Romeo y Julieta
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William Shakespeare
William Shakespeare is the world's greatest ever playwright. Born in 1564, he split his time between Stratford-upon-Avon and London, where he worked as a playwright, poet and actor. In 1582 he married Anne Hathaway. Shakespeare died in 1616 at the age of fifty-two, leaving three children—Susanna, Hamnet and Judith. The rest is silence.
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Romeo y Julieta - William Shakespeare
ACTO I
ESCENA 1. Verona. Una calle.
Entran Sansón y Gregorio , de la casa Capuleto , armados con espadas y escudos .
Sansón
Gregorio, créeme que no nos quedaremos calentitos.
Gregorio
No, porque entonces seríamos unos calentones[2]. .
Sansón
Quiero decir que si nos hacen calentar, desnudaremos la espada.
Gregorio
Claro. En la vida, el calor siempre te hace desnudar.
Sansón
Reacciono rápido cuando me provocan.
Gregorio
Pero nada te provoca rápido para hacerte reaccionar.
Sansón
Un perro de la casa Montesco me provoca.
Gregorio
La provocación lleva a la agitación; los valientes son los que se quedan tiesos. Por lo tanto, si te provocan, te hacen correr.
Sansón
Un perro de esa casa me provoca a quedarme tieso. Ganaría la pared frente a cualquier Montesco, hombre o mujer[3]. .
Gregorio
Eso demuestra que eres un esclavo debilucho, porque los blanditos van contra la pared.
Sansón
Cierto. Por eso a las mujeres, que son debiluchas, las tiran contra la pared. Lo que haré será arrancar a los Montesco de la pared y arrastrar a sus doncellas contra la pared.
Gregorio
El conflicto es entre nuestros amos y nosotros, sus hombres.
Sansón
Es todo lo mismo. Voy a portarme como un tirano: después de pelear con los hombres, seré muy civilizado con las doncellas y les cortaré la cabeza.
Gregorio
¿Les cortarás la cabeza a las doncellas?
Sansón
Sí, les cortaré la cabeza o la doncellez, tómalo en el sentido que quieras.[4].
Gregorio
Ellas tendrán que tomarlo en el sentido de sentirlo.
Sansón
A mí me sentirán cuando me ponga tieso. Todos saben que soy un buen pedazo de carne.
Gregorio
Menos mal que no eres un pescado, porque serías un bacalao seco. ¡Desenfunda la herramienta! Ahí vienen unos de la casa de los Montesco.
Entran otros dos Servidores; uno de ellos es Abraham.
Sansón
Acá está mi arma desnuda: pelea, yo te cubriré.
Gregorio
¿Cómo? ¿Me das la espalda y huyes?
Sansón
No tengas miedo por mí.
Gregorio
¡Precisamente, te tengo miedo!
Sansón
Esperemos para tener la ley de nuestro lado. Que empiecen ellos.
Gregorio
Voy a fruncir el ceño al pasar y que lo tomen como quieran.
Sansón
No como quieran sino como se atrevan. Me morderé el pulgar y les mostraré los dientes[5]. . Si lo toleran, quedan deshonrados.
Abraham
¿Me pareció que se mordía el pulgar y nos mostraba los dientes, señor?
Sansón
Me mordía el pulgar, señor.
Abraham
¿Se mordía el pulgar y nos mostraba los dientes, señor?
Sansón
[Aparte a Gregorio] Si digo sí, ¿está la ley de nuestro lado?
Gregorio
[Aparte a Sansón] No.
Sansón
No, señor, no les mostraba los dientes, señor, pero me mordía el pulgar, señor.
Gregorio
¿Quiere pelear, señor?
Abraham
¿Pelear, señor? ¡No, señor!
Sansón
Porque si quiere, señor, aquí me tiene. Sirvo a un hombre tan bueno como su amo.
Abraham
No mejor.
Sansón
Bueno, señor.
Entra Benvolio.
Gregorio
[Aparte, a Sansón] Di mejor
: acá viene un pariente de nuestro amo.
Sansón
Sí, mejor, señor.
Abraham
Miente.
Sansón
Desenfunda si eres hombre. Gregorio, recuerda golpear con fuerza.
Pelean.
Benvolio
¡Sepárense, tontos! Bajen esas espadas. No saben lo que hacen.
Derriba sus espadas.
Entra Teobaldo.
Teobaldo
¿Cómo? ¿Desenvaina entre estas cobardes ciervas? Dese vuelta, Benvolio, contemple su muerte.
Benvolio
Solo intento mantener la paz. Guarde su espada o úsela para separar a estos hombres, como yo.
Teobaldo
¿Cómo? ¡Desenvaina y habla de paz! Odio la palabra, tanto como al infierno, a los Montesco y a usted. ¡Allá voy, cobarde!
Pelean.
Entran varios partidarios de ambas casas y se suman a la pelea. Luego entran tres o cuatro Ciudadanos (como Oficiales de la Guardia), con garrotes o lanzas.
Primer ciudadano
¡Palos, picas y lanzas! ¡Golpeen! ¡Derríbenlos! ¡Abajo los Capuleto! ¡Abajo los Montesco!
Entran el viejo Capuleto, en bata, y Lady