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Español: "En 1931, Alvear fue recibido en forma apoteótica, pero el general Uriburu aprovechó una de las tantas insurrecciones de los radicales para expatriarlo a Rio de Janeiro.

Hacia allí fue con Regina y un grupo de correligionarios con sus familias. Uno de los hijos de Mario Guido, niño entonces, recuerda al matrimonio Alvear instalado en el hotel Copacabana, y tratandolos a el y sus hermanos, con cordial afecto cuando iba a visitarlos. Es muy probable que ambos lamentaran la falta de hijos.

En diciembre de 1932, Justo acusó a los radicales de un plan subversivo. Alvear -que habia vuelto del exilio y estaba organizando nuevamente el partido- Tamborini, Noel, el general Dellepiane y el propio Yrigoyen, un anciano de mas ochenta años, fueron enviados a la isla Martín Garcia durante cuatro largos meses.

A Yrigoyen se le permitió volver antes, porque estaba muy enfermo. "Por primera vez, Alvear conocería, ya sexagenario, las privaciones, la humillacion, las condiciones inhumanas a que lo someteria el presidente Justo, su ex ministro de Guerra, quien le debía la carrera y la presidencia".

Acostumbrado a todos los refinamientos, Marcelo supo, sin embargo, adaptarse a la situación. Se lavaba la ropa e iba a la cocina, pava en mano, a prepararse el mate. Sería también esta una oportunidad de valorar el amor de Regina que, para visitarlo, desafiaba el rio y las inclemencias del tiempo...."