su localización es la propia costa y varía en función de la
intensidad de las mareas.
• el piso infralitoral que se correspondería con el mar abierto más cercano a la costa. Su límite
inferior se hace coincidir con la profundidad máxima a la que pueden vivir las fanerógamas
marinas como la Posidonia.

Para cada una de estas zonas existen animales y vegetales con estrategias vitales apasionantes. Con
organizar alguna salida de campo será suficiente para poder darse cuenta de las mismas. Apenas
se necesita más que una lupa, algunos potes y salabres para poder facilitar la observación de estos
seres vivos que, por supuesto, luego debemos devolver a su medio. Es interesante apreciar cómo el
substrato rocoso condiciona alguna de las comunidades biológicas. Podemos incluso observar los
diferentes mecanismos de defensa y las relaciones que se establecen entre ellos.

Existen algunas guías que nos ayudarán en nuestro trabajo de campo para identificar los seres vivos
que descubramos.

Otra posibilidad pedagógica es la de visitar un acuario marino. En España existen unos pocos.
Permiten visualizar algunas de las formas de vida marina "vivitas y coleando". Habitualmente este
tipo de instalaciones están pensadas más para los turistas que para los escolares. Si no disponen de
un guión o dossier pedagógico es preciso que el docente prepare la visita. En este caso
recomendamos que preparéis una ficha donde pongáis una clasificación de los peces y demás fauna
marina según diversas categorías. Por ejemplo:

• peces que viven apoyados sobre el fondo o incluso enterrados.


• peces de forma ovalada, aplastados y peces fusiformes.
• animales transparentes o sin esqueleto aparente.
• Crustáceos y cefalópodos.
• Peces con colores calientes.
El objetivo sería poder, después, establecer algunas relaciones de tipo etológico o ecológico. Por
ejemplo, los peces de forma fusiforme son normalmente de tipo pelágico y veloces, en cambio los
de forma ovalada y aplastados no son nadadores veloces y viven más bien sobre fondos litorales.
¿Qué diferencia hay entre los peces llamados azules y blancos respecto a su morfología externa o
modo de vida?. Además, podremos observar la gran diferencia entre los peces de nuestros mares y
los peces típicos de arrecifes coralinos. Existe un sin fin de posibilidades para poder familiarizarse
con las estrategias vitales más comúnmente adoptadas por la vida marina y, en este sentido, el
acuario facilita la tarea de observación.

El mar como recurso para la vida humana

La pesca es la actividad que más claramente pone en evidencia la importancia del mar para los
humanos. ¿Cuántas veces a la semana comemos pescado? En la mayor parte de los pueblos litorales
existen puertos de pescadores con lonjas donde se comercializa la cosecha marina. Visitar la lonja
del pescado de un pueblo marinero, no sólo permite un interesante paseo socioeconómico, sino que
también, es una forma fácil de adentrarse indirectamente en el piso circalitoral y conocer la vida
marina. El momento clave para visitar una lonja es justo durante la subasta del pescado, puesto que
todo lo que han capturado los barcos durante la jornada está a la vista de curiosos. En algunas
comunidades autónomas existen recursos didácticos organizados para la visita a las lonjas de
pescadores.

La visita se puede complementar con un paseo por el muelle, donde está atracada la flota pesquera,
para poder observar las artes de pesca. Además, se puede entablar algún diálogo con los pescadores.
En este caso, solicitad permiso al patrón de la embarcación o bien al estibador o propietario del
barco. Los barcos de pesca están especializados según el tipo de pescado que capturan. Desde la
forma del barco hasta las artes son diferentes. Así la flota de bajura nada tiene que ver con la flota
de altura o la de arrastre. Un dato muy interesante para hacer cálculos sobre el esfuerzo energético
de la pesca es averiguar la cantidad de combustible que gasta un barco, el número de personas de la
tripulación, las millas que recorre y el peso total de captura por salida.

Otro tipo de pesca, más artesanal y que se practica con pequeñas barcas cerca de la costa, es la
captura de caracoles como el bígaro (Littorina littorea), la cañadilla (Murex brandaris) o la vieira
(Pecten maximus).

Finalmente, debemos señalar las piscifactorías de pescado marino. En estos últimos años se han
instalado en espacios litorales o incluso de tipo flotante cerca de la costa. En ellas podemos
encontrar desde doradas hasta langostinos. La fertilización y engorde de los peces marinos ha sido
posible gracias a los avances de la biología en estas últimas décadas. En definitiva, un tema que
puede ser muy apasionante y excusa para organizar un debate sobre la pesca y la piscicultura de
cara a garantizar el futuro de la conservación de la vida marina.

Otro aspecto a focalizar es el de la organización de los pescadores. Desde las cofradías hasta los
refranes relacionados con la profesión. España es un país de pescadores a juzgar por la importancia
de sus flotas y por las guerras comerciales internacionales que hemos organizado como la del fletán
y el bacalao. Nuestra costa no sólo son las playas para tostarse y burlar el cáncer de piel. "El mar es
la sopa donde se cuece la vida". Sacadle partido a esta realidad.

UNIDAD 6
A vueltas con la energía
Juego de simulación y conflicto
¿En qué consiste un juego de simulación?

El juego de simulación puede ser calificado como técnica de trabajo grupal. Habitualmente, cumple
un doble objetivo. Por una parte, establecer un mayor nivel de enriquecimiento personal mediante el
hábito de trabajo en grupo, y por otra, disponer de un instrumento para el conocimiento y la
resolución de conflictos.

Comúnmente, consiste en determinar un tipo de problema y asignarle variables de intervención


relacionadas con los diferentes posicionamientos sociales, fácilmente detectables, existentes en el
mismo. Esto es expuesto al grupo y éste, a su vez, se divide en varios subgrupos que asumen el rol
correspondiente a cada uno de los posicionamientos. De esta forma, es posible discutir y
profundizar tanto en el problema como en su resolución, mediante las diferentes posturas existentes.
Algunos de los componentes del grupo hacen la labor de observadores y aportan sus
consideraciones en el análisis que se realiza tras el juego. Todos los grupos cuentan con un(a)
moderador(a) cuya función es favorecer las intervenciones y centrar el diálogo en torno al problema
objeto del juego.

Se llama juego de simulación ya que cada grupo simula el posicionamiento de un sector social
interviniente y ello sin tener en cuenta si se encuentra a favor o en contra del mismo.

Situación: un edificio de nueva construcción

Un grupo de personas está interesado en construir chalets en las afueras de una gran ciudad, y
disponen de parcelas de 2.000 metros cuadrados. El terreno tiene una extensión total de 50.000
metros cuadrados. Dispone de un río, que linda con el terreno, de 40 cm. de profundidad media y 3
metros de ancho (en los periodos estivales). Existen 5 metros de desnivel de comienzo a fin del
terreno. Igualmente, en su lado Norte, hay una barrera de frondosos robles, y dispone de acceso por
carretera a través del Este. El terreno está ubicado en una planicie y no ofrece promontorios
cercanos, contando además con un manantial abundante de agua potable en el bosque.

Conflicto:

Hay cuatro bloques de personas con diferentes posicionamientos, que pretenden acometer la
construcción de distinta forma en lo que respecta al acondicionamiento energético de la zona.

Roles adoptados:

Las propuestas de cada uno de los bloques son las siguientes:

Bloque 1:

Realizar una acometida eléctrica, dotar a las edificaciones de gasóleo para calefacción
(independiente para cada usuario), gas para todo el conjunto (con contadores individuales) y hacer
un depósito de agua que satisfaga las necesidades de al menos una semana (estimado en 100 metros
cúbicos de agua).
Dicen que es lo más barato.

Bloque 2:

Dotar a cada casa de instalaciones de agua caliente sanitaria por medio de colectores solares planos.
Instalar una minicentral solar de reflectores y proporcionar 500 W. de potencia fotovoltaica
independiente a cada casa. Igualmente, aprovechar el caudal del río para montar una central
hidroeléctrica que sirva de apoyo a las necesidades energéticas de la urbanización y medir el
potencial eólico para establecer uno o más aerogeneradores de apoyo en invierno.

Dicen que es lo más barato.

Bloque 3:

Este grupo de personas conoce ambos postulados anteriores, y se muestra indeciso.

Bloque 4:

Desconocen los postulados y simplemente tienen comprada su parcela. Han hablado con telefónica
para que pongan teléfono por hilo.

Eje de discusión:

Se ha convocado en una reunión a todos los socio/propietarios de parcelas, para decidir acerca del
tema y dar comienzo a las obras.

Experimentando con la energía solar


1. La primera propuesta se centra en observar el aprovechamiento de la energía calorífica del
sol y su aplicación en la agricultura. Así, se debe disponer de un tetrabrick, que se secciona
por la mitad, y se rellena de tierra para ser utilizado como semillero. La superficie exterior
se pinta de negro para captar mejor la energía del sol. A continuación, se cubre con un
plástico transparente al que se le practican varios orificios. Con ello se consigue calentar la
tierra, favoreciendo el proceso de evaporación y transpiración, al mismo tiempo que se logra
dotar al semillero de la suficiente cantidad de agua con una aceleración del proceso de
desarrollo de la semilla.
2. La segunda propuesta consiste en fabricar un mechero solar "de emergencia". Para ello se
puede utilizar una naranja, un poco de papel de aluminio y un palillo. Se secciona la naranja
por la base, estimando un sexto de la misma, de forma que quede una superficie circular
cóncava. Se elimina la pulpa, y la parte interna se forra con el papel de aluminio, colocando
el palillo en la parte central. De este modo es posible, orientándolo al sol, centrar todo el
reflejo de los rayos solares en un único punto del palillo, y posicionar en el mismo aquello
que queramos quemar.

UNIDAD 7
Actividades de campo
Las actividades interpretativas de campo ayudan a sedimentar una serie de nociones, ideas y
conceptos sobre fenómenos y procesos ligados a la naturaleza, y muy especialmente a los biotopos
de bosques. A continuación se describen dos actividades que pueden ser realizadas tanto por niños
como por adolescentes y adultos. El punto de partida de cada una de ellas es una pregunta en
concreto.

Actividad 1
¿Durante nuestros paseos por el bosque se deben tirar las cáscaras de fruta en el
suelo?

Actividad para niños y niñas a partir de 8-10 años de edad y adultos

Si es conveniente o no desechar los restos de las frutas (ej: cáscaras, semillas) en los senderos y
pistas forestales es una de las dudas que con mayor frecuencia surge durante las excursiones en
áreas naturales. Durante estas excursiones, muchas veces son los propios niños quienes nos
preguntan si es correcto o no tirar productos biodegradables en los entornos naturales y,
frecuentemente tenemos que tomar decisiones "sobre la marcha". Sin embargo, independientemente
del aspecto nocivo o no de esta práctica, cabe hacer una reflexión que podría ser bien ejemplificada
por medio de una actividad de experimentación en el campo.

Esta actividad fue ideada por Marc Martín, un estudiante de biología de la Universidad de
Barcelona que organiza salidas de campo para niños. Es necesaria, como mínimo, una segunda
excursión (que se realiza días después) con el mismo grupo que inició el experimento.

La experiencia consiste en depositar cáscaras y otros restos de frutos comúnmente llevados en las
salidas de campo, tales como plátanos, manzanas, naranjas o peras, en puntos estratégicamente
elegidos en los caminos del bosque. Estos puntos de deposición deben situarse en lugares que
puedan ser fácilmente detectables por otros excursionistas o caminantes, siendo conveniente que los
puntos estén separados por distancias mínimas de 100 metros. En el acto de la deposición se debe
explicar a los integrantes del grupo que las cáscaras de frutos son biodegradables, que en un
principio no afectarían al ambiente, y que se trata de hacer una valoración sobre otras posibles
consecuencias de estas acciones.

Lo ideal sería poder volver más de un día al bosque para revisar los puntos de depósito, pero la
actividad puede llevarse a término con una sola reincursión. Pasados cinco o siete días, a partir de la
fecha de inicio del procedimiento, se deben revisar todas las acumulaciones de restos de frutas. El
resultado esperado es que, aparte del material dejado por los primeros excursionistas, aparece una
serie de objetos nuevos desechados por otros caminantes. Estos objetos van desde cáscaras de frutos
recién tiradas y papeles (materiales biodegradables) hasta latas, botellas, diversas bolsas de plástico,
etc. (materiales no biodegradables).

Posibles valoraciones:

Una de las conclusiones que se pueden desprender de este ensayo experimental es que: a- los restos
de alimentos son interpretados por las personas como basura; b- las personas, y muy especialmente
los niños y niñas, tienden a tirar sus productos desechables en depósitos previos, quizá por
considerar que alguien un día irá a recoger la basura que hay en los caminos y que concentrarla en
algunos lugares facilitaría el trabajo de recogida; c- que la basura biodegradable atrae a la basura no
biodegradable. Otra valoración que se puede hacer es que al tirar restos de frutos, muchas semillas
de especies alóctonas (o sea no nativas de la región) tienen la oportunidad de germinar y de
colonizar los márgenes de bosques autóctonos, especialmente junto a los caminos que pasan por
fondos de valles. En los seguimientos a largo plazo, también se concluye que las cáscaras de
algunos frutos, como las naranjas y mandarinas, tardan mucho en degradarse, permaneciendo
mucho tiempo en el entorno.

Actividad 2
¿Hay especies alóctonas en este bosque?
Actividad para adolescentes a partir de los 16 años de edad y adultos.

La mayoría de los parques naturales periurbanos, e incluso aquellos que están más apartados de los
núcleos urbanos, tienen especies de plantas alóctonas creciendo en su interior. Una gran parte de
estas plantas han sido diseminadas por aves y mamíferos, que al consumir frutos de plantas
cultivadas, transportan sus semillas en el tracto digestivo, diseminándolas en el interior y márgenes
de bosques. Otras han sido diseminadas por el viento o por el agua de lluvia.

Esta actividad propone hacer una valoración cualitativa y cuantitativa de la incidencia de


colonización de plantas alóctonas que pueden aparecer en una determinada zona natural o semi-
natural. Para desarrollarla, es necesario que el educador o la educadora conozca de antemano las
especies de plantas alóctonas más frecuentes y que sea capaz de localizarlas en medio de la
vegetación natural. Para ello, antes de llevar a término la actividad es imprescindible que seleccione
previamente un área que contenga plantas alóctonas y de la que se haya hecho una valoración
cuantitativa.

El método consiste en recorrer el interior y los márgenes de bosques en busca de plantas jóvenes
exóticas (menores a 1,50 m de altura). Una vez localizada una planta no nativa de la región, se
delimita un cuadrante de 1 x 1 m., usándose para esto una línea de color claro y cuatro estacas. Una
vez hechos algunos cuadrantes (mínimo de cinco) se cuenta el número de plantas de cada especie
exótica y nativa que se encuentran dentro de la superficie delimitada. Con algunos cálculos rápidos
de frecuencia (porcentaje de presencia de cada especie en relación al número total de cuadrantes) y
sus abundancias relativas (número de individuos/especie en relación al número total de individuos)
se puede hacer una valoración de la incidencia de la colonización de plantas alóctonas, respecto a
las autóctonas, en estos cuadrantes.

Entre las especies de plantas exóticas (=alóctonas) más frecuentes en los bosques periurbanos de
la Península Ibérica, que son diseminadas por las aves están:

Eriobotrya japonica, diversas especies cultivadas de Prunus, entre ellas Prunus laurocerasus
(Rosaceae), Pittosporum tobira, Pittosporum undulatum (Pittosporaceae), Phoenix canariensis,
Trachycarpus fortunei (Palmae), Opuntia ficus-barbarica (=Opuntia ficus-indica, Cactaceae), Punica
granatum (Punicaceae), Parthenocissus quinquefolia, P. tricuspidata (Vitaceae), Ligustrum
ovalifolium, L. japonicum (=L. lucidum, Oleaceae), Solanum nigrum, Solanum dulcamara
(Solanaceae).

Entre las especies exóticas diseminadas por el viento, algunas de las más comunes son:

Ailanthus altissima (Simaroubaceae), Robinia pseudoacacia (Leguminosae).

Las principales conclusiones que se pueden extraer de esta actividad son que:
a) existe una serie de especies de plantas que han sido previamente traídas por el hombre de otras
regiones y continentes;

b) que estas especies pueden ser diseminadas por aves y mamíferos frugívoros en zonas naturales o
semi-naturales;

c) que las plantas exóticas pueden competir por luz y espacio con las plantas nativas, pudiendo
existir el riesgo de una progresiva pérdida del bosque autóctono.

UNIDAD 8
La ciudad vivida
Estas actividades pretenden que reflexiones sobre el municipio donde vives o en el que pasas más
tiempo trabajando... Además, es conveniente realizarlas conjuntamente entre varias personas, pues
en las diferentes percepciones que tenemos sobre la ciudad, y en las que normalmente no nos
paramos a pensar, es donde reside el interés de llevarlas a cabo.

1- Escribe, en treinta segundos, seis palabras que tengan algo que ver con la ciudad.

o ___________________________________

o ___________________________________

o ___________________________________

o ___________________________________

o ___________________________________

o ___________________________________

2- Dibuja un plano con el itinerario que diariamente sigues para ir al lugar donde
trabajas (o estudias) y señala los puntos que te parezcan más importantes.

3- Señala en el plano anterior los servicios que hay en tu recorrido: luz, agua,
correos, teléfono...

4- Dibuja un plano con el itinerario que seguirías para ir al edificio que te parezca
más importante de tu municipio.

5- Ahora dibuja, con el mayor detalle que puedas, ese edificio y su entorno.
Comparamos los planos y dibujos que hemos realizado cada uno o una y ¡a ver si
vivimos en el mismo municipio!

Además podéis aprovechar para comparar los planos y dibujos que habéis hecho con los que
existen, como callejeros, fotos, cuadros...

UNIDAD 9
Programa educativo en torno a un espacio
natural protegido
Un programa formal de educación ambiental sobre un espacio protegido debe contener los
siguientes apartados:

1. Experiencia del Parque

Una de las primeras actividades de nuestro programa será tomar contacto con el espacio protegido.
Por ello, la experiencia directa que otorga una visita será un comienzo ideal. Se recomienda la visita
al Centro de Interpretación o Visitantes, éste debe constituir nuestro primer contacto emocional con
el objeto de estudio. En este tipo de centros suelen existir diversos materiales educativos, así como
la presencia de personal especializado que nos dará una explicación básica sobre el área en cuestión
e, incluso, pueden aconsejarnos sobre la realización de algún sendero o itinerario interpretativo. Es
recomendable contactar telefónicamente o por correo con estos centros si queremos concertar una
visita de estas características.

2. Análisis de documentos normativos (Ley de creación y planes de gestión, PRUG,


etc.)

Estos documentos permiten conocer la finalidad, los límites y otros condicionantes de la


administración y gestión del parque. En la ley de creación de un espacio protegido suele estar
recogida la figura del Patronato o Junta Rectora. Este suele ser un órgano consultivo que se reúne
periódicamente para supervisar las actividades realizadas durante el año y las que se realizarán en el
próximo.

Normalmente, en el Patronato están representados todos los organismos o entidades públicas y


privadas relacionadas con la gestión del espacio protegido. Una vez estudiada la ley de creación y
algún plan de gestión, el grupo escolar puede simular una reunión del Patronato donde cada uno
asuma el papel de los diferentes colectivos afectados por la gestión del espacio protegido: Gobierno
regional, alcaldes, ganaderos, agricultores, empresarios, universidades, cazadores, ecologistas,
montañeros, etc. Cada uno debe exponer y razonar su visión particular sobre el espacio protegido.
Otra actividad interesante que se desprende del estudio de la normativa del espacio natural es la
creación en el patio o jardín del centro escolar, o en alguna zona natural de los alrededores, de un
espacio natural protegido en miniatura (micro-reserva).

Nuestra primera actividad para la zona elegida, será someterla a un proceso ordenado de
planificación, aplicándole en este caso un supuesto de "Plan de Ordenación de los Recursos
Naturales" (PORN), que se adecue a las características físicas y de uso del lugar. Los pasos a seguir
en la aplicación del PORN serán los siguientes:

• Delimitaremos la zona de forma clara y precisa, incluso se puede realizar un mapa a escala.
• Realizaremos una descripción detallada de todos los elementos que componen la zona.

Ejemplo: Tipo de suelo donde se asienta (rocoso, arenoso, arcilloso), orografía (llano, ondulado,
abrupto, con fuertes pendientes, etc.), vegetación (presencia de árboles, arbustos o praderas,
podemos elaborar una cartografía representativa sobre la distribución de estas tres unidades
vegetales, y también de algunos elementos que consideremos singulares: árboles raros o
excepcionalmente grandes), fauna (mamíferos, aves, reptiles, anfibios, peces, invertebrados, se
puede realizar una cartografía que represente la distribución de los distintos grupos faunísticos) y
actividades humanas (sería conveniente elaborar un inventario con todas las actividades y usos que
se desarrollan en la zona, así como un listado sobre el número de personas que la utiliza).

• Analizaremos el estado de conservación o deterioro de cada uno de los componentes de la


zona que se han descrito en el apartado anterior, incluso se podrían realizar algunas
predicciones futuras sobre su evolución en base a la situación actual de partida y a los
posibles cambios que pudieran acontecer.
• Realización de consultas y encuestas a la población afectada (nos referimos aquí a alumnos
de otras aulas que utilizan la zona, profesores y otros colectivos de usuarios que pudieran
verse afectados por nuestro trabajo de ordenación).
• Por último, se pueden elaborar algunos planes de recuperación para especies vegetales o
animales que se hayan identificado como dañadas o en peligro durante el desarrollo del
Plan. Asimismo, también podemos poner en marcha un plan de restauración para las zonas
donde se hayan identificado daños o deterioros: suelo (erosión), paisaje (construcciones o
infraestructuras que afean el entorno), aguas contaminadas, plan de recogida de basuras,
restauración de vegetación, etc.

3. Estudio de campo e interacción con los protagonistas del territorio protegido

En primer lugar, nos situaremos correctamente en el espacio objeto de estudio. Para ello,
necesitaremos cierta cartografía e información ambiental sobre el área protegida. A continuación,
confeccionaremos una ficha que iremos completando en sucesivas jornadas con la siguiente
información: Localización, altitud (máxima y mínima), relieve, aguas, clima, suelos, vegetación,
fauna, población humana, actividades económicas, transporte y comunicaciones, servicios sociales
y culturales, etc.

Toda la documentación sobre aspectos geográficos, naturales, sociales y humanos que se ha


elaborado en el aula debe ser complementada con diversas salidas de campo correctamente
planificadas, y donde se realizarán observaciones directas (aspectos naturales) y diálogos, encuestas
o entrevistas (aspectos sociales). En la fase final, la información recogida debe ser ordenada,
clasificada y sintetizada para luego poder establecer contrastes que nos permitan elaborar algunas
conclusiones.

4. Identificación de problemas y propuestas de acción

Durante el proceso de recogida de datos y elaboración de información, seguro que hemos podido
identificar los problemas más importantes que tiene el espacio protegido. Los participantes en el
programa deberán adquirir algún nivel de compromiso analizando su implicación en estos
problemas y las posibilidades de contribuir a su solución.
Un ejemplo de acción a emprender puede ser la convocatoria de una jornada, foro de debate o
reunión con los implicados en el problema, analizando sus causas y posibles soluciones. El centro
escolar o el grupo puede asimismo emprender una campaña informativa o de denuncia sobre el
problema en cuestión.

UNIDAD 10
DOCUMENTOS
Los dos documentos que se presentan a continuación pueden utilizarse para completar y profundizar
el tema, resumiéndolos o acotándolos en función de los destinatarios, pero también para organizar, a
partir de todos o alguno de sus puntos, un debate sobre las políticas o las opiniones en ellos
planteados. Podrían proponerse cuestiones como: Población y Desarrollo Sostenible (¿Qué se
entiende por Desarrollo Sostenible? ¿Es lo mismo que crecimiento económico?. ¿Qué relación tiene
con la población?), Población y Pobreza (interrelaciones, la cuestión Norte-Sur, estrategias para
erradicar la pobreza), Población y Género (la situación de la mujer, acceso a la educación,
planificación familiar).

Documento 1
Programa de acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el
Desarrollo (CIPD) El Cairo (Egipto). 5 a 13 de septiembre de 1994

Principio 2

Los seres humanos son el elemento central del desarrollo sostenible. Tienen derecho a una vida sana
y productiva en armonía con la naturaleza. La población es el recurso más importante y más valioso
de toda nación...

Principio 3

El derecho al desarrollo es un derecho universal e inalienable, que es parte de los derechos humanos
fundamentales, y la persona humana es el sujeto central del desarrollo... debe ejercerse de manera
que se satisfagan equitativamente las necesidades ambientales, de desarrollo y demográficas de las
generaciones presentes y futuras.

Principio 4

Promover la equidad y la igualdad de los sexos y los derechos de la mujer, así como eliminar la
violencia de todo tipo contra las mujeres y asegurarse de que sea ella quien controle su propia
fecundidad son la piedra angular de los programas de población y desarrollo... La plena
participación de la mujer... y la erradicación de todas las formas de discriminación por motivos de
sexo son objetivos prioritarios de la comunidad internacional.

Principio 5
Los objetivos y políticas de población son parte integrante del desarrollo social, económico y
cultural, cuyo principal objetivo es mejorar la calidad de la vida de todas las personas.

Principio 6

El desarrollo sostenible como medio de garantizar el bienestar humano, compartido de forma


equitativa por todos hoy y en el futuro, requiere que las relaciones entre población, recursos, medio
ambiente y desarrollo se reconozcan cabalmente, se gestionen de forma adecuada y se equilibren de
manera armoniosa y dinámica. Para alcanzar el desarrollo sostenible y una mejor calidad de vida
para todos, los Estados deberían reducir y eliminar las modalidades de producción y consumo
insostenibles y promover políticas apropiadas, entre otras, políticas de población, a fin de satisfacer
las necesidades de las generaciones actuales sin poner en peligro la capacidad de las generaciones
futuras para satisfacer sus propias necesidades.

Principio 7

Todos los Estados y todas las personas deberán cooperar en la tarea esencial de erradicar la pobreza
como requisito indispensable del desarrollo sostenible... Se deberá dar especial prioridad a la
situación y las necesidades especiales de los países en desarrollo, en particular los menos
adelantados. Es preciso integrar cabalmente en la economía mundial a los países con una economía
en transición, así como a todos los demás países.

Principio 8

Toda persona tiene derecho al disfrute del más alto nivel de salud física y mental. Los Estados
deberían adoptar todas las medidas apropiadas para asegurar, en condiciones de igualdad entre
hombres y mujeres, el acceso universal a los servicios de atención médica, incluidos los
relacionados con la salud reproductora, que incluye la planificación de la familia y la salud sexual...
sin ningún tipo de coacción...

Principio 10

Toda persona tiene derecho a la educación, que deberá orientarse hacia el pleno desarrollo de los
recursos humanos, de la dignidad humana y del potencial humano, prestando especial atención a las
mujeres y las niñas...

Principio 11

Todos los Estados y todas las familias deberían dar la máxima prioridad posible a la infancia. El
niño tiene derecho a un nivel de vida adecuado para su bienestar y al más alto nivel posible de
salud, a la educación...

Principio 12

Los países que reciben a migrantes documentados deberían tratarlos, a ellos y a sus familias, de
forma apropiada y proporcionarles servicios de bienestar social adecuados y deberían garantizar su
seguridad física... deberían garantizar a todos los migrantes todos los derechos humanos básicos
incluidos en la Declaración de Derechos Humanos.

Principio 14
Al considerar las necesidades de los indígenas, en materia de población y desarrollo los Estados
deberían reconocer y apoyar su identidad, su cultura y sus intereses y permitirles participar
plenamente en la vida económica, política y social del país, especialmente en lo que afecte a su
salud, educación y bienestar.

Principio 15

Los países desarrollados reconocen la responsabilidad que les incumbe en los esfuerzos
internacionales por lograr el desarrollo sostenible y deberían seguir redoblando sus esfuerzos por
promover el crecimiento económico sostenible y reducir los desequilibrios de manera que redunden
en beneficio de todos los países, en particular de los países en desarrollo.

Documento 2
6 puntos de optimismo
El País. Viernes, 13 de junio de 1997

A fines de este siglo, de 3.000 a 4.000 millones de habitantes de la población mundial -más de
5.700 millones en total- habrán experimentado una mejora sustancial de su nivel de vida, y de 4.000
millones a 5.000 millones tendrán acceso a enseñanza y salud básica. Son cálculos del "Informe
sobre el Desarrollo Humano 1997", que aspira a la eliminación de la pobreza para el próximo siglo.
Para ello propone un plan estratégico de seis puntos.

El informe destaca el crecimiento económico como "un medio poderoso para reducir la pobreza".
Pero sus beneficios no son automáticos. Honduras, por ejemplo, creció en un 2% anual entre 1986 y
1989 y su pobreza de ingresos se duplicó. Lo mismo sucedió en Argentina. Estados Unidos, Nueva
Zelanda y el Reino Unido, por otra parte, experimentaron un buen crecimiento medio en los últimos
veinte años, pero la proporción de población pobre aumentó. Para disminuir los niveles de
marginación social e impulsar el desarrollo empresarial, el PNUD(1) sugiere una mayor inversión
en educación. Además convoca una acción internacional para detener a los países que atraen
inversión externa con la explotación de mano de obra barata. También recomienda llegar a una
igualdad de los derechos para hombres y mujeres. De los 1.300 millones de pobres que hay en el
mundo un 70% son mujeres (...)

El PNUD recomienda un crecimiento más rápido en los aproximadamente 100 países en desarrollo
y transición, cuyo crecimiento ha declinado. Además, cree necesario la mejora en el acceso de los
países pobres al proceso de globalización, un mayor espacio democrático y programas de reducción
de deuda.

El informe señala la "vinculación estrecha" de la reducción de la pobreza con el descenso del


crecimiento de la población y recuerda que "cerca de la mitad de los habitantes más pobres del
mundo- unos 500 millones- se ganan la vida en zonas frágiles y de baja productividad". En estos
países, la erradicación de la pobreza debe ir de la mano de intentos por proteger el medio ambiente.

En los países industrializados, los principales problemas a resolver son proporcionar empleo a todos
los ciudadanos activos, garantizar sistemas viables de seguridad social, pensiones y servicios de
salud para todos y permitir que hombres y mujeres compartan más equitativamente sus obligaciones
en el hogar y en el lugar de trabajo.
El administrador del PNUD, James Gustave Speth, señala en el informe: "A menos que enfrentemos
ahora los problemas de la pobreza, no se podrá lograr ninguna de las grandes metas que se ha fijado
la comunidad internacional- paz, estabilidad, derechos humanos para todos, preservación del medio
ambiente- en un mundo en que la mitad de la población está excluida de la oportunidad y los
beneficios de una sociedad mundial". En 1995 casi todos los países se comprometieron con este
objetivo en la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social.

_____________________________________

(1) Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.

UNIDAD 11
Un ámbito de trabajo en la Ecoauditoría Escolar: la Energía
La Ecoauditoría escolar, como todo proyecto de Educación Ambiental, no debe desarrollarse como
una serie de actividades aisladas y descontextualizadas. Para que cumpla los fines educativos que
persigue, se ha de integrar en el currículo atendiendo tanto a las características de edad y desarrollo
del alumnado como a las peculiaridades del centro. En el caso de la energía, este tópico aparece
tanto en los contenidos de Educación Primaria como en los de Educación Secundaria, por lo que el
conseguir su adecuada integración será una cuestión de programación y planificación por parte del
profesorado. Además, permite un tratamiento interdisciplinar, por ser un contenido que de una u
otra forma aparece o guarda relación con contenidos desarrollados en distintas áreas (Ciencias de la
Naturaleza, Ciencias Sociales, Tecnología...). La propuesta genérica que se expone a continuación
ha de ser adaptada teniendo en cuenta las características del contexto en el que vaya a ser
desarrollada y seleccionar aquellos aspectos que resulten más adecuados al mismo.

Por otro lado, en el logro de una mayor eficiencia energética intervienen factores técnicos cuyo
análisis e investigación generalmente escapan a las posibilidades del personal del centro y, por
supuesto, del alumnado. En este caso, se puede solicitar la ayuda de organismos como el CADEM-
EVE (Centro para el Ahorro y Desarrollo Energético y Minero - Ente Vasco de la Energía) o el
IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) para realizar el diagnóstico y
proporcionar después al alumnado una versión inteligible del informe técnico emitido. De cualquier
forma, no se ha de olvidar que el protagonismo ha de corresponder al alumnado, a fin de que éste
sienta que puede influir y participar en distintos aspectos de la gestión de su medio ambiente más
próximo y contribuir con sus capacidades y su comportamiento a la mejora de la calidad del mismo.

A grandes rasgos, el alumnado, trabajando en grupos, ha de diseñar y poner en marcha un proceso


de investigación que tenga por objeto conocer los usos y hábitos de consumo de la energía en el
centro. A partir de los resultados de esta investigación, se pueden establecer unos objetivos de
mejora de la eficiencia energética en el centro y de cambio en los hábitos de consumo, en función
de los cuales elaborar un plan de actuación; de éste se realizará un seguimiento durante el proceso
de aplicación y su evaluación, una vez transcurrido el periodo de implantación previamente
establecido. Los resultados se harán públicos a la comunidad educativa mediante un informe, a
partir del cual se podrán establecer los nuevos objetivos de mejora, introducir las modificaciones
que se consideren pertinentes en el diseño del plan o en su desarrollo, o extender su alcance a otros
ámbitos que anteriormente no hubiesen sido contemplados. A fin de mejorar la eficiencia de este
proceso, resulta conveniente poner en marcha la comisión energética del centro, que será la
responsable de la implantación del plan, su seguimiento y evaluación, así como de valorar y decidir
sobre las propuestas que le sean remitidas y de elaborar el informe.

¿Cómo poner en marcha un Plan de Eficiencia Energética en nuestro centro?

Se seguirán, de forma aproximada, las fases del proceso de puesta en marcha del procedimiento de
ecoauditoría:

1- Revisión inicial

1.1. Documentación y recopilación de datos generales del centro que puedan tener interés en la
planificación energética: ubicación, descripción del edificio del centro y de su entorno, orientación
y características de la construcción, instalaciones y servicios, alumnado (número, agrupamiento por
niveles y características de edad...), personal docente y no docente (incluyendo responsabilidades
asignadas y organigrama), actividad (tipos, secciones y departamentos, tiempo diario de uso,
intervalos horarios...), etc.

1.2. Inventario de instalaciones y aparatos que requieren el consumo de energía:

1.2.1. Energía eléctrica:

• Instalación eléctrica: Función (alumbrado, fuerza, vivienda del conserje...), potencias


contratadas, tarifa diurna y nocturna, normativa de seguridad, etc.
• Aparatos: Tipo, potencia, utilidad, localización, estimación de horas de uso al día...

1.2.2. Combustibles fósiles (gasóleo, gas natural, carbón...):

• Instalación de calefacción: Calderas, potencias, quemadores, antigüedad, combustible,


calorifugado, seguridad, mantenimiento, etc.
• Instalación de agua caliente: Caldera, potencia, quemadores, antigüedad, combustible,
seguridad, mantenimiento, etc.

1.3. Estimación del consumo de energía necesario:

El cálculo del consumo eléctrico necesario se realizará en base a los aparatos eléctricos existentes,
su potencia y la estimación del tiempo de uso medio por aparato en función de la necesidad
objetiva.

El consumo de combustibles fósiles, en lo referente a la calefacción, está sometido también a


variables imponderables (tiempo atmosférico, etc.), por lo que, a falta de otras estimaciones
técnicas, se puede aceptar como válido el valor del consumo medio de años anteriores. No obstante,
se ha de hacer un estudio de las temperaturas de las dependencias del centro en varios momentos
del día y durante un periodo de tiempo suficiente.

1.4. Cálculo de la desviación media entre el consumo estimado y el consumo real:

Si esta desviación es positiva (consumo estimado mayor que consumo real) se ha de revisar la
estimación; si la desviación es negativa, se hará un análisis de las causas, lo que permitirá
identificar las medidas correctoras para disminuir el consumo.

1.5. Emisiones a la atmósfera


Estudio de las emisiones gaseosas y de partículas a la atmósfera como consecuencia del consumo de
combustibles fósiles o de otras actividades específicas en el centro: naturaleza, focos, controles,
seguimiento, efectos sobre los seres vivos y la salud de las personas, legislación aplicable...
Deberían considerarse también las emisiones indirectas derivadas de la producción de energía
eléctrica.

2.- Objetivos de mejora de la eficacia energética

En base a los datos recogidos en el informe de la revisión inicial, se establecerán las medidas
correctoras y los objetivos de mejora de la eficiencia energética. Para adoptar estas decisiones
conviene establecer algunos criterios de priorización: necesidad de uso, potencialidad de
disminución del consumo, facilidad de alcanzar el objetivo, aprovechamiento didáctico, etc.

3.- Planificación de las actuaciones de mejora y determinación de los indicadores de


evaluación

El alumnado deberá diseñar un plan para reducir el consumo de energía eléctrica y para calefacción
en el colegio. El plan puede contener sugerencias relativas a las instalaciones, actitudes y hábitos,
etc., y deberá fijar qué nivel de ahorro esperan conseguir a través de las diferentes medidas. En el
plan han de estar establecidos y documentados los objetivos y las metas, las funciones y
responsabilidades, los medios, los procedimientos de control, los indicadores de evaluación, los
plazos... Además de difundirlo entre todo el personal del centro, se ha de buscar la motivación y el
compromiso de todo el colectivo, antes de que el plan sea puesto en marcha. A este fin, se pueden
presentar informes con los logros alcanzados en experiencias similares realizadas por otros centros,
posibilidades de intercambios, etc.

4.- Ejecución del Plan de Actuación. Seguimiento y medidas correctoras

Una vez puesto en marcha el plan, se ha de realizar el seguimiento del mismo y registrar los datos
de cada control. Asimismo, se adoptarán las medidas correctoras en caso de incumplimiento o de
que se consideren necesarios pequeños ajustes en los procedimientos.

5.- Evaluación

Finalizado el periodo de aplicación establecido, se realizará la evaluación del plan. Esto permitirá
detectar los posibles puntos de mejora para el futuro.

6.- Informe

El trabajo desarrollado por el colegio sobre este tema debe ser puesto en conocimiento de toda la
comunidad educativa y adjuntarlo a la memoria anual del centro. Un resumen del informe se
entregará a los organismos e instituciones colaboradoras en el proyecto. Esta actividad de difusión
se puede complementar con exposiciones, artículos de prensa, programas de radio, etc. A partir del
informe se establecerá el nuevo plan para mantener el nuevo nivel de consumo y conseguir un
mayor ahorro, desarrollándose así un procedimiento de mejora continua en la eficiencia energética
del centro.

Para saber más:

Fernández Ostolaza, Mª. A. (1996): ´Eco-auditoría escolar/Eskola ekoauditoria.ª Vitoria-Gasteiz.


Servicio Central de Publicaciones del Gobierno Vasco. Eusko Jaurlaritza.
UNIDAD 12
Un ámbito de trabajo en la Ecoauditoría Escolar: la Energía
Momento Educativo Métodos Actividades
Excursiones,

Motivación del grupo charlas, vídeos

Identificación de problemas Percepción de problemas Análisis de la realidad

Análisis de información Sensaciones

Recopilación información
Tormenta de ideas Vertido de información
Búsqueda de soluciones
Elección temas y medios Grupos de discusión
Detección de pros y contras
Análisis de posibilidades
Viabilidad Elección de las acciones
Asumir responsabilidades
Reparto de funciones
Coordinación

Relaciones públicas

Documentación
Actuación sobre el entorno Acción directa
Diseño

Gestión de fondos

Realización de la acción

Cuantitativos Repercusión de la acción


Evaluación
Cualitativos Valoración del proceso

Premisas

Partimos de un grupo o colectivo ya previamente creado, cohesionado y con ganas de trabajar. Es


evidente que esta situación cuesta mucho conseguirla, y que conlleva un gran trabajo con técnicas
de animación sociocultural y psicología social.

Para realizar este proceso es muy sugerente la asistencia de un agente externo, con un papel de
motivador y facilitador de todo el proceso y que no esté directamente implicado en el colectivo.

1- Identificación de problemas

El colectivo debe indagar e investigar cuáles son los principales problemas de su entorno
manejando la mayor información asequible posible.

Pero no sólo es importante estar informados, sino también sensibilizados y motivados para actuar.
Las visitas a las zonas o puntos conflictos, las asesorías de expertos, las vivencias de los problemas
y las simulaciones son actividades que ayudarán a percibir y sentir los problemas, y a motivar a las
personas para querer solucionarlos.

2- Búsqueda de soluciones

Con imaginación, volcamos todas las ideas que se nos ocurran para poder atajar o intentar
solucionar el problema "tormenta de ideas" . Posteriormente, hay que empezar a priorizar por temas
y medios. Para ello, es bueno organizar grupos de discusión, con no más de 5 personas.

3- Viabilidad

Momento educativo importante. Con los pies en la tierra, hay que ser conscientes de nuestras
posibilidades y nuestras limitaciones con los temas elegidos. Hagamos un breve pero sincero
análisis de los pros y contras de nuestra acción, y de si realmente tenemos capacidad para llevarla a
cabo. Para hacer correctamente este análisis es importante repartir funciones y asumirlas. Muchas
veces la imposibilidad de hacer una acción no es una causa externa, sino interna del propio grupo.

4- Actuación sobre el entorno

Hay que diseñar la acción y ejecutarla. Este momento, que en un principio parece ser el fin de
nuestra acción, no es más que un momento de cinco en un proceso educativo. Tan importante es el
fin "realizar la acción", como el medio desarrollar todo el proceso participativo.

Alguien debe coordinar toda la acción y sugerimos algunas áreas importantes de trabajo:

Relaciones públicas: contactos con los medios de comunicación y con las autoridades.

Documentación: obtener más información y elaborar la información de los materiales que vayamos
a utilizar.

Diseño de materiales de la campaña, de las acciones.

Gestión de fondos: obtención de los recursos necesarios, no sólo económicos.

Finalmente sólo queda realizar la acción en la que pueden o no participar todos los miembros del
grupo.

5- Evaluación

Por un lado, evaluamos el resultado de la acción y lo hacemos cuantitativamente: impacto en los


medios de comunicación, número de personas que han participado, cumplimiento de los objetivos
marcados, etc. Pero por otro lado, hay que medir el proceso educativo-participativo que hemos
seguido: los pasos que hemos dado, si hemos intervenido todos en el proceso, si nos hemos sentido
a gusto en él...

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