¿Cuál es la importancia de las emociones en la esfera laboral?
¿Cómo han abordado las empresas el tema emocional de sus empleados?
Distintas emociones nos acompañan y hacen presencia, sobre todo cuando establecemos contacto con otros colegas en el trabajo. Por ejemplo, pensemos que estamos en una reunión de trabajo, donde la discusión se torna álgida y de repente somos presa de la ira, el enfado y empezamos a sentirnos estresados. Nuestro comportamiento puede cambiar y detonar que abandonemos la sesión o que nos enfrasquemos en una lucha sin cuartel de la cual más tarde nos estaremos sintiendo arrepentidos. La lista de las emociones es larga y los matices más aún.
Para abordar el tema del impacto emocional en la gestión laboral, en este episodio, hemos invitado a Christian Zampaglione quien cuenta con un largo historial como coach y consultor empresarial en temas de gestión del cambio, impacto emocional y temas de liderazgo, por destacar algunos.
En su largo andar, Christian fundó en México la empresa Growing Up Management Consulting y en Argentina es co-fundador de Perspectiva Consultora Política. Esto le ha permitido trabajar con diversos corporativos en distintos países.
Hagamos una recopilación de los puntos más importantes que Christian Zampaglione nos ha externado en la charla que hemos tenido con él:
1. Lo primero que hay que entender es que las emociones están 24/7, teniendo un rol determinante y que en algunos casos las empresas no las han capitalizado. Curiosamente, a raíz de la pandemia se empieza hablar de nuevo de ellas.
2. La pandemia corrió un velo, no fue el factor desencadenante de una realidad que ya estaba instalada. La gente ya renunciaba a un formato de trabajo que no los satisfacía. La pandemia nos enfrentó a una situación que nos mostraba cuán vulnerables somos. No es que la pandemia nos haya enviado al home-office, más bien nos vimos instalados en nuestras casas en un ambiente que no habíamos vivido y donde las condiciones a veces no eran las mejores y en esta parte las empresas quizá no vieron las consecuencias emocionales que esto provocaba en la gente.
3. Respecto a cuál fue la respuesta que dieron los consultores a este nuevo entorno, vale decir que se encontraron con una postura de cautela por el lado de las empresas, ya que en ese momento las prioridades eran otras, y era un problema que aún no terminaba de dimensionarse.
4. La respuesta de las empresas para abordar esta situación debió estar por el lado de ser sensibles y trabajar especialmente en las habilidades blandas con los referentes de la organización, tomar conciencia que era una situación de excepción y que era fundamental mantener la productividad en una situación de crisis. Trabajar de cerca con la gente. Desafortunadamente, la respuesta de algunas empresas fue darle un tratamiento burocrático, es decir, más de lo mismo que ya se venía dando en el pasado.
5. Si lo vemos por el lado de la cultura, en cuanto al impacto que se tuvo, es válido decir que, bajo un efecto sistémico, si bien la respuesta inicial no fue lo suficientemente rápida, ahora existe una mayor sensibilidad a escuchar a la gente. Se nota una actualización por el lado de las áreas de recursos humanos que va más allá de ser una empresa socialmente responsable. Se observan más indicios de conexión entre la gente y una mayor empatía.
6. Quienes están conectados en términos de bienestar laboral y registran el mayor nivel de productividad son los que generan el 80 por ciento de la productividad.