Renfrew Colin La Nueva Arqueologia

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La nueva

arqueologa

Tr, 3

La hora

3(> Dinamarca
Una comida de hace 2.000 aos

de los pueblos

Los nios que visitan el Centro de Investigaciones Histricas y Arqueolgicas de Lejre, Dinamarca, tienen la oportunidad

de vivir, comer y trabajar como en la edad del hierro. El Cen tro, creado para que los nios y los jvenes conozcan mejor
su propio pasado mediante actividades prcticas, tiene un taller de tejido, una granja del siglo XIX y un taller de alfare ra as como una escuela y un grupo de casas de la edad del

hierro. En la foto, tres alumnos del Centro preparan una


comida segn una "receta" de ese perodo mientras otro tra baja con un telar. Las autopsias de cuerpos humanos perte
necientes a la edad del hierro, admirablemente conservados

en la turba de los pantanos daneses, han proporcionado datos acerca de los alimentos que ingirieron antes de morir
hace 2.000 aos.

El Correo
Una ventana abierta al mundo

Este nmero

Julio 1985
Ao XXXVIII

LA arqueologa, es decir el estudio del pasado del hombre a


travs de los restos materiales de su actividad, ha recorrido

La nueva arqueologa
por Colin Renfrew

un largo camino desde sus iniciadores, los ricos y ociosos aficionados de la Europa del siglo XVI. Los primeros excavadores, se ha dicho, "eran poco menos que ladrones de tumbas"; en cam

Las races del futuro

por Osaga Odak

bio, los arquelogos actuales son especialistas que investigan el pa sado armados de autntica pericia de forenses y de un formidable arsenal de procedimientos cientficos y tcnicos.
Por otro lado, en este final del siglo XX es ms difcil que nunca

12

La ciencia desvela los secretos del pasado


por Tony Hackens
Los anillos reveladores

ignorar los restos materiales del pasado. Hoy se los desentierra to


dos los das con ocasin de los proyectos de desarrollo urbano y de

Era as el rostro de Filipo de Macedonia?


"Perico el de los Pantanos"

las grandes obras de ingeniera. Las nuevas naciones en busca de su propia identidad comprenden la importancia de un patrimonio que
no slo define los logros del pasado cultural de sus pueblos sino que adems constituye un factor esencial del desarrollo nacional. Para

Arqueologa desde el aire


El enigma de Nazca 23 El Templo Mayor de Mxico
por Eduardo Matos Moctezuma

djicamente, una poca como la nuestra abocada al cambio


constante se encara por doquier con su pasado. En este ambiente de cambio la arqueologa adquiere nueva im

portancia y se pone ella misma a cambiar. Sus actividades se extien


den a nuevos mbitos (arqueologa urbana, arqueologa industrial,

28

Los tesoros de Tajti Sanghin por Boris A. Litvinski e Igor Ft. Pichikian

arqueologa sismolgica...). Se elaboran nuevos enfoques tericos y surgen nuevas tcnicas cientficas que han hecho posible cartografiar el pasado de cada pas con mucha mayor exactitud que antes. La clsica imagen del arquelogo armado con su pala est experi
mentando un cambio radical. Un arquelogo moderno forma parte

32

Mohenjo Daro, capital milenaria en peligro


por Syed A. Naqvi

36

Mi vida de arquelogo
por Guo Zhan

de un equipo pluridisciplinario y, en tal calidad, puede acudir a la


teledeteccin desde el espacio como medio de prospeccin, utilizar un ordenador para efectuar tareas tan distintas como trazar el mapa tridimensional de un lugar o tener acceso a los ltimos datos ar
38
2

Latitudes y longitudes
La hora de los pueblos
DINAMARCA: Una comida de hace 2.000 aos

queolgicos, y apelar a la fsica nuclear para analizar sus hallazgos,


adems de recurrir a ciencias tan variadas como la botnica, la en

tomologa e incluso el estudio del polen, de las diatomeas y de las


espinas de 'peces.

De todos modos, la arqueologa sigue tambin significando hoy

la simple excavacin con pala, y para demostrarlo hemos elegido los dos ms importantes descubrimientos arqueolgicos recientes
en Amrica Latina y Asia central. La excavacin, en el centro mis
mo de la ciudad de Mxico, del Templo Mayor arrasado por los

espaoles tras la conquista es una de las ms fascinantes novedades


ltimas de la arqueologa latinoamericana. No menos impresionan te es el descubrimiento por arquelogos soviticos de un fabuloso tesoro de la antigua Bactriana en plena Asia central.

Si la arqueologa es hoy da interdisciplinaria, es tambin, y cada vez ms, internacional. Y es en este punto donde la Unesco viene

desempeando desde hace aos un papel de primera importancia,


sobre todo como resultado de las campaas internacionales para

salvar el patrimonio cultural mundial, que en este nmero simboli


zan las ruinas de Mohenjo Daro, en Paquistn.

Por ltimo, en este que es el Ao Internacional de la Juventud, recordemos que la arqueologa es capaz de entusiasmar a gran n
mero de aficionados, muchos de ellos jvenes, cuya simple existen

cia es ya un reto para los arquelogos modernos que deseen dar un


contenido real a la idea de "democratizar el pasado".
Nuestra portada: Trabajando en las ruinas de Mohenjo Daro.
Foto Ral Zamora, Pars

Jefe de redaccin: Edouard Glissant


Fotos Unesco

Revista mensual publicada en 31 idiomas por la Unesco,

Espaol
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Esloveno Macedonio Servio-croata


Chino

Fins
Sueco Vascuence

Se publica tambin
trimestralmente

Hindi Tamul Hebreo


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Urdu Cataln

Organizacin de las Naciones Unidas para la Educacin, la Ciencia


y la Cultura

Ingls
Ruso Alemn
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en braille, en espaol, ingls,


francs y coreano.

Malayo
Coreano

Blgaro Griego
ISSN 0304-310 X

7, Place de Fontenoy, 75700 Pars.

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Swahili

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Croata-servio

Cingals

N 7 - 1985 - OPI - 85 - 3 - 424 S

La nueva arqueologa
por Colin Renfrew

EN los tres o cuatro decenios ltimos

que se producen en otras regiones. La Nue va Arqueologa ha dejado pues de ser etnocntrica, o al menos trata de no serlo.

cnico hemos podido saber que los prime


ros homnidos fabricantes de herramientas

la arqueologa, es decir el estudio del pasado del hombre gracias a los restos materiales de su actividad, ha cam biado profundamente de carcter. Hubo un tiempo en que se la consideraba como una

En tercer lugar, al acelerarse el desarrollo en numerosas regiones del mundo, tanto en

aparecieron en Africa hace aproximada mente dos millones de aos. Naturalmente,


no se parecan mucho a los hombres moder
nos. Pero incluso los homnidos ms anti

especie de tosca prolongacin de la historia

las ciudades como en las zonas rurales, co mo resultado de la mecanizacin y de la in tensificacin de la agricultura, muchos ele mentos del patrimonio arqueolgico se ven amenazados. La comprensin de esa ame
naza ha dado lugar al nacimiento de una "arqueologa de rescate" o "de salvamen

guos, los del tipo Australopithecus, eran ca

escrita. Respecto de las pocas sobre las que se posean documentos escritos pasaba co
mo un aadido til, como una suerte de
ilustracin de la narracin escrita. Y en

paces de caminar en posicin erecta y de uti lizar la mano para aprehender las cosas, po
sean una visin binocular y tenan otras ca

pacidades qu les distinguan de las especies


animales.

cuanto a la prehistoria, anterior a la escritu

ra, ofreca algo as como una vaga recons truccin del pasado, un sustituto no escrito
del autntico documento histrico.

to" adoptada por numerosos pases como poltica nacional, a la que a veces se bautiza
con el nombre de Gestin de los Recursos

Hace 35.000 aos aparecen los primeros miembros de nuestra propia especie, el Ho mo sapiens sapiens. Tal fecha, de la que
parte el hombre moderno, se ha obtenido
mediante el anlisis con radiocarbono. Esta tcnica de datacin es otra secuela de la fsi

Hoy, como de golpe, la arqueologa ha adquirido una importancia particular, y


ello en un sentido verdaderamente interna

Culturales. Tal poltica entraa esforzarse


por proteger contra toda clase de daos im

cional. Cada continente posee su propio ri co patrimonio arqueolgico, aunque pueda


carecer de documentos escritos sobre su re

portantes lugares de inters histrico y ar queolgico y, al mismo tiempo, reconocer


la necesidad de llevar a cabo excavaciones

ca atmica; gracias a ella cualquier trozo de


materia orgnica (es decir materia derivada

sistemticas en aquellos cuya destruccin no puede impedirse con el fin de que nos en seen cuanto llevan dentro antes de desapa
recer. Junto con este esfuerzo nacional en

moto pasado. Por otro lado, ahora pode mos comprobar con mayor precisin que lo que ocurra, por ejemplo, en las Americas o
en Africa hace dos o tres mil aos tiene tan

de seres en otro tiempo vivientes y que con tiene carbono) puede fecharse en laborato rio, siempre que su antigedad no sea supe
rior a los 40.000 aos.

favor de una arqueologa de salvamento ha

ta importancia para la comprensin de la historia humana como lo que por la misma poca suceda en Asia o en Europa, regio
nes con un historial escrito mucho ms

crecido la conciencia de lo importante que


es el pasado remoto para la identidad de ca

Los resultados as obtenidos en lo que atae a la Europa prehistrica han revolu cionado nuestras ideas. A juzgar por ellos,

largo.

da nacin. Nuestro pasado es algo esencial: una parte principalsima de lo que somos ahora. Y la arqueologa es el nico camino que nos lleva hasta nuestros primersimos
orgenes.

buena parte de lo que ocurri en Europa en


las primeras etapas de la humanidad no tu vo su origen en el Mediterrneo oriental, como se crea antes. Por ejemplo, no es cier

Son varias las causas que se combinan pa ra hacernos presente que la arqueologa de esas regiones no dejemos de lado Aus tralia y el Pacfico forma parte de nuestra
arqueologa, es decir de la constancia mate

to que las pirmides de Egipto sean los pri


meros monumentos de piedra del mundo.

rial de la historia y las realizaciones de la

Hasta hace un siglo se tena una idea poco clara de la antigedad del mundo y una no cin muy vaga de la del hombre: En gran nmero de pases existan leyendas y relatos
sobre la creacin, que generalmente atribu an la aparicin del hombre a un acto de

Algunas de las tumbas lticas de Europa son anteriores, y hoy se sabe que Stonhenge en
Inglaterra y los templos de Malta son con temporneos de esas pirmides.
Pero la importancia de la datacin con s

especie humana, y como tal es parte del pa


trimonio cultural de nuestro mundo.

En primer lugar, la elaboracin de nue

Dios, o de los dioses. Pero nadie poda decir


con exactitud cuando ocurri tal cosa.

vas tcnicas de datacin, particularmente con radiocarbono, ha permitido fechar con seguridad, sin recurrir a la historia escrita,

Hasta 1859, el ao mismo en que Darwin public El origen de las especies, no qued
establecida la antigedad del hombre. Se
encontraron por entonces diversas herra

radiocarbono va mucho ms all. El nuevo mtodo supone que, por primera vez, las zonas que carecan de una historia escrita
pueden poseer actualmente su propia ero-

i l!I
=

los hallazgos arqueolgicos de todas las partes del planeta. Y gracias a la aplicacin
de otra serie de tcnicas tomadas de las cien

nologa exacta. Hoy sabemos, por ejemplo,


que en Australia exista ya una poblacin
humana, los antepasados de los modernos

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2

mientas de slex junto con los huesos de ani

cias, unidas al perfeccionamiento de los m

todos de excavacin, el arquelogo dispone de un arsenal de instrumentos y de mtodos


que puede utilizar para investigar la econo ma, la tecnologa y los sistemas sociales del

males muertos y pudo demostrarse que esos animales y los seres humanos que fabrica
ron las herramientas vivieron hace muchos
miles de aos.

aborgenes, nada menos que hace 25.000


aos. Ahora podemos fechar con precisin

la primera evolucin de las Americas, por


tomar otro ejemplo. As, se ha demostrado

El trabajo de investigacin realizado en


los cien aos siguientes aclar muchas co

pasado (vase el artculo de la pg. 12).


En segundo lugar, con la aparicin de la llamada "nueva arqueologa", los investi

gadores han tenido que redfinir sus objeti vos. Ya no tratamos simplemente de reconstruir el pasado y de elaborar un relato de lo ocurrido en los viejos tiempos. Ahora

sas. Se demostr que nuestra especie naci en Africa y que la mayor parte del planeta fue poblada por los hombres durante el Pa
leoltico, mucho antes del ao 10.000 a.C.

En varias partes del mundo se descubrieron

que los orgenes de la civilizacin maya en Mxico y en los pases vecinos se remontan al ao 2000 a.C. Y ya estamos en condicio nes de comprender la edad del hierro en Africa y apreciar debidamente la originali dad de las figuras de barro cocido y de bronce de Nigeria, algunas de las cuales da
tan de 600 a.C.

intentamos adems comprender por qu cambiaron las cosas y por qu son hoy lo
que son. Para ello la arqueologa necesita

pruebas del nacimiento de la agricultura. En algunas de esas regiones aparecieron las primeras ciudades y se invent la escritura.
Pero cundo ocurri todo esto? Fechar con precisin tales sucesos resultaba sobre

elaborar un marco terico ms claro y po


ner en tela de juicio viejas creencias. Y si nuestra pretensin es comprender cmo y por qu cambian las cosas, el estudio de los procesos que tienen lugar en una parte del mundo puede brindarnos pistas muy valio
sas para penetrar en la comprensin de los

manera difcil. Slo en 1950 permiti el


avance vertiginoso de la fsica atmica ela

Una extraordinaria combinacin de con

diciones climticas y geolgicas ha permi


tido conservar estas huellas de un hom

borar nuevas tcnicas de anlisis arqueol gico. Gracias a la aplicacin del sistema de datacin con potasio-argn a estos dos ele
mentos encontrados en rocas de origen vol

nido en la ceniza volcnica petrificada de


Laetoli, Tanzania, durante unos 3.600.000
aos.

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Estos son slo unos cuantos ejemplos de los muchos que podramos aducir para cada parte del planeta. Todo ello significa que hoy es posible hablar de una prehistoria mundial. Para cada regin podemos
reconstruir la larga secuencia de la evolu

cin humana. Con ello cada pas puede pre


sentar su propia prehistoria perfectamente fechada y definida.
De todos modos, las tcnicas de datacin

representan slo una parte de las tcnicas de

que dispone la ciencia arqueolgica, aun que probablemente son las de mayor impor tancia. Otra forma de investigacin es el anlisis en laboratorio de objetos fabrica dos por ejemplo, herramientas de piedra o piezas de alfarera , anlisis que puede
darnos indicaciones claras sobre la fuente

original del material utilizado. Ello nos per


mite conocer con ms o menos detalle el co

mercio y el intercambio de bienes entre las

poblaciones primitivas y el sistema de distri

bucin en las zonas donde se utilizaban, donde despus fueron enterrados y al final descubiertos por los arquelogos. Tambin las ciencias de la vida han apor
tado su contribucin. Gracias al estudio de

los desechos de las sociedades primitivas es hoy posible tener una idea muy precisa de su rgimen alimenticio y, por tanto, de su eco noma de subsistencia. Por ejemplo, las se
millas carbonizadas encontradas en los ba

sureros pueden revelar al especialista que las estudia qu tipo de cosechas cultivaban los primeros agricultores. Por el anlisis de

los huesos de animales puede saberse qu


animales salvajes se cazaban y si se criaban

animales domsticos y en qu nmero y


proporcin.

Se ha llegado a decir que la arqueologa


moderna no es ms que el estudio de los desperdicios del pobre. Sin irona: la cosa es ms que cierta. Porque estudiando esos res tos ms bien modestos podemos trazar todo

Arriba, excavacin de un tmulo, bajo la


lluvia y con buen tiempo, segn sendos grabados del Gentleman's Magazine de
1852. Abajo, una excavacin cientfica

un panorama de la cambiante economa de

las sociedades primitivas que puede ense arnos mucho ms sobre la vida en ellas que los ms preciosos objetos de oro o de jade.
Sin embargo, las novedades ms intere
santes de la arqueologa actual no son las conseguidas en el laboratorio, los mtodos
de datacin o el estudio del medio ambiente

moderna en un solar paleoltico del depar


tamento del Oise, Francia.

primitivo. Ms bien tienen su origen en un cambio de perspectiva, y de filosofa. La


Nueva Arqueologa comenz en los aos

60, en los Estados Unidos y en Gran Breta

a, como resultado de la insatisfaccin que producan los supuestos y las perspectivas de la arqueologa tradicional, cuyas conclu
siones parecan a menudo basadas en un

marco histrico muy simplificado. El voce ro principal de la Nueva Arqueologa fue el profesor Lewis R. Binford, de la Universi

dad de Nuevo Mxico, Albuquerque, cuya


aportacin fundamental consiste en haber

mostrado que para comprender el pasado no basta con sacar a la luz los objetos y he rramientas de las edades pretritas y escribir un texto intuitivo basado en las impresiones
que nos producen. Por el contrario, nuestro cometido debe

ser estudiar el proceso cultural, es decir c


mo y por qu cambian las culturas huma

nas. Tenemos que preguntarnos con mucha

ms insistencia cul es la explicacin de to

das las diferencias, de la variabilidad que observamos en el .patrimonio arqueolgico.


Ello significa que tenemos que elaborar una

teora y una metodologa mejores para la interpretacin arqueolgica.

Templo megaltico prehistrico de Ggan-

tija, en la Isla de Gozo, Repblica de Malta.


Gracias a las modernas tcnicas de data

en gran medida al estudio de los cazadoresrecolectores prehistricos.


Las mismas tcnicas de estudio pueden

Los arquelogos de este nuevo tipo tra tan de comprender por que cambian las co sas, lo que significa buscar explicaciones a travs de una voluntad de generalizacin.
Es pues necesario construir teoras, exacta mente igual que hace el cientfico cuando trata de comprender la naturaleza. Esas

cin cientfica se ha podido demostrar que

algunos de los templos prehistricos de piedra existentes en Malta, caracterizados por la hbil utilizacin de los materiales
locales, fueron construidos hace ms de

aplicarse tambin a las comunidades urba


nas. En Tucson, Arizona (EUA), el "Gar

bage Project" que dirige el profesor Wi


lliam J. Rathje ha estudiado los desperdi
cios de familias instaladas en varios distri

5.000 aos, mucho antes de lo que se pen saba. La Unesco colabora con el gobierno

tos de la ciudad. Como los desperdicios se

teoras se evalan despus y a veces se las confronta con los hallazgos arqueolgicos. Por ejemplo, podemos tratar de com prender cmo se construy una determina da ciudad y cmo surgi la civilizacin en una zona dada digamos Roma, Mohenjo Daro o Egipto. Para ello necesitamos dis poner de un conocimiento ms general de los procesos que llevaron al incremento de la poblacin y de la complejidad social en diversas culturas humanas. Luego podemos analizar hasta qu punto el caso de Roma, de Mohenjo Daro o de Egipto se ajusta a ese patrn general y tratar de determinar los rasgos peculiares de cada una de esas tres
culturas.

de Malta en la preservacin y presentacin

depositan en los cubos de la basura, los


miembros del Proyecto tuvieron que con
vertirse ellos mismos en basureros, reco

de los importantes monumentos y'lugares del pas.

giendo los desechos de los cubos y estudin


dolos en el laboratorio. La cosa puede pare

cer estrafalaria, pero los resultados han si


ellos encontramos se encuentran exacta

do muy interesantes.

mente donde estn. Para estudiar esas cues

tiones ha surgido la nueva rama de la etnoarqueologa, la cual implica que el especia lista vaya a vivir en una determinada comu nidad contempornea cuyo modo de vida sea en algn respecto similar al de la socie dad prehistrica o histrica que se trata de comprender. El etnoarquelogo estudia c mo se produce el documento arqueolgico en esa sociedad contempornea.
Lewis Binford fue uno de los primeros ar

Este proyecto viene a ilustrar la idea de que las tcnicas de la arqueologa son ade cuadas para estudiar la cultura material de
las sociedades humanas en todo lugar y po

ca, antigua como moderna. El arquelogo contemporneo no piensa ya en trminos de culturas "primitivas" y "avanzadas". El
cazador-recolector de hoy o de ayer es tan
interesante como el habitante de las ciuda

La Nueva Arqueologa es ms optimista que la tradicional. Para ella no es vlido el aserto de que la arqueologa no puede ense arnos nada acerca de la organizacin o de la vida religiosa de las sociedades pretritas, como afirmaban muchos arquelogos de
corte tradicional. Ms bien tenemos que es

des; uno y otro forman parte de la rica va


riedad de la cultura humana.

quelogos que hizo tal cosa. Lo que a l le


interesaba eran los cazadores-recolectores

del periodo musteriense, hace 40.000 aos. Vea Binford claramente que la mejor ma
nera de comprender los documentos ar

Hay otra razn que justifica el lugar que la arqueologa moderna ocupa en el mundo actual. La arqueologa tradicional sola ex plicar las cosas en trminos de "difusin"
de la cultura. En los aos ltimos algunos

forzarnos por elaborar unas cuantas ideas razonables que nos permitan interpretar los datos relativos a esos aspectos de la socie dad, como respecto del rgimen alimenti cio, la tecnologa, etc. A esta arqueologa de nuevo cuo le in
teresa tambin vivamente analizar con ms

queolgicos de esos hombres primitivos era


ir a estudiar en detalle los documentos ar

estudiosos han comprendido que ste era a

queolgicos de una comunidad viviente de


cazadores-recolectores. Eligi con tal fin a

veces un punto de vista ms bien colonia lista para el cual las novedades interesantes
se producan nicamente en unos cuantos centros privilegiados. Hoy comprobamos que, para compren der los cambios histricos y sociales, tene

los esquimales Nunamiut de Alaska, con los que se fue a vivir, participando en sus expe
diciones de caza. Y como no era buen caza

dor, haca de carnicero para el grupo. Ello le permiti estudiar cmo se desembaraza ba la comunidad esquimal de sus desperdi

cuidado cmo se constituye el documento

arqueolgico mismo, es decir cmo los lu


gares que excavamos y los objetos que en

mos que conocer los procesos que se produ


cen localmente en la zona estudiada. Hay

cios, y sus observaciones han contribuido

que analizar los cambios en la estructura so

misin comercial para dar cuenta de la erec

cial, la poblacin, la economa y la tecnolo

cin del monumento, ms fcil de explicar


como obra de la sociedad africana de su

ga. Los intercambios con otras zonas y la importacin de nuevas ideas pueden desem pear, y en efecto desempean, un papel en
ese proceso, pero no son necesariamente los
elementos esenciales.

tiempo. Lo mismo ocurre con Stonehenge


en Inglaterra, considerado generalmente como resultado de influencias y de conoci mientos prcticos venidos del mundo medi
terrneo. Hoy no tenemos necesidad de re

Por ejemplo, durante muchos aos se

crey que las ruinas del Gran Zimbabue, en el pas africano que hoy lleva el nombre del
monumento, deban de ser obra de hbiles
Fogn
harvif

currir a colonizadores mediterrneos para explicar el monumento; la explicacin es de


carcter local.

inmigrantes del norte, o quiz resultado de


los contactos con los comerciantes rabes.
Comportamiento ODtarvado nun

Sencillamente no se admita que pudieran


ser obra de los mismos habitantes, es decir

uinittfi, o* Anakliqtauk {Alaska)

de la poblacin africana. Y, sin embargo,


hoy todas las pruebas (incluida la del radio-

Para hacerse una dea clara de los docu

carbono) convergen en mostrar que esa era justamente la verdad del caso. Hoy no tene
mos necesidad de los inmigrantes o de una

mentos arqueolgicos dejados por los cazadores-recolectores del periodo mus-

Esto no quiere decir que hayamos de pen sar siempre en cada pas como algo aislado. Pero s nos mueve a afirmar que cada na cin debe estimular la investigacin de su propio pasado por medios arqueolgicos. En nuestros das la mayora de los pases sienten el orgullo de su patriomonio cultu ral y algunos poseen admirables museos, como los de Ciudad de Mxico y El Cairo,
para exhibirlo.

teriense hace 40.000 aos, el arquelogo


norteamericano Lewis Binford decidi

De los desperdicios
al modo de vida

estudiar documentos similares en comunidad moderna de

una

Por otro lado, es cada vez mayor y ms general el afn de conservar ese patrimonio cultural. La Unesco patrocina una serie de
proyectos, como la campaa para salvar los

cazadores-

recolectores: los esquimales Nunamiut de Alaska. Para tratar de comprender c


mo perciban y utilizaban su entorno los

En 1973 se emprendi el "Tucson Garbage


Project", concebido por un grupo de an troplogos de la Universidad de Arizona,
EUA, a fin de estudiar la cultura material de una ciudad moderna "excavando" en

restos de la antiqusima ciudad de Mohenjo


Daro en Paquistn (vase el artculo de la

cazadores y el tipo de documentos ar queolgicos que creaban con sus actos,

pg. 32), y son muchos los pases que tienen su propio programa de salvaguardia y pro teccin de monumentos. Este aparece hoy da como un problema internacional. Algu nos de sus aspectos van a examinarse en el

Binford consign grficamente todos los


detalles de la vida diaria de los nunamiut.

la basura, considerada como un indicio


del modo de vida de sus habitantes. Dice

Arriba, un esquema de las actividades

que Binford observ en un matadero y


carnicera de esa comunidad.

el profesor William L. Rathje, director del Proyecto: "Creemos que las hiptesis acerca de las relaciones que existen entre la cultura material y el comportamiento de las civilizaciones del pasado pueden
ser sometidas a prueba en una sociedad

Congreso Arqueolgico Mundial que se ce


lebrar en septiembre de 1986 en Sout

hampton y Londres (Inglaterra) (vase la nota de la pg. 38). El secretario nacional britnico, profesor Peter Ucko, de la Uni versidad de Southampton, espera que asis tan al Congreso representantes de la mayo ra de los pases. Los participantes estudia

conocida, actual. En segundo lugar, pen


samos que la aplicacin de mtodos ar queolgicos al estudio de tal sociedad puede proporcionarnos un valioso cono cimiento de ella". En la foto, alumnos del

rn los problemas de la conservacin y de la


interpretacin, a la luz de esa nueva con

profesor Rathje clasifican, analizan y pe


san cuidadosamente los desperdicios de

ciencia internacional que se est creando en


torno a nuestro pasado prehistrico. La arqueologa sola ser una actividad

una casa para deducir qu consume y c mo vive la sociedad contempornea. Tan original y sistemtico estudio de la socie
dad moderna de los Estados Unidos con

para aficionados con tiempo libre, basada a menudo en los centros ms prsperos del Occidente industrializado. Hoy es un cam

mtodos arqueolgicos es el prototipo de


otros estudios similares que se estn rea
lizando no slo en diversas ciudades de

po de enorme inters para muchsimas per


sonas en todos los pases del mundo. Tal co

ese pas sino tambin en Ciudad de Mxi

co y en Sidney, Australia.

sa se debe en parte a que gracias a ella cada uno de nosotros tiene la posibilidad de co nocer ms a fondo su propia historia nacio
nal. Pero centrarse exclusivamente en la

propia nacin es puro chauvinismo. La ar

queologa nos brinda tambin la posibilidad

de ver la historia primitiva de cada pas co mo parte de la historia general de la especie


humana en su conjunto. Y la Nueva

Arqueologa nos invita a esforzarnos por


conocer mejor la gran diversidad de la cul

tura humana, tanto ahora como en el pasa do. Ello es hoy ms fcil gracias al arsenal de tcnicas que nos ofrece la ciencia y al ri gor y la conciencia crtica de que ha dado
muestras la Nueva Arqueologa.

COLIN RENFREW, britnico, es profesor de ar

queologa de la Universidad de Cambridge y


miembro del Saint John's College de la misma ciudad. Se ha especializado particularmente en prehistoria de Europa y en arqueologa terica. Entre sus publicaciones figuran Before Civiliza
tion: the Radiocarbon Revolution and Prehistoric

Europe (Antes de la civilizacin: la revolucin del

radiocarbono y la Europa prehistrica) y Approa


ches to Social Archaeology (Aproximaciones a la
arqueologa social).

Las races del futuro

por Osaga Odak

"Cjelo.

Plpalo.

Deshazlo. Sabes de

EN el Tercer Mundo la aplicacin de la

La arqueologa naci y se desarroll co

qu se trata? Tal es el mensaje que se


transmite estos das a los nios en Kenia
cuando visitan uno de los museos nacio

teora del desarrollo tiene por finali


dad esencial aliviar el sufrimiento

mo disciplina en Europa. Pero justo por la poca en que se constitua en disciplina au


tnticamente cientfica el continente africa

de los hombres y ofrecerles la posibilidad de


vivir una vida relativamente confortable.

nales. " Esta informacin que recoga ha


ce poco un diario de Nairobi pone de relie ve los objetivos esenciales de los servi cios educativos del museo de la capital

no estaba sometido al proceso de la coloni


zacin. Precedieron a los colonizadores los

Para ello es menester proporcionarles mejo


res servicios de salud, una educacin sufi

exploradores y

misioneros

para los

que

keniana: mostrar que el aprendizaje pue


de ser algo activo y agradable. En la foto, un grupo de estudiantes palpan y obser
van un molde de hombre primitivo en el
Museo Nacional de Nairobi.

ciente y adaptada y sistemas eficaces de co

Africa era un continente habitado por pue blos primitivos que necesitaban ser rescata dos de la barbarie y civilizados, esencial mente gracias a la religin cristiana. A los misioneros no les parecan dignos de preservarse y desarrollarse los valores y las religiones de Africa. Por otra parte, los sistemas religiosos que aquellos imponan
se basaban en sistemas culturales forneos

municacin; es tambin preciso mejorar la agricultura y emprender el camino de la


industrializacin.

Sin embargo, se ha menospreciado en ge


neral el papel de la cultura (y, dentro de ella, de la arqueologa) en el desarrollo.

Pero, para que el desarrollo tenga sentido,


habr de abarcar todas las esferas de la acti

vidad humana,

incluida naturalmente la

que resultaban incompatibles con las cultu


ras africanas. Ello era una forma de minar

cultura. Y debe hacerse hincapi en que la participacin de sta en el desarrollo es fun


damental para la estabilidad del esfuerzo que a l conduce.

la estructura entera de las religiones del con


tinente. Los santuarios fueron sustituidos

por iglesias, mezquitas y templos, se profa-

n los lugares que eran sagrados para los africanos y los objetos que testimoniaban el
saber tecnolgico del continente antes de la

do que hasta cierto punto continuaran los


programas del periodo colonial.

colonizacin desaparecieron bajo una ola


de productos industriales.

A medida que los pases africanos conse


guan la autosuficiencia en materia de mano de obra, la situacin comenz a cambiar

Tal era la situacin que encontraron los arquelogos europeos y norteamericanos al llegar a Africa. Llegaban al continente ne
gro no para salvar su cultura y su historia de
la destruccin sino esencialmente llevados

gradualmente. Se hicieron esfuerzos por in tensificar la investigacin sobre la historia de Africa, pero como eran muy pocos los documentos escritos en que se reflejaba esa
historia, los historiadores africanos se vol

por sus proyectos y sus ambiciones. De to

dos modos, su presencia tuvo algunos efec tos secundarios de carcter positivo ya que
su labor, orientada hacia la reconstruccin

vieron hacia otras fuentes. En particular, la arqueologa se hizo muy popular como ins trumento de investigacin histrica y, en tal

calidad, fue introducida como disciplina


auxiliar en los departamentos de historia de
varias universidades africanas.

de la evolucin cultural y el desarrollo de los

mtodos y de las teoras arqueolgicos, no slo permiti descubrir gran nmero de obras del pasado cultural africano y echar

(Wr"

los cimientos de futuros trabajos, sino que


dio como resultado una revalorizacin de

Pero la atraccin de la arqueologa es to dava limitada. Ello se debe en parte a que


las excavaciones, elemento esencial de la ac

ese pasado.
Los colonizadores de Africa no estimula

tividad arqueolgica, obligan a intervenir en los terrenos de inhumacin y a tratar con

restos de esqueletos y otros lugares y obje


tos relacionados con ciertos tabes. De ah

ban la conciencia basada en la tradicin ni

siquiera en aquellos pases donde haban

creado instituciones que se ocupaban de an tigedades y de arqueologa. Pero, tras la independencia, se produjo un movimiento hacia lo que podramos cali
ficar de "renacimiento cultural". El estu

que, para el hombre de la calle, el arquelo go sea una especie de "sepulturero" que practica una profesin anormal.
La modernizacin ha tenido tambin una
En 1981, Ao Internacional de las Perso

dio de las culturas tradicionales y ciertas disciplinas culturales como la arqueologa entraron progresivamente en los planes de
estudios. Sin embargo, el nmero insufi

influencia negativa. Los progresos moder nos en materia de agricultura y de construc cin de carreteras, represas y centrales hi droelctricas han venido a destruir lugares que antes se consideraban sagrados o vene
rables y ello ha incitado a ciertos vndalos

nas Impedidas, el Comit Nacional Tune

cino del Consejo Internacional de Mu seos (ICOM) traz un plan de utilizacin de los servicios musesticos para ayudar
a los nios mentalmente deficientes. A la

derecha, un grupo de nios subnormales,

ciente de educadores nativos con prepara cin adecuada y la elaboracin de los pro gramas educativos casi exclusivamente por
expertos extranjeros tuvieron como resulta-

a destruir otros sitios sagrados con la espe ranza de encontrar tesoros ocultos o simple
mente por diversin. Todo esto ha suscita

que hacen su primera visita experimental


a un museo arqueolgico, el Museo Na
cional del Bardo, Tnez, examinan el

do un ambiente nada respetuoso para con la

cultura tradicional, falta de respeto que se


ha extendido a disciplinas tales como la ar

enorme pie de una estatua de Jpiter. Arriba, dibujo realizado despus de la vi sita por uno de los nios, Jaled Zarruq. El plan tunecino ha demostrado que los ni os con deficiencias psquicas pueden beneficiarse del estmulo que suponen las visitas peridicas a los museos.

queologa y la antropologa que estudian


Cabanas para estudiantes en el Centro de
esa cultura.

Estudios Musesticos de Jos, en Nigeria.

Desde la independencia la influencia de

los arquelogos extranjeros y de las funda

ciones de otros continentes que financian proyectos arqueolgicos sigue presentando


aspectos a la par positivos y negativos. Por ejemplo, los ltimos progresos realizados

en el estudio de los orgenes del hombre, particularmente en Africa oriental, han


atrado la atencin del mundo sobre el re

moto pasado del continente negro. Tam


bin pueden haber dado a los no enterados

la impresin de que la arqueologa africana no tiene problemas y que sus trabajos avan
zan sin dificultades.

Sin embargo, el hecho es que esos estu dios tienen por objeto periodos anteriores a
la aparicin del hombre moderno. Cabe

preguntarse, por ejemplo, hasta qu punto


los estudios centrados en torno a la investi

gacin del origen del hombre contribuyen al conocimiento de la historia y de la cultura de los actuales pueblos africanos. Un go
bierno consciente de la necesidad de cono

cer el pasado general de su pueblo no puede


apoyarse casi exclusivamente en un solo

aspecto de la historia humana, por impor


tante que sea, que tiene muy escasa relacin

con su pueblo, ignorando en cambio otras

zonas vitales para desarrollar y enriquecer


la conciencia de su identidad cultural.

Hay otro problema consistente en que, dada la escasez de fondos de origen interno, los arquelogos africanos recaban y reciben
ayuda de fundaciones y organismos de fi

nanciacin extranjeros. Aunque ello ha per mitido llevar a cabo una serie de trabajos que de otro modo no se hubieran hecho,

10

hay dos importantes efectos negativos que no cabe olvidar. En primer lugr, el sistema
tiende a incitar a las autoridades locales a

vestigacin de acuerdo con las diferentes pocas y aspectos de la arqueologa.


Armada de una poltica razonable y de un

entre ellos el inters por sta, realzar su po sicin en los crculos universitarios y refor zar su imagen pblica. La arqueologa proporciona datos que contribuyen a la reconstruccin de la histo

no ocuparse de la labor arqueolgica en sus planes de desarrollo con el pretexto de que los fondos necesarios vendrn del extranje
ro. En segundo lugar, esas fundaciones y organismos extranjeros suelen prestar su

conocimiento de las prioridades nacionales, esa organizacin ajustara la labor arqueo


lgica a las necesidades del desarrollo na

ria de pueblos cuyo pasado apenas o nada


se refleja en los documentos escritos. En los vestigios descubiertos por los arquelogos se expresan los orgenes y el desarrollo de la cultura de un pueblo. Algunos de los luga

cional y facilitara informacin actualizada


sobre el potencial arqueolgico del pas.

ayuda nicamente a los proyectos que ellos


mismos seleccionan. En consecuencia los

Normalmente tendra tambin a su disposi


cin documentacin detallada sobre los re

arquelogos locales se ven obligados a con

cebir sus planes de investigacin de modo


que se ajusten a los dictados de los organis
mos financiadores. De este modo las funda

cursos culturales del pas, incluido un in ventario de los lugares y monumentos ar queolgicos basado en los trabajos ya reali
zados as como elementos y datos de inters

res arqueolgicos excavados podran trans formarse en museos al aire libre o en par ques culturales. Los lugares, tesoros y objetos arqueol
gicos pueden constituirse en smbolos que

ciones extranjeras pueden influir en el de


sarrollo de las actividades arqueolgicas de

un pas sin necesidad de que intervengan in vestigadores forneos.

(notas de campo, informes, publicaciones y otros materiales inditos) reunidos en su


centro de documentacin.

Todo esto pone de relieve la necesidad de una poltica arqueolgica nacional coheren
te y perfectamente definida que se apoye en

una legislacin y unos recursos financieros adecuados. Esa poltica debe definir unas l
neas directrices claras sobre las relaciones

entre la arqueologa y otras disciplinas cul turales; debe tambin ocuparse de planifi
car en cierto modo la formacin del

personal.

Una institucin arqueolgica dotada de un nmero suficiente de arquelogos loca les e inspirada en una poltica perfectamen te definida podra desempear un papel muy positivo. Coordinando las actividades de los investigadores locales y extranjeros podra evitar la duplicacin de actividades y distribuir adecuadamente el trabajo de in

El pblico tiene aun que percatarse del papel que la arqueologa debe desempear en el desarrollo moderno, y son pocos los africanos que se sienten atrados por ella. Lo normal es que en cada pas de Africa existan slo un puado de arquelogos pro fesionales, a veces nada ms que uno. La batalla por el reconocimiento pblico de la arqueologa no se ha ganado todava, ni si quiera en los crculos universitarios. El pro blema consiste en sacar a la arqueologa de
las covachuelas del elitismo acadmico e

intensifican el sentimiento que un pueblo tiene de pertenecer a un territorio y a una tradicin histrica y cultural. El sentimien
to de la identidad cultural es la base de la

conciencia y la realizacin de si mismo que abre vastas perspectivas para la creatividad

individual o colectiva. De ah el importante papel que la arqueologa puede desempear


en el desarrollo de cualquier nacin.

, OSAGA ODAK, keniano, es un antroplogo cultural especializado en arte rupestre, adminis tracin de recursos culturales y estudios tnicos.
Es codirector de la Oficina de Investigaciones Ar

instalarla en medio del pblico.


Los jvenes son hoy la mayora en los
pases del Tercer Mundo y es con ellos con

queolgicas y Etnogrficas de Kenia y coordina


dor de investigaciones culturales del Departa mento de Cultura del Gobierno de su pas. Es,
asimismo, presidente del Comit Nacional Kenia

quienes se tiene que ganar la batalla por el reconocimiento pblico de la arqueologa. De ah la necesidad urgente de estimular

no del Consejo Internacional de Monumentos y


Lugares Histricos.

11

La ciencia desvela los

del pasado
LA arqueologa naci en la Europa del siglo XVI como un

por Tony Hackens

guos, a consignar la evolucin de los estilos y a buscar la huella de


las influencias culturales recprocas segn un criterio esttico y una suerte de "tipologa" de los objetos estudiados. En cambio, el arquelogo de hoy vive generalmente en un mun

vastago del fervor erudito del Renacimiento. Muchos de los

primeros

arquelogos

fueron

coleccionistas

quienes

movan un inters esttico por las cosas de la Antigedad y un de


seo de reconstituir el teln de fondo de los acontecimientos narra

do muy alejado de las preocupaciones de los coleccionistas erudi tos y de las excavaciones de prestigio y se halla en el centro de un

dos por los escritores antiguos.

Hasta comienzos del siglo XX generaciones enteras de arquelo gos se dedicaron a redescubrir y excavar importantes solares anti

grupo de especialistas de diferentes disciplinas cientficas. Traba jando en estrecha colaboracin con stos y aprovechando los m-

Los anillos reveladores


A fines el siglo XV Leonardo de Vinci descubri que en el tron
por los arquelogos comparndolas, visualmente o mediante

co de los rboles se formaban crculos concntricos segn las


estaciones. En el siglo XX la dendrocronologa (datacin a partir de los anillos de los rboles que se van aadiendo cada ao du

una computadora, con las cronologas modelo establecidas en


cada regin.

Los pinos de la especie Longaeva que crecen en la cordillera


de las White Mountains de California han constituido un instru

rante los primeros periodos de su crecimiento) ha llegado a


constituir una ciencia. Cada uno de esos anillos es nico (ms

mento nico en la elaboracin del nuevo procedimiento de data


cin debido a que viven hasta una edad muy avanzada. As, el

ancho o ms delgado segn las condiciones en que creci la

planta) y la alternancia entre ellos no se repite nunca debido a que las variaciones anuales del clima jams son iguales. Los cientficos han establecido una cronologa segn los anillos de
los rboles traslapando los crculos concntricos de los rboles

Dr. C.W. Ferguson, de la Universidad de Arizona, ha establecido


una secuencia continua de anillos que abarca los 8.500 aos lti

mos (vase la portada posterior) y confa en que llegue a conte


ner un mnimo de 10.000 aos. Esta secuencia y otras encontra das en diferentes lugares del mundo han servido para rectificar algunas fechas establecidas mediante la utilizacin del radiocarbono o carbono-14, otro mtodo importante de datacin que emplean los arquelogos.
Descubierta a fines de los aos 40, la datacin con carbono ra

vivos con los de la madera muerta (diagrama de abajo). As pue


den datarse muestras de la madera de los objetos descubiertos

diactivo se basa en el hecho de que los organismos vivos absor


ben el radiocarbono de la atmsfera; cuando mueren, el carbo

no se desintegra a un ritmo constante y, midiendo la cantidad

que de l queda en una muestra de materia orgnica, tal como el carbn o los huesos, puede determinarse la poca de que da tan los restos de un animal o de una planta. Sin embargo, cuan
do ios cientficos analizaron el contenido de carbono-14 en los

anillos de rboles cuya edad se conoca, descubrieron conside

rables discrepancias entre sta y aqul. Mientras ms se retro


cede en el tiempo, a partir del ao 1000 a.C, las fechas obtenidas

mediante el carbono-14 se apartan cada vez ms del calendario real. Esto se explica porque la datacin con carbono radiactivo se basaba en el supuesto de que los rayos csmicos que produ
can el carbono-14 haban bombardeado la Tierra con una inten

sidad uniforme, pero en la realidad el carbono-14 presenta fluc tuaciones. Hoy da se han establecido cuadros de calibracin de los anillos de los rboles que convierten los aos-carbono-14 en

aos del calendario. Y resulta extraordinario pensar que algunas


aldeas lacustres suizas del cuarto milenio a.C. pueden datarse
ya no en milenios ni en siglos sino en el ao mismo en que fue

ron talados los rboles con que se construyeron. A la izquierda, corte transversal del tronco de un roble del par
que de Fontainebleau, derribado en 1952. Contando sus anillos

pudo establecerse su edad y, dado que comenz a crecer hacia

la poca de la matanza de la San Bartolom, en Pars, en 1572,


ha recibido el nombre de "roble de la San Bartolom".

1852

Luis Napolen se proclama emperador

' 1870 Proclamacin de la Tercera Repblica Francesa

189

Inauguracin de la Torre Eiffel

1914 Primera Guerra Mundial

>;

1939 Segunda Guerra Mundial

m^i'ii'Mtkmm^
IfMllA'llliil
n
Arboles muertos Madera muerta

todos que se utilizan en las ciencias naturales, los arquelogos mo dernos tratan de descifrar los mensajes acumulados en los archivos palpables de la actividad humana, es decir las variadas huellas deja

de algunas complejas tcnicas cientficas que se utilizan actual


mente en materia de prospeccin, excavacin, anlisis, datacin y preservacin de los vestigios del pasado. Dnde excavar. Uno de los problemas con que se enfrentan los

das en una gran diversidad de materiales. Y aunque no sigan los pa sos de Heinrich Schliemann en Troya y Micenas ni los de Lord Car narvon en Egipto, ni experimenten la emocin de descubrir tumbas rebosantes de objetos preciosos y de joyas, realizan una tarea hu manista igualmente valiosa al utilizar las ms avanzadas tcnicas
cientficas para mejor comprender ciertos aspectos de la vida, del entorno, del paisaje y de la tecnologa del pasado.
Excavar supone destruir y, a diferencia de los recursos naturales,

arquelogos es saber dnde excavar. A veces resulta til estudiar la literatura y los documentos antiguos; en otros casos, los indicios
deben buscarse desde el aire o en el suelo. La utilizacin de la foto

grafa area en arqueologa (vase el recuadro la pg. 18) data de comienzos del siglo, cuando se tomaron fotos de Ostia, el puerto de Roma, desde un globo aerosttico. La aplicacin sistemtica de este procedimiento ha permitido estudiar el trazado de las ciudades
romanas antes de comenzar las excavaciones, localizar los restos

el patrimonio arqueolgico no se renueva. En estas considera

ciones, aparentemente elementales, se basa la misin del arquelo go, el cual debe identificar el ms mnimo indicio de la pasada acti
vidad humana, analizar cada aspecto de la informacin que pueda

de caminos y de casas y observar los sistemas de aprovechamiento


de la tierra. Ms recientemente, la teledeteccin desde satlites ha

ampliado considerablemente la gama de posibilidades de la pros


peccin area.

obtener empleando para ello todos los mtodos disponibles y eva


luar su interpretacin mediante un razonamiento que pueda luego
someterse a prueba con computadora.

En los trabajos de campo se ha difundido considerablemente el


empleo de la resistividad elctrica (o resistencia especfica) para de tectar murallas o zanjas enterradas. Tal mtodo consiste en hacer pasar una corriente elctrica a travs del terreno para medir la re-

El presente artculo, con sus recuadros e ilustraciones, trata de proporcionar una informacin sobremanera simplificada y selectiva

J
m

SC'
r

'

Estos tres dibujos del solar de la Troya antigua revelan algunos


de los cambios tcnicos y conceptuales que se han producido
en la esfera de la arqueologa desde el siglo pasado. Arriba, un

corte transversal que data de 1879,

publicado por Heinrich

Schliemann. En l se indica la acumulacin de escombros que

para el gran arquelogo alemn constituan un obstculo impor tante en su bsqueda de la Troya homrica. El dibujo del centro
es un corte vertical esquemtico de la colina artificial de Troya,

realizado por Carl Biegen, quien dirigi las investigaciones ar queolgicas de la Universidad de Cincinnati en ese solar de 1932 a 1938. La preocupacin fundamental de Biegen era analizar estratigrficamente los diferentes niveles de la colina. El dibujo de abajo, recientemente publicado, indica no solamente la estratigrafa sino tambin los tipos de tierra de las distintas ca pas a fin de reconstituir el medio ambiente de los diversos perio
dos histricos.

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13

sistencia del suelo, variable segn la humedad. Los buscadores de tesoros utilizan a menudo detectores de metales en algunos pases

Los arquelogos de la generacin siguiente elaboraron gran can


tidad de documentos, dibujaron cortes verticales y horizontales del

donde, emplendolos de manera indiscriminada e irresponsable,


han destruido el patrimonio arqueolgico. Los tcnicos norteameri canos y suecos han construido recientemente una camioneta equi

terreno y cuadricularon los solares con unidades de tamao unifor me a fin de "leer" la superposicin de los estratos y analizar la rela
cin de stos con los niveles del suelo que estuvieron alguna vez habitados y con las capas de construcciones y de ruinas. Hicieron asimismo una descripcin minuciosa de cada vestigio encontrado durante la extraccin metdica de la tierra, empleando a menudo

pada con rayos lser capaces de detectar estructuras enterradas a cuatro metros de profundidad en algunos terrenos de turba.
Excavacin. El mtodo ms importante que los arquelogos

modernos emplean llegado el momento de efectuar las excavacio nes es el estudio de la estratigrafa, o sea la disposicin del material arqueolgico en estratos o capas superpuestas. Las primeras exca vaciones que se realizaron en Roma en el siglo XVI y en Pompeya
y Herculano en 1717 consistieron ms que nada en recoger objetos

instrumentos de precisin para localizar la posicin exacta de cada


una de las ruinas.

La generacin actual de arquelogos suele tomar gran nmero


de muestras de la tierra, del polen y del carbn encontrados en las excavaciones. Ello permite deducir de los restos de un edificio c

y el propio Schliemann admiti haber excavado (y destruido) en Troya muchos estratos recientes antes de llegar a las capas arqueo

mo era ste originalmente, reconstituir el medio ambiente e indentificar las ocupaciones de quienes lo habitaban. El anlisis del istopo carbono-13 de los huesos y de los tejidos puede ilustrarnos acerca de la dieta del hombre prehistrico y el estudio de los insectos fosili zados puede informarnos, segn su entorno, sobre las ocupacio
nes de aqul. Actualmente la estratigrafa se sirve de una vasta ga-

lgicas "importantes", aunque no fue el nico que procedi de tal manera. Sus dibujos dan una idea de la superposicin de los estra tos y vestigios pero no dej documentos "visuales" precisos que puedan interpretarse sin acudir a sus informaciones escritas.

Era as la cabeza de Filipo de


Macedonia?

El

profesor

Manolis Andronicos,

de

la

Universidad de Tesalnica, descubri en

1977 tres tumbas reales en Vergina, Ma


cedonia (vase El Correo de la Unesco de

junio de 1979). Pareca posible que el rey


Filipo II de Macedonia (382-336 a.C), pa dre de Alejandro Magno, hubiera sido enterrado en la mayor de esas tumbas, pero nada vena a corroborar la conjetura.
En 1981 Richard Neave, de la Universidad

de Manchester, el Dr. John Prag, del Mu


seo dla misma ciudad, y el Dr. J.H. Musgrave, de la Universidad de Bristol, co menzaron a colaborar con el profesor An
dronicos, examinando el crneo encon

trado y reconstruyendo el rostro del di


funto. Se hicieron vaciados de los huesos

craneales que haban quedado tras la cre macin del cadver, pero los cientficos tropezaron con dificultades para ensam blar los fragmentos seos descubriendo que ello se deba en gran parte a una heri da y a una deformacin congenita. "En resumen escrito el Dr. Prag , el la do izquierdo del rostro estaba marcada mente subdesarrollado y el derecho superdesarrollado, en compensacin." Los expertos en ciruga plstica advirtieron
adems heridas en la cuenca del ojo dere

cho que, a su juicio, slo podan haber si do causadas por un proyectil lanzado des

de arriba. Las efigies de Filipo de Macedo


nia lo representan con una herida en el ojo derecho del cual era, aparentemente, tuerto, y un escritor del siglo I a.C. sea

laba, a propsito del monarca, que "per


di el ojo derecho por un flechazo que re cibi mientras inspeccionaba las mqui nas de asedio y los cobertizos de protec
cin durante el sitio de Metona." Tal

descripcin, segn el Dr. Prag, "concuer


da exactamente con la herida que adverti mos en el crneo de Vergina y constituye

la prueba que Andronicos siempre esper

Anlisis de una pequea cruz bizantina mediante el procedimiento de emisin de rayos X inducida por protones (PIXE) en el Laboratorio de Anlisis por
Reaccin Nuclear de Namur, Blgica. Para ello se bombardea la cruz con un "can de protones",

y que parece haber acallado a los escpticos." Los especialistas que reconstruye ron la cabeza emplearon las mismas tc nicas de que se sirve la polica para identi ficar los cadveres descompuestos. Se introdujeron cuas de medicin en dife rentes puntos del crneo para establecer el espesor de los tejidos blandos, se mo delaron los msculos y luego se aadie ron las capas superficiales. Para los deta
lles de la cicatriz se tom como base una
1. Crneo reconstruido

produciendo rayos X cuyas caractersticas se mi


den, a cada lado de la cruz, con analizadores de ca

en el que se advierte

una herida en el ojo


derecho.

nal mltiple. As ha podido descubrirse el conteni


do relativo de oro, cobre, hierro y plata del objeto
estudiado. Para demostrar el carcter no destructi

2. Vaciado en yeso de la
cabeza terminada.

3. Vaciado en cera de la cabeza reconstruida

vo de este mtodo de anlisis, un miembro del per

sonal del laboratorio de Namur apunta el "can" contra sus propios dientes.

herida

casi

idntica recibida unos aos

con el cabello, la barba

antes por un leador canadiense.

y la piel.

14

ma de disciplinas cientficas, entre las cuales desempean un papel


de creciente importancia las ciencias de la tierra.

na en sendos vasos de agua poda descubrirse el peso especfico del metal contenido en ella. Tanto la tcnica de la piedra de toque como la de la volumetra de masa siguen utilizndose hoy da.
En las tcnicas de anlisis qumico es preciso tomar una muestra

Anlisis de los hallazgos arqueolgicos. Desde fines de la se

gunda guerra mundial las tcnicas de anlisis arqueolgico han


avanzado de modo tal que hoy puede descubrirse cmo se fabrica ron los objetos encontrados, de qu materiales estn hechos y dn

del objeto, lo que a menudo resulta perjudicial, sobre todo cuando

de se los obtena. El jaspe negro o piedra de toque es el primer m todo empleado para determinar la proporcin de metal precioso de
un objeto y sus resultados son extraordinariamente precisos. Para ello se frota el objeto con la piedra de toque, la cual, expuesta a la accin de un agente reactivo, cambia de color, proporcionando as
la informacin buscada.

se trata de objetos preciosos. En cambio, el anlisis espectrogrfico que ha sucedido a tales tcnicas permite, como su nombre indica, investigar la naturaleza qumica de un objeto mediante el anlisis de su espectro. La desventaja de tal procedimiento es que slo puede examinarse una porcin de cada objeto, mas al tomar una muestra sta se destruye y no puede repetirse la experiencia.
En la bsqueda de un mtodo ideal de anlisis que no destruya

En el siglo III a.C. Arqumedes emple la tcnica conocida hoy con el nombre de volumetra de masa para descubrir si la corona del rey Hiern de Siracusa era de oro o de una aleacin de oro y

plata. Como es sabido, al entrar un da en su bao el sabio griego advirti que el agua se derramaba, descubriendo as uno de los ms importantes principios de la hidrosttica. Dedujo entonces que si se
colocaban separadamente partes iguales de oro y de plata y la coro

el objeto estudiado, el paso siguiente fue el bombardeo de las pie zas arqueolgicas con rayos X que, lejos de causar dao alguno, simplemente originan otros rayos cuyos diferentes niveles de di fraccin o de energa corresponden a los diversos materiales. Tal anlisis se limita a una capa microscpica de tomos de la superfi
cie del objeto; de ah que si el material de una pieza no es homogneo puede inducir a error acerca de su verdadera naturaleza. El m-

Cmo fechar los solares prehistricos


Mtodos Materiales Madera

Tiempo abarcado
De 0 a 7.000 aos

Observaciones

Gracias a un estudio experimental que


puede abrir un camino extraordinaria

Dendrocronologa
Carbono 14

Restos

De 0 a 40.000
anos

mente prometedor para la investigacin


futura sobre la evolucin humana y la ar queologa, el cientfico sueco Svante Pbo ha logrado recientemente extraer una muestra de DNA (y reproducir copias
idnticas de ella) de una momia de hace
Relacin
torio-uranio

orgnicos (madera, huesos),


conchas

Estalagmitas,
huesos, conchas Cermica, rocas quemadas

De 700.000 a 250.000 aos De 0 a varios


cientos de

Termoluminiscencia

4.500 aos (en la foto), correspondiente a un nio del antiguo Egipto, muerto a la
edad de un ao. El DNA, o cido desoxirribonucleico, molcula bsica de la vida,
transmite las instrucciones hereditarias
Resonancia del

(silex, piedra
arenisca, granito),

miles

de aos

estalagmitas
Estalagmitas,
huesos

De 1 .000 a
varios millones

En
desarrollo

espn electrnico

que determinan la naturaleza de un orga


nismo vivo; adems, un estudio de las se
Rastros de fisin del
uranio

de aos Cristales
De 0 a varios cientos de miles de aos

cuencias del DNA puede proporcionar

volcnicos,
minerales ricos
en uranio

nos una imagen clara de la identidad ge


ntica de una poblacin. De ah que la in
formacin sobre las secuencias del DNA
Potasio-argn

Lava volcnica

De 1.000 a
1.000 millones de aos

en las momias egipcias podra informar


nos no slo de las relaciones que existan
entre los miembros de las familias reales
Aminocidos

Huesos

En

desarrollo

sino adems de los movimientos de po

blacin en el antiguo Egipto. Sin embar go, debe sealarse que, pese a ciertos ru mores exagerados, es imposible emplear tales tcnicas para reconstituir un gen

Mapa Centre des Faibles Radioactivits, Centre mixte CNRS-CEA, Gif-sur-Yvette, Francia

Algunos mtodos de datacin son ms adecuados que otros, segn la edad aproximada del solar prehistrico y de los mate

riales encontrados. De ah que, cuando sea posible, convenga


utilizar diferentes mtodos y comparar los resultados.

funcional y con mayor razn un ser huma


no viviente a partir de esas secuencias del
DNA.

Roma

ha

emprendido

un

proyecto de

gran alcance en el que la conservacin de sus antigedades en el centro histrico se integra en el marco ms amplio de la pla
nificacin de la ciudad moderna. Un pri mer paso capital era la proteccin de los

monumentos

estatuas

desfigurados

por la contaminacin atmosfrica. A la

derecha, estatua de Marco Aurelio some


tida a tratamiento en el Instituto Central de Restauracin.

todo a base de rayos X requiere un profundo conocimiento de los tipos de objetos arqueolgicos a fin evitar generalizaciones apresu radas hechas a partir del anlisis de la superficie. Con la utilizacin de rayos ms penetrantes se han podido evitar tanto las desventajas de los mtodos de anlisis destructivos como

grano o el color de las venas. Este mtodo de anlisis se aplica parti


cularmente a los istopos del plomo dada la utilizacin generalizada de ese metal en la construccin de edificios y la fabricacin de vi
drio. Se han ubicado con considerable certeza yacimientos de plo

mo de la antigedad en territorios que van desde Espaa hasta Irn.

el carcter superficial del anlisis con rayos X. El anlisis nuclear, que utiliza neutrones producidos por un reac tor o por un acelerador, ha ampliado sobremanera nuestro conoci miento de la metalistera antigua y el estudio de las forjas modernas

Finalmente^ se estn realizando anlisis para saber ms acerca


del carcter de las tecnologas antiguas. El microanalizador de son da electrnica proyecta en una pantalla una imagen ampliada de las

gracias a la determinacin de algunos de sus elementos. Asimismo,


se ha podido descubrir la procedencia de los metales empleados en la acuacin antigua de monedas, mediante las llamadas "huellas

respuestas registradas cuando los haces de electrones bombardean la superficie de un objeto. Se ha empleado este mtodo para deter minar los casos en que el dorado se ha hecho con mercurio. Pueden
llevarse a cabo anlisis detallados, incluso con objetos pesados o

digitales geolgicas" de sus minas originales. Una aplicacin del anlisis nuclear que ha demostrado ser particularmente fructfera es el estudio de la proporcin de istopos de ciertos cuerpos deter minada por la espectrografa de masa. Las proporciones de Oxge no 16 y de Oxgeno 18 en el mrmol antiguo son caractersticas de los diferentes yacimientos y es mucho ms seguro identificar la pro cedencia de los objetos de mrmol griego, por ejemplo, utilizando esta tcnica que confiarse al dictamen emprico sobre la textura del

difciles de manejar, con un aparato de emisin de rayos X inducida por protones (PIXE) en el cual stos golpean una pequea superfi cie del objeto estudiado y provocan emisiones de rayos X cuyas ca
ractersticas se miden con un detector y se registran en un analiza dor de canales mltiples.
Datacin. El mtodo de datacin con carbono-14, descubierto

por Williard F. Libby, forma hoy da parte del arsenal de numerosos arquelogos. Una medida precisa de la proporcin de carbono-14 contenida en una muestra dada permite estimar su edad con fechas

Son muchos los pases donde la utilizacin de detectores de me

tales para buscar tesoros ocultos es el pasatiempo favorito de gran nmero de personas. Los arquelogos, preocupados por el problema de los daos causados al patrimonio y a los solares ar queolgicos, han censurado severamente a los buscadores de tesoros porque slo se interesan por los objetos y porque al se parar stos de su contexto destruyen una valiosa informacin acerca de nuestro pasado. Por otro lado son muchos los arque logos conscientes del peligro que supone la existencia de un "abismo de incomprensin" entre ellos y el pblico y que consi deran importante tratar de movilizar los entusiasmos de los bus
cadores de tesoros en la exploracin de los tesoros enterrados, reconciliando sus actividades con la investigacin cientfica del
pasado.

El georradar es un mtodo electromagn tico de investigacin del terreno concebi do para explorar las estructuras geolgi cas y que tiene tambin aplicacin en ar queologa. La energa electromagntica
es transmitida al suelo desde una unidad

situada en la superficie. En su paso por el manto terrestre una parte de la energa es reflejada al dar con un lmite entre dos

montacargas controlado desde el vehcu lo. Bajo estas lneas, "radargrama" de un


camino de la edad del bronce en una ci

materiales dotados de diferentes propie dades elctricas (como, por ejemplo, tie rra vegetal y roca, o tierra vegetal y un ob jeto arqueolgico), mientras el resto con

naga danesa. El camino de madera de ro

ble, ligeramente inclinado, se apoyaba en


la arena y su profundidad era aproxima
damente de medio metro.

tina profundizando (vase el diagrama).


Midiendo el intervalo entre las seales

Principios de la deteccin
con georradar

transmitidas y las reflejadas es posible


estudiar las distintas capas de tierra y ro ca y el emplazamiento de los objetos en terrados. Las seales reflejadas se reco gen en un tubo catdico y en un registra^
Camino
de roble

dor grfico, obtenindose as un perfil


continuo del subsuelo. Abajo, el sistema de radar operando en un campo. La ante na se halla instalada en un aguiln que puede elevarse o bajarse mediante un

Superficie del suelo

t i

mn]

!f

Arcilla

referidas al momento actual ("BP" = before present, antes de

trata de periodos mayores de 1 .000 aos y tal mtodo es de inapre


ciable valor en el caso de los menores de 50.000. En el estudio de

hoy). Investigaciones amplias y profundas han demostrado que la datacin con carbono-14 es a veces errnea debido a las grandes fluctuaciones de los rayos csmicos en el pasado. De ah que las fechas obtenidas mediante este procedimiento hayan tenido que
ser reajustadas tras una confrontacin con las que han arrojado otros mtodos tales como la termoluminiscencia y la dendrocrono-

civilizaciones sumamente antiguas sobre las cuales no existen refe rencias escritas ni "tipolgicas", tales como la prehistoria del Bra

sil, la cultura Jomo del Japn o las primeras culturas de Africa occi dental, la termoluminiscencia es en realidad el primer mtodo de
datacin que se ha empleado. Por razones de espacio dejaremos de lado los dems sistemas de datacin que se estn desarrollando ac

loga (vase el recuadro de la pg. 12).


La termoluminiscencia se basa en el fenmeno en virtud del cual

tualmente, tales como la datacin magntica y los nuevos mtodos

los rayos de los elementos radiactivos del suelo y los rayos csmi
cos se acumulan en los materiales cristalinos empleados en la alfa

nucleares, entre otros (vase el cuadro de la pg. 15).


Tcnicas matemticas e informticas. Las posibilidades que brinda a los arquelogos el acceso a los bancos de datos son prcti

rera, energa que se libera en forma de luz cuando se los somete a la accin del calor. La cantidad de energa y, por ende, de luz es proporcional al periodo de tiempo durante el cual se fue acumulan do. Tal procedimiento funciona como una suerte de reloj que co mienza en cero cuando el material se calienta a determinada tempe
ratura (en el caso de la alfarera, cuando se hornean las piezas). Las cantidades de luz as obtenidas son infinitamente pequeas por lo

camente ilimitadas. Estos reemplazan a los voluminosos archivos de papeles y a las bibliografas anuales que a menudo aparecen con
atraso. Podemos tener literalmente en la punta de los dedos y en el momento que queramos informaciones sobre objetos, monu

mentos y solares arqueolgicos as como sobre las investigaciones que hoy se realizan. Pero el peligro que amenaza a este sistema es el que sufri la Torre de Babel. El lenguaje de las computadoras y el de la mente humana deben ser compatibles y, sin embargo, in-

cual se requieren fotomultiplicadores para hacerlas visibles y men


surables. Sin embargo, la acumulacin es importante cuando se

'Perico el de los Pantanos"

En un pantano de turba de Lindon Moss,


al sur de Manchester (Reino Unido), se

cin con radiocarbono, el cuerpo de "Pe


te Marsh", como se lo llam (Pete = dimi

lenta, fue por estrangulacin. Posterior


mente se realizaron estudios del cuerpo

encontr en agosto de 1984 el cuerpo de un hombre que fue trasladado inmediata

nutivo de Pedro, Marsh = apellido muy co

con rayos X y se obtuvieron imgenes in


formticas de sus entraas con una son

mn que significa literalmente "panta


no"), tena aproximadamente 2.500 aos de edad. Un equipo de cientficos entre los que figuraban especialistas en medici na forense, dermatologa, anatoma, microbiologa y botnica comenzaron in mediatamente a analizar los restos y as pudo obtenerse un retrato de Pete Marsh. Se calcula que tena entre 20 y 30 aos,
una altura de 1,67 m, cabello castao, bar

mente al Museo Britnico para que all se ocuparan de su anlisis y preservacin. El cuerpo haba sido mutilado por una m quina excavadora pero el tronco, incluido el aparato digestivo, y una importante cantidad de piel y de cabello se haban
conservado intactos en la turba (com

da de resonancia magntica nuclear. Los

investigadores se proponen adems utili


zar las ms recientes tcnicas de ingenie

ra gentica para extraer genes del cuerpo y "cultivarlos" en un laboratorio. Antes de exponer a Pete Marsh al pblico se le
est liofilizando mediante una tcnica

bustible fsil formado por residuos vege tales en lugares pantanosos que despide

que permite congelar el agua contenida en el cuerpo que luego es colocado en


una cmara donde el vaco vaporiza los
cristales de hielo.

un cido preservativo, absorbe la hume dad y expele el oxgeno). Segn la data

ba, bigotes y patillas pelirrojos, y uas in maculadamente pulidas. Su muerte, vio

17

p* cluso en una esfera como la numismtica cuyo lenguaje es tan con ciso e internacional, los diversos equipos de trabajo tienen diferen
tes propsitos y se sirven de instrumentos distintos. Es verdad que se intercambian opiniones y experiencias pero no informaciones ni

todos modernos. Los arquelogos necesitan cada vez ms contar con el dictamen de los gelogos, los especialistas en ciencias del suelo, los botnicos y otros expertos en disciplinas tradicionalmen te estudiadas. No es posible hacer aqu una lista completa de las ciencias que participan actualmente en la reconstruccin del pasa
do, pero en ella se incluira el estudio de las conchas, diatomeas y

datos propiamente dichos, por lo menos de manera automtica. Demasiados bancos de datos son sistemas cerrados cuyo acceso est reservado a unos cuantos privilegiados. Por otra parte, es dif cil hacer consultas a distancia. Sin embargo, pueden grabarse ya en un disco vdeo decenas de miles de imgenes y, tericamente
por lo menos, debera ponerse a disposicin de los interesados las

espinas de peces, de la minera y de las tcnicas de elaboracin de los minerales, de la fabricacin del vidrio y del papel, etc., sin men
cionar la dilatada esfera de la arqueologa submarina.

fotografas de las principales bibliotecas, tal como existen ya microfichas ilustradas de las piezas que conservan los museos. Por su parte, las computadoras han permitido realizar anlisis complejos mediante la simulacin en cortos espacios de tiempo, as como catalogar, grabar y relacionar a gran velocidad inmensas can
tidades de informacin.

TONY HACKENS, belga, es profesor de arqueologa y numismtica clsi cas y de mtodos tcnicos aplicados a la arqueologa en la Universidad Ca
tlica de Lovaina e investigador asociado del Centro de Arqueologa Mun dial de la Universidad de Brown, EUA. Es vicepresidente del Grupo de Ex

pertos Europeos para la aplicacin de mtodos fsicos, qumicos, matemti

cos y biolgicos a la arqueologa del Consejo de Europa, Estrasburgo. Por otra parte, anima los cursos para postgraduados en ciencias arqueolgicas
del Centro Universitario Europeo para el Patrimonio Cultural, en Ravello,
Italia.

De ah que el anlisis interdisciplinario sea la clave de la arqueolo ga actual, aunque no debe limitarse al empleo de los costosos m

Arqueologa desde el aire

La

fotografa

se

ha

convertido

en

un

bia tambin con el estado de la vegeta

Hierro cegada por el lgamo. La cebada


que en l crece es ms alta como conse

instrumento fundamental de la arqueolo ga moderna. Gracias a ella se descubren todos los aos gran cantidad de solares
que a nivel del suelo resultan invisibles.

cin y con otros factores. Los solares en


terrados pueden revelarse, bien por sea
les en el suelo (rastros de suelos con dife

cuencia de la mayor profundidad del sue lo y de la humedad. La tecnologa de los sensores instalados en artefactos espa ciales o en aviones que pueden detectar

rente color o textura), bien por seales en los cultivos. El dibujo de arriba muestra como se producen estas ltimas. La vege tacin es ms alta sobre la zanja enterra
da mientras disminuye encima del ci

Los vestigios enterrados de las activida


des humanas pueden influir durante mi les de aos en el crecimiento de las plan tas, dando lugar a diferencias en la vege tacin que se observan desde el aire. In terpretar fotos areas es una tarea alta mente especializada; la imagen cambia al
cambiar la luz en los diversos momentos

objetos en longitudes de onda a las que


no son sensibles ni el ojo humano ni la fo tografa ordinaria est abocada a trans

miento de piedra. La foto nos ofrece una rara ocasin de comprobar por qu apare
cen las seales en los cultivos. En la orilla

formar radicalmente la preparacin y la


realizacin de los reconocimientos ar

queolgicos. Pero estamos apenas en los comienzos de la aplicacin de esa tecno loga a la exploracin arqueolgica.

de esta gravera puede verse el suelo de color oscuro de una zanja de la Edad del

del da y en las distintas estaciones; cam

El enigma de Nazca
Marcados en el rido desierto de Nazca, a casi 500 km al sureste

micos. He aqu algunas de sus conclusiones, que nos ha enviado

de Lima, capital de Per, existen unos inmensos dibujos o es quemas a base de surcos o zanjas. Su tamao es tal que no se

especialmente para este nmero: "Las perfectas proporciones de estas figuras, algunas de las cuales tienen 200 o 300 metros de largo, dan a entender que se trazaron para ser vistas desde el aire. Podran representar constelaciones que, igual que en
otras culturas, eran considerados en la de Nazca como divinida

los puede ver al nivel del suelo. En cambio, contemplados desde


el aire, presentan una especie de bestiario, a medias fantstico,

a medias naturalista, de simios, pjaros de largo cuello, una ara a, un lagarto, perros, peces y ballenas, rodeados de lneas en zigzag, formas estrelladas, espirales, rectngulos y trapezoides.
Las rayas o lneas se atribuyen a la llamada cultura de Nazca, de

des. Esas constelaciones caracterizan las diferentes pocas del


ao segn su visibilidad nocturna. El momento ms Importante del ao era siempre diciembre porque se esperaba que entonces el agua corriera por los ros secos y la gente se preparaba para
tal acontecimiento labrando las tierras... En Nazca esta conste

la que toman nombre y que floreci en la regin desde 200 a.C. hasta 600 d.C. Qu finalidad tenan las famosas rayas? Desde
que hace ms de 40 aos las descubri el Dr. Paul Kosok, ste

lacin anunciadora del agua era la Osa Mayor. Cuando el agua,


asustada, se negaba a aparecer, la gente trazaba en el suelo una

viene siendo un desconcertante enigma arqueolgico. Se han formulado al respecto teoras, algunas tradas por los cabellos. Indicaban las rayas un puerto espacial construido por seres ex traterrestres o para su uso? Tenan un significado ritual y sea laban el derrotero que deban seguir los desfiles de antorchas en los das fijados por el rito? Constituan un mapa estelar del fir
mamento antiguo, "el mayor libro de astronoma del mundo",

imagen de la divinidad del agua, es decir la constelacin que apareca siempre al mismo tiempo que el agua. Imagen tan
grande que la divinidad poda verse a s misma desde lo alto y acordarse de nuevo del agua cantarna. Por varias razones a la Osa Mayor se la representa como un mono. En cuanto a la ara a, parece que representa a Orion". No todos los arquelogos estn de acuerdo con las teoras de la Dra. Reiche, pero todos rinden homenaje a su resuelta voluntad de preservar las frgiles

segn las palabras del Dr. Kosok? Contenan una informacin simblica que deba transmitirse a las generaciones posterio
res? Aunque se han dado mltiples Interpretaciones de cada uno de los elementos de los dibujos de Nazca, los estudiosos

rayas de Nazca para la posteridad. As, aunque no llegue a expli


carse nunca completamente su misterio, quedarn como una de las ms bellas creaciones del Ingenio humano.

convienen hoy en que hay en ellos implicaciones sociales, polti cas, econmicas y religiosas de uno u otro tipo. Desde que se produjo el descubrimiento, la Dra. Mara Reiche, astrnoma y matemtica, ha consagrado su vida a estudiarlas rayas y a esta
blecer correlaciones entre ellas y los acontecimientos astron

A la derecha, visto desde el aire, un colibr de 90 metros de largo


dibujado en el suelo de Nazca.

18

f UH"

a*.

.-.

PAGINAS EN COLOR

El Templo Mayor
de Mxico
por Eduardo Matos Moctezuma

Pginas centrales
Arriba a la izquierda : Las excavaciones

realizadas de 1974 a 1979 en algunos luga res arqueolgicos del antiguo reino de
Zhongshan, en la actual provincia de He-

bei, al suroeste de Beijing, han aportado


una contribucin esencial al conocimien

to de ese periodo de la civilizacin china

(siglo Vl-comienzos del siglo III a.C). Se


desenterraron ms de 20.000 piezas, la mqyor parte de las cuales provienen de dos grandes portancia mausoleos la reales. Varios en
instrumentos musicales dan fe de la im

que

msica

revesta

aquella poca. Kongfuzi (Confucio) le atribua una funcin reguladora esencial para el buen gobierno del estado. El rey de Zhongshan Cuo (muerto en 314 a.C.)
parece que fue fiel a tal principio. En su sepulcro se ha descubierto, adems de un

LA noche del 21 de febrero de 1978,

principal templo de los aztecas o mexicas, grupo que se establece en los islotes del la go de Texcoco hacia el ao 1325 d.C. y que
a partir de ese momento va a desarrollarse, primero como pueblo sometido al seoro

obreros de la Compaa de Luz y Fuerza se encontraban trabajando en la esquina de las calles de Guatemala y Ar
gentina, en pleno corazn de la ciudad de

carilln de piedras sonoras, otro de 14 campanas de bronce (foto). Estas, que


carecan de badajo, colgaban por orden
decreciente d tamao de un armazn de

madera laqueada y se las golpeaba con un


pequeo mazo. Este carilln es uno de los muy pocos que han llegado hasta noso
tros enteros.

Mxico. Despus de romper la gruesa capa de concreto de la calle, a dos metros de pro fundidad, dieron con una piedra dura que les impeda continuar. Al retirar el lodo que la cubra se percataron de que la piedra te na una serie de relieves, por lo que decidie
ron suspender el trabajo hasta el da si

de Azcapotzalco, hasta que logran su inde pendencia hacia el ao 1428, y despus co


mo una sociedad expansionista que va a

conquistar grandes reas de Mesoamrica, hasta que en 1521 caigan bajo el dominio de
los espaoles que, mandados por Hernn

Corts, acabarn por conquistar Mxico durante el siglo XVI y destruirn la ciudad azteca de Tenochtitln, con la consiguiente destruccin del Templo Mayor.
He aqu las tres fases del Proyecto de ex cavacin del Templo Mayor. La primera fase consista en recopilar el material existente sobre el Templo Mayor,
tanto de las fuentes histricas como de tra

Foto Oficina de Relaciones Exteriores del Ministerio de Cultura, Beijing

Abajo a la izquierda, friso policromado


del Templo de las guilas, parte del Tem plo Mayor de la ciudad de Mxico (vase

guiente. La oficina de Rescate Arqueolgi co del Instituto Nacional de Antropologa e Historia envi al lugar un equipo de arque logos y el 23 de febrero se verific que el hallazgo consista en parte de una escultura en la que se poda apreciar un rostro de per
fil con adornos en la cabeza. Hasta el da 27

el artculo de esta pgina).


Foto Alex Webb Magnum, Pars

se continuaron los trabajos de rescate, dan do por resultado la localizacin de un enor

Arriba a la derecha: ruinas de Mohenjo

me monolito de 3,25 m de dimetro cuya


parte superior estaba esculpida con la re

bajos arqueolgicos practicados con ante rioridad en el lugar o en lugares aledaos.


Sobre la base de esta informacin se esta

Daro, Paquistn. En los restos de la ciu

dad que fue el centro de una brillante cul


tura que floreci en el valle del Indo hace
5.000 aos, se advierte una avanzada con

presentacin en relieve de una mujer des-*


nuda, decapitada y con los brazos y las pier
nas separados del tronco. Se trataba, sin lu

blecieron

los

planteamientos

generales,

cepcin de la planificacin urbana.


Foto Ral Zamora, Pars

gar a dudas, de Coyolxauhqui, deidad lu


nar, hermana de Huitzilopochtli, dios de la
Abajo, la Piedra de Coyolxauhqui, de

Abajo a la derecha: esta obra maestra de la joyera en miniatura, encontrada en un

guerra, a quien ste, segn relata el mito,

3,25 m de dimetro, cuyo accidental des


cubrimiento en el centro mismo de la ciu

kurgn (tmulo funerario) escita de Ucra


nia, representa a un grifo con un pendien
te en forma de racimo de uvas.
Foto Instituto de Estudios Orientales de la Academia de Ciencos de la URSS, Mosc

dio muerte en el cerro de Coatepec despus de singular combate.


A partir de ese momento se puso en prc

dad de Mxico, en 1978, iba a dar como re

sultado la excavacin general del antiguo


Templo Mayor azteca de Tenochtitln. La piedra representa el cuerpo desmembra do de la diosa lunar Coyolxauhqui que, segn el mito, fue derrotada, muerta y
desmembrada por su hermano Huitzilo-

tica el Proyecto Templo Mayor. El Proyecto


se estructur desde un principio en tres fa

ses

fundamentales

que

permitieran

la

aplicacin de los principios terico-metodolgicos que nos aproximan a lo que fue el

pochli, dios de la guerra y del sol.

Pgina de la izquierda
Arriba: De gran fuerza expresiva, esta ra

ra miniatura de marfil en la que Alejandro


Magno aparece de frente con un yelmo

que representa un len data del siglo III


a.C. Fue descubierta en un templo monu mental excavado por los arquelogos so viticos en la RSS de Tadjikistan (vase el artculo de la pg. 28).
Foto Instituto de Estudios Orientales de la Academia de Ciencios de la URSS, Mosc

Abajo: cabeza barbada al estilo de la civi lizacin de Nok, en Nigeria. Como la ma yor parte de los objetos pertenecientes a esa civilizacin aparecieron en zonas alu
viales en las que es imposible hacer ex

menes estratigrficos debido a los corri


mientos de tierra, son pocos los datos ar

queolgicos ciertos que poseemos sobre


ellos. La aplicacin de las tcnicas de da tacin con carbono-14 y por termolumi niscencia (ver el artculo de la p. 12) ha
permitido fechar la civilizacin de Nok

entre 500 a.C. y 500 d.C.


Foto Universidad Catlica de Lovaina, Coleccin De Grune

tanto tericos como prcticos, que regiran el proceso de investigacin. La segunda fase inclua lo relativo a la ob tencin de los datos arqueolgicos, es decir la excavacin, que comenz el 20 de marzo de 1978 y termin en el mes de noviembre
de 1982. Con tal fin se utilizaron las tcnicas

adecuadas para un buen control del proce


so excavatorio, a partir de la cuadriculacin del rea en unidades de 2 x 2 m. La superfi cie por excavar se dividi en tres secciones,

cada una a cargo de un arquelogo y sus


respectivos ayudantes. Se establecieron los

elementos de apoyo tales como la presen


cia de un equipo de restauradores con un la

boratorio de campo, as como la ayuda de bilogos, qumicos, gelogos, etc., del De partamento de Prehistoria, y de laborato
rios fotogrficos y secciones de dibujo y de
control de materiales.

La tercera fase comprende el estudio,

anlisis e interpretacin de los materiales obtenidos en la fase anterior. Despus de

cuatro aos de trabajos ininterrumpidos, se han cubierto las dos primeras fases y nos
encontramos metidos en la tercera, que ha br de llevarnos ms tiempo.
A continuacin daremos un resumen de

los hallazgos obtenidos tras casi cinco aos


de excavaciones en el lugar, as como las

principales investigaciones que se realizan


actualmente.

Arquitectura. Hasta hace poco aos los relatos que del Templo Mayor nos dejaron

los cronistas del siglo XVI eran la principal informacin con que se contaba para cono
cer las caractersticas del mismo. Ahora,

gracias a la arqueologa, tenemos el templo


frente a nosotros y vemos que en realidad la descripcin de los cronistas estaba muy apegada a lo que vieron o a lo que les relata

ron algunos indgenas. La arqueologa nos


ha permitido inclusive llegar a etapas muy antiguas del Templo Mayor, que ni siquiera las ltimas generaciones de mexicas cono
cieron.

El templo estaba orientado con su facha

da principal hacia poniente y asentado en una plataforma general con un gran basa mento sobresaliente de cuatro cuerpos con dos escaleras que conducan a la parte su perior, donde se encontraban los dos adoratorios, el del lado sur dedicado a la divini

dad tutelar Huitzilopochtli, dios de la gue rra, y el del lado norte a Tlaloc, dios del agua, de la lluvia y de la fertilidad. El templo se fue agrandando cada vez
ms por diversas causas. Por un lado, la
ciudad de Tenochtitln sufra inundaciones

Plano Scientific American y Prensa Cientfica, S.A. Derechos reservados. Reproducido con autorizacin

totales por los cuatro lados y, si van segui


dos de una letra, los aumentos solamente

adoratorio guardan aun las pinturas mura les de que estaban recubiertos, consis

que obligaban a elevar el nivel de sus con juntos arquitectnicos, adems de fallas
estructurales (asentamientos, hundimien

de la fachada principal. Etapa II. Este edificio se caracteriza por tener muy completa su parte superior. Ve
mos restos de los dos adoratorios de piedra y con parte del estuco (mezcla de arena y cal) que la cubra. Frente a la entrada del

tentes

tos del terreno inestable, etc.). Por otra par


te, las fuentes histricas nos informan de

blanco posiblemente los ojos del dios sobre una banda azul y otra roja. Debajo de stas hay franjas verticales en blanco y negro, al
ternndose. En el interior alcanzamos a ver

en

crculos

negros

con

cmo algunos de los gobernantes manda ron edificar un nuevo templo sobre el ya existente, superponindose as unas sobre otras las diversas etapas constructivas. Ahora sabemos que el templo se agrand por sus cuatro lados en siete ocasiones por
lo menos, aunque hubo tambin cuatro

adoratorio de Huitzilopochtli tenemos la piedra de sacrificios. En el ltimo escaln y en eje con la piedra vemos la cara de un per sonaje con un glifo encima (2 conejo) que de ser numeral equivale al ao 1390 d.C. En
el interior del adoratorio se alcanza a ver

la banqueta sobre la que debi encontrarse el dios. Esta etapa es, en general, anterior al ao 1427, fecha en que los mexicas se li beran de Azcapotzalco.
Etapa III. Esta etapa presenta unas esca

linatas bien elaboradas y los paramentos de los cuerpos del basamento son verticales.
Fue en la escalinata de Huitzilopochtli don de se encontraron las ocho esculturas que
representan portaestandartes reclinados en

aadidos solamente de la fachada principal. Seguidamente damos una idea general de cada una de estas etapas constructivas,
con excepcin de la etapa I, que se encon traba en el interior de la etapa II y en tal esta

una banqueta que corre de norte a sur y en la mitad de ella hay un altarcillo donde debi
colocarse la deidad. Del lado de Tlaloc (lado

norte) se halla la figura de un Chacmool, es

do de deterioro que cualquier descripcin


habra resultado nula e innecesaria. Los n

cultura de piedra policromada que repre senta al mensajero divino, encargado de transportar la ofrenda al interior del adoratorio. Los pilares que marcan el acceso al

los escalones. Estas figuras probablemente adornaban el edificio, pero en el momento en que se iba a iniciar una nueva etapa
constructiva fueron reunidas y colocadas
ceremonialmente sobre la escalinata donde I

meros romanos indican los agrandamientos

24

El Templo Mayor de Tenochtitln


El Templo Mayor de los Mexicas, el pue largo de la fachada, aparecen dos ranas

blo que habitaba la ciudad azteca de Tenochtitln, era un monumento erigido


para celebrar el poder del imperio azteca. Coronaban el templo sendos adoratorios

esculpidas (apenas visibles en la foto).


Sola utilizarse a las ranas para represen
tar a Tlaloc, el dios de la lluvia. A la iz

quierda, un dibujo del artista norteameri


cano Ned Seidler da una idea clara de la

dedicados a Tlaloc (el dios del agua, la llu via y la fertilidad) y a Huitzilopochll (el
dios de la guerra y del sol), lo que refleja ba la dependencia de la economa mexica respecto de la agricultura y los tributos

complejidad del edificio. Orientado hacia el oeste, el templo se alzaba hasta una al
tura de 60 metros, con dos escaleras simi

lares que conducan a los dos adorato

guerreros. Las excavaciones mostraron la existencia de seis grandes pocas en la construccin del templo (indicadas con
nmeros romanos en el plano de la pgi

rios. Excavar un gran solar arqueolgico en medio de una gran ciudad no es tarea fcil, y la cosa result aun ms complica
da en Mxico donde la capa fretica est
a slo cuatro o cinco metros del nivel de

na de la izquierda). La primera poca que


se excav, la nmero II, se sita en torno

la calle. Los trabajos tenan que realizarse


a menudo con lentitud debido al trfico

a 1390 y apareci casi Intacta. La ltima poca, la Vil, fue totalmente arrasada por los conquistadores espaoles. La foto de

ciudadano y hubo que echar abajo y reti


rar trece edificios para que las excavacio nes pudieran comenzar. Aun as, la situa cin urbana del solar presentaba ciertas

arriba muestra un panorama general de las excavaciones desde el ngulo sudoc


cidental de la fachada. En el centro de la

ventajas. Por ejemplo, era fcil recabar los servicios de especialistas de toda cla
se, como urbanistas, arquitectos, edaf logos, etnlogos, historiadores, ornitlo

foto se ve la Piedra de Coyolxauhqui ro

deada de una armazn de metal. En pri mer trmino del templo una serpiente es

culpida (utilizada a menudo como smbo


lo de Huitzilopochli) flanquea la escalera que conduce al santuario del dios de la

gos e ictilogos, y docenas de estudian tes se presentaron voluntarios para cola


borar en los trabajos.

guerra. Un poco ms a la Izquierda, a lo

25

muestra un muro con tres cabezas de ser

piente hacia el poniente, as como la alfarda

decorada y parte de la escalinata.

Etapa Vil. Es la ltima etapa del Templo


Mayor que vieron los espaoles. De ella s

lo queda parte del piso de lajas del recinto ceremonial y la huella en donde se ergua el templo, aunque del lado norte puede apre ciarse parte de la plataforma.

El saqueo del pasado


El pillaje de los solares arqueolgicos y la exportacin e importacin ilegales de
bienes culturales han llegado a constituir
un floreciente comercio mundial estima

Ofrendas. Durante casi cinco aos de ex

cavaciones se pudieron recuperar alrededor


cularmente gracias a la "Convencin so

de siete mil objetos arqueolgicos de cerca


de un centenar de ofrendas. Estas se en contraban colocadas de tres maneras dife

bre medidas encaminadas a prohibir e im pedir la exportacin, importacin y trans


ferencia lcitas de bienes culturales"

do en 3.000 millones de dlares por ao.


Las principales vctimas de los traficantes

(1970) y la "Convencin para la Protec

rentes: 1) en cistas cuyas paredes y piso estaban hechos de piedra con restos de estuco, 2) en el interior de cajas muebles de piedra con su tapa del mismo material, y 3) directamente en el relleno o ncleo de pie dra y lodo que cubra una etapa cons
tructiva.

cin del Patrimonio Mundial Cultural y


Natural" (1982). En la foto, vista parcial de

de objetos de arte son los pases en desa


rrollo que a menudo carecen de los recur sos necesarios para establecer un control

una exposicin de objetos legalmente sacados del Ecuador y recuperados tras


seis aos de batalla jurdica ante los tribu

eficaz de su patrimonio. No slo se pier den inapreciables objetos sino que pgi nas enteras de la historia de los pueblos
se borran por la destruccin indiscrimina

nales de justicia de Italia. Celebrada en Quito en mayo de 1983, la exposicin tuvo

el apropiado ttulo de "Ecuador recupera


un fragmento importante de su memoria
cultural".

Podemos afirmar que, por lo general, la distribucin de los objetos de las ofrendas no obedece al azar sino que expresan una intencin premeditada, es decir que los ob

da y el saqueo de los solares arqueolgi cos. La Unesco se sita en la vanguardia de la lucha contra ese trfico lcito, parti

jetos ocupan un lugar conforme a algn


simbolismo que es necesario descifrar. Di cho de otro modo, los objetos y su coloca cin tienen un lenguaje. As, por ejemplo, algunas ofrendas aparecen ocupando la

fueron halladas. Este edificio tiene en la par te posterior, en el muro de la plataforma del lado de Huitzilopochtli, el glifo "4 caa",
que equivale al ao 1431.

decorada con serpientes que integran el


cuarto escaln de la plataforma. El basa mento formado por los restos de las dos es

parte inferior, sobre el piso, mientras que


otras se encuentran siempre en la parte al

Etapa IV. Esta etapa es, con sus agrega


dos, una de las ms ricas en elementos. La

calinatas que conducan a la parte superior consta de cuatro cabezas de serpiente: dos en sus extremos y dos en medio, que mar
can la unin de ambos edificios. En la mitad

ta. Tambin hemos observado que los ma


teriales estn orientados de determinada

plataforma general est adornada con bra

seros y cabezas de serpientes por sus cua


tro lados. Los braseros del lado de Tlaloc

de la plataforma del lado de Huitzilopochtli puede admirarse la Coyolxauhqui, monu


mental escultura en piedra que representa a

manera. Tanto las ofrendas del lado del po niente (fachada principal) como de la parte posterior del templo estn orientadas hacia

el lugar donde el sol se pone, mientras que


las ofrendas que se encuentran a la mitad

muestran el rostro de este dios, en tanto

la hermana de aquel dios. Cronolgicamen


te, pensamos que la etapa IV corresponde

del edificio, en sus fachadas norte y sur,


estn orientadas hacia esos rumbos. Las

que los del lado de Huitzilopochtli llevan un moo, smbolo de esta deidad. Al pie de
estos braseros y serpientes aparecen varias ofrendas. La etapa IV-b es un aadido de la

en general al reinado de Moctezuma I, ya


que tenemos un numeral en la parte poste rior de la plataforma del lado de Huitzilo

ofrendas 7 y 61, ubicadas la primera hacia

la mitad del edificio en su fachada sur y la


segunda en el lado norte, tenan una misma

fachada principal (poniente) que result te


ner una gran riqueza de elementos. Se trata

de la gran plataforma en que descansa el Templo Mayor, plataforma que tena una escalinata corrida en cuyos extremos se han encontrado enormes serpientes cuyo
cuerpo ondulante remata en grandes cabe

pochtli con el glifo "1 conejo", equivalente al ao 1454. El aadido de Coyolxauhqui y las serpientes bien pueden corresponder al gobierno de Axayacatl, por otro grifo al
costado sur del edificio con el smbolo

distribucin de materiales: en su parte infe


rior caracoles strombus, orientados de nor

te a sur. Sobre ellos, cocodrilos, y en la par te alta los dioses sedentes que hemos deno minado Xiuhtecutli, dios viejo y del fuego, centro del Universo y del hogar. A los lados
de estos dioses tenemos, a la derecha, un

"3 casa", que de ser numeral equivaldra al


ao 1469, fecha en que comienza su gobierno.

coral marino, y a la izquierda una vasija de

zas que aun conservan algo del pigmento original que las recubra. La escalinata de la

barro con la efigie del dios Tlaloc. Podra


Etapa V. De esta etapa solamente se han

significar esta distribucin que los caracoles


representan el mar, los cocodrilos un nivel

plataforma slo est interrumpida por un altarcillo con dos ranas que descansan sobre

encontrado la plataforma general recubier

los pequeos dados del mismo. Este ele


mento se encuentra en eje con la mitad de

ta de estuco, as como parte del piso del gran recinto ceremonial formado por lajas
unidas entre s con estuco.

terrestre y Xiuhtecutli y Tlaloc el

nivel

celeste? Lo mismo ocurre con las ofrendas

11 y 17, situadas la primera en la fachada

la escalera que conduce a la parte superior del templo dedicado a Tlaloc. Del lado de
Huitzilopochtli, enfrente de la escalinata que conduce al adoratorio de este dios, te

Etapa VI. Esta etapa es la penltima y


vemos sus restos formados por parte de la

principal, entre las dos cabezas de serpien tes que marcan la unin de los templos de Tlaloc y Huitzilopochtli, y la otra en la parte
posterior donde se unen ambos edificios.

nemos una lpida de dos metros de largo

gran

plataforma.

La

fachada

principal

Una y otra estn colocadas en cistas con

26

paredes de piedra y sus objetos guardan

una posicin similar, adems de ser muy


parecidas en su contenido.
Entre los materiales obtenidos tenemos

piezas propiamente mexicas y otras proce

dentes de las reas tributarias. Entre las pri meras figuran las esculturas de ancianos sentados que tienen un "maxtlatl" o tapa rrabos como nica vestimenta y un tocado en la cabeza caracterizado por dos protube rancias. Se ha considerado que representan tambin a Xiuhtecutli. Otras representacio
nes son las efigies del dios Tlaloc esculpidas

en "tezontle" (piedra volcnica) y otras pie


dras, algunas serpientes enroscadas, repre

sentaciones de cabezas y de crtalos de


serpiente hechas de obsidiana, braseros de

piedra con moo anudado y, desde luego, las magnificas representaciones de caraco
les que constituyen verdaderas obras de ar
te, aunque no aparecieron dentro de las
ofrendas. En este mismo caso se encuen

tran la Coyolxauhqui y las cabezas de ser


piente que adornan la fachada del Templo.

De las reas tributarias tenemos piezas interesantes que aparecen en mayor abun dancia a partir de las ofrendas de la etapa IV (alrededor del ao 1454), en plena expan sin mexica, tales como una gran cantidad de mscaras y figuras de Mezcala (Estado de Guerrero) de diversos tipos y tamaos;
piezas de alabastro de la regin de Puebla

como las cabezas de venado y los dardos, adems de algunas deidades sedentes; de

la Costa del Golfo tenemos dos magnficas urnas funerarias de cermica anaranjada,
con su tapadera, en cuyo interior se encon traron restos de huesos quemados, collares y otros materiales. La gran variedad de ca

racoles y conchas, peces, picos de pez sie


rra, corales, etc., provienen de las costas

del Golfo y del Pacfico. Igual ocurre con los cocodrilos y jaguares que posiblemente
proceden de Veracruz o de Tabasco.

Otro grupo de objetos son aquellos que


corresponden
las mscaras

y, en general, los objetos procedentes de las reas tributarias, producto de la


conquista militar. Todo lo anterior viene a

GUERRERO

GUILA.

Esta

estatua

de

claramente

sociedades
encontradas

barro cocido, de casi dos metros de alto,


representa a un soldado de la orden de las

muy anteriores a la mexica. Tal es el caso de


teotihuacanas

que cabe fechar alrededor del ao 400 d.C.

confirmar nuestro planteamiento acerca de la existencia de un pueblo agrcola y milita


rista que dependa para su sostenimiento de la agricultura y de los tributos.

guilas y es uno de los hallazgos ms no tables realizados en el Templo Mayor.


Entre los aztecas haba dos rdenes mili

y de la mscara olmeca, esta ltima proce


dente de la regin comprendida en los lmi

tes de los estados de Puebla, Oaxaca y Guerrero, y que sera el objeto ms antiguo
encontrado (800 a.C).
EDUARDO MATOS MOCTEZUMA, mexica

tares principales: la de las guilas y la de los Jaguares.

no, es director general del Centro de Investiga

Podemos decir que la mayora de los ma teriales representan a Tlaloc o smbolos asociados con l, como los objetos de ori
gen marino, canoas, peces, etc. Por otra parte tenemos objetos asociados con Huit

ciones y Estudios Superiores de Antropologa


Social de Tlalpn. Antes de comenzar las excavaciones que condujeron al descubrimiento del Templo Mayor en la ciudad de Mxico, que describe en este artculo y que se llevaron a cabo

zilopochtli, que es un dios que no se repre senta, pero del que tenemos simbolismos,
como los braseros con moo o nudo, cr neos de decapitados, cuchillos de sacrifi

bajo su direccin, haba participado en investiga


ciones arqueolgicas en Bonampak, Teotihua cn, Cholula y otros lugares. Entre sus libros ca be destacar Muerte a filo de obsidiana. Excava ciones en el centro de la ciudad de Mxico y Una visita al Templo Mayor.

cios "tecpatl" con ojos y dientes de concha

27

Los tesoros

de Tajti Sanghin
por Boris A. Litvinski e Igor R. Pichikian

En este adorno de plata para una brida,

con la cabeza de una gorgona, el mons


truo de la antigua mitologa griega se ha
transformado en una dulce muchacha.

Este objeto es una brillante ilustracin de la sntesis del arte griego e indio conocida
como estilo de Gandhara. Las monedas

de plata y los numerosos objetos de mar


fil indios descubiertos en el Asia central

dan fe de la existencia de relaciones eco

nmicas entre Bactriana y la India en el si glo I antes de la era cristiana.

Esta vaina de espada de marfil, finamente

labrada, pertenece a un impresionante te soro descubierto por arquelogos sovi ticos en Tajti Sanghin, Asia central. El

hallazgo ha venido a arrojar luz sobre al


gunos aspectos oscuros de la historia de la antigua Bactriana, que tan gran Impor tancia tuvo como va de paso para el co mercio terrestre entre el este y el oeste y como punto de encuentro de muy varia
das corrientes artsticas. Adorna la vaina

un relieve con un len haciendo presa en


un ciervo. La cabeza del len, con sus

dientes

apretados,

aparece

de

frente,

mientras el ciervo es representado de per


fil, con las patas delanteras dobladas en
seal de sumisin (detalle a la derecha).

Crese que el grabado es una representa


cin alegrica de un conquistador victo rioso, rey o dios, y de sus subditos sumi

sos. Debajo del len se ve una escena


muy estilizada de un predador felino que

ataca a una oveja. La vaina, tpica de la


Persia aquemnida, data de comienzos del siglo
longitud.

V a.C.

tiene 276

mm

de

28

HACE ms de cien aos, en 1878,

do entre las ruinas de una ciudad en la con

tres comerciantes de Bujara que


se dirigan a la India hicieron alto

fluencia de dos ros, el Vajsh y el Piandsh,


que reunidos forman el Oxo o Amu Daria.

en el oasis de Kibadian (al sur de lo que hoy es el Tadjikistan), donde compraron una gran cantidad de objetos y monedas proce dentes de una "vieja fortaleza" situada en
el promontorio que se yergue en la con fluencia de dos ros. Los objetos y las mone

Muy cerca, por la orilla izquierda del Vajsh,


corre la cordillera de Techik-Tach. Por el

estrecho valle pasaba antao una vieja ruta

de caravanas. Los arquelogos, que han ex


plorado el lugar en varias ocasiones, han

encontrado vestigios de dos antiguas ciuda

das fueron a parar a las manos de joyeros indios y despus a las de coleccionistas in
gleses. Por ltimo, con el nombre de "teso ro del Oxo", terminaron en el Museo Brit
nico de Londres.

des: Tajti Kuvad ("Trono de Kuvad") y, cinco kilmetros ms al norte, Tajti Sanghin ("Trono de Piedra"), donde las exca vaciones de 1928 y 1956 no dieron resulta
dos interesantes.

Los objetos que forman el tesoro del Oxo


(este es el ro que hoy se conoce con el nom bre de Amu Daria) son de soberbia calidad

En 1976 la misin arqueolgica al Tadji

kistan meridional organizada por el Institu


to de Estudios Orientales de la Academia de

artstica. A juzgar por ellos resultaba evi dente que la antigua Bactriana, cuyo terri torio abarcaba lo que actualmente son las

Ciencias de la URSS, la Academia de Cien

cias de la RSS de Tadjikistan y el Museo del

regiones meridionales de Tadjikistan, parte' de Uzbekistn y el norte de Afganistn,


prometa a los investigadores unos descu

Hermitage de Leningrado decidi empren der nuevas excavaciones en Tajti Sanghin. Nuestro propsito no era, naturalmente, lo calizar el emplazamiento donde se haba
descubierto el tesoro del Oxo. La ubicacin

brimientos histricos y artsticos de primera


importancia. Se confirmaban as las lacni
cas observaciones de los autores de la anti

de Tajti Sanghin junto a una vieja ruta de caravanas, sus poderosas fortificaciones y
los restos dispersos de antiguas columnas,

gedad sobre la riqueza y el poder del reino


de Bactriana.

junto con nuestra intuicin de arquelogos,


bastaron para convencernos de que deba mos empezar el trabajo de nuevo en sus mis- 1

Segn las descripciones del lugar donde


fue hallado el tesoro del Oxo, estaba situa

29

Este altar de piedra votivo, ejemplo nota


ble de sntesis cultural en el Asia central

de hace ms de 2.000 aos, sirve de peana


a una figurilla de bronce de Sileno tocan

do una flauta doble. La inscripcin graba


da en la base reza: "Tras hacer un voto,

Atrossok lo dedica a Oxo". Aunque la ins

cripcin es en griego antiguo, los dos nombres citados en ella son de origen
persa. Se supone que Atrossok, que dedi

c el altar con su inscripcin y su figurilla


griegas al dios local Oxo, era un servidor bactriano de un culto al fuego.

mero de objetos de alabastro labrado. En total, se han descubierto y restaurado en

diez temporadas de excavaciones 5.000 ob


jetos de arte. Lo que ms nos alegr fue descubrir

obras de arte de los siglos VI al IV a.C. (poca del reinado de la dinasta de los

Aquemnidas en Persia), que recuerdan las del tesoro del Oxo. Una vaina de marfil pa ra una pequea espada aparece sugestiva mente decorada con un relieve que repre senta a un len con un venado entre sus ga rras. Por su forma y su tamao (276 mm) es como una rplica de otra vaina del tesoro
del Oxo.

En el templo han aparecido otras obras de arte de la Persia aquemnida que recuer dan por su manufactura piezas anlogas del tesoro del Oxo. Entre ellas figura un ritn
(copa para beber vino) en cuya tapadera se

ve un len agazapado y una empuadura de espada de jinete coronada por un grifo. Se


han hallado tambin ms de cincuenta lmi
nas de oro.

Los objetos pertenecientes al siguente pe riodo cronolgico (entre finales del siglo IV y principios del II a.C.) nos ilustran sobre un periodo sobremanera interesante y hasta hace poco desconocido: la poca helenstica

mas ruinas. Montamos nuestras tiendas y erigimos nuestros chals porttiles. Y all vinieron a trabajar docenas de estudiantes
tadjiks y especialistas de Mosc. La parte central de la antigua ciudad

lo tenan cuatro metros de espesor), al que bautizamos con el nombre de templo de


Oxo, fue construido a finales del siglo IV o

principios del III a.C. Su planta recuerda la de los templos del fuego persas; est cons

de la cultura de Bactriana. Por la fecha y el lugar de fabricacin (Asia Menor, Bactria


na, las estepas escitas) esos objetos se empa

ciudadela

era de forma rectangular (165

por 237 metros). La rodeaba una muralla de

truido con materiales lcales y sus colum nas, pilastras, altares y otros detalles arqui
tectnicos son de estilo helenstico.

rientan con otras piezas del tesoro del Oxo. Las esculturas de arcilla y de alabastro, cu
yos prototipos encontramos en las escuelas

seis metros de altura, con robustas torres en


cada ngulo, y un profundo foso. Dos mu rallas que partan de las montaas hacia el

Los fieles llevaban al templo ofrendas que se depositaban en zanjas excavadas ex

plsticas de Asia Menor, son obras de arte puramente helensticas. Junto a gran nme ro de retratos de soberanos griegos y orien
tales adornados con diademas hemos desen

ro, a 500 metros al norte y al sur de la ciu


dadela, marcaban los lmites de la ciudad.

profeso con tal fin o en otros receptculos.


Posteriormente se amontonaban en rinco

En una colina de la parte occidental de la


ciudadela se excav un monumental edifi
cio. Se trata casi con toda certeza de un tem

nes de los corredores que ms tarde fueron recubiertos y cerrados hermticamente con
virtindose as en tesoros ocultos. A nosotros nos toc la satisfaccin de

terrado estatuas de muchachas (kor) repre sentadas en movimiento impetuoso y una


estatua de Apolo (el llamado "Apolo de Tajti Sanghin"). Lugar especial entre todos estos hallazgos
corresponde a un busto de marfil en minia

plo, ya que en l se encontr un altar de pie


dra votivo dedicado a Oxo. En el centro ha

descubrir esos tesoros. Cuando hubimos re

ba un amplio vestbulo blanco con cuatro

tirado los cinco metros de relleno, ante nuestros ojos aparecieron cientos de obras

columnas, rodeado por tres de sus lados por dos hileras de soportales. Al este (donde estaba la entrada principal) se elevaba un prtico con columnatas.
A juzgar por la arquitectura de este im

tura de Alejandro Magno, una ms entre las escasas efigies helensticas que han llegado hasta nosotros del rey guerrero que repre sentaron Lisipo, Leocares y otros grandes artistas. Las efigies de Alejandro en las mo nedas se basan probablemente en una esta-

del arte greco-bactriano, hasta entonces desconocido: bronces con una ptina de co lor verde oscuro, esculturas de alabastro de una blancura centelleante, piezas de rutilan
te oro... Desenterramos tambin gran n-

presionante edificio (los muros del vestbu

30

Estas escenas de caza grabadas en el cos


tado de un cofrecillo de marfil nos mues

tran la indumentaria, las armas, los arne-

ses de caballo y el arte de jinetes de los Yueh-chih, conquistadores del reino greco-bactriano (fines del principios del siglo I a.C). siglo II-

tua monumental, hoy perdida, en la que Lisipo representaba al hroe macedonio en el papel de Hrcules cubierto con una mscara

en la India desde el siglo V hasta el II a.C, poca en que reinaron las dinastas de Nanda y de los Maurias. Otros objetos de marfil descubiertos en el templo son sin lugar a du das obras de estilo gandhara-indio.
Ya se ha formulado muchas veces la hi

y otras varias civilizaciones (desde la India hasta el Mediterrneo). Las obras de arte descubiertas en el templo de Oxo ilustran brillantemente la amplitud y la intensidad
de esos lazos.

de len con las garras cruzadas sobre el pe cho. De este mismo modelo procede la ima gen del retrato de marfil de Tajti Sanghin en
el que Alejandro aparece de frente. Dadas

La interaccin entre esas civilizaciones no se limit a la esfera de la cultura material.

las diferencias con las monedas, en las que


se ve a Alejandro de perfil, este retrato re
sulta nico.

ptesis sobre los contactos culturales y


artsticos entre los partos y los bactrianos.

Vienen ahora en apoyo de tal hiptesis las


esculturas de Tajti Sanghin y casi setenta monedas de plata que imitan dracmas del rey parto Fraates IV (36?-2 a.C).

En la orilla derecha del Oxo viva un pueblo que hablaba y escriba griego y veneraba a
los dioses helensticos. All se cre una cul

El hecho de que se haya descubierto en el


corazn del Asia central esta "mascarada"

tura sincrtica greco-bactriana. En Ai Ja num han aparecido un teatro y un gimnasio

en la que Alejandro aparece con los atribu tos de Hrcules es de particular importancia
ya que las imgenes del soberano macedo

Algunos de los objetos por nosotros des


cubiertos dan testimonio de las relaciones

griegos y otros edificios especficamente


helnicos.

nio desempearon un papel decisivo en el arte greco-bactriano, lo mismo que en el ar te budista y en el de Gandhara, en lo que hoy es el noroeste de Paquistn. Otra obra de altsima calidad es una pin tura original que representa un combate
entre Hrcules y Sileno, tema sobremanera

permanentes con el mundo escita-siberiano.

Al parecer, en Bactriana eran muy cono cidos los escritos literarios, cientficos y fi losficos de los autores griegos. Y es posible
que algunos elementos de esa cultura sobre vivieran a la cada del imperio kuchn. Por el momento esto no es ms que una hiptesis. Lo importante es proseguir las in vestigaciones, ya que el descubrimiento de vestigios de las antiguas tradiciones cultura les que hayan podido sobrevivir a la Edad Media arrojara nueva luz sobre la gnesis de las ciencia y la
musulmn.

Aparte de la placa de oro antes menciona da, existe un disco de bronce con una ima

gen ("el escita sujetando dos caballo por la brida") y varios miles de flechas de bronce y de hierro que debieron ser llevadas al tem
plo como ofrendas.

raro en la plstica de la antigedad, que adorna una espada ceremonial griega.


Entre los numerosos relieves que exornan las fundas de espada griegas figura una es cena fantstica en la que se ve una criatura de sexo femenino con una cola de pez, cascos de caballo y alas de ave. Cabe imagi nar que una antigua divinidad griega del mar fue transformada en ninfa del squito del dios del ro Oxo. Esta imagen del siglo
II a.C, poca del hundimiento del reino

De este modo, los hallazgos del templo de

Oxo nos muestran con precisin los compo


nentes del arte greco-bactriano; esos ele mentos son orientales (originales), helens

ticos (secundarios) y de Gandhara (resulta do de la sntesis greco-india).


Muchos de los objetos que hemos descu bierto presentan analogas con otros del te soro del Oxo y del arte persa del periodo aquemnida. Son muchas las razones que abonan la idea de que el tesoro del Oxo se
halla orgnicamente relacionado con el

filosofa del oriente

greco-bactriano, es prueba de la heleniza-

templo de Oxo, es decir que forma parte del


tesoro del templo.

BORIS A. LITV1NSKI, especialista sovitico en culturas del Asia central, es miembro correspon
diente de la Academia de Ciencias de la RSS de

cin de la cultura bactriana y de la impor tante influencia de la antigedad en el arte


greco-bactriano.

La exploracin de Tajti Sanghin prosigue


hoy junto con la de otros monumentos bac
trianos. En la orilla meridional del Amu

Tadjikistan y director del Departamento de Rela


ciones Histricas y Culturales con el Oriente So vitico y no Sovitico del Instituto de Estudios
Orientales de la Academia de Ciencias de la

Probablemente de la misma poca es una

placa semiesfrica de oro con una imagen en relieve de tres panteras en un crculo, ca da una de las cuales muerde a la que la pre cede (la "Ronda de las Panteras"). Se trata
de una fina muestra del "estilo animales-

Daria en Afganistn, donde el Kocha Daria

URSS. Entre sus numerosas publicaciones mere


cen destacarse especialmente "Las tumbas de

desemboca en el gran ro, nuestros colegas


franceses han descubierto toda una ciudad

Ferghana" (cuatro vols., 1972-1978) y "Tepaishah. Cultura y contactos con la Bactriana de los
kuchanes", escrita en colaboracin con A.
Sedov.

griega cuyas ruinas han recibido el nombre

co" propio del arte escita-siberiano.

de Ai Janum. Los objetos de Ai Janum y los del templo de Oxo se complementan mutua
mente y permiten hacernos una idea clara

V.

La abundancia de objetos de marfil, ma

terial escaso y muy caro, es prueba de que existan relaciones econmicas y comercia les estrechas con la India, de lo que tambin dan fe las rarsimas monedas perforadas de forma oval y rectangular que se acuaron

de la cultura greco-bactriana, de sus orge


nes y de sus prolongaciones.
Gracias al estudio de ese material hemos

IGOR R. PICHIKIAN, arquelogo sovitico, es


colaborador cientfico del Instituto de Estudios

Orientales de la Academia de Ciencias de la

URSS. Especialista en cuestiones de arte e histo

podido conocer las relaciones multilaterales

ria antigua del Asa central, ha publicado ms de

entre los pueblos que habitaron esa regin

cien estudios sobre la cultura de esta regin.

31

MOHENJO
capital milenaria en peligro

DARO

por Syed A. Naqvi

Testimonio incomparable de la gran civi


lizacin que se extenda por el valle del In
do hace casi 5.000 aos, las inmensas rui

MOHENJO Daro, metrpolis de la


civilizacin cinco veces mile

una cubierta para evitar accidentes a los ni os y a los animales domsticos.

nas de la ciudad de Mohenjo Daro estn

naria del valle del Indo . en Paquistn, presenta uno de los ms tem
pranos ejemplos de planificacin urbana
con miras al futuro. Incluso en la zona limi

El plano reticular y la arquitectura resi


dencial no son las nicas muestras de la

situadas en el actual Paquistn, provincia


de Sind, a unos 400 km al norte de Kara

sensibilidad y el cuidado que caracterizan la

chi. Mohenjo Daro, a la que se ha dado el


sobrenombre de "Manhattan de la Edad

del Bronce" por su urbanismo extraordi

tada que la pala de los arquelogos ha saca do a luz, pasear por Mohenjo Daro es como
caminar a travs del embrin fsil de Man

concepcin de Mohenjo Daro. Nunca antes de los tiempos de Grecia y Roma se haba

nariamente

moderno,

estuvo

siempre

amenazada por las Inundaciones del In

hattan. En la ciudad baja encontramos un

do, aun en los tiempos de su mximo es plendor. Durante siglos las ruinas de la

ciudad estuvieron protegidas por un capa


protectora de tierra, pero tras su exhuma
cin (iniciada en 1922) han de enfrentarse

sistema reticular de calles: una amplia ave nida de ms de nueve metros de ancho que va de norte a sur, atravesada en ngulo rec
to por calles ms pequeas orientadas en
direccin este-oeste. Las manzanas de ca
sas residenciales as constituidas comuni

dado tanta importancia a los servicios pbli cos y sanitarios. Los canales de desage re cogan primero las aguas de desecho al pie de los muros, en pequeos desages reves tidos de ladrillos, desde donde eran dirigi
das, a travs de conductos, hacia canales

una triple amenaza: ascenso

de las

principales que corran por las calles bajo el nivel del pavimento y estaban cubiertos por
espesos ladrillos. Este sistema de alcantari
llado estaba conectado con cloacas ms

aguas subterrneas, corrosin salina y


crecidas del Indo. Ya en el decenio de los

can por medio de estrechas callejuelas.

60 la Unesco empez a colaborar con el gobierno paquistan para salvar tan ex

cepcional solar arqueolgico. Posterior mente la Organizacin traz, con la ayu da de expertos paquistanes, un plan di
rector de trabajos, emprendi una cam

La principal preocupacin al planear las casas fue la comodidad y la seguridad. Para evitar el riesgo del pesado trfico de las calles principales, las puertas de las casas daban generalmente a las callejas laterales. Unos patios interiores proporcionaban luz y
aire y las ventanas estaban cubiertas con
celosas de barro cocido o alabastro. El

anchas, tambin cubiertas, que conducan finalmente las aguas sucias fuera de las zo nas pobladas. Algunos cientos de metros hacia el oeste de esta parte de la ciudad densamente
descu construida, las excavaciones han

paa internacional para su salvamento e inscribi a Mohenjo Daro en la Lista del


Patrimonio Mundial. En la foto, las ruinas

bierto

unos

cuantos imponentes

monu

mentos, situados en una colina artificial, de


unos siete a catorce metros de altura. Los

espesor de las paredes de las casas de Mo henjo Daro indica la existencia de edificios

de la antiqusima ciudad dominadas por


un stupa bdico construido en poca mu
cho ms reciente.

Grandes Baos, construccin de ladrillos

de por lo menos dos pisos. La mayora de


las casas disponan de escaleras de acceso

sumamente compleja, es un smbolo de los

al segundo piso o al techo, que es utilizado

logros de la ingeniera en aquellos tiempos. La piscina, de 11,9 m de largo, 7 de ancho y 1,9 de profundidad, estaba impermeabili zada con una capa interna de ladrillos fra guados en cemento, dispuestos de canto una capa regular de alquitrn de 2,5 cm de espesor que a su vez cubra otra
sobre
capa doble de ladrillos. El suelo se iba indi-

generalmente en Paquistn y otros lugares de Oriente como lugar fresco para dormir
en verano. Adems de otras comodidades

bsicas, muchas casas tenan pozos para el abastecimiento de agua, revestidos de la

drillos y protegidos en su parte superior por 32

7m >

mi

Fotos Ral Zamora, Par

nando hacia un orificio de salida que condu

ca a un desaguadero cubierto con un arco con mnsulas. Este arco es uno de los pri meros logros de la ingeniera arquitectnica dado que posibilita las aperturas curvas sin necesidad de utilizar envigados de madera. (La posibilidad de hacer aperturas curvas
mayores se generaliz ms tarde con el des

descubrimiento en 1922 de una metrpolis tan completa y avanzada constituy una in


mensa sorpresa para los arquelogos que
nunca haban tenido indicios de la existen

Los Grandes Baos son seguramente el edificio ms espectacular de Mohenjo


Daro. Construidos con ladrillos, como la

mayora de las viviendas, miden casi 12 metros de longitud. Su impermeabilidad era perfecta gracias a una capa de alqui
trn colocada entre dos series de ladrillos

cia de una civilizacin tan acabada en el va

lle del Indo ya 2.500 aos antes de Cristo. Slo en 1920, cuando se iniciaron las exca

vaciones en Harappa, a unos 640 kms al norte de Mohenjo Daro, se empez a vis
lumbrar la existencia de toda una red de

unidos con argamasa. El suelo, inclinado, posea un sistema de desage.

cubrimiento de la clave de arco y actual


mente se ha desarrollado aun ms con la

utilizacin del hormign armado.) Un segundo monumento arquitectnico


es el podio del Granero situado en la ladera

estas ciudades antiguas tan "modernas".


Cuando Harappa, la ciudad madre de la

civilizacin del valle del Indo


"cultura de Harappa"

la cual
Sello descubierto en Mohenjo Daro. Enci
ma del animal puede verse una muestra

oeste de la colina. Pinsase que ese podio,


constituido por plataformas cuadradas de

tal civilizacin es tambin conocida como

, fue descubierta a

mampostera divididas por una red de estre

chos pasadizos que se cortan en ngulo


recto, estaba cubierto por un piso de made

mediados del siglo XIX, se constat que sus ladrillos se los haban llevado los ingenieros
que construyeron la lnea del ferrocarril en

de la escritura pictogrfica de la civiliza cin del Indo, que los cientficos no han
descifrado todava.

ra y que las superestructuras eran probable


mente tambin de madera. Se ha afirmado

tre Lahore y Multan y tambin, evidente

mente, los habitantes de la zona que busca


ban materiales de construccin de fcil ob

que serva como Tesoro de Estado y que

hasta l llegaban los sacos de granos de los agricultores en carros tirados por bueyes,
ya que en esos tiempos todava no exista la

tencin para sus propias casas. Desde en


tonces, los arquelogos han identificado en
el subcontinente indio cerca de mil nuevos

moneda. Cantidad de granos de trigo car


bonizados que se han encontrado durante
las excavaciones confirman rotundamente
la naturaleza de este edificio. Un tercer edi

sitios de estilo Harappa. Tales sitios dan


testimonio de la existencia de un estrato

cultural notablemente similar y cubren una superficie geogrfica sobremanera vasta, desde el mar Arbigo hasta el pie del Hima
laya y desde el lmite oriental de Irn hasta

ficio importante en esta zona es el Saln de

las Columnas: veinte en total, que tena un pequeo patio y serva probablemente co
mo centro administrativo.

las proximidades del valle del Ganges. Esta


zona era mucho mayor que la que abarcaba

Cul era el propsito de algunas de las

complicadas construcciones de Mohenjo Daro es uno de los enigmas que siguen sin
resolver en lo que respecta a la ciudad. El

las culturas contemporneas de Mesopota mia y del valle del Nilo juntas.
Cul era el principal medio de subsisten cia de los pobladores del valle del Indo en
@

33

ese

remoto

pasado?

Los

testimonios

arqueolgicos muestran que se trataba esencialmente de agricultores que cultiva ban cereales, legumbres y algodn, siendo la ganadera un elemento fundamental de la economa agrcola. Sus modos de vida eran sencillos pero no por ello carecan de obje tos preciosos. Utilizaban el cobre y el bron ce para determinadas herramientas y armas y trabajaban ocasionalmente el oro y la pla
ta con otros materiales para los abalorios y

nistrativa libre de esas grandiosas construc ciones como son los fuertes, palacios o

grandes templos destinados a ser centros de un poder autoritario. Fue all, en tan re motos tiempos, donde se fue gestando una cierta idea de gobierno del pueblo, por el

pueblo y para el pueblo, echando la semilla


del sistema democrtico tan pre

cioso para todos nosotros hoy en da.


Evidentemente, tal deduccin slo puede

las joyas. Algunos de los abalorios eran fa


bricados con mucha destreza a partir de

probarse mediante nuevas investigaciones de los esquemas socioculturales de la civili


zacin del valle del Indo. En los ltimos 60

ciertas piedras semipreciosas tales como el

gata, la cornalina y el lapislzuli. Al mismo tiempo, la mayora de sus utensilios eran de


hueso, madreperla, loza, piedra, greda y otros materiales abundantes en la regin.

aos los especialistas en epigrafa y lings


tica de todo el mundo han desplegado gran

Los objetos fabricados con substancias or gnicas ms vulnerables no sobrevivieron y slo podemos imaginar el tipo de muebles que utilizaban o los tipos de tejidos que pre
feran. Los restos de la tintorera de Mohen

des esfuerzos para descifrar esta escritura. Una descripcin de tales esfuerzos consti tuira un largo relato de intentos y errores. Hasta hoy el nico resultado de esas inves

jo Daro y ciertos dibujos identificados en las vestimentas de figuras esculpidas dan a entender, no obstante, que gustaban de ro pas de colores vivos, normalmente borda das o estampadas.
Otro aspecto notable de esta antigua civi

fi rey-sacerdote: esta estatua de esteati


ta, de 18 cm de altura, apareci durante las excavaciones en los barrios bajos de
Mohenjo Daro.

tigaciones ha sido la identificacin de cerca de 350 pictografas diferentes y la constata cin de que la escritura se haca de derecha a izquierda. Pero la ausencia de textos sufi cientemente largos ha impedido cualquier resultado positivo, pese al empleo de las computadoras, y slo cabe esperar que al gn da se descubra una inscripcin bilin ge que permita desvelar los misterios de la
cultura de Harappa del mismo modo que
sucedi con la Piedra Roseta en Egipto y

lizacin es el alto grado de uniformizacin.


En arquitectura, los ladrillos de construc cin eran de un tamao regular cm do de otras civilizaciones contemporneas

con la inscripcin de Behistn en Irn. De las capacidades manuales de este

de largo, 13,42 de ancho y 6,35 de espesor. Los sistemas de drenaje y alcantarillado se ajustaban a un mismo patrn. Las casas particulares respondan a idnticos princi pios en cuanto a planos y dimensiones y s lo las construcciones especiales, quizs de
carcter pblico, eran tratadas de manera diferenciada pero siempre en el marco del

era la existencia de pesos y medidas estric


tamente controlados.

La gente respetaba el imperio de la ley, sistema que les ayud a erigir hace 5.000
aos una sociedad igualitaria en tan vasta

escala, logro sin parangn en la historia de


la humanidad. De esto cabe pues deducir

pueblo hemos podido saber ms gracias a una amplia gama de objetos utilitarios, ludi os, artsticos y de culto, hechos de cermi ca, piedra, metales, marfil, madreperla, lo za y otros materiales. La amplia gama de objetos de cermica,
en su mayora torneados, presentan una multitud de formas, tamaos y modelos de
corativos. Ehtre los innumerables juguetes de barro cocido resultan particularmente

que el valle del Indo dispona de un meca


nismo de control eficaz, medios de comuni

plano de la ciudad. Un rasgo fundamental que distingue la civilizacin del valle del In

cacin y transporte y una estructura admi-

impresionantes los carros de bueyes en mi


La invasin de las ruinas por la sal
A. La sal del subsuelo

niatura con slidas ruedas. Tales carros si

guen utilizndose an hoy en Mohenjo


Daro. Encontramos tambin aqu los orge
asciende por capilaridad. B. El agua salada penetra a
travs de los terraplenes en
los muros aun no totalmente

nes del tablero de ajedrez diseado en bal


dosas de ladrillo con figuras de gata o
marfil.

despejados.
C. Los vientos de polvo

Quines fueron los fundadores de estacivilizacin tan avanzada y hace ya tanto

estn cargados de sal que la


lluvia introduce en los
muros.

tiempo desaparecida? Los estudiosos pien san que los pueblos del Indo llegaron al valle
desde la base de las montaas situadas a occidente. Descubrimientos recientes en

D. La sal acumulada en los

ladrillos destruye los muros.

[tas ruinas de Mohenjo Daro, corrodas


I por la sal, van desmenuzndose y convirI rindose poco a poco en polvo. La sal pro
viene de las aguas subterrneas cuyo ni
vel ha subido mucho debido a la eleva-

los ms antiguos sitios de cultura de Harap pa en Mehrgarth, Beluchistn, al sudeste de Sulaiman y Kirthr, dan testimonio de una
secuencia ininterrumpida de evolucin cul

tural, desde el sexto milenio antes de Cristo

I cin del lecho del Indo y al riego artificial


I de las llanuras circundantes. La altura de
la capa acufera, que en 1922 se situaba a

hasta el apogeo de la cultura de Harappa.


En cuanto al fin de esta civilizacin altamen

te desarrollada, que se sita en torno a 1 .500 aos a.C, los arquelogos han avan

una profundidad de 8 metros aproximaI damente, oscila actualmente entre 1,52 | metros en octubre y 3,66 en mayo bajo la
superficie del suelo. La sal asciende hacia
i el suelo e Impregna los muros por capila-

zado algunas teoras. Unos atribuyen su fin


a invasores arios que habran asolado el va
lle del Indo en esa poca, mientras otros

I rdad o por otras vas (ver el esquema ad\ junto). Se produce as un ciclo continuo
' de saturacin, de evaporacin y de crista-

consideran que se debi a un deslizamiento


tectnico en el litoral del mar Arbigo que habra afectado todo el sistema ecolgico del valle. De todos modos, ser preciso

! lizacin de la sal que provoca la desagre! gacn de las paredes de ladrillos. Las so
luciones previstas consisten en disminuir

continuar las investigaciones para esclare cer las causas de la sbita desaparicin de

I el nivel del acufero por bombeo o drena"' je, el completo desenterramiento de los
muros, la limpieza exterior y el lavado in
Dibujo Unesco

tan gran civilizacin. Los antiguos restos de Mohenjo Daro fi guran actualmente en la Lista del Patrimo-

terior de las paredes.

34

nio Mundial como un monumento de inte

dos Miembros y de fuentes privadas. El go


bierno de Paquistn ha invertido, de sus

La mayor parte de las casas de Mohenjo


Daro posean un pozo del que sacaban

rs universal y la Unesco ha lanzado una

campaa internacional para su preserva


cin. Cuando las excavaciones comenza

propios recursos, cerca de 6 millones de d lares para la ejecucin del Plan Principal,

agua para la cocina o el cuarto de bao.


La constante elevacin del'nivel de ocu

ron

en

el

sitio

en

1922,

los

restos

de

que incluye planes para el control de las


aguas subterrneas, la conservacin de los restos arquitectnicos y el encauzamiento del ro Indo y cuyo costo total se ha estima
do en 19 millones de dlares.

pacin del suelo de la ciudad puede ob servarse gracias a estos pozos que, una

construcciones estaban en condiciones ex

celentes.

Pero

poco

despus

resultaron

vez vaciados, parecen chimeneas y que


para el arquelogo funcionan como au tnticas escalas de profundidad. En efec to, a lo largo de los siglos los habitantes de la ciudad Iban realzando las paredes de ladrillos de los antiguos pozos hasta el ni vel del suelo. En ciertos casos los pozos
descubiertos atraviesan las habitaciones anteriores.

afectados por la calamidad del anegamien to y la peste de la salinidad. Estas dos enfer
medades, combinadas con la amenaza de la

Ya se ha completado la primera etapa del plan de control de las aguas subterrneas que incluye la construccin de 14 pozos,

erosin por el ro Indo, pusieron en grave

peligro la existencia misma de Mohenjo Daro. Tan complejo problema no slo exi ga recursos financieros que no estaban al alcance del gobierno de Paquistn sino un
conocimiento tcnico de carcter multi-

colectores y dispositivos de drenaje, as co


mo una instalacin de bombeo. Las labores

de conservacin de los restos arquitectni


cos han avanzado tambin considerable

disciplinario.

mente. Los fondos necesarios para la ejecu

A pedido del gobierno de Paquistn la


Conferencia General de la Unesco adopt en su 17a. reunin una resolucin por la que

cin del plan de encauzamiento del ro (cer


ca de 9 millones de dlares) an no se han

reunido y, por ende, los trabajos correspon


dientes a tal proyecto no se han iniciado to

autorizaba la realizacin de una Campaa internacional para la preservacin de Mo

dava. De ah que el Director General de la


Unesco haya hecho un segundo llamamien
to a la comunidad internacional insistiendo

henjo Daro. En enero de 1974 el Director


General de la Unesco hizo un llamamiento

SYED A. NAQVI, arquelogo y muselogo de


renombre internacional, fue director del Museo

Nacional y luego director general del Departa

a la solidaridad internacional en el que afir maba que "aportando generosamente el di nero, el material y los servicios necesarios,

en que "este desafo es proporcional a la responsabilidad que todos tenemos frente a nuestra historia comn, de la cual Mohenjo
Daro es un emocionante testimonio que no

mento de Arqueologa y Museos de Paquistn.


Ha realizado excavaciones en diversos solares ar

queolgicos de su pas, tales como los de Mo

los gobiernos, las instituciones pblicas y privadas


Miembros

los
no

particulares

de

Estados
a

podemos ni debemos dejar desaparecer".-

contribuirn

nicamente

salvar un testimonio valioso del pasado de la humanidad sino que adems patentizarn y reforzarn esa solidaridad intelectual y moral de la humanidad que es el fundamen to de la paz verdadera".

henjo Daro, Taxila y Mansura. En julio de 1973 se incorpor a la Divisin del Patrimonio Cultural de la Unesco, que dirige desde enero de 1982. A su atinada direccin se debe el xito con que culmi naron las campaas internacionales organizadas

por la Unesco para salvar los templos de Nuba y


de Borobudur. Actualmente coordina todas las

actividades de la Organizacin en materia de pre servacin del patrimonio cultural. Entre sus estu dios sobre arqueologa y arte antiguo cabe citar
"El arte musulmn", "El arte de Gandhara" y

Desde entonces,

han ingresado en el

Fondo Fiduciario de la Unesco ms de 4 mi

"1.400 aos de caligrafa cornica", publicados


en ingls.

llones de dlares provenientes de los Esta

35

Mi vida de arqueolog
CUANDO Escuela en de 1973 ingres en de la la

por Guo Zhan

fotografa, cartografa, historia de la arqui


tectura antigua, historia de las diferentes

En 1976 un terremoto que sacudi la pro


vincia de Hebei arras literalmente la ciu

Arqueologa

Universidad de Beijing (Pekn) un


nuevo mundo se abri ante mi. All recib

nacionalidades, filosofa y ciencia poltica.


Tras graduarme en 1976, se me envi a

dad de Tangshan. Hubo centenares de miles


de muertos y heridos y los temblores secun

una rigurosa formacin sobre la manera de

trabajar en el Instituto de Investigaciones

darios constituan una amenaza para Bei

realizar excavaciones e investigaciones ar

queolgicas. Nuestros profesores nos ense


aban no solamente la manera de desente rrar determinados elementos de ruinas anti

Cientficas y Tecnolgicas para la Preserva cin de las Reliquias Histricas, que depen
de de la Oficina de Administracin de Reli

jing y otra gran ciudad, Tianjin. Qu posi bilidades haba de que la capital fuera de vastada por un terremoto en un futuro in
mediato? Esta cuestin preocupaba al pas
entero.

guas sino tambin los principios a que de ben someterse los trabajos de excavacin
cuando se trata de grandes solares arqueo

quias del Estado. El Instituto se ocupa prin cipalmente de la conservacin de todo tipo de restos histricos segn la metodologa
moderna y de la preservacin y manteni

Las investigaciones sismolgicas deben


basarse en un estudio de los documentos

lgicos. Particip en las excavaciones de las ruinas del Palacio E-fang de la dinasta Qin en Shanxi y de los vestigios de la Edad de
Piedra en el curso medio del Yangts y en

miento de monumentos antiguos.

Junto

histricos ms antiguos de que se dispone.


En este sentido China tiene la suerte de po
seer en todo su territorio documentos y este

con otros miembros del personal se me en


comend la tarea de iniciar un nuevo tema

los trabajos que se efectuaron en el solar de la antigua capital de la Ciudad-Estado de

Qi, perteneciente al periodo de Primavera y


Otoo de Linzi, provincia de Shandong.

de estudio: la arqueologa sismolgica. (Ca be sealar, ante todo, que los arquelogos que trabajamos a lo largo del ro Yangts habamos proporcionado informaciones hi
drolgicas relativas a los 2.000 aos ltimos

las de tiempos remotos con anotaciones so bre la actividad ssmica que, junto con los
numerosos monumentos antiguos que han sobrevivido a los terremotos, constituyen
un valioso material de estudio. El diverso

Hoy comprendo que aquellas excavaciones en las que nos permitan participar a los
principiantes no eran de gran importancia, pero trabajar en un verdadero solar arqueo

como material de referencia para la cons truccin de programas hidrolgicos. De ah que nos correspondiera iniciar una nueva rama de la ciencia: la arqueologa hidro lgica.)

grado de deterioro sufrido por los edificios


histricos en diferentes lugares de la ciudad de Tangshan, indicio cierto de las variacio

lgico me permiti adquirir una experiencia prctica y suscit en m mayor inters por
mis estudios.

nes en la magnitud de los temblores, consti tuan pruebas capaces de ser "tratadas" cientficamente. La arqueologa sismolgi
ca acababa de nacer.

A ms del trabajo de campo estudi chino clsico, caligrafa antigua, la historia anti gua de China, los principales temas arqueo

El arquelogo chino Guo Zhan (segundo


por la derecha) y sus colegas en 1976, du
rante una campaa de estudio de un sec
tor de la Gran Muralla. La longitud de sta

Entre 1976 y 1979 mis colegas y yo reco rrimos la devastada Tangshan, a ambos la dos de la Gran Muralla, en el norte de Chi na, as como Beijing y Tianjin, para com-

lgicos de cada periodo de nuestra historia,

es de 2.400 km y algunos de sus tramos datan del siglo IV a.C, mas su construc

cin fue principalmente obra de Qin Shi huangdi, primer emperador de China
(221-210 a.C). Posteriormente, y en espe

cial durante los siglos XV y XVI, la mura lla sufri importantes modificaciones.

36

Foto Edicin china de El Correo de la Unesco

Esta Inmensa tumba, situada en la provin

cia de Qinghai, en el oeste de China, es la de un noble originario de Turfan. Durante


las excavaciones, iniciadas en 1983, se

han descubierto, entre otras cosas, gran

cantidad de tejidos de seda y de fragmen


tos de tabletas de bamb grabadas. Cen
tro de un oasis por donde pasaba la va

septentrional de la Ruta de la Seda, Tur fan, en la actual regin autnoma de los uigures del Xinjiang, fue una gran ciudad caravanera y comercial. (Vase El Correo
de la Unesco, "Grandes rutas comercia

les", de junio de 1984).

pletar nuestras investigaciones. Los resulta


dos los consignamos en un libro titulado

do que todos puedan participar en la pro teccin, el estudio y la valoracin de nuestra


cultura histrica comn.

Su nmero es insuficiente. Por otra parte,

"La arqueologa sismolgica de Beijing" que fue aclamado por nuestros colegas. En esa experiencia se origin mi concepcin de las mltiples facetas de la arqueologa y de
sus estrechas relaciones con otras ramas de

la nueva situacin exige un conocimiento profesional mayor. En el curso de forma cin de directores de equipos arqueolgi
cos, que depende de la Oficina de Admi

Estoy enteramente dedicado a mi trabajo administrativo y a realizar investigaciones sobre temas que me interesan. En los tres
aos ltimos he visitado ruinas antiguas en

nistracin de Reliquias del Estado, slo se


acepta como alumnos a graduados de esta blecimientos superiores y con tres aos de experiencia prctica. nicamente quienes aprueban los exmenes al final del curso estn autorizados para dirigir trabajos de
excavacin.

la ciencia.

las tres gargantas del ro Yangts, he inspec

En 1979 segu un curso de graduacin so


bre historia de la dinasta Yuan en la Acade mia de Ciencias Sociales. As comenz un

cionado las reliquias de los lamas en el Tibet y he viajado a Egipto. Este ao he sido
nombrado subdirector de nuestro Departa

nuevo captulo de mi carrera arqueolgica y termin mi trabajo en materia de arqueolo ga sismolgica. Al concluir el curso slo me atraan dos instituciones en las que po dra realizar al mismo tiempo investigacio nes y trabajos de conservacin: el Instituto de Investigaciones Histricas y la Oficina de Reliquias del Estado, donde haba traba

mento de Reliquias, un nuevo honor que me incita a esforzarme ms aun en mi trabajo a fin de cumplir la misin histrica enco mendada a nuestra generacin.
Antes de la fundacin de la Repblica

De todas las revistas chinas sobre esta

materia las de ms alto nivel profesional son "Arqueologa" (que publica el Institu to de Investigaciones Arqueolgicas de la Academia de Ciencias Sociales de China) y "Reliquias" (publicada por la editorial del mismo nombre). Algunos museos e institu

Popular haba pocos arquelogos en el pas. En los primeros aos de la joven rep blica varios arquelogos clebres, incluso algunos del extranjero, dictaron cursos de
formacin para futuros arquelogos. En 1955 se cre la Escuela de Arqueologa en la

jado antes. Decid pues regresar a ella.


Fue as como me incorpor al departa

tos locales de investigaciones editan sus propias revistas.


El mbito de los estudios arqueolgicos
se est ensanchando. En el pasado, debido

mento de reliquias que participa en la elabo racin y aplicacin de las leyes relativas a los vestigios histricos y de las normas ad ministrativas para la preservacin de las re liquias y en los trabajos arqueolgicos que se realizan en todo el pas. Durante mis
estudios de postgraduado me interes viva mente por las religiones antiguas: mi nuevo cargo me brindaba la posibilidad de cono cer lo que de ellas quedaba y constitua un

Universidad de Beijing. Quienes se gradua ron en ella constituyeron la fuerza principal con que se emprendieron las tareas de la ar queologa en la nueva China. Nosotros, los de la generacin siguiente, hemos llegado a ser los pilares sobre los cuales descansa esa
ciencia en todo el pas. Muchos de nosotros

a la escasez de profesionales, se prestaba particular atencin a los periodos anteriores

a las dinastas Qin y Han. Sin embargo, a medida que China se desarrolla y sus inter
cambios con otros pases aumentan, hay un

creciente inters por los vestigios de pocas ms recientes as como por los objetos fa bricados por nuestras minoras nacionales.

somos directores de museos o de equipos ar queolgicos. La modernizacin del pas est acelerando el ritmo de las investigacio nes y el trabajo de excavacin de las ruinas antiguas. Sobre los jvenes arquelogos re cae el peso de grandes responsabilidades.
Actualmente son muchas las universida

puesto ideal para realizar investigaciones en


esta materia.

Tengo la profunda conviccin de que un arquelogo que ama su pas no debe sola

mente emprender por cuenta propia investi gaciones serias sobre problemas histricos
nacionales sino, adems, ayudar a un pbli

des que cuentan con departamentos de ar queologa. Con el desarrollo de la economa


y la elevacin de los niveles de vida y de cul tura China espera ms de sus arquelogos.

GUO ZHAN, de la Repblica Popular de China, es subdirector del Departamento de Reliquias de


la Oficina de Administracin de Reliquias del Estado. Es uno de los compiladores de la obra

co ms vasto

el pas entero

a compren

"Arqueologa sismolgica en Beijing", publicada


en 1985, y ha escrito diversos estudios histricos.

der la importancia de la arqueologa de mo

37

LATITUDES

LONGITUDES
Congreso Mundial de Arqueologa

El pasado en manos de los jvenes El Congreso Mundial de Arqueologa, que


se celebrar en Londres del Io al 7 de sep

Todos los aos son muy numerosos los jvenes que, preocupados por el enriqueci miento y la conservacin del patrimonio cultural, participan en excavaciones

tiembre de 1986, es el 11 que organiza la


Unin Internacional de Ciencias Prehistri

cas y Protohistricas (U.I.C.P.P.) con los auspicios de la Unesco. Para obtener infor
macin sobre el Congreso debe escribirse a: UK National Secretary, Professor P.J. Ucko, Department of Archaeology, Univer

arqueolgicas como voluntarios o en los campos de trabajo benvolo organizados


para reparar o restaurar edificios o lugares
de inters histrico. Desde 1980 la Unesco

sity of Southampton,
5 NH, Inglaterra.

Southampton 509

y la asociacin francesa "Jeunesse et Patri

moine" (Juventud y Patrimonio) publican


anualmente un folleto con informacin so

El Premio Internacional

bre los campos de trabajo voluntario y los


cursos internacionales para la formacin de dirigentes de campos que se organizan en

Simn Bolvar de la Unesco

al Grupo de Contadora
Foto Dominique Roger Unesco,

los siguientes pases: Argentina, Australia, Austria, Blgica, Canad, Checoslovaquia,


Espaa, Finlandia, Francia, Hungra, Irlan

El Director General de la Unesco, seor Amadou-Mahtar M'Bow, ha decidido otor

da, Israel, Italia, Marruecos, Noruega, Pa ses Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, Repblica Arabe Siria, Repblica Democr
tica Alemana y Tnez. Los cursos de forma cin tienen por objeto hacer que los partici pantes aprendan a organizar o administrar los campos de voluntarios para actividades de restauracin en sus propios pases. A los

gar el Premio Internacional Simn Bolvar


estudiantes se les instruye en diversas tc

de 1985 al Grupo de Contadora (del que for

nicas de restauracin y conservacin. Quie nes deseen ms detalles al respecto pueden


escribir a: Jeunesse et Patrimoine, 9 Ave nue Franklin D. Roosevelt, 75008 Pars. En la foto, restauracin de las columnas del

man parte Colombia, Mxico, Panam y


Venezuela), de conformidad con la reco

mendacin que le hiciera el Jurado del Pre mio presidido por el seor Arturo Uslar Pietri (Venezuela).

teatro romano de Bosra, en la Repblica


Arabe Siria.

El Grupo de Contadora se ve as recom pensado por los admirables esfuerzos que


realiza en el seno mismo de los pases de
Amrica Latina con miras a encontrar una

solucin pacfica y negociada de los proble


mas sobremanera graves con que se en

Contra la violencia de la naturaleza y de los hombres


En el curso de la 121a. reunin del Consejo Ejecutivo de la Unesco,

frenta la Amrica Central.

El Premio Simn Bolvar, creado por la

el Presidente de ste, el Director General de la Organizacin y los miembros del Consejo han dejado constancia de su emocin, su
dolor y su solidaridad con el pueblo y el Gobierno de Bangladesh
tras los recientes ciclones e inundaciones que ha sufrido ese pas. El Director General record en tal oportunidad las diversas medidas

Unesco en 1978, fue concedido por primera vez en 1983 a Su Majestad el Rey Juan Car
los I de Espaa, juntamente con Nelson Mandela, presidente del Consejo Nacional
Africano, encarcelado en Africa del Sur.

Con ocasin de la atribucin del premio al Grupo de Contadora el Director General se asoci igualmente al homenaje especial que
el Jurado del Premio ha rendido a su Alteza

de asistencia y ayuda que haba decidido adoptar en favor de las


vctimas.

Por otra parte, las mismas autoridades de la Unesco han deplora

do profundamente la violencia que ocasion la tragedia del estadio Heysel, en Bruselas, Blgica, en la cual murieron 38 espectadores
que asistan a la final de la Copa de Europa de los clubes campeones de ftbol el mircoles 29 de mayo pasado. Al mismo tiempo se puso . de relieve la accin de la Unesco encaminada a fomentar el fair-play en todas las competiciones deportivas.

Imperial el Principe Talal Bin Abdul Aziz AI Saud por la labor humanitaria que realiza en favor del desarrollo, en general, y de la in
fancia desheredada del mundo, en

particular.

La entrega del premio tuvo lugar durante


una ceremonia solemne celebrada en la se

de de la Unesco en Pars el 20 de junio


pasado.

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Coreano: Paik Syeung-Gil (Sel)


Swahili: Domino Rutayebesibwa (Dar es-Salam) Croata-servio, esloveno, macedonio

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(nicamente en Francia): 120 francos. Tapas para
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Espaol: Francisco Fernndez-Santos (Pars) Jorge Enrique Adoum Francs: Alain Lvque (Pars)
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y servio-croata: Vitomir Sudarski (Belgrado)


Chino: Shen Guofen (Pekn)

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38

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CHILE. Editorial Universitaria S.A., Departamento de

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MOZAMBIQUE. Instituto Nacional do Livro e do Dis

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ECUADOR. Revistas solamente : DINACOUR Ca.

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Vendas, caixa postal 9.052-ZC-02, Praia de Botafogo 188,


Rio de Janeiro, R.J. (CEP. 20000). Livras e Revistas Tc

ANDALUS, Roldana 1 y 3, Sevilla 4 ; Librera CASTELLS, Ronda Universidad 13, Barcelona 7. ESTADOS UNIDOS DE AMERICA. Unipub, 205, East
42nd Street New York, N. Y. 10017. Para El Correo de

PARAGUAY. Agencia de Diarios y Revistas, Sra. Ne lly de Garca Astillero, Pte. Franco 580, Asuncin.
PERU. Librera Studium, Plaza Francia 1164, apartado

2139, Lima; Libreria La Familia, Pasaje Pealoza 112,


apartado 4199, Lima.

nicos Ltda., Av. Brigadeiro Faria Lima, 1709 - 6o andar, Sao Paulo, y sucursales : Rio de Janeiro, Porto Alegre, Curitiba, Belo Horizonte, Recife.
COLOMBIA. Instituto Colombiano de Cultura, carrera

la Unesco : Santillana Publishing Company Inc., 575 Le xington Avenue, Nueva York, N.Y. 10022. Para libros
y peridicos : Box 433, Murray Hill Station New York,
N. Y. 10157.

PORTUGAL. Dias & Andrade Ltda., Livrana Portugal,


rua do Carmo 70-74, Lisboa 1117 Codex. PUERTO RICO. Librera Alma Mater, Cabrera 867, Ro
Piedras, Puerto Rico 00925.

3", n 18/24, Bogot. COSTA RICA. Libreria Cooperativa Universitaria, Ciu dad Universitaria "Rodrigo Faci", San Jos; Ministe rio de Cultura, Juventud y Deportes, Edificio Metropoli
tano 7 piso, apartado 10227, San Jos.

FILIPINAS. The Modern Book Co., 926 Rizal Avenue, P.O. Box 632, Manila, D-404.

FRANCIA. Librairie de l'Unesco, 7, place de Fontenoy,


75700 Paris (C.C.P. Paris 12.598-48).

URUGUAY. EDILYR Uruguaya, S.A., Maldonado 1092,


Montevideo.

CUBA. Ediciones Cubanas, O'Reilly n 407, La Haba na. Para El Correo de la Unesco solamente: Empresa COPREFIL, Dragones n 456, e/Lealtad y Campanario, Ha
bana 2.

GUATEMALA. Comisin Guatemalteca de Cooperacin con la Unesco, 3" Avenida 13-30, Zona 1, apartado
postal 244, Guatemala.

VENEZUELA. Librera del Este, Av. Francisco de Mi

randa 52, Edificio Galipn, apartado 60337, Caracas 1060-A ; La Muralla Distribuciones, S.A., 4a. Avenida
entre 3a. y 4a. transversal, "Quinta Irenalis" Los Palos Grandes, Caracas 106.

HONDURAS. Librera Navarro, 2" Avenida n 201, Co-

mayaguela, Tegucigalpa.

Los rboles

que cambiaron la cronologa


histrica
Este rbol de tronco retorcido y

nudoso que se yergue en medio de


las rocas a 3.000 metros de altura en la cordillera White Mountains de

California es un pino de la especie Pinus longaeva. Estas coniferas son


los rboles vivos ms antiguos de la
tierra. Al contar los "anillos" o crcu

los concntricos que ao tras ao se


van formando en el tronco de un

rbol

durante

su

crecimiento,

se

pudo calcular que uno de esos pinos

tena cerca de 4.900 aos.

Compa

rando las diversas escalas de referen

cia cronolgica constituidas por los


anillos sucesivos de los rboles vivos

y de la madera muerta, los especialis


tas han creado un mtodo de data

cin de los vestigios arqueolgicos


mediante el cual se estn revisando

algunas teoras tradicionales


vas al desarrollo de las

relati

culturas

antiguas.

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