Los corredores ya no son como antes, delgados y enjutos; ahora tienen un físico mucho más robusto. La tendencia hacia el entrenamiento híbrido ha hecho que numerosos usuarios de gimnasios, que apenas se alejaban de las sentadillas y los bancos de musculación, se decanten por las pruebas de resistencia, especialmente las carreras de larga distancia. De hecho, cada vez son más los deportistas que se retan a sí mismos para alcanzar objetivos aparentemente incompatibles, como correr una maratón y conseguir batir su marca en peso muerto. Quieren mantenerse en forma, pero también quieren resistencia.
Alcanzar estos objetivos es factible, pero eso no significa que sea fácil. Hay que ser inteligente. Jonny Pain es cofundador de la plataforma de entrenamiento Omnia Performance y cuenta con años de experiencia en la formación de atletas híbridos capaces de levantar cargas pesadas y de correr largas distancias (básicamente, lo hacía antes de que estuviera de moda). “El objetivo”, dice Pain, “es avanzar en metas dispares al mismo tiempo, sin sucumbir a problemas