A lo largo de la extensa historia del movimiento feminista en México, uno de los principales problemas como sujetos políticos ha sido el aparato del Estado y sus diferentes instituciones, como el sistema de justicia. Todos los días hay denuncias públicas en los tendederos de las universidades, o denuncias formales convertidas (algunas de ellas) en un archivo interminable de tipificaciones penales resguardadas en el búnker que esperan su turno para ser atendidas con “justicia”.
Las denuncias forman parte