Deleuze La Denuncia de Spinoza

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 0

Nuevo Itinerario Revista Digital de Filosofa ISSN 1850-3578

DELEUZE. LAS DENUNCIAS DE SPINOZA.




Ada Mercedes Lpez


El pensador contemporneo Gilles Deleuze considera en su obra Spinoza. Filosofa
Prctica que Baruch Spinoza edifica una tica con la intencin de llevar al hombre a la
libertad mediante la aplicacin de un mtodo de rectificacin vital y ptica.
1
Este
reajuste espiritual ser more geomtrico pero no una investigacin intelectual sino una
regresin vital a experiencias ya vividas mediante las cuales a partir del hallazgo de una
idea verdadera clara y distinta se alcance la intuicin comprensora de la causa sui en
la que el hombre encuentra desde siempre asentadas las propias perfecciones de su alma
que supusimos se aadan a ella.
2
El hombre alcanza la beatitud liberadora asentado en la penetracin prctica de un
principio metafsico que es el fundamento de su propio ser y de su ser-en-el mundo
Deus sive Natura, slo hay un ser uno a la vez nico e inmanente una sustancia
constituida por una infinidad de atributos, cada uno de los cuales expresa una esencia
eterna e infinita.
3
Todo lo existente es un modo o atributo de la sustancia nica e inma-
nente que en la multiplicidad manifiesta de los atributos de extensin y de movimiento
prepara un plan de inmanencia que es posible visualizar a la manera de un plano carto-
grfico orientador.
El presente trabajo propone una lectura crtica de la obra de Deleuze mencionada
antes y tambin de la obra Etica de Spinoza con la finalidad de capturar y discernir de
manera amplia los conceptos y relaciones que establece el pensador contemporneo al
presentar que Spinoza propone un mtodo vital y ptico de rectificacin voluntaria de
la conciencia como manera de alcanzar la libertad en relacin a la concepcin del acaso
siniestro obrando en el destino que no obstante, parece prefijado.

La triple denuncia de Spinoza.
El plan de inmanencia de la sustancia nica se despliega horizontalmente en el or-
den de lo real aparente y tal como un atlas representativo revela la unicidad de todos los
atributos de la sustancia infinita Dios o Naturaleza Naturante que contiene en su ser a
las esencias modales finitas de la naturaleza naturada con-movidas entre ellas segn el
modelo relacional causativo de causas y efectos. La causalidad inherente del plan de
despliegue es de tipo necesario, la Naturaleza Naturante es causa sui modalidad cau-
sal que se extiende de manera dbil pero necesaria hacia la naturaleza naturada que
constituye el individuo.
En la causalidad ordenada del plan inmanente de la sustancia una, del principio
causal primero emana hacia el plano extenso de la naturaleza naturada una causalidad
interna que sigue leyes fsicas de conveniencia e inconveniencias entre existencias y
tambin un orden causal extrnseco de encuentros por contigidad aparentemente no
reglados que pueden apuntarse como impensados o fortuitos. Sin embargo cada uno

1
DELEUZE, Gilles. Spinoza: Filosofa Prctica. trad. Antonio Escohotado. Buenos Aires, Tusquets,
2004. p. 23
2
SPINOZA. Etica. trad. del lat. y prl. Angel Rodrguez Bachiller. Buenos Aires, Aguilar, 1957.-p. 388
3
ibid. p. 24
1
Nuevo Itinerario Revista Digital de Filosofa ISSN 1850-3578
de estos occursus no deja de ser necesario puesto que obedece las leyes de un de-
terminismo externo que opera progresivamente
4
A juicio de Deleuze es posible encontrar en la Etica de Spinoza si se la analiza sin
descuidar aquellos corsi y recorsi que ste aconseja para su lectura, es decir seguir el
texto respetando su sistema de escolios vinculantes que ligan prefacios y apndices y
va conformando la trama de una tica subterrnea, un conjunto de principios naturales
de los cuales es posible extraer consecuencias prcticas. Las tesis prcticas spinozistas
conforman veladamente aquello que en el criterio de Deleuze puede ser denominado la
triple denuncia realizada por Spinoza, la denuncia acerca de la conciencia habitual
y soberana, la denuncia de los valores establecidos por otros y la denuncia de las pa-
siones tristes que parecen sucederse al acaso.
5
Segn el pensador francs cada una de estas denuncias presentadas en forma de tesis
implcitas trajo para el autor judo en el transcurso del tiempo los motes de materialista,
inmoral y ateo, cuando en realidad Spinoza a un estudio ms profundo y desapasionado
aparece como un pensador a la vez mstico y prctico que intenta enfocar el escenario
de la realidad con la visin de los ojos del espritu para luego proceder pacientemente
a la demostracin mental. Conocemos claramente por esto en qu consiste nuestra
salvacin, es decir, nuestra beatitud, o nuestra libertad, a saber: es un Amor constante y
eterno hacia Dios, o en el Amor de Dios hacia los hombres.
6

Denuncia acerca de la conciencia.
Segn Spinoza Nadie ha determinado hasta el presente lo que puede hacer el
Cuerpoconsiderado slo como corporaly lo que no puede hacer a menos de ser de-
terminado por el Alma.
7
Deleuze sostiene que este pensamiento spinoziano plantea a la
filosofa el modelo cuerpo para pensar, pero no para sentar una primaca de ste sobre
el alma sino para demostrar que el cuerpo supera el conocimiento que de l se tiene
y que el pensamiento supera en la misma medida la conciencia que se tiene de l.
8
El
conocimiento de lo desconocido del cuerpo puede asimilarse paralelamente al conoci-
miento de toda la amplia zona del pensamiento que por conformista desconoce la con-
ciencia habitual.
En la teora expuesta por Spinoza la Mente y el Cuerpo son dos modos finitos
distintos pero correlativos que pertenecen a dos de los atributos de la sustancia nica
el pensamiento y la extensin. Cada atributo es expresin de una esencia o cualidad
infinita que al ser percibida por el entendimiento de manera cualitativa y formal, no de
manera numrica corresponde a un singular. Hay infinidad de atributos en la sustancia
nica pero el hombre conoce solamente aquellos dos que aparecen como extensin y
pensamiento, atributos que estn englobados en su ser contingente de esencia modal y
finita. En cada una de las lneas de atributos los modos se acoplan rigurosamente en sus
rasgos las ideas en el pensamiento y los cuerpos en la extensin.
El hombre est constituido esencialmente de aquello que es lo primero en el orden
atribuible al pensamiento, es idea en la que el espritu es la idea del cuerpo que en tanto
extensin actual es el objeto formal de tal idea, los modos finitos humanos son cuerpo y
espritu simultnea y paralelamente pues esta sincrona de efectos no incluye la accin

4
DELEUZE, Gilles. op.cit. p. 109
5
cfr DELEUZE, Gilles. op. cit. p. 27
6
SPINOZA. op. cit. p. 390
7
SPINOZA. op.cit p. 163
8
DELEUZE, Gilles. op. cit. p. 27
2
Nuevo Itinerario Revista Digital de Filosofa ISSN 1850-3578
real entre ellos. A juicio de Gilles Deleuze esta correspondencia paralela sin causalidad
real y tambin la causalidad ordenada en la lnea de los atributos formales concebida
como una isomorfa es un pensamiento corriente entre los especulativos cartesianos, el
aporte original de Spinoza radica en percibir que las series lineales del pensamiento y de
la extensin en la conexin entre atributos gozan de isonoma o equivalencia, as la
isologa, identidad de ambos atributos en el ser de la sustancia nica e inmanente pro-
duce idntica modificacin simultnea en el pensamiento segn la forma espiritual y en
la extensin segn el modelo corporal pero la idea no es la causa del cuerpo.
9
La conciencia aparece entonces como idea de la idea representa para el hombre
una realidad objetiva que existe en el atributo pensamiento como una realidad formal
pero se halla sumergida en el inconsciente, opera en la nebulosa del pensar alterado
por la modalidad extensin. La conciencia habitual acostumbrada usualmente a mirar
desde la extensin, solamente es consciente de todas aquellas ideas confusas que
como conocimientos de primer grado expresan la afeccin que producen otros cuerpos
sobre el propio.
La conciencia segn Deleuze es idea de ideas inadecuadas, en ella arraigan dos
espejismos la ilusin psicolgica de la libertad que condesciende al espritu un poder
real sobre el cuerpo, se pretende libre y soberana en la accin y la eleccin los hom-
bres se creen libres porque tienen conciencia de sus accionen e ignoran las causas que
las determinan
10
y la ilusin teolgica de la finalidad cuando imagina que todo co-
natus provocado por un objeto exterior que la afecta y mueve internamente tiene una
causa final que por s misma la aficiona y la atrae todas las causas finales son slo
ficciones de los hombres
11
Para el pensamiento de Spinoza esta doctrina finalista
trastorna totalmente la Naturaleza, porque considera como efecto lo que, en realidad es
causa, y viceversa.
12
La conciencia es en su mayor parte inconsciencia el hombre desconoce las ideas
que estn en Dios, exclusivamente en ste se encuentran la totalidad de las ideas de
las cosas singulares y el conocimiento de las diversas relaciones segn los distintos atri-
butos, el ser humano slo es consciente de las ideas que le resultan manifiestas por las
afecciones que causan los otros cuerpos sobre el cuerpo propio estableciendo los nume-
rosos y variables afectos que decretarn conatus. Los conatus en s mismos no son ms
que modos de pensamiento que reflectan las afecciones padecidas, determinan afectos
al devolver conscientemente ideas deformadas de los objetos externos que los provoca-
ron. Por esta razn Spinoza define el deseo como conatus que se ha vuelto conscien-
te.
13
La consciencia producto de afecciones no es intelectiva sino afectiva, es incapaz de
desprenderse de las mltiples ilusiones que la componen, toda toma de conciencia care-
ce de poder, pero como las ideas inadecuadas incompletas y confusas slo son falsas
en relacin al alma singular y a la afeccin del cuerpo la idea inadecuada no se refle-
ja sin liberar lo que hay en ella de positivo
14
El ncleo positivo liberado sirve para
determinar y formar en el alma nociones comunes de extensin, movimiento y reposo

9
cfr. DELEUZE, Gilles. op. cit pp.86-88.
10
SPINOZA. op. cit. p165
11
ibid. p. 75
12
SPINOZA. op.cit. p. 76
13
DELEUZE, Gilles. op. cit. p.73
14
ibid.
3
Nuevo Itinerario Revista Digital de Filosofa ISSN 1850-3578
que expresan las relaciones calificables de conveniencia o disconveniencia en la
composicin de los cuerpos existentes.
15
La conciencia vctima de ilusiones conoce lo que le sucede al cuerpo y lo que le su-
cede al alma pero sin embargo desconoce las relaciones prefijadas y las reglas de com-
posicin y descomposicin. Es mrtir de su propia ignorancia, se olvida que slo es
conciencia de acontecer del paso de un estado afectivo hacia otro y produce ideas in-
adecuadas de efectos-afectos sin conocimiento de causa. Debido a la ignorancia de las
leyes de composicin, sumidos en la maraa de los encuentros y afectos los hombres
son los esclavos de cada cosa, ansiosos e infelices en la medida de su imperfec-
cin.
16

Denuncia acerca de los valores.
De acuerdo a la teora de Spinoza la potencia del alma se define solamente por
el conocimiento que existe en la misma
17
como una afirmacin y desarrollo del des-
pliegue de una idea existente en el alma, ya sea como propiedades que explican una
esencia o a la manera de efectos que remiten a una causa. En la lectura deleuziana la
afirmacin de la idea aceptada como conocimiento consciente distingue para el hombre
dos modos de existencia o dos tipos de conocimiento segn paradigmas de conciencia
y afectos que le corresponden.
18
Bueno y Malo para Spinoza son palabras que no se refieren a las cualidades de
las cosas ni a las virtudes humanas sino a distintos modos de pensar que comparan
dos nociones que el hombre se ha formado de ellas cada uno apetece necesariamente
lo que juzga bueno y, por el contrario, repugna lo que juzga malo.
19
De este modo
Bueno califica lo que al ser humano le es til y Malo aquello que le resulta nocivo o
molesto para la supervivencia del propio ser. Cuanto ms nos esforzamos en buscar lo
que es til, es decir, en conservar nuestro ser y ms tenemos el poder de conseguirlo,
ms estamos dotados de virtud
20

Segn Deleuze en su lectura de Spinoza es de subrayar la originalidad de esta
concepcin spinozista de lo til y de lo nocivo.
21
As bueno y malo en Spinoza tiene
dos sentidos simples un sentido objetivo-relativo de conveniencia o disconveniencia
con la propia naturaleza y un sentido subjetivo-modal que califica dos modos de exis-
tencia para el hombre. En sentido objetivo es bueno todo aquello que favorece la po-
tencia de accin o la ensancha y permite salir del estado habitual de servidumbre a las
afecciones en la que el hombre no vive a cargo de s mismo sino saturado en el azar de
los encuentros
22
y es malo aquello que disminuye o impide en el encuentro el desa-
rrollo del propio potencial, mas las afecciones en s mismas son indiferentes es una
idea con la que el alma afirma una fuerza de existir de su cuerpo, mayor o menor que
antes
23


15
La teora de las nociones comunes, segn Deleuze es de capital importancia en la Etica de Spinoza,
por primera vez aparece sta en el pensamiento del autor y fija el estatuto del segundo tipo de cono-
cimiento que faculta formar ideas adecuadas. DELEUZE, Gilles. op. cit. p. 116
16
DELEUZE, Gilles op. cit -p.301
17
SPINOZA. op.cit. p. 359
18
cfr. DELEUZE, Gilles. op. cit. pp. 74-76
19
SPINOZA. op. cit. p. 278
20
ibid.
21
DELEUZE, Gilles. op.cit. p. 68
22
cfr. SPINOZA. op. cit. p. 253
23
ibid.p.265
4
Nuevo Itinerario Revista Digital de Filosofa ISSN 1850-3578
El cuerpo humano se compone de partes que se mantienen en relacin equilibrada
de movimiento-reposo y tienden naturalmente a conservar su forma en conexin ntima
con las partes del alma, en este sentido es bueno todo aquello que logra que el cuerpo
conserve el equilibrio de movimiento- reposo y de forma que le faculta afectar y abrirse
a afecciones; contrariamente es malo lo que provoca en el cuerpo la alteracin nociva
de la relacin equilibrada de movimiento-reposo y de conexin de forma, ya que le hace
perder la capacidad de afectar y de ser afectado en las series causales de las lneas de
atributos o peor an provoca su destruccin, tal como acontece con la muerte.
En sentido objetivo aquello bueno slo acontece cuando en las circunstancias
del encuentro los cuerpos se componen y as aumentan su potencial, lo malo cuando
en la relacin entre ellos uno de los cuerpos descompone la interna homeostasis del otro
y provoca en el alma de ste una suerte de toxicidad momentnea que lo incita al auto-
emponzoamiento.
24
En sentido subjetivo es bueno quien en forma libre y razona-
ble exteriorice fortaleza y dentro de sus posibilidades tienda a combinarse con todo
aquello que conviene naturalmente a su propio ser y entonces se esfuerce en organizar
encuentros que provean concretamente el engrandecimiento cuantitativo de su potencia
de conservacin y accin; y es malo quien de manera insensata prolongue su debili-
dad y se resigne a ser un esclavo de los encuentros azarosos e intoxicantes y tolere pa-
decer los efectos de estos.
Los valores trascendentes Bien y Mal no son ms que una ilusin de la conciencia
que pervierte el orden causal e ignora que el despliegue sustancial sigue leyes naturales
inmanentes a la misma causa sui como naturaleza que se despliega. La conciencia
habituada creyndose soberana recusa la Naturaleza y confunde a la ley natural con la
obligacin moral, el deber o la prohibicin, la conciencia victima de la ilusin de los
valores concepta que la ley manda al hombre la obediencia y no el conocimiento. Se-
gn Deleuze el concepto de Ley como imperativo es auxiliado por los efectos de re-
velacin que en tanto signos de segunda especie impiden establecer una relacin di-
recta en la relacin de las causas y los efectos, se admite as el error teolgico de no di-
ferenciar el conocer del obedecer, se logra de esta manera hacernos tomar los princi-
pios de obediencia por modelos de conocimiento.
25

La hiptesis de un ser trascendente y creador extranjero de la realidad a la que vigi-
la desacredita, para Deleuze, la ontologa de la sustancia una, nica e inmanente con-
vierte al conocimiento en obediencia, estado de sumisin en el que signos equvocos
productos de ideas inadecuadas brindan el conocimiento de las cosas y de las leyes
relacionales entre ellas como preceptos que determinan opciones Bien-Mal. El conoci-
miento que brinda el modelo cuerpo en cambio es la potencia inmanente que de-
termina la diferencia cualitativa entre dos modos de existencias bueno-malo.
26

Denuncia de las pasiones tristes.
Spinoza en la Etica, sostiene la conveniencia de atender al conocimiento de las pa-
siones que rebajan el potencial de vida y de accin como una manera de luchar con ellas
o de transformarlas las afecciones del odio, de la clera de la envidia...tienen ciertas
propiedades tan dignas de conocimiento como las propiedades de otra cosa cualquiera,

24
La impotencia de conservar su ser, para Spinoza es un defecto de virtud natural, no es por una necesi-
dad de naturaleza sino obligado por causas exteriores por las que el hombre pierde el instinto de conser-
vacin y busca autodestruirse. cfr. SPINOZA. op. cit p. 279
25
ibid.p. 130
26
ibid. p. 35
5
Nuevo Itinerario Revista Digital de Filosofa ISSN 1850-3578
cuya sola consideracin nos causa placer.
27
Es decir no debe despreciarse el conoci-
miento de las pasiones tristes que hacen de la vida una ceremonia de muerte si stas
son posibles de utilizar para ascender a una verdad.
El estudio de las pasiones tristes se basa en la teora de las afecciones. Un modo
existente es un grado de potencia o poder de afeccin, as desde el punto de vista de una
etologa del hombre
28
se distinguen dos tipos de afecciones: las acciones que emanan
del interior y las pasiones que se siguen del exterior. Un individuo mantiene su grado de
potencia constante pero en su interior la potencia de accin y la potencia de pasin var-
an en razn inversa, la pasin satisface el poder de afeccin pero tambin aleja de la po-
tencia de accin e impide empuarla.
En las pasiones humanas son separables las afecciones (affectio) de los afectos
(affectus).
29
Las primeras comprometen al cuerpo y adems a su idea con relacin a
la presencia de un objeto exterior constituyen imgenes ideas, las segundas presentan
los sentimientos que afloran a consecuencia de aquellas imgenes- ideas interiorizadas,
son conocidas como pasiones del alma. El affectus como sentimiento es bivalente es
de alegra o de tristeza y es causado naturalmente por la afeccin, imagen o idea
del estado en la que se encuentra el cuerpo humano en los occursus con otros cuerpos, si
estos provocaron que pasara a una perfeccin mayor o si por el contrario disminuyeron
su potencial de accin.
Cuando un cuerpo se encuentra con otro cuerpo se relaciona y se compone con ste
formando un todo ms poderoso o bien sucede que uno de ellos descompone al otro y
destruye la coherencia interna corporal y anmica, en tanto ser consciente el hombre re-
coge los efectos causados por los encuentros que le acontecieron como afecciones posi-
tivas o negativas, as experimenta alegra cuando otro cuerpo se compone con el suyo
o tristeza si por el contrario el otro amenaza su integridad.
30

El hombre que es conmovido por el affectus de alegra-amor en el encuentro con-
veniente aumenta su potencia de vivir y de accionar pues su fuerza de existir crece ma-
terialmente preparando gradualmente el acceso al punto de conversin en que la afec-
cin como afecto pasa a ser potencial actualizable y el conatus de permanecer en la
existencia se transforma ahora en conatus de experimentar alegra promotora de acti-
vidad.
Las pasiones tristes surgen de un contacto con aquello que se considera un dao a
la integridad o una aproximacin a la muerte El conocimiento de un mal es la tristeza
misma en cuanto tenemos conciencia de ellala pasin que depende de las ideas inade-
cuadas
31
como pasin negativa la tristitia esclaviza y disminuye la capacidad activa
y reactiva, encierra y limita. Las pasiones tristes encarnan el estado ms bajo de poten-
cial y dan ocasin a que germine dentro de la sociedad el hombre alienado por las cir-
cunstancias o por los eventos fortuitos, proclive a desconocer a la Razn este hombre es
dominable fcilmente por la supersticin y los tiranos.
De acuerdo a Deleuze el problema prctico que plantea la tica conforme a Spinoza
es hallar el modo de allegarse pasiones alegres y activas para alcanzar con su mpetu
las ideas adecuadas que si bien todas se hallan en Dios, corresponden al conocimiento
humano de tercer grado que instala en la beatitud. Las ideas inadecuadas convierten al

27
SPINOZA. op. cit -p.158-159.
28
cfr. DELEUZE, Gilles. op. cit. pp. 152-153
29
cfr DELEUZE, Gilles. pp. 62-63
30
cfr. ibid. pp. 28-31
31
SPINOZA. op. cit 329
6
Nuevo Itinerario Revista Digital de Filosofa ISSN 1850-3578
hombre en la causa directa de su propio padecer pero permiten reconocer por contraste
las ideas adecuadas que florecen en los encuentros convenientes. Ya consciente del po-
dero de las ideas verdaderas y no del sentimiento el hombre comprende el orden y la
conexin del plan de las cosas y puede aplicarlo a su vida ya que esta comprensin lo
traslada desde los efectos hacia la causa sui. Todo el camino de la Etica se hace en la
inmanencia.
32

A modo de conclusin
La Etica de Spinoza seala que en Naturaleza naturante est el arquetipo, el origen
y la eficacia de la causalidad finita y para usar en su provecho esta causalidad inherente,
el hombre debe despojarse mediante el conocimiento de ciertas ilusiones a las que est
habituado y resignado, la de la conciencia, la de los valores y la de las pasiones
tristes y as intentar conocer lo que puede su cuerpo en tanto modo de extensin pa-
ra establecer en base a las afecciones que este soporta un mapa vital que sirva para es-
capar del azar que no es asaz fortuito sino tenaz falta de conocimiento y de escucha del
cuerpo.
En el parecer de Deleuze la tica spinozista puede ser til al hombre para establecer
una tipologa de modos inmanentes de existencia con los que pueda derrotar el rumbo
juicio-culpa-sometimiento pues sustituye la oposicin de los valores bien y mal
que aprisionan y desvalorizan al sujeto, por las diferencias cualitativas de modos de
existencia bueno y malo .Ocurren los modos de existencia bueno y malo, pero
el hombre es libre dentro del plan de inmanencia de la sustancia de organizar encuentros
que convengan a su natural y aumenten su potencial. Hay as un modo bueno de exis-
tencia en el que se puede ser potente, expansivo, poderoso y alegre, contrariamente un
modo de existencia en la que se es malo porque se atenta contra s mismo al desertar
hacia la tristeza, el agobio y el autoemponzoamiento.
La Etica spinozista como propuesta de rectificacin ptica vital y activa, aproxima a
la beatitud del tercer grado de conocimiento ejemplaridad en la que el hombre al des-
cubrirse comprendido en la esencia de la Causa Sui se comprende a s mismo como del
linaje de sta y cualitativamente con el mismo potencial, se sabe entonces no slo capaz
de conservar su ser sino adems ser causa segunda de su propia perfeccin y felicidad.






32
DELEUZE, Gilles. op.cit. p. 40
7

También podría gustarte